Pov Normal.
Aquella pelea el día anterior, si es que se le puede llamar pelea, había sido resuelta para alivio de todos y alegría del erizo de ojos sangre pues así ya podría volver a hablar con su crush como le dice en secreto este. Aunque empezó a creer que su sobrino aún estaba enojado con el, ¿razón? El menor de la familia no dejaba de mirarlo en ningún momento llegando a incomodarle bastante pero trató de ignorarlo y pensar en que sólo es su imaginación.

Claro que no fue su imaginacion, cuando estaban desayunando sintió la mirada del menor clavada en el, intentó ignorarlo siguiendo su charla con el azabache, el resto de la mañana fue lo mismo, cada que pasaba podía fijarse en que lo estaba mirando en silencio, lo ponía tan nervioso su mirada al punto de que en cada movimiento que hacía sus manos temblaban y el palpitar de su corazón aumentaba de manera preocupante.
Pero volviendo al presente justo en el almuerzo, Exe cocinaba algo simple pero rapido y la cosa no fue muy diferente, aquellos ojos esmeralda lo seguían mirando todo el tiempo, para ese punto todas sus emociones estaban al tope y sus movimientos eran torpes mientras usaba el cuchillo casi cortandose tres veces.

-¿S..Sonic?

-¿que quieres?

-..¿podrías d..dejar de mirarme?-dijo sin mirarle, en el fondo sabía que si lo miraba toda la valentía que reunió se iria-

-¿porque?

-me.. incómoda un poco..

-¿porque te incomoda?-sonrió acercándose y paransose a su lado-

-...-miró al contrario un momento sintiendo como los nervios volvieron a apoderarse de el-¿p..porque me miras tanto?..desde la mañana me has estado mirando Sonic.

-sólo te miró Exe, ¿porque te incomoda? Somos familia después de todo.

-familia o no eso incomodaria a cualquiera.

-¿estas libre más tarde?

-qu..

-te espero en el parque a las 16:00, se puntual.-se dio la vuelta y se fue sin dejar hablar al otro-

Volvió con su tarea de picar la carne con las manos temblorosas aún por toda esa experiencia que tuvo que soportar, juraría que aún sentía como lo miraban pero decidió ignorarlo por completo esta vez, no quería ser un manojo de nervios y emociones frente al erizo menor.

Sólo se dedicaría a sonreír para tratar de ya no estar así.

El silencio parecía ser lo único que habría entre ellos dos, todo lo que el erizo mayor dijo horas antes se esfumó por completo cuando se sentó frente al menor quien sólo se dedicó a mirarlo fijamente por unos 30 minutos almenos.

-¿que te pasa?-preguntó el ojiesmeralda-

-¿q..que me pas..sa?-dijo sobresaltado por la repentina pregunta-

-no estas sonriendo ¿qué pasa?

-q..que..-se maldijo a si mismo por no poder dejar de tartamudear de los nervios acumulados-

-sonríe..

-...-parpadeo sin comprender nada pero obedeció al más bajo sonriendo-

-pero sonríe de verdad Exe, hasta yo noto que esa sonrisa es falsa.

-pero..porque quieres que sonría Sonic.

Se relajó un poco al ver como el menor le sonrió, todo el tiempo había estado demasiado serio para su gusto empezando a preocuparle.

-porque me gusta verte sonreír, ahora ¿podrías sonreír para mi Exe?

Todo el rostro del contrario comenzó a calentarse sonriendo con emoción mostrando sus afilados dientes, gran parte de su cuerpo se alivio de saber que el menor no había estado enojado con el, volvió a sentir esa sensación cálida en su pecho, amor, estaba perdidamente enamorado de aquel adolecente.

-tienes una linda sonrisa Exe..-murmuró bajo pero lo suficientemente alto como para ser escuchado, se sobresalto cuando el mayor cubrió su rostro dejando salir lágrimas-¡p..perdona! ¡no quería hacerte sentir incómodo con esto, no tienes que sonreír si no quieres!

El menor era tan dulce y tierno para alguien como el, agradecía tanto poder estar a su lado aún en esa situación..

-n..no es eso-río un poco sin dejar de sonreír-eres una de las pocas personas que no se asustan por mi sonrisa pequeño.

Ahora el sonrojado era el adolecente, miró hacia otro lado evitando ver aquellos ojos que le gustaba ver.

-..d..deberías sonreír así más seguido, tienes una linda sonrisa..-miró un momento al mayor enojandose cuando comenzó a reír-¿dije algo gracioso idiota?..

-¿así que tengo una linda sonrisa?-apoyo su rostro sobre una mano manteniendo aún esa sonrisa que mostraba sus dientes afilados-

-..s..solo olvidalo.

-aunque ya te lo he dicho anteriormente, también me gusta tu sonrisa es linda..

-gracias..

Nuevamente el silencio reino entre los dos pero esta vez era uno cómodo, las dudas volvieron al erizo menor preguntándose mil cosas por segundo y procesando todo lo que pasó hace apenas unos momentos.
¿el sentira lo mismo que yo? ¿habrá notado mis intenciones? ¿sabrá lo que siento por el? ¡¿porque hizo esto en primer lugar!?
Su última duda fue respondida rápidamente cuando miró al mayor y este sólo le sonrió calidamente.
Oh, por eso.. pensó con cariño.

Hubiesen seguido así de no ser por una vieja que cruzaba por allí que al verlos sólo se acercó sin vergüenza y los miró mal dejando confundidos a los dos erizos.

-¿no tienen otro lugar para hacer sus mariconadas?-dijo de forma brusca la zorra-

-disculpe si nuestra presencia le hace algún tipo de daño señora, pero sólo estoy pasando la tarde con mi sobrino.

-¿sobrino?-preguntó rápidamente riendo un poco cambiando su actitud de la nada-discúlpen a esta vieja zorra, no tenía idea jajaja.

-y aunque fuese mi pareja no tendría el porque hablarnos así, si un chico quiere a otro no tendría porque meterse..vieja bruja..-susurro lo último con enojo el ojirubi-

-¿disculpe?

-¿acaso no tiene nada mejor que hacer señora? Vaya a alimentar patos o consiga una vida-le dio una sonrisa-

La zorra sólo se dio la vuelta indignada para luego irse a molestar a otra pobre pareja tal vez, el menor miró al mayor perplejo y confundido a la vez ¿acaso no le molestaban las parejas homosexuales? Miró sus propias manos, pues hace dos noches atrás leyó sin permiso el diario del otro por curiosidad encontrando una página que decía cuanto odiaba a las parejas así, raro de cierta forma dedicarle una página completa a eso. Pero eso lo desilusiono un poco.

Aclaro su garganta para volver a mirar al mayor que aún maldecia a la zorra por lo bajo.

-¿no te molestan las parejas homosexuales?..

-¿porque me molestaría? Todo el mundo tiene derecho a amar Sonic-le dedico una sonrisa más relajada-

-oh..pues, emm..-rasco su nuca avergonzado-en..en tu diario decía que las odiabas, demaciado diría yo..

-¿mi diario?-inclinó su cabeza dudoso para luego reír fuerte asustando un poco al mas bajo-

-¿q..que?

-yo no tengo diario, tal vez encontraste el diario personal de mi padre, ese hombre si odiaba a muerte ese tipo de cosas-dio un suspiro triste-

-¡n..no lo sabía! ¡perdoname por haberlo agarrado!

-no te preocupes, pero a la próxima sólo dime cuando quieras algo pequeño.

Río al momento que todo el rostro del contrario se tornó rojo y apartaba la mirada, enserio lo amaba mucho.

-ven, vamos a casa tomatito-se levantó para agarrar la mano del menor comenzando a caminar a dicho rumbo-

-no me digas así piraña..

-¿ahora soy piraña eh?-soltó su mano y sonrió alegre-¿una carrera hasta la casa?

-¿que ganó a cambio?-lo miró el tomate con desinterés-

-¡el ganador podrá pedirle todo lo que quiera al perdedor por un día!-luego de decir esto comenzó a correr-

-¡¡que tramposo eres imbécil!!-corrio tras el contrario alcanzandolo facilmente-

-aver si entendí..-el azabache los miró con enojo y preocupación pero más que nada enojo-¿por andar corriendo como niños por una carrera te torciste el tobillo y casi te mueres por un lobo..salvaje?..

-¡fue culpa de Sonic!-dijo entre lágrimas señalando al nombrado como niño chiquito cubierto de vendas y algunas curitas-

-¡¿que!? ¡¡Tú sólo te caiste por esa montaña!!

-¡ya callense! ¡montaña o no ahora quien mierdas te va a cuidar mañana!

-tu lo haras-le sonrió a su hermano-

-mañana volveré a trabajar Exe.

-Sonic lo hará.

-ahg, eres realmente un pendejo hermano..-dio un fuerte suspiro-para la próxima no se desvien y sólo vengan caminando como personas normales..-otro suspiro-dejé la comida en el horno si quieren cenar, no se duerman tarde..

Dijo esto último para irse escaleras arriba dejando solos a los dos enamorados.

-Ahora tienes que hacer todo lo que yo diga-habló el menor con una gran sonrisa llena de maldad-

si, el mayor cayó por una montaña que vio pero el menor de ambos sólo siguió corriendo hasta llegar a su casa, volvió a buscar al otro para curarlo ya que estaba tendido en el suelo sin moverse y un lobo le mordia una de sus manos.

Para la próxima no le seguiría el juego al mayor a menos que alguno quiera morir.