Capítulo 7 parte 1

Cuando entré en el estudio, me di cuenta de que el plató había sufrido algunos cambios. Normalmente, Eadlyn y yo éramos los único que nos sentábamos frente a la cámara, junto a nuestros padres, pero esta noche Kaden y Osten también estaban sobre el escenario.

Los oficiales de papá se había apiñado al otro lado del cuadrilátero; el centro estaba reservado a un recipiente con todos los sobres que había seleccionado esa misma tarde. Junto a él, un cuenco vacío en el que debía depositar las inscripciones después de abrir los sobres que había seleccionado esa misma tarde. Leer los nombres en voz alta era una con mucha cautela; quería dar la impresión de que controlaba la situación. Y eso me gustaba.

Tras las cámaras se habían acomodado otros miembros del personal del palacio. Distinguí al general Ledger; besó a la señorita Lucy y después colocó su mano con extremada gentileza sobre el hombro de su hija y ella le sonrío. Ya habían pasado varios días desde aquella conversación que oí a escondidas en el pasillo, pero seguía sintiendo... tristeza por la señorita Lucy. Quería ayudarla, pero no tenía ni la mas remota idea de cómo, no puedo forzar a Mavi a que permanezca por siempre en el castillo.

Las señorita Marlee instaba a Josie a callarse de una vez por todas, seguramente porque se reía de un chiste que ella misma había contado y que muy posiblemente carecía de gracia. A su lado estaba un muy exasperado Kile tratando de leer, estaba a punto de reírme de el cuando se levantó de su lugar harto de escuchar a su hermana, susurró algo a su mamá y se sentó junto a Mavi; sonrío de inmediato y comenzaron a charlar. Vi como el general Ledger se tensó y apretó sus dientes como si quisiera romperlos, realmente esperé que hiciera algo pero La señorita Lucy sostuvo su mano tratando de relajarlo.

—¿Cómo estás? —preguntó mamá, que apareció de repente a mi lado. Después me rodeó el hombro con su brazo.

—Bien —conteste sin apartar los ojos del lugar donde se había sentado mi mejor amigo.

—¿A quien ves? —mamá siguió mi mirada y sonrío. —Parece que esos dos se están llevando muy bien últimamente. Me alegra, ella es una niña muy linda y amable. ¿Hacen buena pareja no crees?

—Si —murmuro. Mamá me miró raro por unos momentos y después me dio una sonrisa ladeada, como si sintiera lastima por mi. Me moví incómodo por unos momentos hasta que ella retomo la sonrisa a la que estoy acostumbrado.

—Volviendo al punto. No puedes estar bien, esto es aterrador. —El tema de Mavi había quedado completamente enterrado y yo estaba feliz con eso.

—Bueno, ya que lo dices, sí, si lo es. Gracias por hacer pasar por todo este calvario.

Ella se rió por lo bajo para ver su se me había pasado el enfado.

—Cariño, no creo que tengas tantos defectos —susurró —Tus virtudes son infinitas y, algún día, sabrás cuanto se sufre por los hijos. Me preocupo por ti, incluso mas que por tus hermanos. No eres un chico cualquiera, Caleb.

—Lo sé —sonreí con suficiencia.

Mamá rodó sus ojos e ignoró mi comentario —Eres el chico. Y quiero lo mejor para ti.

En el fondo me pregunté si me estaría diciendo todo esto antes, antes de convertirme en el heredero. Mis comentarios listillos se fueron de vacaciones. No supe que contestar. Lu último que quería era decir alguna tontería que comenzará una discusión. Mamá siguió abrazándome, así que le devolví el gesto y ella recargo su cabeza en mi hombro.

—Esto es incómodo — admití —Es... las cámaras no me molestan pero yo... me cansé de sonreír y actuar todo el tiempo.

—No actúes, nadie espera que reboces emoción, todos saben que esto no es fácil, puedes estar nervioso. No olvides cómo se deben estar sintiendo esas muchachas. Para ellas, esto también es importantísimo. El país les agradecerá.

Me concentré en mi respiración. "Solo sonríe. Nada que no hayas hecho antes" pensé. Tres meses. La liberta. Pan comido. Neal debería estar aquí conmigo repitiéndome todo lo que debía decir frente a las cámaras. ¿Desesperante? Si. Pero... de alguna manera me mantiene mas tranquilo. Pero hoy es su día libre.

—Estoy muy orgullosa de ti —murmuró y me dio un último achuchón —buena suerte.

Se fue a saludar a papá. Eadlyn aprovechó ese momento para acercarse a mi.

—No puedo creer que esto este ocurriendo de verdad —comentó con cierta emoción, la cuál me hizo arrugar mi frente por unos segundos. A veces olvido lo mucho y lo poco que ha cambiado desde Kile y después Colin. —Me muero de ganas por tener compañía.

—¿Qué pasa? ¿Josie no es suficiente para ti? —espeté.

Ella hizo una mueca y golpeo mi brazo —No es gracioso. — Me reí por lo bajo.

—No se que tienes contra ella, a veces es bastante agradable y divertida

—A eso yo le llamo ser odiosa la mayor parte del tiempo —se burló. En ese momento Kile se acerco a nosotros.

—Listo para conocer los nombres de tus prometidas —Bromeó y Eady se rió.

Me puse completamente serio. Miré hacia donde estaba Mavi. Ahora platicaba con Josie.

—No es gracioso, y ellas no son mis prometidas. —Ambos volvieron a reírse —De todas maneras, ¿por qué lucen tan emocionados?

Kile se encoge de hombros —Es divertido ver tu cara de sufrimiento.

—A mi me apetece conocer gente distinta.

—Pues a mi no— farfullé. Si, todos sacan algo bueno de esto menos yo.

—Vamos, Caleb. Esto será muy divertido.

—Si, hermano. Estoy impaciente por ver que has planeado para esas chicas. —dice Kile y me río. Nadie me conoce mejor que este par. Bromeamos un poco hasta que Kile tuvo que irse a sentar de nuevo.

Eadlyn tomó uno de los sobre y me dio un suave golpecito en la nariz. —Y ahora prepárate. Si dominas el idioma esta parte te resultará bastante fácil.

—Eres como un dolor de muelas. —murmuré y rodé mis ojos.

—Pero me quieres. —Le sonreí un poco porque era cierto —Lo harás genial.

Nos indicaron que ocupáramos nuestros asiento, así que Eadlyn dejo el sobre en el lugar que le correspondía, me cogió de la mano y me acompañó hasta mi sitio. Las cámaras empezaron a filmar. Papá inauguró el Report del día anunciando un posible acuerdo comercial con Nueva Asia. Trabajábamos codo con coso con ese país, por lo que me costaba imaginar que antaño habíamos estado en guerra. Mencionó las leyes de inmigración y todos sus consejeros hicieron sus discursos, incluida la señorita Bryce. Aquellos minutos me parecieron eternos a la vez que efímeros.

Cuando Gavril pronunció mi nombre, tardé unos segundos en recordar que debía hacer exactamente. Sin embargo, me levanté, crucé el escenario y me coloqué delante del micrófono.

Esbocé una media sonrisa, esa que a todas las mujeres les encanta de mi y miré directamente a la cámara. Sabía que esa noche toda Illea estaba sentada frente a su televisor.

—Estoy convencido de que todos están tan emocionados como yo, así que porque no nos saltamos el protocolo y vamos al grano. Damas y caballeros, aquí están las treinta y cinco jóvenes invitadas a participar en la ya conocida selección.

Metí la mano en el recipiente y extraje el primer sobre.

—Desde Likely —leí y en seguida mi mente fue a Mavi, ella se había mudado por un tiempo allá. Hice una pausa mientras lo abría. —La señorita Alissa Shepard.

Mostré la fotografía de la joven candidata y todos los presentes aplaudieron. Deposité el contenido del sobre en el recipiente vacío y cogí otro sobre. Tras cada nombre que pronunciaba la sala estallaba en aplausos.

Bonnie Fields. Emelinda Bishop. Rose Garner. Dakota Forbes.

—Desde Columbia —extrañamente se me hacía muy conocido el apellido, tal vez era uno común —Kirsten Ambers. —En lugar de aplausos se escuchó un coro de gritos ahogados. Mire a mi alrededor extrañado. Después de unos segundos todos aplaudieron atónitos.

Lo mismo pasó cuando mencioné a otra de las chicas. En serio quería saber de que iba todo el alboroto. Hasta mi hermana lucía sorprendida.

Al final, cuando alcancé el último sobre del recipiente, creí haber abierto al menos un centenar de ellos. Me dolían las mejillas de tanto sonreír. Esperaba que mamá no se llevara una decepción cuando le dijera que prefería cenar en mi habitación. En mi opinión era lo menos que merecía.

—¡Ah! Y desde Ángeles —anuncié; rasgué el sobre y saqué la última inscripción. ¡Pero qué...! Voltee a ver en seguida hacia donde estaban los Ledger y los Woodwork. Josie rebozaba felicidad, como si supiera lo que estaba apunto de pasar, lo que estaba apunto de anunciar. Me guiño un ojo y se volteo para decirle algo a su madre. 

Esta vez mi sonrisa no fue capaz de ocultar mi desasosiego y todo el mundo se percató de ello. Mire de nuevo la inscripción y anuncié  —La señorita... —tragué saliva. Presiento que tendré a un muy molesto Kile sobre mi espalda toda la selección, o lo que ella dure en en todo esto, lo cuál planeo que sea muy poco.

***************************************** 

Por fin... comienza la selección.

 ¿Kirsten Ambers? Espero que recuerden y sepan de donde viene el apellido ;) .

Hay otra señorita seleccionada por la cual todos están sorprendidos. Pero ¿quién será? 

Y por si no faltara más ¿Josie Woodwork? Aclaremos, que para esta fecha ella ya no tiene 15 años, tiene 17 y es la edad mínima en la que se les permite a las chicas participar. ¿Su emocionante felicidad será porque quedó seleccionada? si es así ¿Cómo reaccionaran Kile y Carter? 

Les confesaré que a mi siempre me agradó Josie en La Heredera. Por mas odiosa que fuera, como que entendí porque era así desde el principio.

¿Y qué pasa con Kile y Mavi? ¿Se gustan? ¿Nuestro príncipe está celoso? ¿Nuestro Aspen estará molesto?

Yo me hago todas esas preguntas jajaja y después escribo las respuestas.

Espero que les haya gustado este capítulo y que sigan leyendo <3

  

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top