Ha subido por encima

Capítulo 10

Harry abrió la carta con los dedos revueltos, abriéndola tan pronto como la lechuza se la entregó. Leyó la carta varias veces como si no pudiera creer lo que acababa de leer, sus amigos lo observaban con curiosidad e atención. "Entonces?" Draco finalmente preguntó.

"Lo firmó", dijo Harry, sonriendo.

"Sacaré la piedra de mi baúl arriba", dijo Draco y salió de la habitación.

"Daph, Tracey, ayúdame a sacar el equipo de pociones de nuevo", dijo Harry con entusiasmo.

"Por qué?" interrogado Daphne.

"Antes de devolver la piedra a Flamel, mantengamos un poco de elixer para nosotros mismos. Tenemos suficiente dinero, pero el elixer de la vida podría ser muy útil", dijo Harry con una sonrisa. "Iré a buscar el cabello de unicornio y el veneno de acromantula."

Dumbledore se recostó en un lujoso sillón en su habitación, con los dedos tocando y pensando profundamente. ¿Cómo estaba destinado a conseguir el interés de Daniel Potter en la piedra de nuevo? Sabía que Daniel sospechaba que la piedra había sido robada, después de todo un poco de legilimencia fue un largo camino, pero aún necesitaba mantener su interés bloqueado. Daniel necesitaba confrontar a Voldemort a fin de año, puramente para que Dumbledore esté seguro de la lealtad de Daniel y de dónde estaban sus habilidades mágicas, pero también para verificar que tuviera la protección de su madre con él.

Un par de pistas aquí y allá de que la piedra todavía estaba en el tercer corredor, y tal vez una ligera poción de olvido podría funcionar. Tendría que calcular la dosis correcta, por supuesto, pero Severus estaría dispuesto. Él no le diría al maestro de pociones obviamente y solo diría que era un pequeño proyecto suyo. Tal vez una conversación escuchada también podría ayudar a convencer al niño de que alguien todavía representaba una amenaza para la piedra.

La piedra había desaparecido hace mucho tiempo; Flamel le había reprendido diciendo que un misterioso benefactor la había devuelto y había cortado las relaciones con él. Nadie más sabía que la piedra ya no estaba en Hogwarts, con la propia habilidad de Dumbledore en alquimia lo suficiente como para crear una falsa. Sería lo suficientemente bueno como para engañar a Voldemort y definitivamente engañar a Daniel.

Sí, sí, todo eso podría funcionar. Todo lo que tenía que hacer era asegurarse de que nada más saliera mal.

Después de unos meses, los exámenes estuvieron aquí. El resto del año escolar pasó sin incidentes notables, dijo, a menos que, por supuesto, cuentes el día en que una broma de Fred y George falló y giró las túnicas de Gryffindors para ver a Thorugh durante todo el día, tanto niños como niñas. No hace falta decir que había muchas caras rojas, silbidos de lobo y un número notable de hechizos de broma lanzados a los gemelos Weasley.

En las semanas previas a los exámenes, todos podían ser vistos en un bullicioso grupo de plumas, tinta y pergamino y, a veces, en aulas vacías practicando su hechizo. Algunos habían comenzado a revisar mucho antes que otros

Todos tenían exámenes prácticos y exámenes teóricos, aparte de History of Magic, donde no se podía tomar un examen práctico. Hacía un calor sofocante, especialmente en el gran salón de clases donde hacían sus documentos escritos. Se les había dado nuevas y especiales plumas para los exámenes, que habían sido hechizados con un hechizo AntiCheating. Con todo, la teoría no era tan mala a menos que contaras Historia de la magia, donde era una rutina de 1 hora de escritura sin parar.

Sus exámenes prácticos fueron mucho más interesantes, aunque se podría argumentar que fueron más difíciles. El profesor Flitwick los llamó uno por uno a su clase para ver si podían hacer una tapdance de piña en un escritorio. Harry logró darle un pequeño sombrero de copa, traje y bastón en el proceso y lo hizo bailar tan vivazmente que Flitwick lo comparó con Charlie Chaplin, un famoso bailarín muggle que era el favorito del hombre bajo. Su hermano, Harry había escuchado a través de Neville, de alguna manera logró que la piña se quemara. Cómo, incluso Flitwick no estaba muy seguro.

El profesor McGonagall los vio convertir un ratón en una caja de tabaco: se dieron puntos por lo bonita que era la caja de tabaco, pero se la quitaron si tenía bigotes. Snape los puso nerviosos a todos, respirando por sus cuellos a pesar del hecho de que eran Slytherins mientras trataban de recordar cómo hacer una poción de Olvido; la ironía era siempre ridícula. Harry logró preparar una cerveza casi perfecta, el color girando un blanco lechoso hacia el final. Otros no habían tenido tanta suerte, con la poción de Weasley explotando en su cara y Granger derramando accidentalmente la suya en su regazo. Aunque Snape es extra malo con ellos no podría haber ayudado.

Por fin, la única prueba que quedaba para el examen práctico de Defensa Contra las Artes Oscuras, y aunque Quirrel era un cerdo incompetente, Harry no lo superó para esperar que lanzaran perfectamente los pocos hechizos que les había enseñado a lo largo del año.

"No puedo meter más información en mi cerebro", se quejó Daphne, cerrando su libro tan fuerte que recibió un resplandor marchito de la bibliotecaria de la escuela, Madame Pince.

Harry levantó la vista de su propio libro, con el pelo salvaje y desordenado. "Puedes volver a la sala común que conoces", comentó, bajó y miró para leer.

"Cuánto tiempo vas a estar?" Daphne se quejó de nuevo, tratando de alisar los grupos en su cabello generalmente inmaculado. Todos sus amigos ya se habían ido y probablemente estaban profundamente dormidos en sus cómodas camas. Ella y Harry habían optado por quedarse y revisar por un tiempo más, pero ahora incluso ella también estaba cansada.

"Daphne", dijo Harry bajando su libro para revelar completamente su rostro, "Vamos, estaré bien; solo necesito terminar de leer este capítulo."

"Bien," estuvo de acuerdo Daphne, y ella se puso de pie por primera vez en 2 horas y comenzó a empacar. "Sin embargo, no pase mucho tiempo", agregó, recogiendo sus libros y colocándolos en su mochila.

"No lo haré", Harry la salvó y la saludó. Infortuantemente para él, su nueva paz y tranquilidad pronto sería perturbada por 3 idiotas.

"Sabes", llegó una voz aguda que decía snob, "¡realmente no deberías ir allí! ¡El corredor del tercer piso está fuera de los límites por una razón!" Harry inmediatamente; lo identificó como Granger, aunque quizás fue el primer año que estuvo tan enamorado de las reglas.

"Si tiene un problema con nosotros yendo allí, ¿por qué no se va y le importa su propio negocio!" gritó Weasley. Harry suspiró, realmente debería haber sabido que donde quiera que fuera Granger, Weasley también iba a ir allí. Se movió pacientemente para que la débil voz de su hermano saliera chirriando, tratando de arreglar las cosas entre sus 2 amigos, y así fue.

"Ambos", dijo Daniel, "¿pueden dejar de discutir?"

"Finalmente tienes a tus monos mascotas bajo control Daniel?" Harry preguntó por haberse colado en el desprevenido trío. Los tres giraron, tropezando y casi cayendo de bruces mientras intentaban hacerlo.

"Solo vete Adriano. Esto no es asunto tuyo!" rompió a Daniel con sumo gusto como si pensara que sería suficiente.

"Sí!" de acuerdo Weasley, "Nadie quiere una serpiente viscosa como tú alrededor. Ahora sal de aquí a menos que quieras comer babosas!"

"Me gustaría verte intentarlo, Weasley. Recuerda lo que pasó la última vez?" replicó Harry. "Creo que Granger sí,", bromeó Harry, el recuerdo de Granger comiendo babosas todavía vívidas en su mente. Hermione también lo recordó lo suficientemente bien teniendo en cuenta el hecho de que Harry la vio retroceder ligeramente, pero aparte de eso, no dio otra inclinación de que eso le hubiera molestado.

"Seguramente no puedes vencernos a todos", se jactó Granger con sumo gusto sacando su varita también, "así que enfréntalo. Somos tres y solo uno de ustedes."

"Bien! Bien!" Harry admitió haber dejado caer furtivamente su varita en su manga. "Iré ahora." Levantó sus dos varitas y se alejó, no amenazado en absoluto por las 3 varitas que lo apuntaban. Tan pronto como desapareció de la vista, los 3 Gryffindors se alejaron pensando que Harry se había ido. Harry miró a la vuelta de la esquina que había desaparecido detrás y señaló su varita como su hermano, murmurando en voz baja. Una pequeña mancha de pintura salió disparada de la varita y se unió al pie de Daniel, en silencio. Fue un hechizo de broma que dejó un rastro verde donde fuiste y Harry quería saber lo que estaban haciendo.

Su pensamiento rápido resultó útil; un momento o dos más tarde, los 3 de ellos desaparecieron bajo la capa de invisibilidad de Daniel. Siendo realistas, la capa debería haber sido de Harry, con él siendo el hijo mayor, pero su padre se la había dado a Daniel (sorpresa, sorpresa) y no pudieron recuperarlo en la corte mágica con la mitad de los señores allí en el bolsillo de Dumbledore. Harry se puso su propia capa de pelo de Demiguise y la siguió, justo al pasillo del tercer piso.

Harry quería llorar. Había estado siguiendo a su hermano durante casi una hora y lo que había hecho lo había conmocionado. Actualmente estaban dentro del pasillo del tercer piso, solo 3 de ellos cuando Weasley había caído al tablero de ajedrez, mirando las botellas alineadas sobre la mesa. ¿Había olvidado Daniel que la piedra ya no estaba en Hogwarts? Él había sido el que gritaba al respecto en primer lugar. Era tan idiota que probablemente ya lo había olvidado, razonó Harry.

Los 3 idiotas habían superado al salvaje hipogrifo bien enoug (eso era nuevo desde la última vez que Harry había estado allí) tocando una horrible música chirriante en una flauta que parecía que solía ser el juguete masticable de un perro, pero después de eso todo fue cuesta abajo. Fueron tan lentos en superar la trampa del Diablo que casi fueron estrangulados, aunque al final lo hicieron bien. Incluso Harry se encogió cuando Granger comenzó a decir que no había 'madera.' Les tomó más de 15 minutos obtener la llave voladora, volando en el palo de la escoba, y casi murieron picoteados en el proceso. Y, por supuesto, dejaron las escobas cuando entraron en la sala de ajedrez.

Weasley se había hecho cargo 'heroicamente' y al final se sacrificó pensando que no había otra manera. ¿Mucho dramático? Y luego habían alcanzado el desafío de las pociones. Daniel se había rendido en los primeros 10 segundos, cayendo al suelo quejándose de cómo iban a quedar atrapados allí para siempre, mientras que Granger había tomado alguna iniciativa y comenzó a frotar sus dos braincells solitarios juntos sobre el problema. Ella había estado en más de 15 minutos ahora, mientras que a Harry le había tomado apenas 2 minutos hacerlo. Los había estado siguiendo todo el camino, escondidos bajo su capa de pelo de Demiguise, mientras que habían salido de la capa de invisibilidad de su hermano. Obviamente no podía ayudarlos, y se había asegurado de seguirlos solo una vez que hubieran superado el desafío. Valoraba demasiado su vida como para saltar ciegamente allí con ellos.

"Lo tengo!" Granger finalmente lloró, su rostro se deleitó como si hubiera logrado resolver los secretos del Universo. "Es la botella más pequeña", dijo con entusiasmo apresurándose y recogiendo la botella sin apenas líquido. Harry le dio eso a regañadientes, aunque sabía que lo había hecho más rápido.

"Solo hay suficiente para uno de nosotros", señaló Daniel y Harry resistió la necesidad de poner los ojos en blanco.

"Esa no es una golondrina."

Se miraron el uno al otro. "Cuál te llevará de vuelta a través de las llamas moradas?" Hermione señaló una botella redondeada en el extremo derecho de la línea. "Bebes eso", dijo Daniel. "No, escucha, vuelve y busca a Ron. Toma escobas de la sala de llaves voladoras, te sacarán de la trampilla y pasarán Fluffy: ve directamente a la lechería y envía a mi búho, Merlín, a Dumbledore, lo necesitamos a él. Mantendré el git viscoso hasta entonces."

"Pero Daniel, ¿y si sabes quién está con él?" Hermione se burló.

"Relajarse. Lo he vencido antes, ¿no?" le preguntó a Daniel señalando la V en su mejilla. Harry puso los ojos en blanco esta vez, solo si sabía la verdad, y desconectó el resto de sus incómodos adiós y momentos blandos. Solo volvió a sintonizar cuando Granger se fue y su hermano recogió la botella y bebió todo lo que pudo. Daniel se estremeció por un momento y luego caminó a través de las llamas negras hacia el otro lado.

Harry se lanzó hacia adelante tan pronto como lo hizo y recogió la botella que yacía de lado sobre la mesa, sosteniéndola hasta su ojo para poder verla. Quedaban un par de gotas de poción adentro y esperaba que fueran suficientes. Se llevó la botella a los labios y la vació por completo, dejando que cayera al suelo. Se estremeció y respiró hondo y caminó a través de las llamas, aún con su capa.

Las llamas solo hacían cosquillas y pronto se abrió paso solo para ver a su hermano y Quirrel cara a cara. "Severus?" Quirrell se rió, y tampoco eran sus agudos temblorosos habituales, sino fríos y agudos. "Sí, Severus parece el tipo, ¿no? Tan útil tenerlo dando vueltas como un murciélago cubierto de maleza. Junto a él, que sospecharía p-p-poor, st-stuttering P-Profesor Quirrell!"

"Pero Snape intentó matarme!" respondió Daniel incrédulo

"No, no, no. ¡Nadie intentó matarte! Todo fue un accidente cuando, en cambio, yo", Quirrel de repente se detuvo como si acabara de escuchar algo. "No importa de todos modos cuando después de todo eso, te voy a matar esta noche", respondió alegremente. Quirrel chasqueó los dedos de nuevo y de repente Daniel comenzó a moverse hacia él. "Abajo a los negocios!" Quirrel exclamó y se dio la vuelta.

Harry solo podía mirar en estado de shock mientras los eventos se desarrollaban ante sus ojos: no había sospechado que nadie buscaría la piedra, y mucho menos a Quirrel, que tenía miedo de su propia sombra. Tomó varias respiraciones profundas y se arrastró detrás de Quirrel, y solo entonces vio la bola brillante suspecnded en el aire. ¡Dentro de él, Harry podía ver un débil contorno rojo, la piedra!

"Por supuesto que a Dumbledore se le ocurrió, confía en él para que haga exactamente eso. Pero, ¿cómo paso a este maestro?" se preguntó a Quirrel para sí mismo, o al menos eso es lo que Harry y Daniel pensaron. A ambos de su horror, una voz seca respondió.

"Usa al chico ... usa al chico."

"Por supuesto por supuesto!" Quirrel exclamado. Le dio la mano y las cuerdas liberaron a Daniel, quien chilló con fuerza frente a la bola brillante. "Dime! ¡Dime cómo conseguir la piedra!" preguntó Quirrel frenéticamente. Había una luz brillante de la pelota, pero ni Daniel ni Quirrel lo notaron: Harry vio esto pero no sabía lo que significaba, y vio un pequeño objeto hundirse en el bolsillo del pantalón de Daniel.

"No lo sé!" se quejó Daniel.

"Él miente... Él miente..."

"Potter, vuelve aquí!" Quirrell gritó. "Dime la verdad! ¿Qué acabas de ver?"

La voz alta volvió a hablar. "Déjame hablar con él ... cara a cara..." "

¡Maestro, no eres lo suficientemente fuerte!"

"Tengo suficiente fuerza ... para esto..." Ambos Potters vieron atónito mientras Quirrel desplegaba su turbante y se alejó de Daniel. En la espalda de su cabeza había una cara canosa y agrietada con rendijas para los ojos. Voldemort. "Mira en lo que me he convertido, Potter", escupió la cara y comenzó el monólogo malvado...

"APRÉSALO!" gritó la cara al final de dicho monólogo malvado, y Quirrel levantó su propia mano para agarrar a Daniel. Harry entró en acción, sus extremidades pudieron moverse una vez más. Sacó su mano y murmuró un hechizo, golpeando accidentalmente a Daniel en lugar de Quirrel. Daniel fue arrojado contra el costado de la cámara y fue noqueado instantáneamente y Quirrel se volvió hacia donde había venido el hechizo. Harry sacó dramáticamente la capa de su cabeza y arrojó un aturdidor a Quirrel que falló.

"Por supuesto, el otro Potter también está aquí." Quirrel sonrió y chasqueó los dedos y las mismas cuerdas que ataban a Daniel surgieron alrededor de Harry. "He estado tratando de matarte todo el año, ya sabes", dijo Quirrel alegremente como si estuviera discutiendo el clima.

"Espera qué?" le preguntó a Harry luchando contra las cuerdas. Su varita yacía en su mano, pero no podía moverla para salir de las cuerdas.

"Oh sí! De hecho, te estaba apuntando al partido de Quidditch cuando ese oaf Hagrid se topó conmigo. Sacudió mi objetivo hacia ti imbécil de un hermano", explicó Quirrel.

"Entonces por qué no le dijiste eso a Daniel?" preguntó Harry. "Estoy seguro de que le encantaría saber eso", escupió Harry. Estaba haciendo todo lo posible para distraer a Quirrel y mantener su atención en él, no en sus manos, que estaban trabajando furiosamente para deshacer las cuerdas.

"Lo haría?" preguntó Quirrel sonriendo. "Sí, sí, estoy seguro de que le encantaría saber todo sobre cómo no es el chico que vivió cuando en cambio eres tú." Quirrel sonrió y tomó el silencio de Harry como shock, continuando. "Eres el chico que vivió Hadrian Potter. Mi maestro te apuntó esa noche y su objetivo era cierto, pero algo de magia profunda te impidió morir. Fuiste abandonado por tus padres, Potter", continuó Quirrel y de repente la voz cambió a una seca y áspera.

"Únete a mí, Potter. Únete a mí y vengate de aquellos que te abandonaron pensando que no valías nada." Quirrel se alejó de Harry, quien finalmente se encontró cara a cara con el propio Voldemort. "Ayúdame a conseguir la piedra y te recompensaré más allá de la imaginación."

"Estás seguro de eso? Mi imaginación es bastante activa", bromeó Harry, una mano finalmente libre de las cuerdas restrictivas. "Y no te diste cuenta de una cosa sobre mí, Voldy", comenzó Harry agarrando su varita con fuerza. "He sabido que fui el chico que vivió durante todos estos años." Harry llevó su varita a la cara agrietada de Voldemort y gritó: "Confringo!" Un chorro de luz azul salió disparado de la varita de Harry y golpeó a Voldemort justo en la cara. Él y Quirrel explotaron en polvo fino y escombros, dispersándose por toda la habitación. Un fantasma pálido salió volando de la habitación dejando a Harry solo.

Harry corrió hacia Daniel y revisó su pulso, estaba respirando. Con las manos torpes, quitó la piedra del bolsillo de Daniel y la sostuvo con curiosidad. Podía decir que era falso: la verdadera piedra irradiaba magia tan intensa que incluso un niño de 11 años podía sentirla. Este no lo hizo y debe haber sido una trampa para atraer a Voldemort a la cámara. Solo para estar a salvo, Harry rompió la piedra en el suelo a través de la fuerza pura, la roca se fragmentó en cientos de pequeñas piezas. Tenía una cosa más que hacer. Sacó la capa de invisibilidad de Daniel del bolsillo de su hermano y la reemplazó con su propio cabello Demiguise. La capa era legítimamente suya y su hermano era demasiado idiota para darse cuenta.

Se levantó y salió de la habitación, robando una última mirada a su hermano que yacía noqueado en el suelo. Dumbledore venía a buscarlo. Harry entró en las llamas negras y al otro lado.

AN/ Este parece un buen lugar para terminarlo, ¿no? ¡Y finalmente tengo tiempo suficiente para escribir regularmente! Espere capítulos cada 7-14 días ahora personas. Se explicarán bastantes cosas en el próximo capítulo que concluirá el año escolar y posibles las vacaciones. Tuve que hacer un salto de tiempo ya que no creo que quisieras leerlos simplemente pasando por sus clases normales.

Vi un montón de críticas sobre la juramentación, así que edité el último capítulo. Solo queda uno y ese es Flamel. Otros decían sobre la capa y estaba evitando responderlas sinceramente, ya que había planeado que Harry se la robara a Daniel a fines de este año. ¡Espero que hayas disfrutado y siéntete libre de dejar una reseña!