Capítulo 37

El Uzumaki abrió sus azules con sorpresa y un gran sonrojo, las mirada de la aldea caían en ambos mientras los rumores comenzaban, las voces se escuchaban dudando sobre la sexualidad de ambos chicos, aunque aún no identificaban al heredero Uchiha, tenían años sin verlo, para Itachi era algo bastante conveniente para su misión en Akatsuki, por otro lado. Naruto no prestaba atención, estaba acostumbrado a que la gente hablara de él, aunque en su viaje eso no sucedía, cuando regresó a Konoha comenzaron los rumores, no era de parte de todos como antes, aún así ahí estaban las habladurías, por eso podía entender las palabras que Shisui siempre le decía sobre meterse en problemas si los veían juntos, pero el chico a su lado no dudaba, no le importaba compartir a su lado y ser visto, lo había llamado hermoso y eso lo hizo sentir especial, bajó su rostro con una suave sonrisa- si sigues creeré que te gusto- Itachi sonrió ligero sin responder, no quería presionar aún, ambos tomaron asiento en los bancos del Ichiraku.

-Narutoooo se ven tan lindos juntos, no te preocupes, aquí nosotros los defendemos, los aldeanos hablan por envidia, ustedes sigan- el Uzumaki abrió y cerró su boca sin entender -Ayame-nee, ¿de qué- Itachi apretó el ceño, con velocidad actuó -¿te sigue gustando el ramen de cerdo con extra carne pequeño?- Naruto sonrió con emoción olvidándose de preguntar a qué se refería Ayame -bastante ttebayo -el heredero sonrió -nos das dos platos y tal vez quiera algunos más adelante Naruto, yo invito -el Uzumaki sonrió con emoción -eres el mejor ttebayo -lo abrazó con fuerza.

Itachi sonrió contento dejándose hacer, Ayame y Teuchi los veían con una sonrisa, la chica susurró a su padre -hacen tan bella pareja, me derrito paaa- el Ichiraku sonrió sirviendo sus platos- aquí están chicos, la primera ronda por nuestra cuenta -Naruto comenzó a comer con emoción -están deliciosos Teuchi-ji, gracias ttebayo- Itachi observó a la chica, sonrió amable, esa castaña lo ayudaría, estaba seguro que difundiría rumores positivos sobre una relación entre su rubio y él.

Al salir del restaurante Itachi levantó nuevamente su brazo, Naruto sin dudar se abrazó de él mientras caminaban por la aldea- tal vez quiera unos dulces como postre, no he comido unos dulces decentes en todos estos años- el rubio sonrió con emoción- es verdad, tengo tiempo sin comer, vayamos, pero esta vez invito yo, siento que te estafé un poco en el Ichiraku ttebayo -Itachi sonrió levemente, observó la luna sobre el manto oscuro de la noche recordando aquella plática con el rubio antes de irse en su misión a Akatsuki- aún eres un sol- Naruto abrió sus azules con sorpresa al escucharlo, sonrió quedito, tiempo después de irse de Konoha había entendido que en aquella ocasión el Uchiha le había hecho un halago -¿y tu la luna? ttebayo-

Itachi sonrió quedito- ¿recordaste?- el rubio sonrió divertido -nunca nadie más me ha dicho algo tan lindo, no podría olvidarlo ttebayo- levantó sus azules viendo la luna sobre ellos, se perdió un poco viendo una escena extraña frente a él, una imagen de Itachi en una habitación frente a una ventana sentado viendo la luna con la mirada triste llegó a su mente, podía ver cómo la luz de la luna bañaba su rostro, se veía mayor, más maduro, bastante serio, había dolor en su mirada, parpadeó con duda, sintió dolor en su corazón al verlo así, sacudió su mente al sentir la mirada del Uchiha sobre él, estaba a su lado caminando, ¿había sido una alucinación como aquella vez del estadio?, giró sus gemas analizando al heredero con curiosidad viendo que nuevamente era joven, parpadeó con duda al ver su mirada seria sobre él, ¿por qué lo veía tan intensamente?, Itachi sonrió ligero -“no te desharás de mí tan fácilmente”-

Naruto paró de golpe al escuchar esa frase sin darse cuenta que estaban en medio del bosque, su corazón latió con fuerza, comenzó a respirar un poco agitado, giró su rostro con duda, esa frase lo hizo sentir agitado, una voz sonó en su cabeza “te juro que te buscaré en cualquier otra vida, no te desharás de mí tan fácilmente” sus azules se abrieron bastante, abrió y cerró sus labios, bajó su rostro tratando de calmarse, respiró hondo sintiendo su respiración compensarse, levantó sus azules una vez más, ¿dónde había escuchado esa frase que tanto lo alteró? Su corazón aún quería salir de su pecho, la mirada del mayor lo puso aún más nervioso, era como si lo traspasara, como si con esa frase hubiera querido llamar a su alma- ¿qué?-

Itachi sonrió al ver el efecto que causó en su rubio, esa frase la había dicho en el lecho de muerte de su amor, quería saber si Naruto también había retrocedido en el tiempo, todos esos años se lo había preguntado, al parecer había algo de ello, por lo que podía ver aún no había despertado su conciencia, debía ser paciente- me refiero al tiempo que me fui a esa misión, quiero recuperar nuestra cercanía, ¿te molesta?- Naruto comenzó a calmarse, sonrió lindo al entender, aunque la duda quedó en su corazón, ¿qué había sido eso? -no necesitas recuperar algo que nunca perdiste Ita, seguimos siendo cercanos, ¿no es así? ttebayo- el heredero sonrió ligero, asintió con emoción, con velocidad se acercó besando su mejilla, Naruto se puso de un rojo intenso, sintió su susurro en la mejilla -gracias, es importante para mí -el azabache tomó un poco de distancia observando la luna evitando la mirada del pequeño, haciendo ver cómo algo natural su acción -no tengo más amigos-

El rubio lo veía embelesado aún perdido en su pequeño beso en la mejilla, en el susurro en su piel, su corazón latía con tal fuerza que parecía querer salir de su pecho, nunca lo había sentido, ¿a qué se debía esa sensación?, su mirada se perdía en como la luna bañaba con su luz al Uchiha recordando esa imagen que hace minutos cruzó por su mente donde estaba triste frente a una ventana viendo la luna, pensó en ese momento que el mayor era demasiado hermoso, no podía dejar de verlo- vayamos por esos dulces, muero por uno- Naruto salió de sus pensamientos al ver su sonrisa, sonrió divertido- vayamos, se acabarán ttebayo -el rubio tomó la mano del azabache, corrió con velocidad jalando de él sin soltarlo, Itachi sonrió quedito apretando ligeramente su pequeña mano, dejándose llevar por el bosque y las calles de la aldea sin soltarse, llegaron al restaurante donde pidieron dos charolas de dulces, comenzaron a comerlas recordando su infancia.

Al finalizar caminaban lentamente por las calles de la aldea- ¿ya no vives en el barrio rojo?- Naruto negó lentamente, sonrió ligero- vivo cerca de las termales, en la cabaña de ero-jiji- Itachi sonrió contento -me da gusto que todo mejore en tu vida- el rubio sonrió con cariño- todo es gracias a ti Ita, gracias por regresar a mi familia a mi lado, si no hubieras hablado con ero-jiji, tal vez sería un huérfano más en el sistema aún, viviendo de la caridad del anciano -Itachi sonrió ligero, paró ante la casa del sannin, era un lugar agradable -te traje un obsequio- tomó su cabello negro con vergüenza girando su rostro sonrojado hacia el bosque, Naruto giró su rostro con duda- ¿para mí?- Itachi asintió- en mis viajes con la organización visité muchos lugares, en una feria en un pueblo cerca de la nube encontré algo que me agradó mucho- sacó un pequeño objeto de su bolsa del pantalón -lo encontré y no pude evitar recordarte-

El rubio observó cómo abrió su puño mostrando un collar, sonrió lindo al ver a un zorro y un cuervo de ojos rojos, el cuervo lo cubrían con sus alas, con emoción sonrió, se dio la vuelta dejando ver su cuello largo y bronceado -está genial Ita, ¿me ayudas a ponerlo? ttebayo -Itachi sonrió complacido, levantó sus manos rodeando al pequeño con el collar, acarició suavemente su cuello observando su piel erizarse y un tono rosado en su piel aparecer ante su toque, sonrió al darse cuenta que su pequeño sol no era tan indiferente a él como creía, cerró el seguro lentamente y acomodó el collar suavemente- se ve hermoso- Naruto giró su rostro levantando sus azules, había escuchado su susurro, sus mejillas tenían un rosado marcado, el Uchiha sonrió ligero, dio un paso atrás divertido -me tengo que ir pequeño, me dio gusto pasar tiempo contigo, hace muchos años no me divertía-

El Uzumaki lo vio desaparecer frente a él, parpadeó con duda, parecía el jutsu de transparencia de su ero-jiji, soltó el aire que retenía en sus pulmones, no sabía que lo contenía, su corazón latía con fuerza, no podía entender qué le sucedía a su lado, mordió sus labios, bajó su mirada observando el collar, sonrió con cariño, lo tomó en su mano viendo con cuidado al cuervo negro proteger al zorro naranja, ese cuervo era tan Itachi, sonrió tímido guardando el collar en su playera, era un regalo especial para él, no se dio cuenta como la pulsera negra en su mano había sido arrebatada por el heredero quién la quemó al salir del lugar.

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