-Xochimilco, Nueva España, 1808-

El Día de Muertos en Xochimilco estaba lleno de color y alegría, pero la amenaza de la Llorona pesaba sobre el pueblo como una sombra ominosa. Kika y Beto, dos hermanos recorrían las casas en busca de dulces. Cuando Kika decidió ir sola para pedir dulces, Beto la instó a no alejarse demasiado.

De pronto el aire se volvía cada vez más frío y siniestro. De repente, un grito desgarrador resonó a los alrededores. La Llorona, una figura espectral envuelta en lamentos, apareció en busca de más niños. Beto al ver esto no dudo en llamar su atención para mantener a su hermana menor a salvo... Y sin piedad, lo atrapó en una nube de desesperación y la arrastró hacia la oscuridad, mientras Kika se quedaba atónita de lo que sucedió.

-En el Globo Aerostático-

Leo San Juan, acompañado de Don Andrés, el Alebrije, y las calaveritas de azúcar Finado y Moribunda, viajaba en el globo aerostático que le había heredado Fray Godofredo. Santiago Ayala Mendoza, el Guardián con habilidades felinas, estaba presente para asegurarse de que la misión se llevara a cabo sin contratiempos.

Leo: La carta del Padre Tello menciona que la Llorona está causando estragos en Xochimilco. Necesitamos estar preparados para cualquier situación.

Santiago: Si... Algo me dice que este espíritu será en verdad una amenaza sin igual.

Leo leía la carta en voz alta, detallando la amenaza de la Llorona, un espíritu que secuestra niños para intentar apaciguar su dolor por la pérdida de los suyos. De repente una terrible y gran tormenta se acercaba empezando a tambalear el globo.

Leo: ¡Estamos perdiendo el control!.

Fue lo que grito el joven mientras intentaba estabilizar la nave, y los sentidos felinos de Santiago estaban al máximo mirando su entorno y a los compañeros para evitar cualquier desgracia.

La turbulencia fue tan intensa que Moribunda estaba a punto de caer del barco volador. Pero Santiago, usando su agilidad felina, logró sujetarla y salvarla de la caída, pero la fuerza de la tormenta hizo que él cayera hacia el agua. Leo, en un acto desesperado, intentó salvarlo pero también se precipitó y cayó hacia el mar junto a él.

Leo y Santiago aterrizaron en una pequeña embarcación donde había una niña, la misma Kika los recibió y aunque uno estaba inconsistente, el otro fingió estarlo para no alarmar a la pequeña.

Las horas pasaron y ambos jóvenes despertaron en una cama, Santiago fue el primero en levantarse y acercarse a una ventana para recuperar aire.

Santiago: Agghh... Mi cabeza, esa fue... Una gran caída.

De pronto siente a alguien entrando al cuarto, mirando con rapidez y estando en guardia... Pero solo vería que era la madre de Kika.

Rosa: Ohh, veo que has despertado. Mmm veo que tu amigo sigue durmiendo.

Santiago: Leo al ser más pequeño necesita más reposo, ¿Usted quien es?.

Fue su pregunta, mostrándose calmado pero con sus brazos cruzados, la mujer al verla bien se mostró asombrada y un poco sonrojada. Pero deja ese pensamiento de lado, cruzándose también de brazos.

Rosa: Me llamó Rosa, soy la madre de la persona que los trajo cuando se cayeron de su globo.

Santiago: Entiendo... Usted es la mamá de la pequeña, les debemos la vida.

Dijo de forma clara y amable, haciendo un asentimiento de agradecimiento asombrando a la mujer la cual ríe levemente.

Rosa: Jeje, no es necesario ser tan educado.

De golpe entra una niña con un diente sobresaliente con un plato lleno de pan.

Kika: ¡¿Ya despertaron mami?!.

Al hacer tanto ruido, el castaño se sujeta brevemente la cabeza ya que al tener un oído muy agudo, el grito de la infante la lastimó levemente.

Rosa: Ay Kika, ¿Qué te dije de gritar dentro de la casa?. Guarda silencio por favor, Leo sigue durmiendo.

Kika: Ay... Perdón ejeje.

El joven al ver la relación de ambas mujeres sonríe levemente, pues se notaba que se querían mucho... Aunque podía presentir que no estaban totalmente felices, y miró a su alrededor notando unas fotos de ellas junto a un niño, a quien dedujo que era el hermano e hijo de ellas.

Santiago: Ustedes viven aquí... Desde hace mucho, ¿No?.

Kika: ¡Pues claro, casi toda nuestra niñez!.

Rosa: Mi marido y yo llegamos aquí cuando éramos más jóvenes, nos casamos y tuvimos a nuestros hermosos niños... Aunque poco tiempo después él...

Ella se detiene de contar, por lo que el castaño comprende y hace otro asentimiento mostrando sus condolencias, no obstante se vería como Leo empezaba a abrir sus ojos y Rosa rápidamente se acercó para atenderlo.

Cuando iba despertando, Santiago escuchó brevemente como Leo le decía "mamá" a Rosa, lo cual le pareció tierno de cierto modo. Parecía que la extrañaba mucho, le había contado poco de ella ya que no la recordaba por haberse ido tan joven.

Luego de unos breves momentos de paz, Leo hizo la pregunta que cambió el ambiente y Rosa se mostró afligida para así empezar a contar sobre quién fue la Llorona junto a su leyenda.

Rosa: Hace años, una mujer llamada Yoltzin vivía con sus hijos. Vivieron en paz y armonía por un tiempo... Hasta que la desgracia llegó a su vida. Un incendio inesperado arrasó su casa, y al intentar salvarla, dejó a sus hijos en una chalupa a la deriva... No pasó mucho para que... Los cuerpos fueran encontrados... Ya sin vida, y ella, no pudiendo aceptar su pérdida decidió desolarse de los demás, se aisló y murió de dolor y tristeza. Cuando el tiempo transcurría su historia trágica también iba desapareciendo... Hasta que empezaron a escucharse sus lamentos en la mitad de la noche, haciendo que varios niños desaparezcan. Desde entonces, su espíritu atormenta a quienes se cruzan en su camino... Dejando a los padres como yo en espera de alguna noticia por su bienestar.

Luego del relato de la mujer, Santiago pudo entender que el hijo de ella había sido una de las víctimas de ese espíritu. Leo estaba también muy atento y muy preocupado por lo que había oído.

Rosa: El padre Tello lo dio todo por ese monstruo, investigándola durante años... Y antes de desaparecer el me dio esto.

Dijo sacando de su falda un cuaderno viejo, antiguo y polvoriento al parecer el cual le entregó a Leo quien estaba a su lado, pues el guardián de las almas felinas estaba aún en la ventana sin querer despegar su vista del paisaje.

Rosa: Aquí están todas las pistas y repuestas necesarias para acabar con el dolor y la maldición de Yoltzin.

Luego de un rato de silencio, se ve como Leo agarra su colgante donde tenía la foto de su madre diciendo lo mucho que le importaba.

Leo: Está es mi posición más valiosa, y el único recuerdo que tengo de mi madre... Aveces me gustaría recordar su voz.

La mujer entonces toma su propio collar, diciendo que era un regalo de su madre y diciendo lo mucho que también le importaba, dejando en claro que nuestros seres queridos aunque no estén vivos siempre estarán a nuestro lado, aunque no los veamos.

Cuando finalizo su oración, se escucha algo romperse y fue Kika la cual terminó rompiendo una máscara de madera ocasionando que su mamá le llame la atención, para luego decir que iría a preparar la cena para al día siguiente ir a buscar a sus amigos, Leo estaba sonriendo por su hospitalidad y amabilidad, mientras tanto Santiago seguía mirando el paisaje... Teniendo una vista diferente y viendo muchas estelas espectrales por los caminos de los campos.

Santiago: Pobre mujer...

Leo: Si... No hay mayor tesoro de una madre que un hijo...

Santiago: Y también es la mayor pérdida, tanta ira... Tanto enojo y rencor acumulado... Es entendible pero no justifica sus acciones.

Leo: Tenemos que buscar a los demás... Mientras más rápido actuemos podremos terminar con esta pesadilla.

El castaño/pelinegro al oír eso asiente determinadamente, y miró como el otro castaño se preparaba para seguir el viaje... Pero el guardián al saber que esto era mucho para Leo, lo deja inconsciente golpeando su cuello y así acostarlo en la cama.

Santiago: Perdóname Leo, pero esta vez seré yo quien te ayude a finalizar esta misión... Esa mujer... No es ningún juego.

Y con lo dicho se acerca a la ventana para así saltar y cambiar rápidamente a una forma felina, un espléndido y feroz jaguar.

Santiago(Jaguar): Hrrr.

Santiago no era capaz de hablar en estas formas felinas, pero igual seguía siendo consiente de sus acciones así que sin dudarlo salió corriendo en dirección a donde estaba la presencia del espíritu de la Llorona. Pasaron las horas y ya era de noche, por lo que el felino estaría atento y con todos sus sentidos al máximo, pues sentía la mirada de alguien desde una sombra.

Santiago(Jaguar): (Está cerca...).

Y así continuó caminando, hasta notar en la distancia lo que parecía ser una iglesia inundada por lo que al acercarse al agua se queja como todo felino que no le gusta tanto el agua, pero al ser un jaguar que son conocidos por ser nadadores expertos no se quejó mucho.

Santiago(Jaguar): Woaarrr.

Él miraba la zona y sabía que la única manera de explorar más a fondo esa iglesia era cambiando a su forma humana, pero entonces de manera inesperada es atacado y empujado con el acompañamiento de un grito desgarrador, lo cual hizo que el se detuviera con bastante dificultad usando sus cuatro patas y mirando al causante.

Llorona: ¡Ahhhhhh!.

La piel del felino se erizó por completo, mientras sus orejas se encorvaban y empezaba a retroceder, el impacto de ver tal espíritu en un estado de ira fue... Aterrador.

Pero luego de unos segundos recordó porque había venido hasta aquí, así que agita su cabeza de lado a lado y muestra una mirada determinada empezando a rugirle lo cual la espíritu se mostró asombrada pero no se retiró y siguió con sus desgarradores gritos con su expresión inhumana.

Santiago(Jaguar): (N-No es... Lo mismo que sentí al enfrentar a la Nahuala... Esta fantasma... Es de temer... Correr... Y suplicar...).

No pasó mucho para que ella a una velocidad sobrehumana, usando su fuerza bruta y poderes sobrenaturales emperezara a atacarlo para alejarlo de donde estaban los niños, ella sentía que era un ser poderoso y pensaba que tenía malas intenciones con los pequeños que se había llevado. Así que haría hasta lo imposible para mantenerlos a salvo del gran felino.

Santiago también estaba agotándose, ya que no podía esquivar la mayoría de ataques y estaba agotándose por las heridas que le ocasionaba. Así que sin más opción opto a regresar a su forma humana, estando agotado y viéndose acorralado.

Llorona: ¡Hahhhh!.

Santiago: Y-Ya basta... Yoltzin... ¡Tú no eres así!.

Dijo mientras su amuleto brillaba y el cuerpo del joven empezaba a ser rodeado de energía natural, mientras un faro de sol se hacía presente encima de él empezando a cambiar su aspecto a uno más... Intimidante para un simple mortal.

La Llorona al ver ese aspecto, se detuvo un momento confundiendo al joven con un guerrero de hace años, aqueles que lucharon contra los conquistadores Españoles y brevemente retrocede por miedo y respeto. Pero de nuevo el miedo y dolor de que le arrebaten a los niños hace que pierda su cordura y se lance hacia el joven para querer robarle su vitalidad, sin embargo el joven agarra su medallón el cual brilla intensamente y cambia su aspecto mostrándose más poderoso que antes.

El extiende su mano con su medallón, y este brilla para luego liberar una onda sonora igual a la de un majestuoso león empezando a agrietar el suelo y así mandar a volar lejos al espíritu quien no puede soportar la presión de ese amuleto, siendo brevemente vencida.

Santiago ante esto, no duda ni un segundo y corre para intentar entrar a la iglesia inundada, pero desde la distancia siente como muchas energías pequeñas despiertan y se da cuenta de que en esa dirección están sus conocidos Don Andrés y Alebrije. El se ve en duda en sí salvar a los niños o ayudar a sus compañeros del más allá para estar todos juntos y así vencer a la Llorona.

Sin mucho que decir, baja la cabeza y cierra los ojos para entonces darse la vuelta y correr a la dirección contraria, donde adquiría nuevamente su forma de jaguar siendo muy rápido y en cuestión de minutos llegaría a la Isla de las Muñecas.

Mientras tanto, Don Andrés y el Alebrije habían aterrizado en la temida Isla de las Muñecas por todo este tiempo, ahí fueron atacados por un ejército de muñecos animados. La estaban pasando mal y parecía que estaban perdidos, o bueno más o menos ya que el Alebrije estaba logrando mantener controlada la situación por completo.

En cuanto a Santiago quien ya había llegado con sus habilidades de felino, los ayudó estando transformado en jaguar y enfrentando a los muñecos y liberando al hombre que había sido prisionero del líder de los títeres cuando este fue despedazado por sus garras. Don Andrés y Alebrije estaban asombrados por ver la habilidad sobrenatural del joven guardián, sabían que era especial y fuerte... No pensaron que tanto.

Santiago(Jaguar): Ggrrr.

Diría mientras volteaba a mirar a Don Andrés y Alebrije, uno se mostró algo asustado mientras el otro lo miraba con admiración.

Alebrije: No manches, ¡¿Eres Santiago?!. ¡Que increíble habilidad!.

El jaguar solo le asiente, estando agradecido por sus palabras mientras Don Andrés se acerca notando en sus ojos que era en verdad el.

Don Andrés: ¿Cómo es siquiera posible?, sabíamos que eras especial pero esto... Es inesperado.

Entonces el jaguar regresa a su forma verdadera, dejando ver al Santiago de siempre sin su vestimenta de guerrero y su medallón con su apariencia de siempre.

Santiago: No es que me guste revelar mis habilidades y poderes, si lo piensan con claridad no es buena idea.

Alebrije: Eso tiene mucho sentido, si revela todos sus poderes ante las personas podrían ver puntos débiles y bueno... Lograr vencerlo.

Santiago: Justamente Alebrije.

Don Andrés: Pero bueno, ¿Sabes donde se encuentra nuestro amigo Leo?. Hay que juntarnos a él para luego detener a la Llorona.

Santiago: Lo siento... Pero no puedo decirles dónde está o dejar que vayan a traerlo, esta entidad es un peligro incluso peor que la Nahuala.

Cuando dijo eso, ambos seres se quedan asombrados por lo que dijo y al notar su seriedad comprenden lo que dice, así que cuando le piden al hombre que era controlado por las muñecas que reparen su transporte, ellos 3 regresarían por su camino... Claro que el joven guardián se da cuenta de la falta de las dos calaveras.

Santiago: ¿Dónde están Moribunda y Finado?.

Alebrije: Es verdad, no los he visto desde hace un buen rato.

Don Andrés: Espero que no hayan sido lastimados por los muñecos.

El castaño se pone algo serio, así que usa su olfato desarrollado y nota que de los muñecos de la isla habían 2 sobrevivientes, por lo que camina hasta un enorme árbol donde las calaveritas estaban colgadas de cabeza.

Santiago: Ahí están chicos, ¿Cómo llegaron a esta situación?.

Entonces nota como atrás del árbol estaban los dos muñecos con aspecto de diablitos, los cuales se mostraban orgullosos de haber atrapado a los hermanos esqueléticos. No pasó mucho para que el joven usara sus habilidades felinas para dar un gran salto llegando a donde estaban colgando los gemelos, liberándolos y cargándolos para tenerlos en sus hombros.

Santiago: Jeje, vámonos chicos. Hay un espíritu que detener rápidamente.

Mientras se iba, miraba de reojo a los muñecos en forma de diablo a quienes les sonrió de forma algo burlona. Sin embargo mientras todo esto pasaba Leo y Kika habían pasado los mismo momentos que la línea original, incluyendo el secuestro de la pequeña por la Llorona, la búsqueda hacia la iglesia inundada y finalmente la distracción de Teodora para alejar a Yoltzin de Leo.

Cuando la Llorona perdió su interés en seguir persiguiendo a la niña fantasma, Teodora continuó huyendo y volando a máxima velocidad llegando hasta Santiago y el grupo chocando con fuerza en el pecho del joven, quien ni se inmutó y se mostró asombrado al verla.

Santiago: ¿Teodora?, pensé que no tenías interés en ayudarnos.

Ella estaba aún en shock por el espanto, aunque cuando volteó a mirar al joven guardián ella solo suspira como toda chica enamorada, se aparta un poco y se acomoda el cabello para no verse tan terrible por estar cerca de Santiago.

Teodora: ¡Ay Santi, qué gusto verte de nuevo!. Lamentó si te ensucie o pegue, estaba algo... Distraída, o sea, no es algo que sea más lindo que tu, ¡Obvio!. Solo... Solo... Eje...

El joven reconocería esos nervios, así que la mira más detenidamente ocasionando que ella se ponga nerviosa.

Santiago: Estabas siendo... Perseguida por la Llorona, ¿Verdad?. Significa que alguien te pidió que la distrajeras, ¿Quién lo hizo?.

Teodora: Ay o sea, obviamente fue Leo desde luego, ¿Quién más precioso Santi?.

Le dijo de forma coqueta y guiñándole el ojo, no obstante la cara del castaño era bastante seria y baja de sus hombros a los hermanos Moribunda y Finado, para nuevamente acceder a su forma jaguar asombrando de sobremanera a los hermanos calavera y a la niña fantasma, pues jamás vio en persona que tuviera esa habilidad.

Y sin decir nada más sale corriendo hacia la dirección de donde venía Teodora, no obstante sabía que esta velocidad no bastaba así que cambia a su forma de Chita siendo más veloz que antes, llegando justo en un momento preciso al ver como el suelo se rompe y de este sale la Llorona cargando con fuerza a Leo llevándolo hasta el cielo.

Santiago ruge con fuerza por lo que veía, pero no funcionó para nada y vio como la mujer en pena absorbía con intensidad el alma de Leo hasta casi matarlo, por lo que en forma de ira regresa a la normalidad y accede a su forma de guerrero.

Santiago(Guerrero): ¡Yoltzin!.

Y así vuelve a mostrar sus amuleto el cual brillo y de este saldrían varias almas felinas de diferentes tamaños, épocas y ferocidad. Los cuales salieron hacia la mujer en pena luchando y logrando contenerla mientras Santiago agarraba a Leo que iba cayendo, atrapándolo y dejándolo en el suelo con cuidado.

Santiago(Guerrero): Niño testarudo, hahh...

Escuchaba tanto gritos y rugidos por parte de los fantasmas, los felinos eran en mayoría más rápidos y fuertes, pero la locura, dolor e ira de la Llorona era incomparable y logró derrotarlos a todos.

Llorona: ¡AHHHHH MIS HIJOS!.

Luego de eso, mira con una ferocidad aterradora al joven guardián quien la encaró poniéndose en una pose defensiva.

Santiago(Guerrero): Ya basta Yoltzin... Esto no cambiará lo que pasó con tus hijos. Debes aceptar la verdad.

Dijo con seriedad y empezando a hacerse para atrás, acercándose a la cripta de sus hijos por lo que cuando ella escuchó sus palabras se enfureció y voló hacia él con la intención de acabarlo de una buena vez... Pero...

El joven al ver su cercanía, regresa a la normalidad y usa su amuleto para alumbrar los nombres de la cripta de los hijos de la Llorona, la cual al estar cerca se detiene... Y empieza a acercarse lentamente a esa cripta, leyendo los nombres de sus pequeños y ocasionándole un ataque doloroso por esas memorias, viendo en los pequeños Leo y Kika el reflejo de sus hijos quedando espantada por lo que había hecho.

Así que con su gran dolor y desesperación, daría un último grito de muerte y terror reclamando por sus hijos escuchándose el eco en toda la iglesia inundada, para verse como la fantasma en pena volvía a ser la mujer hermosa y amable que era.

De la cripta saldrían sus hijos y correrían hacia ella para abrazarla y recibirla para irse al más allá juntos, por supuesto que todo esto era visto por Santiago quien sonreía con satisfacción al ver que la pobre mujer había encontrado su paz... Después de tanto tiempo, sin embargo también notó como Leo estaba compartiendo un lindo momento con su madre.

Ellos estaban abrazándose con mucho cariño, para que luego de un rato ella decidiera volver al otro mundo, dejando con ello a un Leo menos triste y más determinado que antes, entonces él voltea a ver al joven guardián.

Leo: Tu y yo tenemos mucho de que hablar tonto, jejeje.

Santiago: Solo quiero decir Leo, que otra vez... Salvaste a un pueblo entero y ayudaste a un alma en pena a encontrar la paz, hmm... Creo que después de esto, es buen momento para mencionar que eres digno de tus dones.

Al oír eso, el castaño sonríe feliz y se acerca para chocar el puño, cosa que el otro castaño repitió con una gran sonrisa. Los segundos transcurrieron y todo había terminado, los niños estaban despiertos, Kika se reencontró con su hermano Beto y finalmente todos los pequeños fueron regresados a sus hogares.

Y así, al día siguiente todos los presentes del pueblo se despedían de la gente que los ayudó en su situación, todo el grupo estaba en el transporte volador para volver a casa, sin duda ellos no serían olvidados por mucho tiempo.

El castaño estaría sentado cerca de una escalera para subir al timón, viendo a la gente despedirse y notar como la mujer Rosa estaba feliz con sus dos pequeños, cosa que le hizo sonreír y cerrar sus ojos.

No obstante, ante tanta felicidad recibieron la noticia del padre Fray que Xochitl había sido raptada por las Momias de Guanajuato, cosa que hizo a todos decidir ir hacia allá para rescatarla y de paso acabar con las momias, sin embargo Santiago sabía que esto era inusual... Pues no se creía que unas momias habían raptado a Xochitl así de fácil, por lo que debía estar bien preparado para lo que se avecinaba.

Así, la embarcación empezó a elevarse y a irse de ese pueblo, para continuar con sus aventuras y seguir ayudando a pueblos enteros de estas situaciones terribles.