Los Grandes Juegos Magicos.

Un evento tan espectacular e impresionante en su enormidad, que incluso los individuos más aislados al menos conocían el nombre. La mayor competencia entre gremios de magos en todo Fiore, sin duda determinaría quién es el mejor entre ellos. El campeón no solo gana el prestigio que conlleva ser el más fuerte, sino que un premio considerable de treinta millones de joyas es más que suficiente para atraer a los gremios como una polilla a la llama. Dicho esto, solo los gremios más fuertes pueden hacer el corte, mientras que el resto se queda atrás en el polvo. Para ganar, un gremio se enfrentará a la competencia más dura del reino.

Sin embargo, esas probabilidades amenazantes no hicieron nada para disuadir a Fairy Tail de lanzar su sombrero al ring. Después del regreso de los equipos de Sirius Island, se determinó que ganar los juegos sería la forma más rápida para que el gremio se recuperara de la mediocridad.

Y así se encontraron en la capital de Fiore, Crocus, 'la ciudad de las flores en flor'. La ciudad más grande de toda la tierra, en su centro se encuentra el Palacio Real, Mercurius. Y al oeste se encuentra el estadio Domus Flau, donde se realizarían los juegos. Decir que la ciudad recibe su parte justa del turismo sería quedarse corto. Con la afluencia de turistas de los juegos, la gente tendría que reservar posadas con varios meses de anticipación.

Entonces, dado que Fairy Tail siempre ha sido bien conocido por los daños colaterales, Makarov había exigido que se comportaran de la mejor manera, para que no fueran expulsados antes de que comenzaran los juegos.

"Ahora... los juegos comienzan mañana", explicó Makarov mientras sacaba un libro grande de su chaqueta y se lo entregaba a Erza. "Este es el libro de reglas para los juegos de este año. Asegúrate de terminar de leerlo esta noche".

"¡¿Se supone que debemos LEER eso ?!" exclamó Natsu. "¡Es del tamaño de un maldito diccionario!"

"¡No se preocupen chicos!" Levy gorjeó mientras se ponía un par de anteojos. "¡Déjame esto a mí! ¡Tengo mis lentes para leer con fuerza de vendaval!"

"¡Eres tan confiable!" vitoreó Lucy.

"Veamos, hay tres puntos principales aquí; ningún maestro del gremio puede participar, nadie con la marca del gremio puede participar tampoco, y las reglas se mantendrán ocultas hasta justo antes de cada partida. Oh, y todos tenemos que estar en nuestro posada antes de la medianoche ".

"Así que hasta entonces, ¡Divirtámonos un poco!" Natsu lloró mientras agarraba a Lucy por la muñeca y despegaba calle abajo.

Sin embargo, no pasó mucho tiempo antes de que el estado de ánimo de Natsu se agriara. Debido enteramente a los dos adolescentes parados frente a él.

"Tú..." Natsu gruñó en voz baja mientras apretaba los dientes, los puños apretados y temblando de ira a su lado. "¡Ustedes monstruos! ¡¿Asesinaron a sus propios padres ?!" rugió a los dos cazadores de dragones Dientes de Sable.

Sting simplemente se rió divertido. "Naturalmente. Eso es lo que hace un asesino de dragones. Como se espera que pinte un pintor, el propósito de un asesino de dragones es matar dragones".

"¡Pero te criaron!"

"Sí, y lo hicieron muy bien". comentó Rogue. "Vamos Sting, no tengo ningún interés en la generación anterior".

Incluso cuando los asesinos de tercera generación se fueron con sus excedentes a cuestas, Natsu continuó mirándolos acaloradamente.

"¿C-cómo pudieron hacer tal cosa?" Lucy dijo mientras sus manos seguían temblando incontrolablemente. "Matar a los que los criaron..."

Natsu gruñó una última vez mientras la multitud se dispersaba y los asesinos antagónicos salían de su campo de visión. "No se merecen esa magia". gruñó mientras su puño comenzaba a arder.

"Yo no haría eso si fuera tú." vino una voz fuerte.

Natsu, Lucy y Happy se volvieron para ver a un hombre que se les acercaba por detrás, abriéndose paso entre la multitud. "No sería prudente empezar a tener problemas tan cerca del inicio de las competiciones".

El hombre tenía una apariencia bastante única para él. De piel ligeramente bronceada y una melena de rebelde cabello plateado, estaba vestido con una armadura de cuero negro junto con placas de escamas de metal. Una capa oscura colgaba de su espalda, pero hacía poco para ocultar la gran espada que estaba debajo de ella.

Por la forma en que habló, era obvio que era miembro de otro gremio en competencia, pero no mostró hostilidades hacia ellos. Al menos, eso es lo que les pareció a Lucy y Happy. Natsu, por otro lado, estaba rígido ante la presencia del hombre. Cada fibra de su ser le gritaba que el hombre que estaba frente a ellos era peligroso. Su sangre se sintió como si se hubiera convertido en hielo tan pronto como sus ojos se posaron en la espada que el extraño había amarrado a su espalda.

Con los instintos de supervivencia trabajando a toda marcha, el adolescente de cabello rosado agarró a sus dos amigos y rápidamente se alejó del hombre mientras aún lo mantenía a la vista.

"¡Natsu!" Lucy exclamó alarmada por la acción repentina.

"¿Quién eres tú?" Preguntó Natsu sin apenas mantener la compostura.

Sus dos compañeros se sorprendieron por la cantidad de miedo presente en el rostro de los asesinos. Algo en el recién llegado lo había puesto nervioso como nunca antes lo habían visto.

El hombre inclinó la cabeza por un momento antes de chasquear los dedos como si se diera cuenta de algo. "Ah, mis disculpas. Siendo un asesino de dragones, no estaba muy seguro de qué tipo de reacción tienes hacia mí. Aunque puedo asegurarte que mis intenciones están lejos de ser hostiles."

"Mierda." Natsu inmediatamente se mordió. "Cada instinto que tengo me está gritando que eres una amenaza".

Sacudió la cabeza. "Sin embargo, parece que sus compañeros no comparten sus suposiciones". respondió mientras señalaba a Lucy y Happy. "La única razón por la que estoy aquí es porque quería ver cómo es un 'asesino de dragones'. Aunque tu reacción es algo preocupante."

"¿De qué está hablando Natsu?" preguntó Happy.

"Cuando la presa está en presencia de un depredador peligroso cuyo ser entero está limitado a matarlos, es natural que su miedo instintivo se apodere de ellos". explicó crípticamente mientras se cruzaba de brazos. "Escuché que tu magia te permite asumir los aspectos de un dragón. Como tal, tu cuerpo es capaz de reconocer el peligro absoluto que represento."

Los dos lados permanecieron quietos por unos momentos en un enfrentamiento silencioso. Entonces el hombre tarareó de satisfacción y se volvió para marcharse.

"En caso de que tengas curiosidad, mi nombre es Siegfried. Y no tienes que preocuparte de que participe en los juegos. Nuestro equipo de gremios ya ha sido decidido".

Incluso después de que Siegfried se fue, Natsu todavía estaba sudando. Se sentía como si apenas hubiera escapado de esa confrontación con su vida.

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Jellal, actualmente disfrazado de ex miembro de Fairy Tail y su homólogo de Edolas, Mystogan, acechaba las calles de Crocus como parte de su investigación sobre los extraños fenómenos mágicos que irradiaban desde la ciudad. Cada año, la misma energía irradiaba desde el área, pero él o sus compañeros de gremio nunca podrían encontrar la fuente. De lo único que estaban seguros era de que la energía era inquietantemente similar a la de Zeref.

Sin embargo, este año fue el peor hasta ahora. Si los años anteriores fueron similares a un grifo de agua derramando la energía, este año fue como una cascada.

Algo había cambiado drásticamente para que ocurriera tal suceso. Sin embargo, no estaba más cerca de encontrar la causa que de encontrar la fuente. Todavía tenía algunas horas más para buscar antes de que se le pidiera que regresara a la posada en la que se alojaba su equipo, así que siguió adelante. Y cuando cruzó otra intersección, lo sintió. Una barrera apenas perceptible que parecía mitigar los efectos de la energía. Ahora, habiendo pasado la barrera, Jellal tendría que estar ciego para no identificar la fuente de energía.

Manteniendo la compostura, Jellal mantuvo un ritmo constante mientras se dirigía hacia el epicentro de la barrera. Al llegar a él, notó que estaba ubicado justo encima de una posada bastante grande. Y a juzgar por todas las firmas mágicas que estaba recogiendo, debía albergar a uno de los gremios rivales.

Si bien no es prudente entrometerse en lo que esencialmente equivale a territorio enemigo durante los juegos, la competencia aún no había comenzado oficialmente y no tenía intención de comenzar problemas. Por lo tanto, su 'infiltración' de la posada salió sin problemas ya que simplemente había entrado en el bar / restaurante que estaba adjunto al edificio. Al entrar en el establecimiento, se dio cuenta de lo diversos que eran los miembros del gremio que se alojaban allí. Hombres y mujeres de todas las edades y razas estaban esparcidos por el lugar, cada miembro vestido con atuendos que diferían mucho de una persona a otra.

No queriendo sobresalir simplemente holgazaneando, Jellal se dirigió al bar y se sentó cerca de un hombre de cabello naranja que vestía una capa verde. Mientras esperaba que el camarero se acercara, decidió charlar con el otro hombre.

"Toda la colorida variedad de personas aquí". Jellal comentó mientras miraba a una mujer de grandes pechos con cabello blanco. Su atuendo estaba más allá de la exposición y parecía estar hablando con la pequeña criatura oso en su hombro.

El hombre se encogió de hombros. "Eh, te acostumbras después de un tiempo. Sin embargo, para algunos eso podría significar unos días, y para otros, algunos años". después de beber un sorbo de su vaso, el hombre se volvió levemente para mirar a Jellal con ojos críticos. "Entonces, ¿Qué trae un competidor rival a nuestra base de operaciones?"

La única señal de que Jellal estaba alarmado por haber sido descubierto tan rápidamente fue un leve movimiento de sus labios que aún estaban ocultos debajo de su máscara. Aunque parece que el hombre de alguna manera se dio cuenta de esto, mientras agitaba la mano en señal de despido.

"Tranquilízate, no es como si estuvieras haciendo algo ilegal por estar aquí. Solo analizando la competencia, ¿verdad? No hay reglas que digan que no puedes hacer eso, ya que los juegos aún no han comenzado". dijo el hombre con una sonrisa mientras giraba la muñeca y agitaba su bebida. "Seguro que podríamos haber hecho lo mismo, pero los jefes dijeron que los otros gremios necesitaban una desventaja. Lo mínimo que podemos hacer es darles a ustedes el elemento sorpresa".

"... Lo haces sonar como si tu gremio ya hubiera ganado." Jellal respondió con una pizca de molestia.

Girando en su taburete, el hombre apoyó los codos en la barra mientras se enfrentaba a Jellal. Su capucha se había caído por completo, revelando los rasgos rugosos del hombre. "Bueno, digamos que tenemos más de lo que nos corresponde de potencias aquí". respondió antes de extender su mano. "Llámame Robin."

Sopesando brevemente sus opciones, Jellal sintió que no haría ningún daño complacer al hombre. Alcanzando la mano extendida, la agarró con la suya. "Mystogan".

"Ahh, verdadero nombre misterioso que llegaste allí." Robin respondió mientras se giraba hacia la barra. "Para que lo sepas, no soy el único aquí que se percató de tu presencia". añadió, sorprendiendo aún más a Jellal. "Es solo que todos los demás que se dieron cuenta están siendo educados".

"Ya veo." el hombre buscado comentó después de un momento.

Aunque todavía no había provocado su ira, Jellal estaba seguro de que no sería capaz de buscar sutilmente la fuente de la energía sin alertar al menos a uno de los miembros del gremio más perceptivos que lo rodeaban. Aunque Robin no mostró ningún interés real por el espionaje general, no se podría decir lo mismo si Jellal fuera sorprendido tratando de localizar a su objetivo. Eso podría ser suficiente para agitar el nido de avispas, e incluso él no estaba seguro de sus probabilidades de escapar del bar en caso de que estallara una pelea.

Jellal se bajó el pañuelo para ocultar aún más su rostro, se levantó del taburete de la barra y se volvió para irse.

"¿Eh? ¿No vas a quedarte a tomar una copa? Me vendría bien la compañía". Robin habló mientras veía a Jellal alejarse.

El mago Crime Sorciere negó con la cabeza. "Las cosas se pondrán incómodas conmigo alrededor. Debería irme".

Robin se encogió de hombros y volvió a su bebida.

Aunque no pudo localizar la fuente exacta de la firma de energía, Jellal todavía estaba satisfecho de haberla reducido a su ubicación actual. Tendría que regresar en algún momento durante los juegos cuando todos se hubieran ido para hacer una investigación más exhaustiva. Eso, o Ultear y Merudy tendrían que infiltrarse en la ciudad.

Sintiendo un escalofrío antinatural correr por su espalda, Jellal echó un vistazo a una de las ventanas superiores de la posada, donde vio a un hombre que lo miraba irse. Cabello oscuro con una tira de tela roja envuelta alrededor de su cabeza y un cuerpo muy bronceado que estaba cubierto de marcas tribales, el mago sabía que algo estaba mal en su observador por la forma en que lo miraba. La expresión de su rostro parecía decir; cerca, pero mejor suerte la próxima vez.

Acelerando el paso cuando se fue, Jellal ni siquiera podía comenzar a comprender el caos que se desarrollaría una vez que los juegos llegaran a su conclusión.

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Los rugidos de emoción y los vítores de alegría de los espectadores en el estadio se pudieron escuchar en todo Crocus. El primer día oficial de los juegos de Grand Magic finalmente había llegado y todos estaban preparados para la acción. Más aún para los competidores. Y aunque Fairy Tail había recibido abucheos en lugar de vítores, los magos todavía estaban listos para lo que fuera que se les lanzara.

"¡Entonces, ahora estamos en nuestros tres mejores equipos!" Chapati Lola exclamó mientras continuaba brindando comentarios. "Así que ahora tenemos al equipo que terminó tercero en las preliminares, es... ¡Oh, Dios mío! ¡Es una gran sorpresa! ¡Nunca lo hubiera visto venir!" gritó el hombre mientras mantenía a la audiencia colgando en el borde de sus asientos con anticipación.

El siguiente equipo salió al campo. Y para el equipo de Fairy Tail, fue un grupo de caras conocidas. "¡Equipo B de Fairy Tail!"

Después de un breve interludio del Equipo A lanzando un ataque al Equipo B, así como Chapati explicando que varios equipos pueden participar pero aún deben competir entre sí, hizo que la multitud se entusiasmara una vez más por el siguiente equipo. .

"¡ Y ahora tenemos al equipo que quedó en segundo lugar! ¡Me pregunto quién podría ser!" anunció mientras miraba la alineación en el apuntador. "Así que lo siguiente es... Espera, ¡¿QUÉ?!" de repente gritó alarmado. "¡Esto no puede ser posible! ¡Es simplemente impensable! ¡¿Cómo pudo haber sucedido esto ?!"

Aunque estaba más que sorprendido por quién era el siguiente, Chapati no estaba enojado por eso, más bien no podía comprenderlo. "Llegando en segundo lugar... tenemos el poderoso gremio que nunca ha sufrido una derrota hasta ahora... ¡Sabertooh!"

Decir que la revelación fue impactante sería quedarse corto. Sería como decir que una explosión nuclear no es más que un petardo. El estadio que una vez rugió de emoción, de repente se había quedado en un silencio sepulcral cuando el gremio más famoso de Fiore entró en el estadio. Lejos de su habitual actitud arrogante y engreída, los magos parecían absolutamente lívidos. Ni un solo miembro de su equipo estaba dispuesto a dar una demostración de poder. Sin puños, sin rugido de dominio, parecían listos para matar a quien se les acercara.

Pero al mismo tiempo esto planteaba la pregunta; si el gremio superior del Reino quedó en segundo lugar, entonces, ¿quién fue el primero?

"Puedo ver que esto es bastante impactante para todos nosotros..." dijo Chapati débilmente. "Pero es hora de que presentemos a nuestro equipo de primer lugar. Solo aparecieron el año pasado, pero parece que se han estado apoderando de la tierra".

Los otros siete equipos pudieron comenzar a distinguir las formas de las figuras que salían del último túnel. "¡Haber salido encima de Dientes de Sable, eso dice algo sobre su fuerza, es Caldea!"

Cinco personas salieron a la arena y su imagen quedó grabada a fuego en la mente de todos los presentes. En el fondo más alejado se encontraba una figura alta vestida con una armadura de metal negro que estaba cubierta de púas y tenía un yelmo en forma de calavera. En una mano sostenía una gran espada de obsidiana y en la otra una torre-escudo que tenía una gran calavera impresa en el centro.

El segundo más alejado era un individuo de género indeterminado. Sus rasgos eran muy ambiguos en cuanto al género, al igual que su edad. Con una tez clara y cabello verde que les caía por la espalda, vestían túnicas blancas anodinas y carecían de calzado.

De pie a la izquierda de la persona principal estaba un hombre de aspecto juvenil cuyo rostro podía derretir el corazón de cualquier mujer que mirara. Su cabello blanco estaba teñido de azul por lo que casi parecía plateado, lo que combinaba bien con su túnica azul y blanca. Combinado con su bastón, era el epítome de tu típico mago, pero se las arregló para lucir bien haciéndolo.

A la derecha del protagonista había otro joven, aunque su pelo blanco contradecía ese hecho. Su piel estaba notablemente bronceada, lo que cuando se combinaba con su corto cabello blanco, le daba un parecido con Elfman. Vestido con una armadura negra con un sudario rojo, sostuvo la bandera del equipo en alto mientras avanzaba.

Y de pie al frente había una mujer que se veía a partes iguales regia y hermosa. Llevaba un elegante vestido azul y blanco con una armadura encima que pondría celosa a Erza. De piel clara y ojos verde esmeralda, su sedoso cabello rubio estaba recogido en un moño en la espalda, salvo por el flequillo que enmarcaba su rostro y el único ahoge rebelde que se mantenía erguido independientemente de sus movimientos. Y envainada a su costado había una espada contenida en una elaborada vaina.

Sin embargo, mientras se dirigía con su equipo hacia el centro de la arena donde estaban todos los demás, los cazadores de dragones entre ellos comenzaron a temblar ligeramente. Porque no vieron a una mujer hermosa con un porte regio, sino que vieron un enorme dragón que se les acercaba. 

Continuara...