Antes que nada: ¡NO SOY UNA EXPERTA EN DC! tan sólo me guío por las películas, así que cualquier error, contradicción etcétera, háganmelo saber :D

Contiene escenas explícitas. ¡Espero que les guste!

°°°

Realmente Clark es la viva imagen de un pobre cachorro que intenta devorarse a los leones alfas. No es que fuese un novato, tampoco alcanza el término de "virgen" (palabra que para Clark no tiene sentido), pero a diferencia de Bruce, nuestro hombre de acero no es tan fugaz sexualmente hablando.

Pero mantiene cierto encanto, sino me creen pregúntenle a Bruce Wayne, quien en sus noches apasionadas grita el nombre de Clark Kent a los cuatro vientos.

Hoy no era la excepción. Acaban de volver de una fiesta, dónde el señor Wayne, uno de los solteros más codiciosos y soñados de todo Estados Unidos, fue el centro de atención. Kent ya se estaba acostumbrando a esto, ya saben, tu novio no puede ser un multimillonario guapo con un andar sensual sin que pase desapercibida.

Pero no todo fue un lecho de rosas en esa fiesta, Clark tuvo que soportar sus celos, pues una vez más Bruce coqueteaba con uno que otro famoso, aceptando copas, números de teléfonos y miradas provocativas de parte de los demás. Clark sabía perfectamente que su novio no le pondría los cuernos (otro término que no entiende muy bien de parte de los humanos) pero duele aún así. Como si menospreciara lo que hay entre ellos.

Cuando llegaron a la mansión Wayne la atmósfera tensa se hizo notar aún más.

–¿Quieres algo de beber?–Pregunta Wayne al mismo tiempo en que se retira el saco de su costoso traje.

–No, me parece que ya fue suficiente por hoy–Clark no era bueno ocultando sus sentimientos, y Bruce acepta las indirectas con facilidad. El silencio en la sala era pesada.

El multimillonario deja su saco encima de un sofá y se dirige al pequeño bar situado a la esquina del salón, ahí se sirve una copa. Clark lo sigue en silencio, igual que un cachorro, esperando que sea el otro quien diga algo. Está incomodidad lo está volviendo loco.

–De acuerdo, ganas tú–Comenta Bruce, sabiendo de las intenciones de su pareja–¿Qué te sucede?

–Veras...–Ni el propio Superman sabe porque está algo nervioso, se supone que cuando tienes problemas con tu pareja las cosas se resuelven charlando, además, es Bruce Wayne, han mantenido un sinfín de charlas ¿Porqué está es distinta?–¿No soy suficiente para tí?

Pésima elección de palabras. Bruce aparta su copa, mirándolo fijamente, lo cual sólo pone más nervioso al kryptoniano. Pero ya no hay vuelta atrás, Superman no se esconde, no huye, no intenta apaciguar al enemigo, no tiene miedo. Superman no permitirá que se le vea inferior.

–Explícate mejor–Responde Bruce, su mirada es intensa, intenta intuir.

–Dime...¿Cuántas personas intentaron seducirte está noche?–No puede ocultarlo, Superman está terriblemente celoso, no es justo, no soporta la cara de fascinación que pone Wayne cuando alguien le invita una bebida.

–Oh, Clark...–El multimillonario ríe de forma maliciosa, seguido de otro sorbo a su copa–Superman está molesto y me pide explicaciones, que desgracia.

–Hablo en serio, y no me digas que es por imagen, hay límites y está noche te pasaste.

Que raro es ver al pacífico y modesto Clark Kent tan molesto. Y por si eso fuera poco, Wayne no puede ocultar su sonrisa, que cabrón, se divierte con todo esto. A veces olvida lo tradicional que es Kent y cómo sus emociones siempre son a lo grande.

–¿Y cuál es tu solución?–Pregunta Bruce.

–Que dejes de comportarte como una barata, tienes una pareja.

Joder, ojalá alguien hubiese grabado eso. Clark acaba de maldecir delante de su cara, acaba de exponer todo el enojo que guarda. La sonrisa de Bruce crece un poco más; nunca su novio se había molestado con él de esa manera.

–Por eso lo volveré a preguntar ¿No soy suficiente para tí?–Sigue hablando el kryptoniano, hay un fuerte arrebato debajo de sus lentes cuadrados.

Bruce cambia su sonrisa por un semblante más serio. No quería provocar de esta manera al hombre de acero, pero algo en su interior le decía que debía continuar, llegar a las últimas consecuencias. Bruce siente un cosquilleo en la entrepierna.

–Quizás no–Fue la respuesta final del caballero murciélago.

Todo ocurre en cuestión de minutos, Clark deja sus anteojos sobre la mesa del bar, y con la fuerza sobrehumana que tanto se alaba, toma a Bruce y lo sube a la mesa, tomando sus muñecas y posicionándose encima suya.

–No puedo creerlo, apenas te someto un poco y ya estás erecto–Comenta Kent al posar su mirada en los pantalones del multimillonario–Batman no se deja vencer con tanta facilidad...

–Entonces no soy Batman, soy Bruce.

–Si, eres Bruce, mi amante.

Clark atrapa a Bruce en un apasionado y húmedo beso. Utilizando su lengua, dejando al pobre Wayne sin aire. A veces olvida que su pareja es un humano, pero no es razón para subestimarlo, todo lo contrario.

–¿Qué harás Superman? ¿Harás que grite tu nombre y diga tonterías como "si, soy tuyo"?–Batman se la está pasando bien, por eso adora a Clark, tiene demasiadas facetas y es impredecible.

–No, no eres un objeto–Dice Kent mientras acaricia una de sus mejillas, dejando algo desconcertado al multimillonario–Eres mi pareja, no una posesión.

–No hagas eso–Lo dice una firmeza como tal que el kryptoniano retira su mano inmediatamente–No me trates con tanto cariño, como si fuera débil.

–Esa no era mi intención...

–Como sea, si no vas a quitarme la ropa o algo así mejor quítate de encima.

Una vez más, Superman queda ante las órdenes del Caballero Oscuro. Vuelven a besarse, mientras que las manos de Clark se escabulle bajo las ropas costosas del Wayne. No perdiendo el tiempo, rasgando primero su camisa blanca, exponiendo sus pectorales.

–Ah...–Fue el primer suspiro de placer de la noche, de parte de Bruce pues su hombre de acero ya tenía posesión sobre sus pezones, lamiendo como si fueran caramelos–No...no te contengas...

–«No tenía pensado hacerlo»–Piensa Superman mientras cambia de pezón, haciendo que este se ponga duro de golpe, escuchando como Bruce Wayne poco a poco cae en el éxtasis.

Los pantalones del multimillonario se deslizan por sus piernas, dejándolo en ropa interior. Clark se aparta sólo para también desnudarse, retirándose la corbata, seguido de la camisa de botones.

Bruce admira con detalle el cuerpo fornido de su pareja. Y pensar que oculta todo ese poder tras unas gafas y un título de reportero.

Cuando los pantalones de Clark caen al suelo, un bulto duro y con la punta mojada se hace notar. Bruce ha visto decenas de veces ese miembro tan férreo y cómo siempre lo deja adolorido la mañana siguiente, y siempre que lo ve piensa lo mismo "Es grande, como debía esperar de Superman".

Clark baja su propia ropa interior, dejando su pene en primera fila. Vuelve a colocarse encima de Batman, besando su cuello y explorando su cuerpo.

–Aah...–El multimillonario suspira al sentir las manos poderosas de Kent debajo de su bóxer, tomando su miembro para estimularlo un poco–Clark...

Finalmente ha pronunciado su nombre. Ya no opone resistencia. El kryptoniano aprovecha para terminar de desnudarlo, su amante es bellísimo, y saber que es el único que puede ver a Batman de esta manera lo excita aún más.

–Date la vuelta–Dice Clark como si fuera una orden. El multimillonario obedece, quedando a cuatro patas y con el culo bien expuesto.

–¿Qué piensas hacer? Casi nunca usamos está posición–Comenta el caballero murciélago, de hecho, detesta está postura, pero está demasiado caliente como para protestar.

–Creo que te gustará–Tras decir eso, el hombre de acero envuelve su mano con el miembro de Wayne, lo empieza a masturbar lenta y dolorosamente.

–Ah... más rápido–Gime el millonario, meneando un poco sus caderas, incitando a Superman a qué ya lo meta, pero todo terminaría muy rápido.

–Espera–Sin perder la lentitud, Clark lame un par de sus propios dedos para después acercarlos al trasero de Bruce–Voy a prepararte.

–No hace falta...–Y aún así se quiebra tras el primer dedo, que lo dilata con la misma lentitud que la masturbación–¡Ah!

Bruce necesita más, su cuerpo no puede con tanta tortura. Superman se aprovecha de la fuerza que tiene sobre su humano cuerpo, no le gusta pensar que es frágil, pero a comparación con el kryptoniano, si quisiera lo dejaría paralítico.

Cuando Clark mete el segundo dedo, la velocidad aumenta un poco más. Para Wayne no es suficiente, necesita esa adrenalina que sólo este reportero hijo de un granjero puede darle. Su cuerpo muestra todas sus debilidades, que fácil es vencer a Batman.

–Bien, aumentaré la rapidez–Dice el kryptoniano mientras acomoda sus manos.

Pero no hablamos que sólo aumentó la velocidad. Sino que empezó a meter y jalar con tanta fuerza que más que estimular parecía que quería partirlo a la mitad. Bruce se quebró en el placer, el climax y en el dolor.

–Aah...aah...C-Clark...–Loa dedos del reportero viajan por su entrada con rapidez y brusquedad, tocando en más de una ocasión su próstata–«Calmate Clark, me vas a matar».

Batman no tardaría en correrse. El kryptoniano usaba toda su fuerza en masturbarlo con fiereza; quería oírlo gritar, ser llevado a los profundos abismos del placer. Bruce Wayne no es un objeto, pero eso no significa que su cuerpo no tenga las marcas de una pertenencia.

–Aaah...–Ese fue el suspiro de Bruce al correrse. Kent saca sus dedos y de inmediato mete su miembro, dejando a Wayne sin aire–¡Ah! ¿Q-Qué?

Debido al reciente orgasmo, la entrada de Wayne se había dilatado por lo que envolvió con facilidad el pene duro de Superman. Las embestidas eran salvajes, sólo habían gritos en esa sala.

–Ah...Ah...–Gime el kryptoniano, decide darle la vuelta a su novio para apreciar su rostro sonrojado con los ojos algo brillosos.

–Soy tuyo...d-de nadie más–Dice Wayne entre gemidos, era un pensamiento totalmente sincero, escapado de su subconsciente. Su intención no era poner celoso a su pareja, pero la idea de estar atado a alguien de forma amorosa le aterra. Pero Superman sigue ahí, haciéndolo feliz de cualquier manera.

–Bruce...–Quería decirle que él también era suyo, pero su mente no podía procesar ningúna palabra; tan sólo enfocarse en el placer, en como su miembro palpita en el interior del caballero murciélago.

Se besan, el sudor en ambos cuerpos apegan como sean. Bruce no quiere correrse de nuevo pero sabe que en cuanto esa sustancia se adentre en su interior su mente quedará en blanco de nuevo.

–Ah...–Clark no soporta más, llega al orgasmo, provocando que Batman se corra en ambos cuerpos.

Tras un par de segundos de recuperar el aliento, ambos se sientan en la mesa. Bruce siente la sustancia pegajosa entre sus nalgas.

–También soy tuyo, Bruce–Dice el kryptoniano mientras toma su mano.

–Lo sé–Normalmente no aceptaría estos gestos pero es una bonita noche, por lo que permite que Kent acaricie su rostro.

Un último beso antes de vestirse y subirse a dar una ducha es lo ideal. Aún les queda mucho camino por delante para entender los pensamientos del otro, pero no importa si es en una mansión, una fiesta, un bar o una ciudad en peligro, pueden contar con el otro, y en el código de un superhéroe es decir demasiado.

°°°Fin°°°

No sé, siempre he pensado que es un shipp muy lindo, y a diferencia de otros shipps de superhéroes, no hay mucho material.

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