Capítulo 30: Me alegra ser tu primera vez

♠★Contenido un poco fuerte, se recomienda discreción, si eres menor de edad no leas esto hasta después de la mitad, recuerda que Dios te vigila😂★♠

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Prácticamente me lanzó al asiento del copiloto y cerró la puerta para rodear el auto rápidamente y montarse. Ahora parecía completamente emocionado, sus manos parecieron no saber qué hacer primero dentro del auto, soltó un suspiro como si intentara calmarse, aumentó la temperatura del calentador, se colocó el cinturón y arrancó el auto.

— ¿Qué tenemos que hablar? —Pregunté—, creo que a mi mamá no le caes muy bien...

Calvin negó con la cabeza y me miró de reojo.

—A mí no me engañas, sé que me recuerdas.

Oh, ¿Cómo lo supo?

—Es imposible que me olvides —continuó—, a mí nadie me olvida.

Al parecer él no lo sabía, todavía lo tenía engañado.

— ¿Qué es lo que se supone que no debo olvidar? —Pregunté—, ¿acaso te debo algo?

Calvin permaneció en silencio un largo rato hasta que soltó un largo suspiro y se pasó una mano por la cabeza.

—Maldición, ¿Qué estoy haciendo? —dijo entre dientes, como si hablara con el mismo.

—No lo sé —dije—, prácticamente me estas secuestrando en un auto después que me dijeras que me extrañas. 

—Porque lo hago, te extraño tanto —dijo—, cada vez que veo a Brian contigo, es como si algo en mi mente se retorciera, necesito...

—Brian es mi novio —interrumpí—, ¿Acaso yo te gusto?

Calvin parecía un poco confrontado por mis palabras, tragó pesadamente saliva y negó con la cabeza.

—Tal vez, eso creo —dijo—, me acostumbré tanto a ti, que es como si cada cosa que hago no tuviera realmente sentido... mírame, fui a tu instituto, te secuestre y ahora no sé a dónde demonios te estoy llevando.

Quise reírme, pero mordí mis labios y negué con la cabeza intentando aparentar no entender qué le sucedía.

—Está lloviendo mas fuerte —dije lo obvio, la lluvia comenzó a caer torrencial y hacía imposible incluso transitar, así que Calvin se orilló a un costado del camino donde habían muchos carros estacionados y se atrevió a mirarme.

—Nunca me contestaste las llamadas —dijo—, no podía encontrarte en el instituto, llevo tres días viniendo y esperando tu hora de salida, hasta que por fin hoy, te encontré.

—Ya veo que tu nivel de acoso es muy grande —comenté, me solté el cinturón de seguridad y me voltee en el asiento para poder mirarlo de frente—, ¿Qué es lo que quieres Calvin?

Calvin se soltó el cinturón y ni siquiera pude pestañear cuando me agarró el rostro con sus manos y pegó sus labios a los míos. Solté un gemido de la impresión y sentí como si tocara el cielo al recordar lo bien que se sentía besarlo, incluso el aro de su labio me volvía adicta, podía jugar con él y morderlo.

—Dime que recuerdas eso —susurró Calvin a centímetros de mis labios antes de volver a besarme, su lengua obligó mi boca a abrirse y cuando mordió mi labio inferior sentí como toda mi espalda se estremecía de placer, con Brian nunca había esta chispa, nunca podría ni siquiera compararse a él.

Soltó mi rostro y sus manos descendieron por la silueta de mi cintura, aferró sus dedos deliciosamente en mis caderas y sentí la necesidad de llevar mis manos a su pantalón, sin embargo cuando toqué su cremallera rompió el beso y me miró fijamente a los ojos, sus mejillas sonrosadas y su débil sonrisa ahuecando sus hoyuelos.

—Eso sería cruzar los límites —susurró.

—Creo que comienzo a recordar algo —murmuré y pegué mis labios a los suyos nuevamente.

Me sostuve de sus hombros y me impulsé para poder sentarme a horcajadas sobre sus piernas sin romper el beso, sus manos se introdujeron dentro de mi camisa y me estremecí al sentirlas frías, metí mis manos en su cabello húmedo extrañando la sensación que siempre provocaba en mí tenerlo así de cerca, la lluvia caía tormentosa a nuestro alrededor y ahogaba nuestras respiraciones agitadas.

En un movimiento me levantó la camisa y lo ayudé a arrojarla a algún lado del auto, sus besos descendieron por mi cuello cuando desabrocharon mi sostén y me acarició con su boca mis pezones, todos los vellos de mis brazos se erizaron y sentía mi mente nublada del placer que me hacía sentir.

— ¿Qué estamos haciendo? —susurré con la voz entre cortada jalando sus rulos entre mis dedos.

—Solo déjate llevar —su aliento me hizo estremecerme y una de sus manos me desabrochó el botón de mi blue jean.

El recuerdo de la vez pasada se reflejó en mi mente, Calvin diciéndome que nuestra relación era casual, y Calvin alegrándose de que estuviera con Brian, ¿me había mentido?

—Espera —tomé sus manos entre las mías y lo miré fijamente, él tenía la respiración agitada al igual que yo.

— ¿Recordaste algo? —preguntó, su voz profunda casi ronca y completamente seductora.

—Sí, lo recordé todo —dije—, y habíamos dejado claro que solo seríamos amigos, que dejaríamos de tener una relación casual.

Calvin frunció el ceño débilmente y mordisqueó su aro. Me eché un poco hacia atrás pero lo único que logré fue restregarme contra él, Calvin soltó un gemido y se zafó del agarre que yo tenía en sus manos para sostenerme la cadera.

—No vuelvas a hacer eso —dijo—, harás que moje mi pantalón, y que tengas tus pechos en mi cara no me ayuda.

— ¿El qué? —Intenté que mi voz sonara inocente— ¿Esto?

Moví mis caderas sobre él, él oprimió sus ojos y aspiró profundamente, al parecer estaba sufriendo y podía ver el placer que le causaba. Comencé a meserme contra él y prácticamente pasar mis pechos por su cara, sus dedos se aferraron con fuerza en mis caderas obligándome a seguir mis movimientos, sus labios comenzaron a besar mis pezones con deleite.

Ya no hablaba, no parecía estar en sí, podía ver su rostro de puro placer, me encantaba como comenzó a gemir por lo que yo le ocasionaba y comencé a moverme más rápido, metió su rostro contra mi cuello y sus dientes se incrustaron débilmente en mi piel, cuando de repente lo sentí estremecerse y soltar una fuerte exclamación, al instante sentí como todos mis musculos se tensaban y metí mi cabeza entre su cabello para ahogar mi propio gemido de placer.

Nos quedamos inmóviles, ni siquiera podía moverme.

Sus manos se deslizaron sobre mi espalda y me abrazó, me aferraba como si no quisiera soltarme, como si necesitara saber que estaba ahí, como si yo fuera preciada para él, cuando su respiración se apaciguó, observé sus ojos risueños y una débil sonrisa vergonzosa que me imaginaba era un reflejo de la mía.

—Jamás había hecho esto —confesó, su voz parecía adormecida y me hizo sonreír débilmente.

—Me alegra ser tu primera vez —bromee y me bajé de sus piernas para descansar en mi asiento, Calvin reposó su cabeza sobre el volante y recuperó el aliento.

Tomé mi sostén, mi camisa de algún lado del carro y me los coloqué. Después de un largo silencio donde la lluvia seguía tormentosa Calvin me miró de reojo, esperé que él hablara, no quería ser yo la primera en decir algo.

— ¿Has hecho esto con Brian?

Me sorprendió su pregunta, ¿para qué quería saber eso?

—Eso no es de tu incumbencia.

—Sí lo es, yo soy tu profesor y tu mi estudiante diablilla.

Solté una pequeña carcajada, me sentía completamente alegre, sin embargo quería más, necesitaba más de Calvin en todos los aspectos posibles.

—No puedo creer que todavía me recuerdes eso —giré los ojos—. Y no, no he hecho más que besarme con él, no sé por qué cada vez que estoy con Brian no siento esa ilusión y es como si ni siquiera provocara alguna cosquilla en mí.

Calvin frunció el ceño pareciendo confuso.

—Pero tú me dijiste que cuando lo besaste escuchaste el coro de Amazing Grace y que los fuegos artificiales...

—Era mentira Calvin —interrumpí sintiéndome de repente molesta—. Intentaba ponerte celoso, pero tú eres de piedra, ni siquiera podía hacer que dejaras de alegrarte cuando te hablaba del “maravilloso Brian”.

Después que lo dije me di cuenta que estaba prácticamente confesándole mis sentimientos, pero ya de nada me valía guardarlos, se suponía que dentro de unas semanas él se iría a Gran Vigor y después yo me iría a la universidad.

— ¿Qué intentas decirme? —se irguió en el asiento y se volteó para poder mirarme sin ocultar su asombro.

— ¡Que me gustas!, ¡me encantas!, te convertiste en mi nuevo Crush, ¡maldición! —Giré los ojos y casi quise darle una bofetada—. Jamás perdí la memoria, solo lo usé como excusa para que mi madre no siguiera castigándome y poder hacer el absurdo intento de olvidarte.

Calvin me miró con la boca debilmente abierta, al parecer él no tenía ni idea de todas las cosas que me hacía sentir con tan solo mirarme.

—Ahora realmente no sé que decir —dijo—, desde un principio te dije que no quería más que una relación casual, Claus...

Mis mejillas comenzaron a sonrojarse y tuve que tragar pesadamente saliva para soportar sus palabras.

— ¿Entonces por qué viniste? —Dije— ¿Por qué me dijiste que me extrañabas, que me necesitabas y prácticamente me ilusionas a cada segundo con cualquier gesto que haces?

Pude ver su mirada avergonzada, parecía querer salir del carro y desaparecer, bueno, así me sentía yo también.

—Porque siento que de verdad te necesito en mi vida —dijo—, pero no puedo tener una relación contigo, jamás podríamos ser pareja ni puedo prometerte un futuro juntos. Lo siento.

Se escuchó algo romperse, creo que eran los restos de mi corazón.

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No puedo hablar *Dice secándose las lágrimas que ocasionó el idiota de Calvin*
Todavía faltan unos capítulo más antes del gran final, ¿Con quién creen que se quedará Claus? Vamos a hacer esto democráticamente:
Comenta en el nombre con el que quieres que Claus se quede, cada comentario será un voto:

Calvin Craft

Brian Cannoli

Anuel AA real hasta la muerte baby

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