Noah

    Fin de año ya se acerca y con ello otra reunión del "Club de los tontos", Rubén brindó su humilde cabaña—lo único que tiene de humilde es el nombre "cabaña" , para que  fuéramos a divertirnos en el lugar.Asaremos carne, beberemos alcohol—unos más que otros—, contaremos historias y veremos los fuegos artificiales.Sin mencionar la cuenta regresiva para darle la bienvenida  al año nuevo, y las tonterías que puedan salir en el momento, también se difrutaran.

      Ahora estoy junto a Anna, en otra clase de tatuaje, esta seria la número sies desde que se mudó a mi casa, siendo sincera, la convivencia ha sido más buena de lo que me esperaba, es organizada, cocina bien y es muy callada.

—Recuerda hacerlo de derecha a izquierda para no borrar la línea—me explica mientras yo hago una rosa en una banana.

—Umju—me enfocó en el dibujo que estoy haciendo hasta que toques en la puerta me sacan de mi bella concentración.

—Sigue haciendo la rosa—me dice Anna mientras camina rumbo a la puerta.

        Por la puerta entró una manada de chicos, ya lo saben, Christian, Rubén, Dann, Bradd y Ray.Carly no entro porque esta durmiendo en el cuarto de Anna.Los chicos desparramaron sus cosas–mochilas y maletas—por la entrada de mi casa, específicamente en el sofá.Como siempre, dejando reguero por donde pasan.

—Chicas—anuncia Bradd—Guarden sus cosas que nos vamos de viaje—sonrie mostrando una fila de dientes perfectamente alineados.

—Creo que hasta aquí llegó tu práctica de tatuaje—me dice Anna sonriendo—Vamos a recojer todo antes de que quemen la casa.

     Recogimos todas nuestras cosas y nos subimos en el auto de Ray—Carly, Anna y yo—y en el auto de Rubén—Bradd, Dann y Christian.El trayecto fue muy divertido, pusimos canciones de Imagine Dragons y cantamos a todo volumen sus canciones.Comimos papas fritas—se las robamos a Ray que las tenia escondidas—, galletas, en fin, acabamos con todo lo que encontramos comestible en el auto del señorito impuntual.Después de una hora, al fin logramos nuestro cometido, llegamos con vida a la cabaña, y molestamos a Ray todo el camino.

—Si se iban a poner tan intensas las hubiera cambiado de auto—protesta Ray mientras abre su puerta.

—Sabes que te gusta—lo molesto—Tu nivel de masoquismo se ha elevado desde que me conociste.

—Cierto pitufa—me aprieta los cachetes.

Ante nosotros se alzaba una "cabaña" de dos pisos con un imponente jardín, a simple vista puedo decir que tiene más de cinco cuartos.Entramos a la cabaña, el olor a hogar y nogal inunda mis fosas nasales, una gran sala nos recibe, repleto de muebles, retratos y una gran chimenea al fondo.

—¿Rubén esta es tu cabaña?—pregunta Christian asombrado.

—Si, se que no es mucho—nos dice el chico de los rizos—Pero es lo que tengo—Ruben tira su mochila en el sofá.

—Rubén para ti esto es una simple cabaña—le dice Ray poniendo su maleta en una esquina de la sala—Pero para nosotros—nos señala— simples mundanos sin un centavo esto es un paraíso—todos acentimos y estuvimos de acuerdo.

—Bueno—Rubén llama nuestra atención—Mañana será fin de año, así que hoy pueden hacer lo que quieran pero mañana estarán todos en la casa para disfrutar el día como se debe.

     Nadie refutó su afirmación  y todos nos dirigimos a las habitaciones, como pensaba antes de entrar a la casa, tiene 5 habitaciones.Nos dividimos como en Navidad, Anna y Carly, Bradd y Dann, Christian y Rubén y Ray junto a mí.La otra habitación está llena de libros, hicieron una mini biblioteca en ella.

       Después de poner cada cosa en su lugar, desempacar nuestras maletas y poner la ropa en el armario cada cual se dividió en diferentes actividades.En mi caso mi destino fue junto a Anna y las máquinas de tatuajes,Carly estaba tiñendole el pelo a Christian; Bradd, Rubén y Dann estaban jugando FIFA en  su Play Station y Ray andaba comiendo en la cocina.

  Salgo junto a Anna al patio de la casa, el lugar estaba repleto de árboles que dan sombra, nos sentamos en la mesa y sacamos todas las cosas necesarias para practicar.

—¿Empezamos?—me pregunta Anna y yo solo asiento.

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Ray

        Me pongo a inspeccionar todo el lugar después de suministrar me una buena dosis de comida, los chicos están sumidos en una increíble pelea futbolística de porque Brazil es mejor que Alemania.Los ignoro y paso por donde esta Christian, tiene mucho papel metálico en la cabeza y Carly le está poniendo más.Parece un alien.

—¿Qué te estas haciendo en el pelo?—le pregunto mientras como de mi helado de fresa.

—Me lo estoy tiñendo de morado—me dice contento—Deberías hacerte algo—intenta aconsejarme y yo solo niego con la cabeza, mi pelo es inocente y virgen, así morira—En serio—me intenta convencer—, es muy aburrido.

    Paso de largo e ignoro los motivos de Christian para que me pintara el pelo y termino en el patio de la casa, observando de lejos a Anna explicarle cosas a Noah de sus tatuajes, y pensar que se llevaban mal.Después de un rato de acosarlas secretamente me acerco a ellas a ver lo que hacen.

—Ray Ray—me saluda Anna mientras mira lo que Noah está haciendo.

—¿Qué hacen?—me siento frente a ellas en una de las sillas libres de la mesa.

—Aquí Noah está haciendo una lista de las personas a las que puede tatuar para practicar.

—¿Cómo van con eso?—comienzo a leer la lista y veo pocos nombres.

—Mal—se queja Noah—Al paso que voy nunca tatuare a nadie.

        Una idea loca pasa por mi cabeza, tal vez me arrepienta mañana, de hecho puede que me arrepienta dentro de unos minutos.Pero cuando a mí mente se le mete una idea no hay quien se la saqué.

—Tatuame—le pido a Noah y esta solo me mira como si me hubiera salido otra cabeza.

—¿Perdón?

—Que me brindo para que me tatues—le explico mientras saco una buena cucharada de helado y me la meto en la boca.

—¿Por qué harías eso?—me cuestiona Noah—Mejor dicho, ¿qué quieres a cambio?

—Verás querida pitufa—acerco mi silla a ella—Tu me haces un tatuaje y a cambio tienes una cita conmigo—le estiro mi mano.

—¿Por qué aceptaría?—me quita el helado y comienza a comerlo.

—Porque me necesitas para aprender y yo te necesito para mi corazón.

—Da ganas de vomitar tu cursilería—ella rueda sus ojos, pero, me da su mano y acepta el trato.

           Unos minutos después estoy sentado en una silla con la mano sobre la mesa y Noah me está mirando asustada.Anna a su lado esta preparando cosas raras, a los minutos Noah me mira y me pregunta.

—¿Estas seguro?

—Si—le contesto y me doy cuenta que están a punto de tatuarme y no he escogido el diseño—¿Me vas a tatuar lo que tú quieras?

—Si—me mira maliciosa—¿Te gusta?—me enseña el papel.

—¿Quieres reclamarme como de tú propiedad con ese aguacate?—si, es un aguacate lo que hay en el papel.

—Ya lo eres y ni siquiera he hecho nada para intentarlo—Anna carraspea y sale del lugar"Me voy para que coqueteen e  paz"es lo que dijo antes de huir.

        No se como llegué a este momento pero ya es tarde para arrepentirme, el primer trazo está hecho en mi piel, mi primer tatuaje, me siento rebelde.Mi mamá me va a matar cuando se entere.Santo dios del aguacate que mí mamá no me mate.

—¿Te duele?—me pregunta Noah mientras sigue haciendo trazos.

—No—me pongo a mirar a Noah, su cara de concentración es muy graciosa, y más cuando saca la punta  de su lengua—¿Por qué eres tan linda?—le preguntó y veo como sus mejillas se enrojecen.

—Cállate—me silencia y quita la aguja de mi antebrazo—He terminado—me pasa algún líquido raro por el lugar donde se impregnó la tinta y me coloca un film sobre él.

—¿Tan rápido?—no han pasado ni 30 minutos desde que empezó el proceso.

—No tiene mucho detalle el aguacate—se acerca a verlo y le toma una foto—Gracias—me abraza—Eres el primero en tener un tatuaje hecho por mí.

—Genial pero agradeceme con la cita.

—A las 7—me dice mientras recoje todo el reguero que hizo para tatuarme—No seas impuntual.

       Por primera vez en mi vida estoy haciendo un esfuerzo por no llegar tarde.Un esfuerzo por verme arreglado y bien para ella.Decidimos vernos en la entrada del restaurante que escojimos.Christian y Bradd me están ayudando a escojer la ropa.

—¿Entonces esta?—les muestro la chaqueta de cuero negra.

—Si—asienten los dos—Te favorece el negro—negro admite Christian.

—¿Seguro qué me veo bien?—necesito su confirmación.

—¿Ya te puedo llevar?—entra Rubén a la habitación—Hola Cuchurrumin—se burla de el nuevo look de Christian, según él, se parece a la novia de Mike Wasauski, el cíclope de Monsters inc.

      
             Bradd y Christian se quedan discutiendo sobre el color del pelo, Rubén y yo salimos hacía el auto de éste.Sera mi chófer está noche y me llevará hacía el restaurante.Mis nervios aumentan mientras me acerco al lugar, espero no hacer un desastre o pasar vergüenza.Pero conociendo mi torpeza seguro Noah se va y me deja plantado.El auto se detiene y me dispuse a bajar.Rubén me muestra los pulgares en señal de apoyo y me dice"Es tuya tigre".Si supiera que soy un dulce gatito.

      Camino a la entrada del restaurante y me encuentro con Noah sonriendo, con su pelo largo, rubio, perfectamente peinado.Un abrigo de lana negro le hace juego a su falda del mismo color, combinado con su cartera y su boina le dan un aspecto hermoso.Si mencionar que parecemos emos vestidos de negro los dos.

—Señorito impuntual—me saluda sonriendo inflando sus cachetes—O debería decir puntual.

—Cuando las cosas de verdad me importan suelo llegar temprano—le explico besando su mejilla.

—¿Por que estas vestido como protagonista literario?—se ríe mientras entramos al restaurante—, o sea estas como el típico bad boy.

—Soy un bad boy—caminamos hacia la mesa que nos dieron en la entrada y corro su silla hacia atrás y ella se sienta, un gracias sale de sus labios y yo me siento en la silla frente a ella.

—Ray no eres un bad boy—ella se ríe.

—Si lo soy—pongo la mejor pose de chico rudo que me se.

—Eres adorable, tierno, detallista, gracioso, cariñoso y no eres una persona tóxica—me explica—Definitivamente eres mejor que cualquier bad boy de libros.

     Yo solo sonrío ante sus cumplidos y mis mejillas empiezan a enrojecer, lo se porque ella se empieza a reír.El mesero viene con los menús, después de ordenar se retira de la mesa sin antes giñarle un ojo a Noah, acto que ella ignoro por estar dándole miradas mortales a un niño que la estaba molestando en la mesa de nuestra izquierda.

—Es insoportable—se queja del niño que le estaba haciendo muecas, yo solo me río ante su enfado.

—¿Como están las cosas con tú mamá?—tal vez no sea bueno sacar este tema pero en serio me preocupa su situación familiar.

—Anoche lo arreglamos y estamos bien—me explica mientras le saca el dedo medio al niño, en serio es insoportable el chico—Solo necesitaba hablar con mi mamá.

—Me alegro que estén bien—recuerdo mi globo de pitufo y me entran ganas de molestarla—¿Qué hiciste con el globo con tú retrato?

—¿Cuál globo?

—El pitufo—me hago el indignado—¿Cómo se te olvida?

—Estas muy sensible—rueda los ojos.

Noah

      Al fin nos traen la comida, no pedimos nada muy gourmet, por lo menos yo, pedí macarrones con queso y Ray pidió pizza napolitana.Estamos en un restaurante italiano.Ray nada más que ve su pizza sostiene su tenedor y cuchillo en sus manos.Después me mira y la vergüenza atraviesa su cuerpo.Nos ponen las papas fritas con el ketchup en un lado y en el otro dos coca colas.

—Este no era mi plan de cita—confieza Ray mientras corta su pizza—No pensaba comer pizza y verte comiendo macarrones.

—¿Qué más da?—le digo—Al final somos dos almas libres, tu eres un chico amante a los calzones de superhéroes y Bob Esponja y yo soy una chica que se sabe todas la peliculas de disney de memoria.

—Somos raro.

—Lo raro no es malo—le explico mientra como de mis macarrones—No es mi culpa que el mundo esté lleno de seres aburridos e iguales.

—Tienes razón—admite—Se que te gustan mis calzones de superhéroes.

          Seguimos comiendo entre risas y alguna bromas hasta que el niño volvió  a molestarnos, más bien a molestarme.

—¿Qué te pasa?—le pregunto al niño, sus padre están en su mundo sin prestarle atención.

—Creo que eres fea , y pensé que mis muecas te espantarían pero veo que te quedaste aquí dañandome la vista—me dice levantándose y acercándose a mí, debe tener alrededor de siete años.

—¿Qué dices?—Ray le pregunta—ella es la chica más bonita de mundo.

—Cierto, no he visto niña mas linda que tú en mi vida,¿quieres ser mi novia ?—la cara de Ray es todo un poema, mira al niño con odio, jamás pensé decir que un niño me agradaría.

—Ella es mi novia—le dice Ray haciendo un berrinche al niño.

—Si, quiero ser tu novia—ignoro a Ray y le respondo al niño; un susurro de "No es justo" sale de los labios de Ray.

        Seguimos comiendo una vez que le niño se retira a su asiento y sus padres nos piden una disculpa.Ray come a regañadientes y le da miraditas al niño, por supuesto, el niño le devuelve las mismas miradas.

       Una vez terminada toda la comida llamamos al mismo mesero que nos atendió al principió, este nos da la cuenta y no podía faltar el típico comentario.

—¿Tienes novio linda?—me pregunta el chico y yo solo ruedo los ojos.

—No—le respondo esperando que nos deje solos.

—Bueno tal vez tú y yo podríamos...—su charla fue interrumpida por Ray, este se acercó y me besó delante de mesero.

—¿Que haces?—le pregunto a Ray y le pego una cachetada, un auch sale de sus labios, y una risa del mesero también—Si me vas a besar hazlo bien—le digo a Ray y lo sujeto de su chaqueta para estampar sus labios con los míos.

             El mesero se retira refunfuñando del lugar y Ray y yo nos separamos.Al momento este recibió un golpe en el ojo.Una albóndiga impactó en su rostro, obviamente el culpable fue el niño que al grito de" No beses a mi novia" le lanzo otra albóndiga.

       Salimos caminando del restaurante, yo solo me río de Ray, esta haciendo berrinche porque yo acepté al niño y no a él.

—No es justo—cruzar sus brazos—¿Qué tiene él que no tenga yo?—ruedo mis ojos.

—Ray

—Tengo que aguantar al niño intentando ligar contigo y que le hagas caso.

—Ray—intentó interrumpirlo.

—Y el mesero"Tinis nivii lindi"—intenta imitar su voz.

—Cállate—le sostengo su rostro y lo besó—¿No ves qué estoy loca por ti?

—¿Por mí?

—Si estupido,por ti—vuelvo a besarlo—Así que eso significa que somos novios.

—Yo no te lo pedí.

—No me interesa ya lo decidí—el asiente y sonríe, me abraza y me besa la cabeza.

—Te prometo que seré el mejor novio del mundo—me dice mientras me eleva del piso—En tu cara niño—se burla del niño del restaurante.