capitulo 45

Volví al hospital en cuanto Alessia me ha dicho que tenía que volver a casa.

En cuanto he llegado al pasillo donde estaba anteriormente Vi dos figuras masculinas , una alta inconfundible , y la otra ... Bueno , también era inconfundible por su tez pálida. El último parecía un poco furioso y el primero parecía decirle unas cuantas cosas .

« Alexander sabe de lo que está hecho Fabián» de verdad todos creían que Fabián podía romperme el corazón? ¿Como es que yo aún no lo creía?.

- Nat - Fabián fue el primero que notó mi presencia y de inmediato centró toda su atención en mi para así evitar a Alexander.

- hola - saludé

- ¿Estás bien? - me escaneó un poco. Pero yo solo asentí - ¿Porqué no me habías llamado? - preguntó , y realmente era una buena pregunta , no sabía porque no se me había pasado por la cabeza llamarle, tal vez porque había desarrollado una curiosa manía de no meterle más problemas en la cabeza al chico.

- Ammm ¿Está todo bien ? - pregunté por una parte para desviar su pregunta y por la otra porque realmente el ambiente estaba tenso , veía como Fabián evitaba a toda costa volver a centrarse en Alexander , y como este le clavaba los ojos en la espalda constantemente.

Dicho y hecho , los dos se tensaron un poco más ¿Porque parecía que yo era la última que se daba cuenta de todo? , Dios , apreciaba mucho a annia pero no quería ser como ella. Pero al parecer si lo era. Ingenua que confía en todos , rápido y mucho.

- de hecho si - habló Fabián y Alexander lo miró fijamente , ok , su mirada me recordaba aquella vez que se cabreó cuando un tal Jackson cambió la clave del casillero. - tengo que decirte algo -

Mi garganta se había secado un poco , pero mi corazón se empezó a acelerar cuando la mano fuerte de Alexander presionó el brazo de Fabián , habia reto en ambas caras , es como si estuvieran diciendose todo sin decir ni una palabra ¿Que estaban diciendo?

- Alexander , ¿Que demonios te pasa? - lo miré e intenté con la mano que detuviera su agarre que aún seguía apretando el brazo de Fabián , se le iba a quedar las marcas por unas horas, eso era seguro. Pero sin embargo Fabián no hacía nada. - suéltalo - ordené pero no me hizo caso , siguió mirando al chico como si estuvieran en un duelo de miradas.

- si la mierda que te metes aún no te ha quemado todas las neuronas piensa un poco sobre cuando está bien hablar y cuando no. - le dijo y con eso Fabián jaló bruscamente su brazo para liberarse y así fue , estaba serio e inexpresivo , no le dijo nada.

- vamos Nat - dijo y sin más comenzó a caminar , resultó obvio que tenía que seguirle , pero antes miré a Alexander por una última vez , había algo en sus ojos que no podía describir , no era furia total pero tampoco tristeza total , más bien una combinación de estás.

- ¿Estás bien? - me preguntó y como había hecho Fabián , este también me escaneó de pies a cabeza.

- maldición , ya dejen de preguntarme eso - no quise responderle de esa forma , pero de un momento a otro me sentía como la estúpida víctima indefensa a las que todos le ocultan cosas porque no es capaz de soportarlas. Me giré y me fuí detrás de Fabián que iba unas pasos ya adelante.

Cuando llegué a la par de él , tal vez mi cara era un poco trágica porque el solo me sonrió y le dió un beso al dorso de mi mano antes de dejarla a los lados y caminar tomados de la mano. Nos dirigimos de nuevo fuera de la clínica , íbamos por la acera y yo solo en podía preguntar qué tanto teníamos que alejarnos para que él hablara , ¿porque no solo se detenía ahora mismo y me decía? Sinceramente los nervios en cualquier momento iban a tomar partido en mi.

- Amor ¿Que pasa? - pregunté muy fuera de mi. El se detuvo a mi lado y me miró , estaba sereno ¿Eso era buena señal?

- Ok , es la primera vez que me llamas así - comentó un poco sonriente.

- ya sabes lo que dicen , hay una primera vez para todo - dije restándole importancia para no sonrojarme , ¿"amor"? Que estúpida.

- creeré que es porque me quieres mucho y no porque intentas comprarme para que hable - me chinchó dándome un beso en la punta de la nariz , había notado que era como una manía personal de él , mi naríz ha recibido muchos besos en esta semana.

- Si te quiero - me alcé de hombros y él solo pasó un brazo por ellos y caminó haciéndome caminar.

Pasamos nuevamente algún tiempo en silencio , ya estabamos apunto de llegar nuevamente a la plaza que por lo hora se veía aún más solitaria de lo que era.

- ¿Sabes esos ataques de sinceridad que suele tener la gente ? - dijo de repente aún mirando al frente solo volteó un momento en el momento que yo asentí.
- pues Nat , prepárate porque estoy apunto de tener uno de esos.

Casi no giré la cabeza como las chicas en las películas de terror , no podía evitar no demostrar interés en el tema , porque me interesaba y muchísimo.

- y yo que pensé que la hoja de mi análisis sobre tú se quedaría en blanco - bromeé un poco , odiaba ese tipo de reacciones , solo para que no notara lo interesada que estaba soltaba un estúpido comentario innecesario .

- tranquila ,pídemelo y te daré los puntos claves de todos para que ganes - aseguró - no creas que el imbécil de Alexander es el único que se da cuenta de las cosas - lo decía un poco en broma pero la manera en que dijo imbécil me refrescó la memoria de la rivalidad que había entre ellos.

- Alexander estaba actuando muy raro en la clínica ¿Porqué? - pregunté. Probando a ver si ya tenía el ataque de sinceridad.

- Alexander es Alexander , Nat. Siempre actúa raro - se limitó a decir.

- el podría decir lo mismo de ti - me alcé de hombros recordando que Alexander también creía que Fabián era un raro.

- touché - dió la razón .

- ¿y... Cuando llega tu ataque de sinceridad?- no quería sonar apresurada pero era una idea demasiado prometedora.

- ¿Impaciencia , princesa? -preguntó riendo un poco , me gustaba el sonido.

- es la primera vez que me dices así - comenté para no responder su pregunta.

- ya sabes lo que dicen - dijo pero
no terminó la frase , más bien que quedó un momento más en silencio como ordenando sus ideas , yo no podía creer que por fin Fabián iba a hablar de él sin tener que preguntarle. Era como el cielo.

« te mentiría si te digo que no siempre estuve jodido, Siempre lo estuve , pero...»

Y asi empezó a relatar, aunque estaba equivocada , esto más buen se sentía como un infierno , un lento y estático infierno pero uno al fin y al cabo.

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