Jungkook supo que todo se había ido a la mierda desde el momento en que lo vio. Al chico castaño que entro a la cafetería, vestido con un traje rojo, una playera con el diseño de mike mause y zapatillas deportivas Nike.

El joven se acercó a la barra y miró los pasteles una y otra vez, de forma, que desesperaba a Jungkook, pero lejos de eso, su olor, lo mareó enseguida y desestabilizó su sistema. El chico también parecía afectado porque su cuerpo estaba temblando ligeramente y era obvio que estaba evitando mirarlo a los ojos. Incluso en el momento de pagar, no quiso ni siquiera rozar su piel.

Esa misma noche, Jeon llego a casa con sus emociones en conflicto y miró a su esposo jugando con su hijo. La imagen era preciosa, Hoseok tenía un carrito pequeño en su mano y lo deslizaba sobre una pista mientras Sunyeol tenía otro carrito y lo deslizaba del lado contrario.

—¡BAM! —gritó Hoseok—, chocamos bebé.

—Chocamos papá, chocamos, otra vez.

—Esta vez déjenme jugar a mí.

Jungkook se unió rápido a ellos y dejó un beso en los labios de Hoseok, luego otro en la frente de Sunyeol.

—Juega con él, te serviré la cena.

Hoseok estuvo a punto de levantarse pero Jungkook tomó su mano.

—Después cenaré, quedate un rato más conmigo.

Hoseok sonrió y asintió, Sunyeol les presto unos carritos y la pequeña habitación se llenó de sonidos de "run, run, run y Bam"

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Hoseok hizo un par de llamadas a los últimos invitados de la fiesta de donación que estaba organizando la fundación. Los miembros dentro de ella no eran muchos. En primer lugar estaba Jiyeon quien fue la fundadora original, hubo algunos más pero no duraron. Desde que Jiyeon se había casado había dejado de frecuentar el refugio para dedicarse a ser una ama de casa, pero las instalaciones y donaciones principales habían venido de parte de ella y su marido. La institución era para ella, una distracción.

Después estaba Hwasa, que se encargaban de administrar el presupuesto, y conseguir descuentos sobre todo en la comida y medicamentos de otras organizaciones y empresas.

Que Jiyeon fuera la esposa del un periodista importante, ayudo mucho a hacer creer el refugio y aumentar las donaciones, pero a veces no era suficiente.

Luego estaban Chris, Youngjae y Hoseok que hacían de todo un poco, pero sobre todo se encargaban del cuidado de los animales y fomentar la adopción.

Choi Youngjae y Hoseok habían crecido juntos, en ese mismo vecindario con Jungkook, los tres se conocía desde el jardín de infantes, Choi incluso fue testigo en su boda.

—Es hora de irnos hijo, dales las buenas noches a tus amiguitos —Hoseok tomó su abrigo y espero a que Youngjae apagará su computadora—. ¿Tienes algo que hacer esta noche?, Rente una película para ver con Sunyeol está noche.

Youngjae dudo.

—No recuerdo haber dejado suficiente comida para que pueda cenar coco —mencionó a su cachorro—, pero le mandaré un mensaje a mamá para que suba a darle algo y también le avisare que no llegaré a dormir, luego se preocupa demasiado.

Compraron algunos aperitivos salados para comer mientras veían le televisión, cuando llegaron al pasillo pudieron ver a Jimin y Jungkook besándose.

Youngjae se congeló al verlos pero Hoseok siguió caminando.

—¡Papá! —Sunyeol corrió hasta donde estaba Jungkook y lo abrazo de los pies, Jungkook se agachó a su altura y lo tomó en brazos.

—¿Cómo está mi campeón? —preguntó, dejando besos en las mejillas de su hijo.

—Muy feliz, el tío Jae va a ver una película con nosotros.

Jungkook alzo la vista y miró a su ex esposo y a Youngjae caminando hacia donde estaban, o más bien hacia el departamento de Hoseok, justo a lado del suyo.

—Youngaje, tiempo sin verte ¿cómo has estado?

Preguntó Jeon y trató de hacer una reverencia pero con su hijo en brazos desestimó la idea, Youngjae si hizo la reverencia mientras decía: —buenas noches, no me quejo la he pasado bien.

Luego miró a Jimin y volvió a hacer una reverencia mientras se presentaba.

La nueva pareja parecía que regresaban de hacer compras porque habían varias bolsas del super a su alrededor. Jimin también se presentó con una pequeña sonrisa.

—¿Papá vas a ver la película con nosotros? —preguntó Sunyeol, Jeon miro a Jimin de forma incómoda y luego volvió a ver a su hijo.

—Esta noche no bebé, pero te llevaré al cine el próximo fin de semana, se estrenará una película de superhéroes.

—No —Sunyeol rápidamente dijo—, quiero que veamos una película hoy.

—No Sunyeol —Hoseok se acercó a Jungkook y tomó al niño en sus brazos—. No molestes a tu padre.

—No me está molestando Hoseok, mi hijo nunca me molesta.

—No estoy diciendo que el niño se una molestia para ti, solo estoy diciendo que probablemente hoy tienes mejores cosas que hacer.

—No lo hagas ver de esa forma —Jungkook alzo ligeramente la voz poniendo incómodos a Choi y a Park.

—¿De que forma se supone que lo estoy haciendo ver?, Dijiste que hoy no podías, sólo estoy tratando de ayudarte —Hoseok también alzo un poco la voz.

—Pero estás usando ese tono de reprochamiento, ya habíamos hablado de esto Hoseok, prometimos que no íbamos a pelear.

—No estamos peleando Jungkook, estamos hablando.

—Estamos peleando justo ahora, me miras como si quisieras sacarme los ojos y estás frunciendo los labios. Nos conocemos desde hace años, sé cuándo estás enojado.

Hoseok respiro profundo y trató de calmarse.

—No llegaremos a ningún lado, es mejor que entremos a mí departamento Youngjae.

Miró a Choi y empezó a caminar, eso hizo que Jungkook apretara los puños.

—Papá —Sunyeol susurró mientras decía adiós con su mano. Jimin notó los ojos rojos del niño y se sintió aún más incómodo.

—Porque no vas con él, ¿qué son dos horas?, no moriré si pasas dos horas con tu hijo.

Jungkook negó.

—Hoseok no lo permitirá.

—Hoseok lo permitirá porque tu eres el padre de su hijo, y su hijo quiere pasar tiempo contigo y Hoseok ama a su hijo. Sólo ve y disculpáte con él, dile que te portaste como un cavernícola y arregla las cosas. No quiero que vayas a la cama con el remordimiento de haber peleado con el padre de tu hijo.

Jungkook junto su frente con Jimin y luego le dio un beso en la nariz.

—Eres el mejor.

—Lo sé.

Park suspiró profundamente mientras entraba a su departamento, con todas las bolsas del super y las acomodaba en su lugar.

Después de unos minutos, se escucharon risas infantiles al otro lado de la pared.