Salí de la Iglesia y camine hasta donde estaba estacionado el auto que llevaría a los novios al salón de la fiesta. Me quedé de pie ahí, como un condenado a muerte esperando los certeros tiros que acabarían con su vida contra un paredón.

Las puertas se abrieron, los invitados gritaban y los felicitaban, Taemin giró su rostro y su mirada me encontró. Perdió el color hasta de sus labios, quisiera saber que pensaba. Seguramente que fui a arruinar el mejor día de su vida. Se acercó lentamente cuando Jongin fue abrazado por sus amigos.

- ¿Que...que haces aquí Minho?.- sonreí con dolor.

- Estás hermoso Taemin.- sus ojos se llenaron de lágrimas. Quiso decirme algo pero la voz de mi hijo lo interrumpió.

- ¿Papá?- Kai gritó al verme, la distancia entre nosotros era considerable, sonreí y levante mi mano. Taemin se tensó. Dio un paso hacia atrás sin dejar de mirar mi rostro.

- Papá...¿Tú eres su padre?-  Tae dijo en un susurro apenas audible. Yo asentí lentamente.

Jongin llegó hasta nosotros, abrazo el cuerpo tembloroso de Taemin, el no estaba bien, colapsaria en cualquier instante. Mi hijo era tan idiota que no noto que su esposo estaba a punto de desplomarse.

- Cariño te presento a mi padre, Choi Minho. Papá el es mi esposo Lee Taemin.- Kai se distrajo saludando a más invitados, Tae me miraba en silencio, las lágrimas comenzaron a salir de sus preciosos ojos y como lo esperaba él se desmayó. Pude sostener su cuerpo rápidamente y lo levante en los brazos.

- ¡Tae!- esa voz la conocía, era Kibum.- Minho...¿que le pasó?-

- ¿Y todavía lo preguntas Key?- Jongin apenas noto a su esposo en mis brazos gritó.

- ¿¡Papá que le pasó!?-

- Está emocionado hijo, no te preocupes.- dije mirando su pálido rostro.Se acercó para quitarmelo de los brazos pero no se lo permití, puse de excusa que se iba a arruinar el traje y se hizo a un lado,le pedí que se fuera con los invitados al salón para esperar a que Tae se recuperara, mi hermano con su novio me acompañaron a la sala de urgencias.

- Lo siento Minho...yo no quería que esto se fuera de control, pensé que tu podías evitar todo esto.- Jonghyun me miraba apenado, era el maldito cómplice de Kibum.

No respondí nada, me dolía el corazón, la mirada llena de confusión que tenía Tae antes de colapsar en mis brazos, podía quebrar a cualquiera.

- ¿Que sucede con Tae Kibum?- pregunté sospechando lo mismo que Onew.

- No lo se, son los nervios, mi hermano no soporta situaciones de stress y reacciona así desde niño. Es su manera de escapar de la realidad.- ¿Debía creerle a un mentiroso? La respuesta era obvia, no. Me quedaría en Corea a vigilar la salud de Taemin, aunque tenga que verlo en los brazos de mi hijo, debía saber la verdad.

El médico llegó y nos explicó que Tae estaba bien pero necesitaba descansar un poco. Le pregunté si podía verlo y me lo permitió.

Entré después de discutir con ese par de idiotas que decían que no les alcanzaría la vida para pedirnos perdón.

Mire la cama donde estaba mi niño, la imagen era totalmente diferente a la última vez.

El abrió los ojos y comenzó a llorar.

- Tae...-

- ¿Lo sabías? ¿Sabías que yo era el novio de tu hijo cuando te acostaste
Conmigo?- preguntó muy alterado.

- No Tae, no lo sabía, eso puedo jurarlo. Hoy... hoy me lo dijo
Jonghyun, y por eso regresé. Intenté llegar a tiempo para impedir todo esto pero no pude hacerlo.- me miró con una expresión indescifrable.

- Ese hijo que tanto te hizo sufrir, porque engañaba al estúpido ciego de su novio con cuanto hombre conocía, ¿era Jongin?- la tristeza inundó sus ojos. Armar el rompecabezas de la verdad dolía demasiado.

- Jongin es mi único hijo Tae. Me fui de casa por que él me dijo que iba a hacer lo que quisiera con su novio, hasta que se cansara. Si hubiera sabido que eras tú mi amor...- no pude contener mis lágrimas.

- Déjame sólo Minho, lo que me está pasando me lo merezco. Yo vi a Kai engañarme, fue ese día que me golpeó.- salté de mi silla enfurecido.

- Tú me dijiste que no lo había hecho.-

- Eso ya no tiene importancia.- lo miré y me di cuenta, era un ciego... era el más ciego de todos.

- ¿Te acostaste conmigo por despecho?- sonreí con tristeza.- te diste cuenta de mis sentimientos por ti y me usaste.- Tae negó rápidamente.- En ésta ocasión creeré lo que me plazca.- salí de la habitación como alma que lleva el diablo. A pesar de los gritos de Jonghyun y Key no me detuve. Caminé hasta llegar a un parque y me senté a llorar sin consuelo.

Mi corazón comenzaba a llenarse de dolor, era cierto eso que decían... del amor al odio había un camino demasiado corto y mis pasos ya lo estaban transitando.

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