Antes de comenzar con el capítulo quiero darle las gracias a los lectores, gracias por llegar ahora o por esperar que está historia regrese desde el año 2019, quiero contarles que ya tiene un final por esa razón regresé ❤️. Espero les gusten los próximos capitulos.

Eternamente agradecida por los votos y comentarios ❤️☺️

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Me ofrecí a acompañar a Taemin a su casa, ya era muy tarde y el sólo se había quedado conmigo esperando a su dichoso novio, ese que nunca llegó. 

- No es necesario, mi hermano estará esperando por mi.- Respondió un poco inseguro, insistí hasta que me permitió caminar a su lado esas cuadras que separaban su lugar de trabajo de su hogar.
    Se veía tan tierno con ese suéter de gatitos y unos pantalones anchos que parecían que no eran suyos. Su cabello rubio brillaba con la tenue luz de la luna.

- Gracias Minho por caminar a mi lado, sinceramente me da un poco de miedo venir sólo.-

- Un jovencito tan frágil como tu no debería estar sólo en la calle a esta hora.- lo vi frunciendo el seño.

- ¡No soy frágil!- respondió enfurruñado. Ahora parecía un gatito animado haciendo berrinches. La verdad que el chocolate debió hacerme mal para imaginarme algo así.

- Bueno, lo siento, creo que es la costumbre que tienen los padres.-

- Pero tu no eres mi padre.- dijo susurrando. Gracias a Dios no lo era o sino no podría vivir con la culpa de desearlo tanto.- eso es bueno ¿sabes?-

Lo mire un poco confundido

- ¿Qué es bueno? ¿Que me preocupe por ti o que no sea tu padre?-

- Ambas cosas, nadie se preocupó así por mi, y si fueras mi padre no tendría la confianza de hablar como lo estoy haciendo ahora. Bueno... aquí es mi hogar, gracias por acompañame.- sonrió y se despidió con una reverencia.

Camine a mi casa y vi a mi hijo llegar con su nueva conquista.  Parecían dos animales en celo, opté por irme, no tenia ganas de escuchar a nadie teniendo sexo en mi casa.

No tenía a donde ir ni que hacer, me sentía mal. Por primera vez en 18 años que no me había quedado para arreglar los líos de mi hijo. Tal vez era necesario dejarlo crecer de una vez.

Me fui a dormir a la casa de mi madre y vi a mi hermano con un joven precioso en la puerta.

Ellos me miraron.

- Hola Minho, ¿que haces aquí?-

- Mi hijo no llegó sólo a casa y ya me cansé de preparar café para los que salen de su habitación.- su acompañante me miraba tratando de entender lo que decía.- Perdón mi nombre es Choi Minho, un placer.- le dije con una sonrisa.

- Mucho gusto, mi nombre es KiBum, pero puede decirme Key.- Jonghyun ¿el es tu hermano?- vi al maldito perro negar con rapidez.

- ¿Como que no? ¡Soy tu hermano mayor!-

- Es decir que... ¿usted es el padre de Jongin?- mire a Jonghyun hacer señas desesperado, por supuesto que no le preste atención.

- Si es mi hijo.-

- ¿El que entró con compañía a su casa?

- Si ese mismo.- el me miró un poco alterado.

- ¿Usted no estaba enfermo?-

-¿Yo? No ¿por que lo preguntas?- el miro el suelo.

- Mi hermanito es novio
de su hijo - ahora entendía todo.- no quiso escuchar mis advertencias sobre el, todos en la escuela sabíamos su debilidad y sabemos que no cambió. Pero Tae se enamoró y no escucha a nadie. Un mes no habló conmigo por decirle que vi a Kai con la profesora de Anatomía en el baño.-

- Bebé tu eres un mal pensado, ella talvez le estaba dando clases particulares.- mi hermano sería cenizas si realmente se pudiera fulminar con la mirada.

- ¿Quieres verme la cara de estúpido, antes de morir? Di tus oraciones.- gritó el joven con mirada felina que tenía intenciones de enseñarle  a Jonghyun quien mandaba.

- Siento mucho que mi hijo cause tantos problemas. Me dijeron que tu hermano es un excelente muchacho.-

- Minho deja de disculparte por las idioteces de tu hijo. Si sigues así envejeceras más rápido.-

- Se crían hijos pero no corazones señor Choi. - Lo mire asombrado, las mismas palabras de Taemin, debía dejar de pensar un poco en el, me iba a hacer daño.- Usted no tiene la culpa de nada.- su mirada era de tristeza.

- ¿Quieres que hable con tu hermano? Podría advertirle que...-

- No, no se preocupe. Jongin es su hijo y el debe seguir siendo su prioridad. Mi hermano no entenderá. Lo único que usted puede hacer cuando lo conozca es consolarlo si lo ve llorar. Por favor.- asentí, aunque realmente desearía jamás tener que consolar a ese niño.- Gracias, por lo menos se que mi bebé no estará sólo si decide casarse con su hijo.-

- Esto es una locura y lo saben. Todo esto se podría evitar diciéndole la verdad a tu hermano.- suspire.

- Gracias por su buen corazón señor Minho, pero Jongin es el primer amor de Tae,  Ojalá el se pudiera enamorar de alguien más así se sale sólo de este problema, sinceramente ruego que alguien lo enamore.-

- Espero que sea así, no es que no me importe mi hijo pero espero sinceramente que el vea a Tae irse con alguien que realmente lo sepa valorar, tal vez así aprenda que debe cambiar.-

Después de esa conversación tan extraña con mi hermano y su pareja me fui a dormir, soñé con Taemin por supuesto, pero algo se me hizo extraño y logró quitarme el sueño a mitad de la noche, el lloraba, no estaba feliz cuando lo fui a ver a la cafetería.

Decidí darme un baño y salir a caminar. Llegué a la cafetería a las cinco de la mañana, iba a esperar sentado en la plaza de enfrente hasta que alguien llegara a abrir. Al mirar los grandes ventanales, logré ver movimientos adentro del local, pero no podía saber con claridad que sucedía. En ese momento mis ojos se distraen con la pequeña figura de Taemin jugando con las llaves en la mano.

Todo pasó frente a mis ojos , no reaccione lo suficientemente rápido, Taemin fue arrastrado dentro del local, aunque luchó su cuerpo cayó al suelo. Logre reaccionar y corrí, abrí  la puerta y vi al sujeto tratando de arrancar las ropas de Tae, el estaba inconsciente, al menos eso esperaba.

Con todas mis fuerzas me atreví a enfrentar al delincuente, se podía notar que el era más joven y tenía más fuerzas que yo, igual no me importó, si me dejaba vencer el lastimaria a Taemin. Los ruidos de cristales rompiéndose y mesas arrojadas suponía que atraeria rápido la atención de la Policía, pero no fue así, sentía que no podía más, recibí muchos golpes aunque el también.

- ¡Minho cuidado!- la voz de Taemin me alertó impidiendo que un cuchillo se clavara en mi espalda cuando no podía ponerme de pie. Luche hasta reducir al sujeto y cuando me senté a recuperar el aire que luchaba por regresar a mis pulmones un cuerpo se arrojó a mis brazos, era Tae.

- Gracias Minho, me salvó. Muchas gracias.- decía entre lágrimas, abrazandome tan fuerte que, si el ladrón no me había fracturado un par de costillas, el lo haría.

La Policía llegó, no recuerdo que sucedió porque me desmaye en los brazos de Taemin.

Me desperté en un hospital, con la mirada de Tae clavada en mi rostro.

- Al fin despierta Minho. Me preocupe mucho...yo no sabía el número de su hijo para que viniera a verlo, su celular se rompió, le compraré otro. Lo juro. Lo siento tanto.- sus ojitos estaban llenos de lágrimas.

- Taemin tranquilo, estoy bien, ¿Tú como estas?- le pregunte tocando su rostro, sus labios estaban partidos,  tenía marcas de golpes, ese cerdo.- Perdona tu, si hubiera reaccionado antes el no te hubiese hecho daño.-

Ambos nos detuvimos a mirarnos en silencio, mis manos no abandonaron su rostro. Y sus lágrimas poco a poco desaparecieron. Nuestro extraño momento fue interrumpido por el médico que venía a evaluar mi estado para dejarme regresar a casa.

No iría a casa así, decidí quedarme en un hotel pero Taemin no estaba de acuerdo.

- Estoy bien, escucha, puedo cuidarme y no puedo aceptar tu ofrecimiento de ir a tu casa, eso le podría molestar a tu novio, pero Tae promete algo, no vuelvas a ir sólo a la cafetería, es peligroso.- pude ver tristeza en sus ojos.

- Le pedí a el que fuera conmigo, pero dijo que debía estudiar para un examen y no podía salir de su casa.- como desearía que abrieras los ojos pequeño, el se cansa de dar señales que no te quiere y tu no interpretas ninguna.

- Entonces yo te acompañare cada día a abrir la cafetería. Desayunare ahí y me iré a trabajar. ¿De acuerdo?- asintió feliz y volvió a abrazarme. Esos abrazos me van a volver loco si continúan, si no te protege yo si lo haré aunque en algún momento tenga que enfrentarme con él .

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Gracias por leer!