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Capítulo 5.
Besos, pies y pasto.
—¿Cómo fue qué empezó su relación? ¿Cómo se contactaron?—Le pregunto Ray al pobre de Andrew por segunda vez.
Me arrepiento de aceptar jugar estos estúpidos juegos.
Andrew soltó una risa nerviosa y se rascó la nuca, en mi mente yo estaba tipo *Por favor, no digas nada estúpido*
Ya llevábamos rato jugando esto, los chicos se habían aprovechado de nosotros cada vez con más preguntas sobre nuestra relación, Jacob me miraba y lo imaginé burlándose de mi internamente.
—Pues nosotros llevábamos tiempo hablando por mensajes, luego fueron llamadas y hasta video llamadas, un día decidí decirle que me gusta y pues fue mutuo, una relación a distancia, ahorita estoy de vacaciones y por eso estoy acá.— Me miro esperando mi aprobación, yo solo oculte mi cara en su pecho, susurré un gracias que solo él pudo escuchar, Andrew me abrazó por los hombros mientras yo solo seguía entre sus piernas.
—Que tiernos.—Comento April viéndonos.
—Ya me aburrí de tantas preguntas , ¿por qué no hacemos retos?—Hablo Ray emocionado.
—Sí, eso sería genial.— contestó Jacob, me volteo a ver y sonrió maliciosamente.
Ay no, maldito mejor amigo me conseguí.
—Okay, pero usemos una botella, así será mas divertido.—Habló Andrew, tan lindo él, tal vez así nos salvaríamos de Jacob.
Thomas se levanto, consiguió una botella y regreso.
—Yo empiezo.—Sonrió emocionado. Giro la botella y esta callo entre April y Gabriel.
—Salvo a April, Gabo tienes que conseguirme una cerveza en cinco segundos o lames mis pies.—Gabriel se levanto de un saltó y corrió hacía la cocina, luego regresó con la cerveza en la mano.
—Ten.—Se la dio y se volvió a sentar.
—¿Mi tía no qué te prohibía el alcohol en la casa?—Preguntó mi primo abriendo la cerveza.
—Las escondo detrás de las verduras.—Dije avergonzada.
—¡Alcohólica!—Me gritó mi amigo riendo.
—Tú fuiste el de la idea de esconderlas ahí, así que yo no se quien es el alcohólico.
—Bueno ya, me toca a mí.—Habló Gabriel para después girar la botella y que esta quede entre Jacob y Ray.— Salvo a Ray, Jacob te reto a comer pasto.
Jacob tomo algo de pasto del suelo, lo miro mal, mi amigo tenía un problema con los gérmenes, bacterias y demás, para él todo tenía que estar limpio, sano, no creo que una hoja de pasto de mi jardín esté limpia para él.
Andrew saco su celular del bolsillo y puso la cámara.
—¡Ni se te ocurra!—Lo reñí.
—¿Qué? O vamos cuesta mucho ver a tu hermano el limpio comer pasto, déjame ser.—Besó mi mejilla y fotografió a Jacob justo cuando metía en su boca el pedazo de pasto, haciendo una cara de horror, luego Jacob empezó a escupir y toser como un loco.
—Tienes razón mira su cara.—Me carcajee.
—Okay.—Tos.—Sigo yo.—Carraspeo Jacob, tomo la botella y la giro.
Y como tengo tanta mala suerte quedo entre Thomas y yo.
—Salvo a Thomas, obvio.—Sonrió divertido.
—Mal amigo.—Lo mire mal.
—Se que me amas.—Me contesto.
—¿Cuál es el reto?—Le pregunte rodando los ojos acomodándome mejor en el pecho de Andrew y literal usarlo como respaldar.
—Te reto a que le des un beso con lengua a Andrew.—Hizo esa sonrisa de *Ya valiste pendeja*
Hijo de Dios.
¿Se puede odiar a tu mejor amigo?
Porque en estos momentos lo estaba odiando.
—No lo hare.—Me negué, Jacob sabía la fea experiencia que tuve con ese tipo de beso, casi me vomito y además de que el tipo tenía mal aliento.
—Que lo haga, que lo haga.—Dijo Ray apoyándolo.
—No chicos, además es muy feo de mi parte, nunca me ha gustado besar con publico.—Les suplique con la mirada.
Andrew puso su mano en mi pierna, para llamar mi atención.
—Es solo un beso, que importa.—Me sonrió tratando de convencerme.
—Es que tuve una mala experiencia, en serio, no quiero hacerlo.—Le comenté, Andrew asintió.
—¿Lo van a hacer o no?—Pregunto April.
—No, si ella no quiero no hay que obligarla, Jacob ponme el reto que tu quieras a mí.—Habló Andrew mirando a Jacob.
—Ay hermanito, hermanito, el reto es para ella no para ti, no te metas.—e contesto.
Andrew ya iba a replicar pero lo detuve.
—No importa, dime el otro reto tonto.—Le dije a Jacob, ignorando los abucheos de los chicos por no cumplir el otro reto.
—Bésame.—Me sonrió coqueto.
Sabía que diría algo mas.
Silencio incomodo de parte de todos.
Andrew me acerco más a él.
Uno, dos, tres.
—Bésame los pies.
Todos empezaron a reír, a Andrew no le dio mucha gracia, pero aflojo su agarre sobre mi.
Todos estaban emocionados de ver esto, Jacob se quito los zapatos y las medias, estiro sus “lindos” pies frente a mí, sabía que esos pies podrían estar incluso más limpios que los míos, pero aún así eran pies.
—Besa los lindos pies de tu cuñado.—Me codeo April, haciéndome reaccionar.
—Andrew tiene los pies más lindos.—Le conteste lo suficiente alto para que todos escucharan.
—Andrew me la pela.—Me contestó Jacob, tocando mi pierna con sus dedos del pie.
Asqueroso.
—¿Me seguirás besando después de esto?-Le pregunte a Andrew, aunque todos escucharon, sobretodo Gabriel.
—Todos los días, menos hoy.—Me sonrió divertido, le di un zape en la cabeza.—Era mentira, obvio si.
—Eso espero.—Le guiñe un ojo, alce el pie de Jacob hasta mi cara, lo bese, y hice exactamente lo mismo con el otro.
—¡Que asco!—Dijo Ray.
Mire a los demás y reían, bueno al menos hago reír a la gente, hasta Gabriel estaba riendo. Soy su pinche payasito.
—Oigan ahora que me pongo a pensar, el reto era para los dos, están sentados en el mismo lugar.—Habló Thomas recuperando la compostura y mirándonos serio.—Jacob te falta el reto de tu hermano.
—Uy esto se puso mejor.—Sonrió.—Dale un pico a Samara ahora.
Andrew muy dispuesto, me hizo girar para quedar frente a él y acortó la distancia, lo que creí que sería un pico fue más que eso, fue un beso intenso, donde nuestros labios se convirtieron en uno solo, me olvidé de que teníamos publico y lo tomé de el cuello con mis manos para acercarlo más.
—Eh chicos ya, es suficiente.—Toco mi hombro Ray, me separe de Andrew y voltee a ver al frente sonrojada.
Alv, esto se salió de control.
Jacob me veía sorprendido, para después señalar su celular, lo mire raro y el señalo mi bolsillo, saque mi celular y tenía un mensaje de él.
Jacob: Definitivamente me quedare a dormir, tienes muchas cosas que contarme, señorita.
Jacob: Espero que todavía seas virgen o matare a ese prostituto que tengo de hermano.
Lo mire mal.
—¿Qué?—Me miro mal él.
Solo negué con la cabeza y suspiré, Diosito protégeme esta noche y has que a Jacob le de diarrea para que no se quede esta noche.
En todo este tiempo no fui capaz de mirar atrás, sabía que Andrew estaba ahí porque yo estaba entre sus piernas, además podía sentir su abdomen pegado a mi espalda.
El juego siguió, con más retos tontos, como hacer que April comiera tierra, que a Thomas le tocara comerse una lombriz, Gabriel me reto a mí a hacer treinta lagartijas, si el muy imbécil, me hizo hacer ejercicio, hicieron que Andrew tomara agua con jabón, Jacob y April se pusieron a coquetear, pero no llegaron a más, como siempre.
Andrew y yo estuvimos juntos todo el tiempo y podía decir que la pase bien, restando la presencia de Gabriel, que no me quito la mirada de encima todo el tiempo, Andrew lo miro mal en todo momento y eso hizo que Thomas se diera cuenta de eso tan extraño, ya que me pregunto con la mirada, lo ignore y él decidió quedarse callado.
—Chicos nos vamos.—Mi tío Álvaro se asomo por la puerta de la cocina, haciendo una seña para que entráramos.
Todos nos levantamos del suelo y entramos a la casa, nos despedimos entre risas por todas las estupideces que hicimos ese día y al final solo quedamos, mamá, Samira, Jacob, Andrew y yo.
—Bueno, fue un gusto volverte a ver Andrew.—Mamá abrazo a Andrew y beso su mejilla.
—El gusto fue mío, usted tiene una familia grandiosa.—Le contesto él.
—Muchas gracias cariño, puedes regresar cuando quieras.—Mamá tomo de la mano a Samira y subió al segundo piso, mientras le hablaba a su hija de la comida de el almuerzo.
—Bueno te acompañamos afuera Andrew.—Habló Jacob.
—¿Acompañamos? ¿No te vienes conmigo?-Le preguntó confundido.
—No, yo hoy me quedo a dormir con Sami.—Me abrazo por los hombros Jacob.
—Pues que mal, bro, mamá me aviso que necesita hablar con los dos, así que vámonos y no reniegues que yo soy el mayor.—Lo jalo de la oreja fuera de la casa.—espérame en el auto, voy en seguida.—Le cerró la puerta en la cara.
—¡Adiós Jacob! ¡Te amo!—Le grite ya que no me pude ni despedir de él.
—¿Y tú porque me miras así?-Lo miré extrañada.
—Bueno Sam, que quieres que haga.—Se acerco a mí.
—¿Qué paso?—Pregunte confundida.
—Samara si vamos a fingir ser novios. ¿Tú crees que se vea bien que mi hermano se quede a dormir aquí, contigo?
—Pero si es mi mejor amigo idiota, todo mundo lo sabe.
Me miro mal y se dio un golpe en la frente.
—Okay pero esta bien, de todos modos estoy algo cansada para soportarlo.—Estire mis brazos hacia atrás.
—Perfecto, Hasta luego Samara.—Besó mi mejilla, abrió la puerta y se fue.
Escuche el auto arrancar alejándose de mí.
Mañana tendría tiempo para hablar con Jacob, por ahora lo único que quería hacer era dormir.
Pero siempre había alguien que no me dejaba hacer lo que quisiera y en este casa fue mamá.
—¿Qué necesitas?—Le pregunte entrando a su habitación y acostándome en su cama.
—Quería hablar contigo.—Suspiro sentándose en la cama.—Es sobre Andrew.
—¿Qué pasa con él?—Me senté en la cama.
—Yo se que él es un buen chico cariño, pero no está demás que te recuerde que tienen que cuidarse y…—Abrió el cajón de su mesita de noche y saco unos condones.—No quiero que después pases toda tu vida arrepintiéndote de algo.
Ay no lo que me faltaba.
Que mi mamá me regale condones.
—Ay no mamá, Andrew y yo no hemos hecho esas cosas…—Me interrumpió.
—Ay cariño no me tengas pena, es algo normal a tu edad, tu padre y yo en ese entonces parecíamos conejos…
—Oh no, no quiero saber nada sobre eso ma, papá, tú y condones no van.—Negué con la cabeza varias veces, me levante de un salto de la cama.
—Al menos toma los condones, me sentiré mas tranquila, Samara.—Dijo extendiendo su mano.
—Okay, gracias aunque no era necesario.—Los tome y salí espantada de ahí, me encerré en mi cuarto y tire los condones por ahí.
¿Andrew, yo y sexo? Me reí de las ocurrencias de mi madre, eso jamás pasaría.
Estaba bien algunos besos pero, ya no mas, yo sabía perfectamente que él es un mujeriego, meno demostró esta mañana con la chica que salió de su habitación, ni siquiera pudo cumplir la estúpida regla.
Aunque no lo podía negar, el chico podía ser un idiota, pero tenía lo suyo, besaba bien, y era divertido estar con él, además tiene unos ojos bellísimos, una sonrisa exquisita, amaba sus camanances. ¿Qué rayos esta pensando? ¿Por qué pensaba todas esas cosas tontas de Andrew?
Mi celular vibro avisando que tenía dos mensajes nuevos
Jacob: Tenemos que vernos mañana temprano, no se que le hiciste a mi hermano, pero era mentira lo de mamá, en casa no hay nadie. Aún así prefiero vernos mañana, no vaya a ser que el me termine atando al sótano, para que no vaya contigo.
Samara: Mañana nos vemos en el parque a las nueve, ahora déjame dormir. ¡Te adoro!.
Me salgo del chat y entro al de Andrew.
Andrew♡: Espero que descanses mucho. Llámame cualquier cosa Samara.
Que sueñes lindo. ♡
Sonreí como una tonta, bloquee mi celular, me tire de espalda en mi cama, solté un bostezo de cansancio, pensando en el día de mañana. ¿Qué le iba a decir a Jacob? Que me gustaba como besaba su hermano, porque en realidad no iba a decir ninguna mentira.
Ni yo misma sabía que había sucedido hoy, solo esperaba que esto acabara pronto, o me iba a volver loca.
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