El ascensor hizo un sonido y un movimiento raro de pronto.

-¿Te has leído cincuentas sombras de grey? –Le pregunte acordándome de la parte del beso desenfrenado del ascensor en aquel libro-

-Ni se te ocurra –me dijo mirándome amenazante-

-¿Hacer qué?

-Besarme de esa manera en el ascensor –dijo y reí-

-¿Por qué?

-Porque me dejarías con las ganas y quería sacármelas en seguida, y en promedio un ascensor no dura todo el tiempo que querré disfrutar .

He de admitir que al principio esos comentarios morbosos no me gustaban en lo mínimo, me hacían recordar a ese tipo de comentarios desagradables que nos dicen a las mujeres algunos hombre cuando vamos por la calle, pero  me he llegado a acostumbrar a ese tipo de comentarios de parte de Jonathan, además de que me gusta la manera en que me los dice.

-¿No te cansas de hacerme ese tipo de comentarios?

-¿No te parecen románticos? –Pregunto entre risas- a mi si, además es la verdad –dijo mientras se encogía los hombres-, apropósito, algún día deberías hacerme un oral en un lugar público –me lo quede mirando sin saber que decir-piénsalo, sería maravilloso 

Las puertas del ascensor se abrieron dando al enorme restaurante del hotel.

-Esto podría ser un buen lugar –dijo mientras caminamos hacia el bufet-

-Oh Dios –dije mientras me pegaba en la frente con mi mano- ni en sueños

-En mis sueño te practico el Kamasutra completo –me quede callada cuando vi que uno de los chef se quedó callado mirándonos al oír eso, Jonathan lo miro mal- ¿Qué miras?

-Yo... nada –el joven camino hacia el otro extremo mientras yo no podía más de la vergüenza-

-Mejor cállate, y toma tu desayuno –le dije regañándolo

-Disculpe –le dije a otro de los chef que había en el lugar- ¿Cómo hago par pedir unos huevos?

-Los que te hacen falta, ¿verdad? –le dije despacio para que solo el oyera y de una siento un golpe en mi trasero de lo cual no pude evitar reír-

-En seguida se los preparo, ¿y su hija que desea? –le pregunto a Jonathan y la risa salió de mi boca de forma involuntaria mientras El permanecía más serio que nunca- disculpe ¿sobrina? –La seriedad de Jonathan me hacía reír-, ¿nieta? –Seguía preguntando mientras yo aún no podía controlar mi risa-

-Mejor cállate y prepárame lo que te pedí –le dijo, refunfuñando.

Sin controlar mi risa me serví mi desayuno de las cosas que había ya en el bufet y me fui a buscar una mesa dejándolo solo a su destino, aunque sinceramente el que estaba peligrando era el cocinero y no Jonathan.

A lo lejos Jazmyn me hacia señas para que fuera hacia ella que ya se encontraba desayunando.

-Buenos días 

-Buenos días Jazmyn, te levantaste temprano

-Sí, me acosté muy temprano ayer –ella miro a lo lejos a Jonathan- ¿Qué le pasa a mi hermano?, ¿Por qué esa cara?

-El señor que nos atendió pensó que era mi padre –dije y ella rio-, luego le dijo que era mi tío y por ultimo le dijo que era mi abuelo

-Oh pobre chico

-Exacto

-Aunque es entendible –me dijo

-¿Por qué?

-Bueno no es que mi hermano este viejo, pero tu si pareces de menor edad, cuando llegamos al avión y te vi lo primero que le dije fue que si era legal su matrimonio –me dijo haciéndome reír-te vez muy joven para tener veintidós 

-Veintitrés en un mes

-Peor –comento mientras reíamos-¿Qué harás para tus veintitrés?

-Nada, no quiero hacer nada

-Quizás Jonathan te haga algo 

-Lo dudo –dije y ella me miro extraño

-¿Por qué? –me quede callada sin saber que decir. Pero es que, ¿Qué le iba a decir?, ¿Qué su hermano no sabía cuándo cumplía años porque en realidad no nos conocemos bien?

-Le dije que no quería nada...

-Oh vale

Vi a los lejos como se acercaba el señor pervertido a nuestra mesa, aun traía su cara de amargado por el anterior episodio, pero se veía realmente tierno.

-Buen día Jazz

-Buen día ,hermanito - Jonathan dejo su plato de comida a mi lado y saco un paquete de cigarrillos de su bolsillo.

-Si me disculpan, ya vengo –dijo y camino hacia la terraza

Me lo quede mirando a lo lejos como sacaba su encendedor y prendía su cigarro.

Maldición, se veía tan sexy.

-¿No te molesta que fume? –Pregunto Jazmyn sacándome del hechizo en que me tenía su hermano

-La verdad no, es su vida, después que no fume a mi lado –ella asintió-, ¿A ti si?

-No, aunque lo que me molesta en verdad es que comenzó a hacerlo desde que murió nuestra madre –la mire atenta-, ¿lo sabias?

-Que murió su mamá, sí, pero no sabía que desde ese momento fuma 

-Jonathan decayó mucho cuando mamá murió, primero termino con su novia de toda la vida a causa que básicamente nadie lo toleraba, ni siquiera ella por lo cual el decayó más por eso.

-¿Estaba muy enamorado de ella?

-¿Enamorado? –Ella rió-No, Jonathan no se enamora –dijo y la mire seria-, disculpa, quise decir no se enamoraba 

-Seme sincera Jazmyn, ¿Vez a tu hermano enamorado de mí? –Ella me miro fijo y torció un poco la boca-

-No se...

-¿Cómo que no sabes?

-Nunca he visto a mi hermano enamorado, asi que no sabría decir si está o no lo está, aunque te quiere y eso es evidente –dijo y una sonrisa salió de mi-

-Si era su novia de toda la vida, ¿Por qué dices que no estaba enamorado?

Ella me iba a contestar pero en ese momento veo como una morena se le acerca a Jonathan de manera coqueta, me acomodo en mi asiento y los miro fijo.

-¿Quién es ella?

-Kathya, su novia de toda la vida, es la ayudante de Maxwell, era obvio que iba a estar aquí –me quede mirando fijamente como ella y Jonathan hablaban, como ella colocaba su maldita mano en su hombro coqueteándole-

-Señoritas –escuche la voz de Maxwell al lado mío- buenos días 

-Buenos días Maxwell –le dijo Jazmin

-Días –dije sin poder quitar la mirada de Jonathan y la tal Kathya.

-Jazmyn podemos hablar un momento –le dijo Maxwell-

-Claro –ella se levantó y antes se me acerco a mi oído- solo tengo algo que decirte con respecto a Jonathan, ten cuidado, no es mala persona, pero no sabe amar.

¿Tener cuidado?, demasiado tarde Jazmyn.

Me levante y con paso firme fui hacia donde se encontraba , el al verme sonrió, pero muy pronto su sonrisa fue opacada con un beso que le tomó por sorpresa ya que no me importa que estuviese con alguien, me pegue a él enrollando mis brazos en su cuello haciendo el beso más profundo, gemí en su boca y mordí un poco su labio haciendo que el apretara sus manos en mis caderas.

Al separarnos mire a mi lado para saber si aún se encontraba ella ahí, pero no, ya se había ido, al voltear de nuevo me encontré con su mirada y esa sonrisa que tanto conocía.

-¿Lo que acabas de hacer es una escena de celos? –pregunto con una sonrisa de burla en su rostro, la cual odie.

-No, no tengo nada que celarle a esa tal Kathya –el me miro de lado.

-Asi que Jazmyn ya te conto quien es –dijo y asentí.

-Tomémonos una foto -dijo de pronto-

-¿Otra? –pregunte

-Es la primera vez que haces una escena celos, tengo que recordar esto –dijo riendo- Señor –llamo a uno de los meseros que iba pasando-por favor nos puede tomar una foto

El señor se alejó y nos tomó una foto. Sinceramente esta costumbre de recolectar recuerdos me estaba gustando.

-Gracias –le dijo al señor una vez que le entrego su celular- apropósito te voy a pedir un favor –me dijo

-¿Qué? 

-Esta noche procura hacerme otra escena de celos –paso mi mano por mi mejilla-, me excita verte celosa, ni te imaginas las ganas de follarte que tengo ahora mismo 

-¿Qué esperas? –Le dije mientras me acerco rosando nuestros labios.

-No puedo, tengo una reunión con Maxwell .

-¿Con Maxwell o con la bruja esa? –pregunte y el rio.

-Con Maxwell nena, pero que te parece si hoy vamos a cenar los dos, te pones un hermoso vestido, yo uno de mis trajes y vamos a cenar.

-¿Quieres comer conmigo?

- Quiero ir a comer contigo y luego comerte a ti –lo mire a los ojos mientras se me salía una sonrisa y entonces, lo volví a besar-