Capítulo 7

Ambos guerreros dieron un salto para esquivar el ataque de este que se frenó en seco para luego voltear su cuerpo y lanzar una ráfaga de energía con su boca que esta vez si impactó en ellos. Pero apenas les hizo algo ese ataque.

—Vamos a tener que derrotar a este oponente, ¿listo Natsu?—preguntó Gray.

—Cuando quieras.

Los dos liberaron energía transformándose en super saiyan. Baby, al ver la transformación y esos ojos recordó a Goku. Una ira incontrolable se apoderó de él haciendo que liberase una cuantiosa cantidad de poder que hizo retumbar el suelo.

—Tiene un gran poder, debemos emplearnos a fondo—comentó Natsu viendo el ki.

Baby se volvió a lanzar a por ellos. Natsu recibió un fuerte golpe en el rostro, Gray intentó golpearlo varias veces pero el tsufur era mucho más rápido, no solamente evadió todos los golpes sino que este sí alcanzó a golpearlo y no poco.

Natsu desde su posición le dio una patada por la espalda pero fue como hacerle cosquillas pues no sintió nada y solamente se quedó ahí parado, esbozando una sonrisa maligna.

—¿Vosotros también sois super saiyans?, esta escoria no hace más que reproducirse.

Gray intentó de nuevo golpearlo, este no lo esquivó y recibió todos los puñetazos. Ninguno surgió efecto. Luego fue su turno y el mago de hielo fue apalizado perdiendo incluso la transformación. Natsu vio como su amigo estaba en el suelo, tirado y herido mientras intentaba en vano ponerse en pie.

—Ahora verás—el pelirrosa comenzó a liberar energía de sus manos.

Pronto, Baby recordó ese ataque, el mismo que le envió al sol matándolo. Se quedó parado y Natsu le lanzó con todas sus fuerzas el kamehameha. El tsufur fue a parar a unos metros antes de que se produjera la explosión.

El pequeño ser se levantó y miró con odio y desprecio a Natsu. Gray le lanzó unas cuantas ráfagas de energía pero de nada sirvió.  Ambos estaban preocupados pues sus ataques no funcionaban ni estando en super saiyan.

Baby se plantó delante de Natsu en apenas unos segundos y le soltó una lluvia de puñetazos que dejaron sin aire al joven. Fue una paliza tan bestia que lo dejó sin sentido. Luego fue el turno de Gray que ya estando herido aguantó menos.

—Estupidos saiyans...no merece la pena ni que me apodere de vuestro cuerpo—comentó con una mirada despectiva hacia ellos.

Baby se marchó del lugar dejando a estos malheridos y al borde de la muerte. Se fue para causar el caos y llevar la destrucción a las ciudades en busca de oponentes fuertes. Quería volverse poderoso antes de regresar a su época.

Una pequeña grieta se abrió, era de nuevo un portal y de este salió un joven. Se acercó a Natsu y Gray, utilizando sus manos logró curarlos. Ambos despertaron y respiraron fuertemente, como si se estuvieran ahogando.

—Tranquilos, estáis a salvo—dijo este.

—¿Quién eres?—Natsu estaba aliviado ahora.

—Mi nombre es Trunks, vigilo las líneas temporales, soy uno de sus guardianes por así decirlo.

—Pues no has hecho muy bien tu trabajo—dijo Gray poniéndose en pie—pero gracias por salvarnos la vida.

—He venido a ayudar a solventar el problema, debemos parar a Baby.

—Pero...es muy fuerte...—Natsu se sentía humillado.

—Entre los tres podremos con él—dijo confiado.

Y así, los tres fueron en la búsqueda de Baby, volaron mientras hablaban de como podían derrotarlo. El plan era estar unidos y atacar con todo.

Lejos de allí, y disfrutando de la destrucción, Freezer arrasaba con todo. Estaba reuniendo un ejercito, poco a poco se iba volviendo más poderoso. Sentía como el poder recorría su cuerpo gracias a los duros entrenamientos. Además, había obtenido una nueva transformación que desearía utilizar con Vegeta y Goku.

Sus soldados estaban destruyendo una gran ciudad de civiles con gente inocente tratando inútilmente de escapar de sus garras. La risa del malvado emperador del mal resonaba por todo el lugar mientras la muerte se abría camino.

—Amo Freezer, ¿este planeta va a ser vendido?—preguntó uno.

—Por supuesto, ¿por qué la pregunta?—pareció molestarle.

—Aquellas zonas de montaña albergan mucho mineral que se vende a gran valor, es por ello que sería recomendable no destruirlo.

—Ah...interesante...¿Eh?—algo captó su atención.

Al voltear, vio a Goku y Vegeta, habían llegado gracias a la transmisión instantánea. 

—Oh, pero si son los monos saiyan...

—Déjate de chorradas Freezer, he venido a matarte.

—Por fin se da el día de la venganza...¡POR TODAS LAS HUMILLACIONES!—Freezer no aguardó un momento más y chocó sus puños con Vegeta que ya estaba listo para pelear.

—¡Vegeta ten cuidado!—advirtió Goku.

—¡Ya lo sé insecto!.

El combate se alejó de la zona. Goku se ocuparía de sus soldados para que no molestasen en la lucha de Vegeta y Freezer.


Continuará...


Bueno, espero que les haya gustado el capítulo. Habrá una pausa ya que estoy bastante ocupado y necesito descansar un tiempo. Además, quiero preparar bien los próximos capítulos.


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