Nigel:

Salí detrás de Mary, mi vista se fue hacia el puesto de Dannielle y ella no estaba, mi ceño se frunce al verla a ella irse por el pasillo hacia el ascensor con alguien.

Se estaba yendo con un sujeto de traje.

—¿Viste eso? Dannielle se fue con alguien ¿Quién será? ¿Será alguien de aquí?

—Ese no es nuestro asunto —dije tratando de disimular mi rabia—, ella tiene su vida personal ¿No?

—La tiene, pero espero que no haga espectáculos en la oficina, sabes que eso no está permitido.

—Tranquila se lo dejaré en claro...

Estaba tan molesto que hasta el hambre se me había quitado, tenía que tragarme todo el fuego que quería soltar, quería ir y detenerla para que no se fuera con aquel tipo.

Maldita sea.

Camine con Mary hacia el ascensor, hoy iríamos a almorzar con sus padres, no estaba cómodo con ello, Pero quería complacerla ya que estaba insistiendo demasiado con eso.

Yo, no dejaba de pensar en Dannielle y el beso que nos dimos en mi oficina, no pude resistirme a besarla, ver esos ojos café intensos, sus labios y ese delicioso olor a flores.

El besarla fue algo maravilloso, majestuoso. El tenerla así tan cerca de mi fue delicioso, tuve que controlarme para no tomarla y sentarla en mi escritorio para poder tocarla.

Pero cuando reaccioné me di cuenta, de que lo que estábamos haciendo estaba muy mal. Ella me miraba de una manera dolida, como si esto estuviese mal, claro que lo estaba por qué yo estoy casado, a duras penas hablamos, es más que obvio que eso no estaba bien.

Cuando llegue a casa y al ver a Mary dormida sobre el sofá, me sentí como una porquería, por qué ella estaba haciendo su esfuerzo por mejorar y lo está haciendo, ahora tendremos un bebé, tendremos una familia, no puedo fallarle.

No puedo hacer eso, juré en el altar que la protegería y la cuidaría, ahora estoy fallando en eso Simplemente no puedo, no puedo. 

Mary y yo, salimos de la empresa con rumbo al restaurante. 

No quería comer con sus padres, no estaba de humor para ello. 

Desde siempre, estuve rodeado de amor, de una familia que siempre se ha apegado a lo tradicional, que la familia es lo primero ante todo, crecí con ese pensamiento por que fue lo que me inculcaron, pero ahora que estoy viviendo un martirio con Mary, me doy cuenta lo infeliz que soy, lo cambiado que he estado desde que me case con ella. Simplemente, no quiero seguir con esto. 

Pero pienso en ella, en ese bebe que viene en camino y lo horrible que seria no ver a mi hijo crecer, no quiero eso para la vida de mi hijo. Es algo que no puedo permitir. Asi que tendre que seguir siendo infeliz, todo por ver crecer a mi hijo a mi lado. 

—Mama, papa. 

Ellos se pusieron de pie al vernos, yo salude a los padres de Mary con un apretón de manos, luego nos sentamos. 

—Yo ordene la comida, espero que te guste el marisco —dijo la madre de Mary—. Es el más delicioso..

—Disculpe señora Mendez, pero no como nada que tenga que ver con el mar, soy alérgico. 

—Es verdad mamá —ella soltó una risa—, mi esposo es alérgico a esas cosas, por eso no comemos pescado en casa. 

—Lo siento yerno —ella me sonrio—, pediré otra cosa para ti. 

—Yo lo hago, se lo que le gusta a mi esposo. 

Ellos hablaron, mi vista se fue hacia el otro lado del lugar, no puede ser. 

Estaba viendo a Dannielle sentada en una de las mesas, frente a ella estaba aquel sujeto con el que había salido de la oficina, el sujeto estaba de espaldas y ella se veía muy emocionada, incluso le sonreía al sujeto, cosa que me daba mucha rabia. 

¿Por qué le está sonriendo así? 

¿Por qué se está riendo con el?

—Nigel —mire a Mary—, te estoy hablando ¿qué vino quieres?

—Lo siento, pensaba en un par de cosas... No quiero vino, solo quiero jugo. 

—Bien, ordené pasta para ti, dicen que es la más deliciosa del lugar... 

Solo asenti. Quería volver a verla, pero debía disimular, no quiero que nadie se de cuenta de que estoy realmente celoso por que ella estaba aquí junto con ese sujeto. 

—Nigel —mire al padre de Mary— ¿Como va todo en la empresa?

—Muy bien, haciendo trámites para buscar nuevas propiedades para comprar, así que todo está en orden... 

—Por cierto, tengo algunas ideas para ti.. 

—Lo siento señor Mendez, no quiero sonar grosero pero no inmiscuyo a nadie en mis asuntos de trabajo, la empresa para mi es algo muy aparte. 

No suelo meter a nadie en mi empresa, a nadie que ni siquiera es mi familia, trabajé muy duro para tener la empresa que tengo, todos mis asuntos con respecto a la empresa son eso, solo de la empresa. 

Yo trabaje duro y comencé desde abajo, no permito que nadie, me diga nada sobre como manejar mi empresa. 

—No te preocupes muchacho.. Tengo una pregunta ¿Tendrás una vacante en tu empresa? Mi hijo George, está buscando empleo. 

—Bueno, ahora tengo una vacante para mensajero... 

—¿Mensajero? —mire a su esposa— Pero George es un profesional, el no sirve para mensajero. 

—Bueno, entonces no, no hay una vacante —sonreí—, el puesto como mensajero es bueno, hay buen sueldo y buenas prestaciones.. Se le da la oportunidad de hacer más cosas.

—Pero, ¿Mensajero? Ese no es un empleo..

—Yo comencé siendo mensajero —respondí—, mientras estaba estudiando así que no le veo nada de malo, por algo se comienza ¿no?

—Es verdad mama, además, George es un poco irresponsable —respondió Mary—, que busque cómo trabajar de otra cosa. 

Ambos se molestaron y se le nota, pero no me importa, soy de los que cree que trabajando duro puedes llegar lejos, no puedo dejar que nadie entre por beneficio a mi empresa. Además, George es un inutil bueno para nada. 

No sabe hacer nada, solo ir de fiesta, gastar dinero y dormir hasta tarde. Las personas así, no tienen nada positivo que aportar a la sociedad y mucho menos a mi empresa. 

(...) 

Más tarde: 

Mary se fue a casa con sus padres, yo me regrese a la empresa para continuar con el trabajo. Estaba un poco estresado por que el dueño del centro comercial en Los Angeles, se niega a tener una reunión conmigo, no quiere vender la propiedad. 

Tengo que ir a Los Ángeles cuanto antes, no puedo dejar perder esa propiedad, es una ganga practicamente, no puedo perder esa propiedad. 

Alce la vista cuando escuche la puerta, Dannielle venía entrando. 

—Aquí tiene las copias —las dejó sobre mi escritorio. 

—Gracias —los tome y fingí leerlos— ¿Qué tal fue tu almuerzo? ¿Comiste bien?

—Si señor, estuvo bien..

La mire, ella tenía las manos en la espalda, estaba erguida y sonrojada. Mire aquellos labios que esta mañana tenían un rojo intenso, ahora, aquel rojo no estaba y eso, me hacia enfurecer. 

¿La besó?

Claro que la besó, eso se nota. 

—¿Necesita algo más? 

Quería preguntarle con quien se había ido, pero se que no es mi asunto. No puedo evitarlo, no puedo evitar sentirme celoso. 

¿Por qué demonios me siento asi?

Deje los papeles sobre el escritorio y me puse de pie para ir hacia ella. Pude notar que se puso muy nerviosa, también un leve sonrojo en sus mejillas. Al estar más cerca, pude notar el olor a perfume de aquel sujeto desprendiendo de su ropa. 

—Te vi salir con un hombre, ¿quien es?

—E-Ese no es su asunto señor... 

—Claro que lo es, por que eres mi secretaria..

—Pero mi vida privada no le incumbe a nadie, mucho menos a usted. 

—Eso me enfurece mucho ¿sabes? —quede muy cerca de ella— que otro hombre te toque o se haya acercado a ti... No entiendo por que, me enfurece el hecho de saber eso, hoy te vi con el en el restaurante, estabas riéndote, sonriéndole a ese sujeto, me revolvió el estómago y no entiendo el porque. 

—No se —respondió firmemente—, yo solo estaba almorzando con alguien muy a gusto, usted estaba con su esposa ¿no? 

Eso fue un golpe duro y certero. Me aleje de ella, no puedo, tengo que calmarme pero la idea de que ella estuviese con otro sujeto, me enfurece demasiado. 

—Me retiro. 

Ella comenzó a caminar hacia la puerta, no quería detenerla pero al final lo hice, le sostuve la muñeca para que no se fuera, la gire y la pegue a mi cuerpo con fuerza, ella dejo las manos en mi pecho tratando de apartarme. 

No se que me estaba pasando pero no quería dejarla ir. 

—Suéltame Nigel. 

—No me llames por mi nombre, no sabes lo que causa eso en mi —murmuré en su rostro. 

—No hagas esto Nigel —ella susurró— me confundes, me confundes demasiado. 

—Creeme que yo lo estoy aún más —acerqué mi rostro al de ella, nuestras narices rozaban entre si—, se que esto no está bien pero no puedo alejarme de ti, no dejo de pensarte, me estas volviendo loco Dannielle. 

—Dejemos esto así Nigel, no puedo meterme con un hombre que está casado y que tendrá un bebé, no quiero ser la causante de que se quiebre una familia —ella susurró.

Mi mente me gritaba que ella tenía razón, que debía alejarme de ella, que no debía tocarla pero no puedo, no puedo alejarla de mi. 

No puedo. 

Mi mano se poso en su mentón para besarla, no pude mas y lo hice, la besé de nuevo. Ella me correspondió en un segundo, este beso no era como el primero que nos dimos, este era más fuerte y más intenso, la pegue mas a mi cuerpo y con mucha más fuerza. 

Me deleite con los sonidos saliendo de sus labios, de como nuestras lenguas se mezclaban en este beso. Entonces hice lo que tanto quería, la alce un poco y camine con ella para sentarla en el escritorio, aun seguíamos en ese beso. 

Solté sus labios para besar su cuello, me recargue del escritorio, con la mano libre me atreví a tocarle el muslo y alzar un poco su falda. Pude sentir en mis dedos cómo se erizaba su piel, tumben lo suave de esta. 

—Nigel —susurró—, no podemos... No, no podemos. 

—Lo se, se que no podemos pero no puedo resistirme a ti, hueles tan bien —dije en su oído. 

No puedo dejar de besarla, ella es todo lo que necesito ahora. Ya después vendrán los arrepentimientos, necesito besarla y dejarle impregnado todo mi olor.

(...) 

Regresaba a casa, pensaba en Dannielle y lo que pasó en la oficina, volvió a reaccionar de mala manera y eso me hizo sentir de la mierda. Decidi irme temprano por que no aguantaba mas esto. 

Iba a decirle a Mary que me iba a divorciar de ella. 

No lo hacia por que queria estar con Dannielle, lo queria hacer por que ya no lo soportaba, ha pasado toda la tarde llamandome y dejándome mensajes con lo mismo de siempre. Cuando conteste aquella llamada estaba histérica, me gritaba una y otra vez que debía contestarle cuando ella me llamara la primera vez. 

He pasado todo el bendito dia con mucho dolor de cabeza. 

Abrí la puerta, dejé el saco en el sofá como de costumbre. En el departamento había sólo silencio, pero se escuchaba a Mary hablando, camine hacia el pasillo en el que estaba la habitación, estaba por empujar la puerta ya que estaba un poco abierta. 

—Si mama, voy a convencer a Nigel que le de trabajo a George, solo a mi papa se le ocurre decirle algo como eso a Nigel, sabiendo como es... No me importa, si queremos hacer esto, deben hacer lo que pido... Mañana iré por la ecografía esa, no, tiene que parecer convincente el embarazo... 

Me quede estático al escucharla, pero ella siguió hablando. 

—Nigel no puede dejarme, el lo sabe y lo tengo que mantener a mi lado... No importa mamá, los abortos espontáneos existen, Nigel tiene un viaje a Los Ángeles en unos días, le diré que no se vaya, que no me deje sola —rió—, entonces lo pierdo, me hago la victima dolida por la pérdida del mocoso, lo hago sentir culpable y así, mucho menos me deja. 

Decidí abrir la puerta de golpe, ella se asusto al verme, tanto así que el teléfono cayó de su mano. No me habia dado cuenta de que yo estaba llorando hasta que sentí las mejillas mojadas. 

Esto, esto es lo peor que me pudieron haber hecho en la vida. 

Hola hola lectoras, espero que esten bien, que hayan tenido un buen fin de semana. Aqui les dejo el capítulo de El dilema de Dannielle, todo esta turbioo con Mary JAJAJA 

No olviden dejar sus votos y comentarios. 

Besos, Ross.