Volví a las clases y todo prosiguió relativamente normal, durante esa primera semana tanto de trabajo como estudio me di cuenta que algo andaba mal, o quizás no mal pero si raro. Toda la vacación no fume, sé que hay gente que siente la necesidad de hacerlo cuando intenta dejarlo, pero no había sentido esa necesidad... no hasta ahora que la clases ya me estaban quemando nuevamente. El estar con Cael me había ayudado? No creo... no fumaba en el parque por miedo de causar algún incendio además de no estar permitido, asique Cael jamás me vio fumar. En fin ese viernes en la noche seguí mi rutina después de clases estar en el apartamento tocar el violín y fumar hasta pasada la media noche.

Al día siguiente, después del trabajo como acostumbraba fui al parque en la tarde a tocar. Esperando ver a Cael, no habíamos hablado ni por mensaje desde la semana pasada. No me gusta molestar a la gente asique simplemente no escribí nada pero tampoco hubo mensaje de ella. Y de igual forma ella no apareció ese día. Una vez mas volví a sentir esa sensación rara, y mi música lo mostraba también, de hecho trate de tocar y no sentía que estaba bien, lo intente tanto que rompí una de mis cuerdas. Había dejado los repuestos en casa asique realmente con mi mal humor me fui temprano a casa. Esta vez no hubo voz que me detuviera, andaba fatal y no quería que nadie se me acercara. Volví a casa, tire mi violín a la cama y me tire al suelo, en ese momento encendí un cigarro y comencé de nuevo. Poco a poco me fui calmando hasta que tuve la paciencia para cambiar la cuerda de mi violín. No sé que me paso... o quizás si... quizás no saber de ella...

En ese momento iba a escribirle pero era algo tarde, no quise molestarla, como siempre. Me quede meditando allí, ni siquiera me subí a la cama, me quede dormido al lado de esta.

Al día siguiente en mi descanso del trabajo, estaba fatal del cuello porque ni siquiera dormir acostado, mientras descansaba tuve un mensaje. Era Cael de hecho

"Hola Kassie! Como estas?"

Sus mensajes hasta sonaban alegres

"Oye no pude ir al parque ayer y no creo poder ir pronto, estoy terminando de llenar papeles de la universidad asique ando muy muy ocupada 😖" decía en un mensaje de texto. Me calme en un momento el saber que ella estaba bien, pero era una lástima que no la iba a poder ver por un rato.

"No te preocupes, suerte con ello"

Hasta mis mensajes eran jodidamente secos dios

"Quizás no te pueda ver pero empezare a escribirte mas 😊. Sé que ahorita estas en el trabajo asique te escribo en la noche. Suerteeee 🤩"

Ella usaba muchas caritas

Que tierna

"Gracias igual"

Guarde mi teléfono y volví al trabajo, aun con el dolor en el cuello pero una mejor actitud.

Ya con esa información me sentí un poco mejor, en el trabajo y estudio. Y en la noche se volvió costumbre que habláramos, me constaba de todo lo que le pasaba día a día. Que sus padres eran algo estrictos pero eran buena onda, que bien por ella. Que incluso gracias a mi música está interesada en tomar clases de algún instrumento. Le dije que si era su primera vez empezara con algo fácil, como la flauta. A ella le gusto la idea.

También le hable de mi extraño amor al color rosa, creo que era una especie de broma al inicio, incluso diciendo que era curioso para alguien tan emo como yo.

Mi mejor amiga me acaba de decir emo. Bien

Pero dijo después que estaba perfecto y que el rosa era un color muy bonito, pero el de ella era el verde. Curioso, siempre creí que iba a ser el azul. A todo esto, jamás lo mencione, me entere que ella era un año menor que yo, y por eso la sentía más pequeña, asique cuando la conocí tenía 17. Para digamos que el momento que nos volvimos a ver en persona ya tenía los 18, rayos ni siquiera supe que su cumpleaños era a inicio de año en ese momento. Seguimos así por lo que quedaba del año, paso navidad por texto, año nuevo y el siguiente año llego.

El tiempo siguió así. Comunicándome con ella, a veces estando en clases y estar más en el celular que en la clase, mal allí lo sé. Llegue a mi segundo año de carrera, y todo iba... normal

De vez en cuando habían chicas que aun intentaban algo conmigo, pero si antes era difícil que les diera una oportunidad, ahora era imposible, no tenía intenciones de meterme con nadie... y de hecho entre algunos compañeros que me conocían empezó el pequeño rumor que quizás, no me gustaban las chicas por nunca parecer "feliz" cerca de ellas, ni aunque me buscaran, ellos decían que pareciera gay... hmp... bueno, es difícil decir si eso era verdad o no, ya que si bien a parte de Cael, realmente no me sentía cómodo con otras chicas, tampoco es como que hubiera sentido algo por un chico tampoco. Sin embargo el rumor entre compañeros cercanos se volvía mas burla de vez en cuando y es cuando cruzaban un poco la línea...

Admito que en segundo año mi temperamento fue en peor y fui más agresivo metiéndome en peleas constantes por estas burlas raras, realmente jamás entenderé cual era la necesidad, no me llevaba bien con alguien por allí como para "deber" algo como una explicación. Pero bueno.

Los días continuaron pasando, mediados del semestre estaba en clases cuando comienzo a escuchar un horrible sonido en clase. Toda la clase se volteo ya que estábamos en práctica, aparentemente había una alumna nueva. No de nuestra sección, eran los de las clases extra que compartían el auditorio con nosotros. Ese tipo de gente que sacaba cursos extracurriculares que venían de otras universidades. Era un horrible sonido de flauta. Y después de un rato y ver que todos se estaban quejando

"Oye! Si piensas tocar así vete a la mi-" mis palabras se callaron cuando vi a una maestra con... Cael quien estaba luchando con una flauta para tocarla, se veía muy frustrada. Avergonzado por casi insultarla me levanto y me acerco. La maestra me ve.

"Ah hola Kassie, oye tu eres muy bueno con los tonos y los tempos puedes ayudar a afinarla? Gracias! Ni siquiera me deja responder pero de una u otra forma me iba a ofrecer quizás... Cael me voltea a ver y me da una sonrisa.

"KASSIE!" súper contenta, wow nunca había visto a alguien tan feliz de verme

"Hola Cael..."

"Tome tu consejo de aprender flauta pero aun soy mala afinando" ella se ríe nerviosa, la flauta no era mi fuerte pero si sabia tocarla ya que también fue mi primer instrumento antes de la desgracia con la guitarra.

"Venga te ayudare" comenzamos a practicar el afinar. "asique... empezaste a tomar clases de música?" le pregunte mientras ella seguía aprendiendo como ubicar sus dedos sobre los agujeros de a flauta.

"Sip! Verte me inspiro y quería intentarlo, aunque... cuando dijiste que la flauta era lo más fácil... yo me esperaba algo... ya sabes... fácil haha" se ríe nerviosa y algo avergonzada ya que no esperaba que fuese a ser más difícil de lo que esperaba.

"Tranquila, lo harás mejor, apenas vas comenzando, todos tuvimos problemas al inicio" Le animaba un poco, me recordaba cuando yo intentaba con la guitarra y simplemente no me funcionaba.

"Aunque otros también tienen talento... quizás aprenda pero siento que tu eres alguien con el dote musical desde... siempre hehe" decía ella con una sonrisa, me sorprendí un poco por su alago, no negare, me sonroje levemente.

"ejem... venga sigamos practicando" Ese día, y los días que la veía me volví básicamente su "tuto", practicábamos cada vez que ella iba al conservatorio, al ella venir de otra universidad y explicarme que era una clase extra no la veía todos los días, pero el día que ella estaba allí, no me despegaba de ella... solo porque ella quería, por cierto, porque ella no conocía mucha gente allí y eso... no es por otra cosa.

Ya que yo estudiaba en la tarde, ella se iba más temprano que yo, como siempre. Ya que lo de ella era más que nada un curso extra. Pero un día la noción el tiempo nos comió y se hizo básicamente de noche, recuerdo que esto altero bastante a Cael.

"Mis padres me van a matar, no puedo irme de noche a casa" me decía ella con miedo viendo a fuera de la ventana

"No pueden venir por ti?" Le pregunte

"Mi padre trabaja hasta tarde con el auto y no hare que mi madre salga sola en la noche" Decía más preocupada, y tenía un punto en eso ultimo

"Y si los llamas para avisar que te quedaras en otro lugar esta noche?"

"Bueno y donde me quedo para comenzar" me dice ella algo seria, aun seria se veía linda.

"Ejem... mi apartamento no está muy lejos... puedes quedarte conmigo si quieres" yo estaba viendo a otro lado y ella se queda pensando, pude ver que se sonrojaba levemente. Y tomando su teléfono se alejo un momento, yo solo me di un golpe en la cabeza por lo estúpido que dije. Como se me pudo ocurrir eso.

Ella regreso después de hablar por teléfono ella me vio golpeándome, no me dijo nada hasta que me di cuenta y solo disimule como que no había pasado nada. Dio una pequeña risita porque, la verdad eso si había sido tonto.

"Mis padres dijeron que estaba bien y puedo quedarme contigo, ya les he hablado de ti y de cómo me has ayudado con mis clases de flauta, ellos confían en ti" al oír eso admito que me puse aun más nervioso pero mantuve la compostura. Y nos fuimos a mi casa. La iba cuidando ya que si bien no era una zona peligrosa de día si que lo podía ser de noche. Llegamos a mi casa, el mismo cuarto pequeño que vivía desde hace ya casi 2 años

"Esta es tu casa?" Dice ella entrando, me daba algo de vergüenza pero es lo que podía pagar con mi trabajo actual. No hablaba mucho de mi casa con ella ya que al final solo era el cuarto de un drogadicto al final estaba lleno de olor a cigarro.

"Me disculpo el desorden, nadie viene a visitarme" la cama estaba sola con una almohada y una cobija. "Puedes descansar allí no te preocupes" le dije señalando la cama mientras dejaba mis cosas por allí

"Que hay de ti?" Me dice ella, la volteo a ver

"No te preocupes por mí, dormiré aquí abajo, lo hago todo el tiempo" ella me vio algo confundida mientras me sentaba en el suelo al lado de la cama

"C-como? Es tu casa no puedes... simplemente dormir en el suelo" Decía ella tratando de no hacerme dormir allí

"Pues... como te darás cuenta no tengo otro lugar, no tengo sillón, además no te preocupes, yo te invite, lo menos que puedo hacer es hacerte sentir cómoda" Le decía, realmente no me importaba ni me molestaba, de muevo, no es la primera vez que lo hago, pero ella seguía discutiendo

"Pero es tu casa, es simplemente injusto" Dice ella sentándose a mi lado en el suelo discutiendo un poco más, me empezaba a cansar de las quejas de ella, solo un poco.

"Oye, quieres que durmamos juntos o qué?" Dije yo de forma más grosera pero rápidamente reacciono a mis palabras y me volteo "l-lo siento, n-no quise molestarte ni ofenderte" dios que soy un imbécil. Ella se ríe un poco

"De hecho... es tu cama, asique no me molestaría dormir contigo" decía ella algo sonrojada, yo me puse totalmente rojo también. Aclare mi voz y le dije

"Ok... si no te molesta, p-pero aun es muy temprano" antes de dormir cenamos mientras le daba una taza de sopa instantánea de fideos ya que era lo único que tenia para comer. Comenzamos a platicar un poco más tranquilos ya que solo estábamos nosotros dos.

Para ese momento ya llevamos hablando bastante tiempo desde que nos conocimos y desde que la vi en el conservatorio, casi el año quizás? Soy malo con el tiempo solo recuerdo que casi entrabamos a exámenes nuevamente. Ella me comenta

"Oye Kassie, se que te gusta el rosa, y si... en algún momento puedes... porque no te tiñes el cabello de rosa? Creo que te verías muy muy bien hehe" dice ella con su característica sonrisa, analizo eso y no puedo evitar pensar que se vería muy raro.

"No creo que se vea muy bien un chico de cabello largo rosa, parecería un payaso" le digo rodando los ojos, ella ríe nuevamente

"Qué tal si te pintas solo la mitad de tu cabello? Y el otro lo dejas natural, tu cabello azul oscuro también es precioso hehe" me sonroje levemente del alago pero a la vez me puse a visualizarlo también, de hecho ese si sonaba bien.

"Sabes? No suena tan mal, si algún día tengo dinero extra lo hare haha" le dije bromeando, ese tipo de cambios eran muy caros asique ni loco podría con lo apretado que siempre estoy.

"Crees que me hace un cambio de look? Parezco muy de calle?" Comienzo a burlarme de mi mismo que en parte era verdad. Ella ríe un poco también

"No realmente de hecho... eres muy guapo tal como eres" mis ojos se abren completamente al oír eso y mi cara se torna totalmente roja. Me volteo a verla y ella también está totalmente roja. Nos quedamos en silencio un momento tras ello

"Tu también... eres muy linda Cael" dejo salir un poco nervioso mis palabras, sin voltearla a ver, ella se acerca más a mí y me agarra el brazo y poniendo su mano sobre la mía, me puse aun más nervioso.

"Kassie... eres un chico muy muy lindo... eres simpático y muy talentoso... a veces... me siento más que una amiga para ti" me dice mientras yo aun me niego a verla pero poco a poco aun con nervios la volteo a ver ella tiene una sonrisa con unos ojos algo... raros, no lo sé, era la primera vez que veía alguien así de... enamorado? Ni siquiera mi ex de hace algunos años atrás era así.

"Cael..." digo de forma suave y aun nerviosa... "eres una... chica hermosa y adorable... me... has hecho muy feliz desde que te conocí... tu..." para ese momento me tenia agarrada la mano. Empecé a tartamudear sentía que mi corazón iba a explotar, y creo que es lo que otras personas dicen tener mariposas en el estomago "Quisieras.... q-quisieras......agh...."me cubro la cara con mi otra mano y entre palabras " quisieras ser mi novia?"

Ella se lanzo sobre mí a abrazarme y a darme un beso a la mejilla, ella se veía muy feliz, yo estaba totalmente rojo viéndola

"Creí que no lo dirías tontito hehehe. Sisisi me gustas, mucho, y quiero ser tu novia" por primera vez en años, en mucho tiempo tuve una sonrisa genuina, incluso comencé a llorar de felicidad, ella se empecé a preocupar. "Eehh??!! Kassie?! Qué pasa?! Porque lloras?!" Tomando mi rostro suavemente, yo no podía dejar de sonreír.

"No... no es nada... es solo que me haces muy muy feliz..." ella comenzó a reírse levemente y me dio un beso en la frente, la abrace contra mí, jamás la había abrazado de esta forma, habíamos sido amigos por un largo rato, y esto era un cambio increíble. No podía mas que abrazarla, no la quería dejar ir. Al final fuimos tontos y terminamos durmiendo abrazados en el costado de la cama.