Bright y Mild estaban discutiendo sobre algo (cualquier cosa de la que estaban hablando) hasta que ambos escuchan la puerta del baño abrirse y miran con sonrisas a la puerta como "bienvenida de regreso" a su mejor amigo. Se sorprenden mucho cuando al que ven salir es al hombre de la máscara escarlata. Este apenas sale y se detiene en su sitio para mirar a los dos amigos en un lento parpadeo de ojos. Sus ojos oscuros mandan escalofríos en aquel dúo de amigos.

Su mirada provoca la clausura de bocas en aquellos dos. Mild indiscretamente baja el rostro cubriéndose este con el panfleto de menú para susurrarle a Bright: —¿Nuestro amigo tuvo un trío?

—Pues no lo sé. Puede ser. Aunque ese no es su estilo.— Bright susurra también cubriéndose el rostro con un panfleto. Ambos susurrandose pretendiendo ser discretos. Eso hace sonreír a Mew quién simplemente se retira con un brinco de cejas.

Una mesera va pasando por las mesas y casualmente ve los panfletos de los chicos. —Oh. Estos debían ser retirados. ¿Puedo tomarlos ahora?— Ella los toma con la intención de llevárselos pero los chicos forcejean para que no se les sea quitado.

—No, gracias. Estamos bien.— Forsajea Mild.

—Pero ya deben retirarse si ordenaron.— Sigue la chica. Los chicos miran arriba de los menus para confirmar que el hombre no estaba viéndolos y sencillamente le entregan los panfletos a la camarera con sonrisitas atrevidas de labios.

—Ya puedes llevartelos.— Encantadoramente sugiere Bright guiñando un ojo.

—Sí, ya puedes. Gracias.— Mild también dice.

Ella les echa una mala mirada antes de llevarse los panfletos con ella misma y seguir su camino. Caminando rápidito para expresar su molestia. Los chicos suspiran mirando la puerta del baño. Mild pasándose una mano por su cabello como costumbre. Finalmente ven a su mejor amigo salir del baño e caminar hasta ellos.

—Por Dios, ¿tuviste un trío?— Mild pregunta con una sonrisa.

—No,— Se sienta Gulf frente a ellos. —solo le quise dar una mamada al primero y se molestó conmigo porque quería seguir. Casi me fuerza de no ser porque le pegue un puño.

—Mm. Qué morón.— Bright aprueba que su mejor amigo le haya dado un puño al desconocido del baño por no tener modales.

—Sí, y al parecer un tipo raro con máscara estaba en el baño así que escucho todo.— Cuenta el chisme Gulf.

—Ouh no.— Mild se vive el chisme haciendo un rostro de "oops".

—Entonces me dijo que la próxima vez que tuviera sexo, que lo hiciera con alguien a quién ame y que la persona me ame también.— Gulf se encoge de hombros habiendo contado lo último con una sonrisita.

Mild abre su boca bien grande. —¡No! ¿Y no cogiste su número? Qué caballeroso.— Mild se queja.

—Él sonaba como un buen partido.— Bright concuerda. —Y ardiente.

—Absolutamente. Aunque nos escondimos de él porque nos miro raro. Pero ahora quisiera retroceder en el tiempo y agradecerle por tan caballerosas palabras.

Bright dice.

—... Sí. Aunque ciertamente es raro.— Sigue pensando Gulf con una sonrisa de labios.

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A altas horas de la noche, el desconocido del baño andaba corriendo su auto todo bebido. Malgastando botellas de licor y llenando el asiento pasajero de su auto con estas.

Él corría aquel auto con mucha velocidad. Sin importarle una mierda si mataba a alguien o no. Solamente corría por diversión con las luces altas.

Hasta que frente a él sus luces iluminaron al chico de la mascara escarlata parado frente a su auto. Estaba ahí parado sin miedo a nada. E incluso su mirada alzó para verlo con una macabra sonrisa de labios.

El auto se salió de la carretera por el susto del conductor. Un molestoso chillido de ruedas fue escuchado antes de que el auto terminase parado en un césped oscuro y el conductor estuviera con la cabeza contra la guía del auto.

Mew camina hacia el auto lentamente. Pasando por el césped. Ensuciando las suelas de sus zapatos con muchas hojas pegadizas. Camina hasta la ventana del conductor cuando este apenas esta alzando su rostro de la guía. Tiene una enorme cortada en la cien. Sangrante.

—Excuse me. (Disculpa.)— Habla Mew en Inglés. El conductor voltea a verlo y vuelve a asustarse.

—¡Tú! ¿Qué hacías parado en la carretera? ¡Desgraciado! Pude haberte matado.— Grita el conductor todo alterado abriendo la puerta cayendo de boca al suelo. Asquerosamente bebido.

—Lo dice el borracho.— Mew responde con simpleza antes de ponerse de cuclillas y acariciarle el rostro a aquel hombre que hiperventila en el césped.

—¿Qué haces?— Pregunta el hombre mirándolo todo débil.

—Hmm-hmm. Hm~Hm~ ¡Hm!— Mew va cantando con su gartanta y le arranca un pedacito de carne de la herida. Es un trocito nada más, pero hace gritar al hombre. Este se cubre la herida. Mew sigue tarareando incluso al abrir su boca y divertidamente dejar ese trocito de carne caer ahí. Lo mastica una y otra vez viendolo con una sonrisa al chico.

—¿Qué haces? ¿Por qué te comes eso?— Pregunta el chico.

—Tienes... Un sabor raro.— Habla el de la mascara saboreando aquel trocito mientras sostiene sus cachetes con sus manos marcadas. —Eres,— Mew lo piensa. —muy común.— Dice con diversión.

El hombre solloza y Mew se pone de pie. —Me parece que la cena,— Él se va quitando la máscara. —será para llevar.— Él relame sus propios labios.

—¿De qué hablas? ¿Qué cena?

El borracho va preguntando, y Mew se pone de cuclillas para tomarlo por la nuca de la camisa y llevárselo a arrastras, ignorando las quejas y gritos de este.

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Todos se fueron del bar y partieron caminos, así que Gulf iba caminando hacia su casa. Tambaleándose. La luna siendo su única linterna. Y al pararse frente a las escaleras de la puerta, fruncio el entrecejo.

Encontrándose con una carta de sobre negro. Negro pero potente y oscuro como la noche. El chico se dobla. Mira a los lados torpemente a revisar si la persona aún está por aquí y al mirar a la izquierda, brevemente ve la figura de una mujer vestida elegantemente en negro con un sombrero flamboyan negro, traje largo, tacones y piel pálida. Un aura oscuro tras ella. Ojos blancos aunque sus facciones no se podían ver bien desde la distancia.

Gulf se asusta dejando su trasero caer al suelo, y la mujer se aleja a toda prisa. El chico cae todo perplejo quitándole la mirada.

Cosa que provoca que cuando él vuelva a mirar, ella ya no este. Ahora no sabía si esa figura fue parte de su imaginación debido al alcohol o qué rayos sucedió.

Le resta importancia y toma la carta en sus manos. La abre con sus dedos. Dios, incluso el sello que se utilizo para esta carta era de esos rojos que se usaban fielmente en la antigüedad. Debía ser costoso ahora mismo.

Él saca la pequeña carta del sobre y comienza a leerla.

"Los invito a cenar con mi hijo y yo. No los conocemos pero no hay necesidad de eso. Solo queremos compañía."

Lee la carta. Él se queda confundido, pero más abajo está la dirección a la que se debe ir si quiere. Y el sello está marcado en tinta negra. Viéndose con más claridad su contenido. El contenido es un cuervo dando su mejor perfil.

—¿Qué rayos...?— Pregunta Gulf en bajo antes de mirar a todos lados incierto.  Bajo la dirección estaba la fecha y la fecha decía ser:

Mañana.

En la siguiente mañana, Gulf estaba en su empresa todo serio vestido con una camisa blanca de botones, unos lentes y por el momento solo estaba sentado en su escritorio acomodando unos papeles cuando su teléfono vibra en el bolsillo trasero. Lo saca de ahí y ve como primera notificación un anuncio trending de instagram. Se mete ahí y sale una foto con el sobre negro que recibió ayer en la noche.

Se impresiona y se inclina hacia adelante para entrar al perfil de la persona y ahí está el hombre con máscara escarlata. El hombre esta posando sobre un estante de una biblioteca vistiendo un formal traje con una copa de vino en otra mano mientras enseña el sobre negro en otra mano. El caption dice: "Elegante para la cena de hoy", y muchos comentarios son emojis con rostros de corazones, tontas preguntas como: «¿qué vas a comer?», y uno que otro esta dando halagos.

Gulf ladea su cabeza con el entrecejo fruncido. Viendo fijo al hombre de la máscara. Era un asiático guapo de rostro fornido, delgado, ojos ligeramente pequeños y una nariz algo ancha pero perfilada como la de un americano, labios finos.

—Es guapo.— Bufa el chico con ironía mientras se le queda viendo. Sale de esa foto para bajar por todas las demás fotos como un acosador imperdenido hasta que se detiene al ver una foto perturbadora. Entra a esa foto y es una con un plato elegante teniendo un dedo cortado con mucha sangre por todo el plato. El dedo tenía un anillo como de matrimonio.

Lee el caption y dice: "Feliz Halloween". La foto fue de hace un año así que tiene sentido. Los comentarios de las personas son bromistas:

"Feliz Halloween igual"

"Luce tan real"

"Buen provecho saboreando el dedo de plástico"

"Yummy"

Gulf deja de leerlos, y mira con un suspiro el perfil de ese misterioso hombre de la máscara escarlata. Al menos en algunas fotos no usaba esa máscara.

Sin saber por qué, sintió escalofríos como si alguien lo estuviese mirando. Y unos aleteos atrás de él golpearon en su ventana. Gulf se da la vuelta con espanto en su silla giratoria.

Mira con miedo al cuervo que posa frente a la ventana exactamente dandole su mejor perfil como el sello de la carta. Gulf, con miedo y sus manos llevadas hacia el frente, camina hacia la ventana.

Paso a paso.

Hasta llegar a esta y al abrirla como si fuese una puerta, el cuervo se va volando hacia los aires. Gulf se asoma por la ventana para ver al cuervo irse. La brisa de la ciudad sopla sus flequillos. Él mira hacia abajo, y ve al hombre de máscara escarlata estar ahí parado. Frente a su edificio, con la máscara puesta.

Se pregunta cómo rayos ese hombre lo encontró. Ni se conocían. Solo se vieron en el bar.

El hombre con manos marcadas en venas, seductoramente alza la mirada con sus manos adentradas en sus bolsillos. Una sonrisa perturbadora se cruza en su rostro. Gulf se le queda viendo desde la ventana sin saber qué pensar...

«Ahora de seguro va a bajar y tendremos una charla.» Piensa el chico de la máscara con una sonrisa póker de labios todo confiado.

—¡OYE!— Grita el moreno y Mew agranda sus ojos un poco. No se esperaba esa actitud ruda del contrario. —¡DEJA DE SER UN ACOSADOR! NO TE CONOZCO. ¿QUIERES QUE LLAME A LA POLICÍA?

Grita el moreno, y Mew se ajusta el gabán de su cuello antes de salir corriendo todo avergonzado de haber sido humillado frente a quién sea. Gulf suspira como todo un princesito y cierra las ventanas con un firme suspiro.

Voltea hacia enfrente y ve a una de sus compañeras de trabajo colocar un jarrón de rosas negras en su escritorio.

—¿Qué es esto?— Pregunta seco y confundido el moreno apuntando a las rosas con un dedo.

—Uh... Te las envía un hombre, dice que te espera en una cita.— La chica se sonroja diciendo lo último y se va antes de escuchar al moreno decir lo que tenga que decir.

El moreno vuelve a fruncir el entrecejo para tocar una flor. Todas están pintadas de negro. ¿Qué clase de lunático era aquella persona? ¿Por qué llegar tan lejos como mandarle flores?

*N/A: 🙈💖✨ Espero les haya gustado, esto fue lo que se me ocurrió y vaya que no me quejo😏 Ahora sí creo que para el prox se nos viene la cena🥩🍽🍷*