Querido Diario:

Ahora Nathan y yo somos oficialmente amigos. O eso se supone. No sé de que debo hablar con él. Tampoco sé que cosas hacen los amigos o como se divierten. Y definitivamente no hablaré de estrellas con él. Se aburrirá de mí.

Hoy me ha hablado de su familia. Tiene dos padres felizmente casados, y una hermanita pequeña. Él tiene una familia perfecta. Incluso tiene un perro. ¿Yo que tengo? Un padre borracho, una madre muerta. Y un telescopio.

No le conté acerca de mi familia, y simplemente dejé que hablara. Al menos ha ayudado a que el tiempo pase mas rápido.

Aun así, solo será cuestión de tiempo para que se de cuenta de lo aburrida que soy y se aleje de mí. Como todos.