Querido Diario:

He huído de casa. Después de lo de ayer, salí corriendo de allí intentando velar por mi vida. Mi padre estaba loco de la rabia. Llegó borracho, e iracundo. La puerta de mi habitación no pudo detenerlo. Me gritó que yo y mi estúpido fanatismo por las estrellas nos arruinó la vida. Incluso tiró mi telescopio por la ventana, cayendo desde el segundo piso. Se rompió por completo. Y ese era el único recuerdo que me quedaba de mamá.

Porque cuando mamá fue asesinada... ella ya había comprado el telescopio. Y los policías lo habían rescatado de la escena del crimen. Supieron que era para mí de inmediato. Estaba envuelto, y tenía una tarjeta con mi nombre.

No pasará mucho antes de que se arme un escándalo, así que he decidido esconderme en este parque abandonado a las afueras de la ciudad. No quise ir a la casa de Nathan, sé que me habrían ayudado pero allí es al primer lugar al que mi padre irá a buscarme.

Mi ojo duele. Y mi corazón también. Papá me golpeó. Y me dolió mucho.

Al menos, antes de salir corriendo, pude coger el diario y un lapicero. Escribir en el diario me reconforta un poco.