Win observaba al chico acostado frente a él con su pecho descubierto y su cabello alborotado por las veces en las que se movió en la noche, junto a un hilo de saliva que caía de su boca terminando en su almohada.

Hasta así se veía tan bien.

No dejaba de pensar en el mensaje que le mando su manager, realmente no quería contestar, quería quedarse en ese sueño por un momento más, estar encerrado en ese departamento uno ratito más para después poder enfrentar la realidad que lo golpearía muy duro.

Era su día libre, así que haría todo lo que quisiera con Bright, en lo que salía de su propio mundo.

Vio a Bright removerse ligeramente sobre la cama y luego abrir los ojos que parecían más idos que los de un viejo drogado, pero aún así se veía lindo.

Cuando reaccionó, se levantó rápidamente quedando sentado y limpió su rostro. Win rio ligero.

-Hola. - saludó sonriente.

-H-hola...- responde nervioso-. Dios esto es extraño, no digo que tú seas extraño, por vafor no me malenteindas. Quiero decir que está situación...no, se escucha peor.

Win rio un poco y tomó su cara para dejar un pequeño beso en sus labios.

-Ayer prácticamente controladas cada parte de mi y ahora ni siquiera puedes mirarme a los ojos. ¿Qué pasó con el Bright seguro de sí mismo?

-Sí, es que...había tomado un tequila antes de venir, ya sabes, para agarrar valor.

Volvió a reír.

-Al parecer funcionó.

-Sí, eso parece...

Ambos sentados en la cama, mirándose a los ojos, tocandose de nuevo con el alma, besandose con sus palabras y sintiéndose felices solamente con eso.

-¿Podrías quedarte? - pregunta tomando sus manos.

-No lo sé, de seguro Tu debe de estar preocupada, no por mí, sino porque no sabe prender ni el microondas y quiere que le haga el desayuno.

Justo después de eso le llega una llamada, busca su celular hasta que Win se lo pasa del buró de a lado. Revisa quien le está llamando, era Tu.

-¿Qué quieres?

-Como sé que estás haciendo joterias y no quise interrumpir nada, salí desde temprano a mi trabajo, hoy me quedaré con Film quien fue tan amable de darme asilo por hoy en lo que tú terminas de hacer tus homosexualidades.

-¿Qué?

-Pasatela bien, no rompas nada ni a nadie, y menos que te rompan a ti. Tampoco quemes ningún departamento y por nada del mundo intentes usar una licuadora que no sea la tuya, ya sabemos lo que pasó la última vez. Nos vemos mañana.

Y con eso último colgó dejando a Win expectante y a Bright más perdido que en sus clases de química cuando estaba en la secundaria.

-¿Entonces... Podrías hacer el desayuno para mí? - pide con sus ojos suplicantes y una bonita sonrisa.

-Te puedo hacer un rico yogurt con cereal.

-Bueno, como quiera estoy a dieta. - dice resigando.

"Es su tercera dieta en el mes" piensa automáticamente.

-No. ¿Sabes qué? Justo me acordé de como hacer hot cakes así que párate y vamos a prepararlos.

El castaño asiente contento levantándose rápidamente y siguiendo a Bright a la cocina. Se lavaron las manos y fue sacando todos los ingredientes y utensilios que usarían. Win con un delantal azul claro intentaba cada que podía lanzar harina hacia el rostro de Bright quien intentaba falsamente esquivar los puños de harina.

Ambos reían a carcajadas por todo y por nada, por el simple hecho de estar juntos.

"Lo tengo aquí, conmigo y no voy a dejar que se me vaya, por nada del mundo"

"Nadie podra separarme de él, ya estoy demasiado aferrado como para que lo intenten"

Mientras Bright ponía la mezcla en el sartén y esperaba a que pasara el tiempo para voltaerlo, Win lo abrazaba por detrás colocando su barbilla en el hombro contrario.

-¿Estás listo para ver el mejor hot cake de tu vida? - pregunta.

-Sorprendame, Sr. Vachirawit.

-Bien, aquí vamos.

Prepara la espatula y la pasa un poco por debajo, después con un poco de impulso voltea perfectamente aquella mezcla que ya tomó forma dejando ver a un hot cake demasiado perfecto a decir verdad.

-¡Wow! Pensé que saldría horrible, o quemado, o algo así.

-¡No me subestimes! - se queja.

Minutos después el desayuno estaba listo, Win no dudó ni un segundo en grabar al menos un pequeño recuerdo de ese momento, aunque no sea una foto de ellos, si sería algo con lo que recordar.

-¿Te gustó? - pregunta mientras ve a Win comer.

Un poco de miel se derrama sobre si labio y con la delicadeza de su pulgar lo limpia para después llevarlo a su boca.

-Hace mucho tiempo que no desayunaba así, nunca me había dado el tiempo de prepararlo.

-Bien, entonces cuando quieras, puedes decirme y yo te prepararé el mejor desayuno.

Win asiente volviendo a masticar un poco.

Probablemente sería un buen momento para hablar acerca de lo que harían con su relación - si es que se le podía llamar así - pero no, era un momento lindo, no quería arruinarlo.

Había todo un día para hablar.

una pequeña motivación para ustedes