Capítulo 12

Narra Amy: 

Apenas llego a casa tomo un pequeño descanso antes de prepararme para ver a mi padre en el hospital. Aun no puedo creerme por lo que acabo de pasar, sin mencionar que fue toda una sorpresa que la culpable de todo este alboroto fuera Julie-Su. Parece ser que tras su largo viaje por el extranjero todavía no logra sacarse de la mente a aquel terrible erizo. Aunque no puedo juzgarla en absoluto, después de todo yo misma no he podido olvidar todo ese infierno por el que me hizo pasar. Sin embargo, ella misma nunca quiso aceptar el hecho de que era una pieza más en su tablero de ajedrez que él usaba solo para buscar la forma de alterarme, llamar mi atención o terminar humillándome. Realmente nunca logré entender del todo como funcionaba esa relación ya que ni siquiera llegó a formar parte de la larga lista de chicas con las que él se divertía de manera más creativa. Solo de recordar la forma en que descubrí todas sus mentiras hace que se me revuelva el estómago. No obstante, eso no es lo más importante en este momento. Lo que realmente me intriga es cómo diablos sabía esa desquiciada equidna sobre mi fobia a la sangre, muy pocas personas saben acerca de ese dato y son solo personas cercanas a mí. Además, no comprendo cuál era el punto de tomar "venganza" por ese idiota justo en este preciso momento. Se me hace muy extraño y no logro encontrarle ni pies ni cabeza. Mas no puedo evitar recordar al erizo de vetas rojas que fue en mi rescate y, si bien no dije nada al respecto, la expresión que tenía en su rostro cuando me rescató de esa loca. Tenía una sonrisa llena de locura y felicidad, casi como si estuviera disfrutando de una de sus fantasías más locas; la mirada penetrante que parecía quitarme la ropa e incluso parecía dejar mi alma al descubierto, como si con eso pudiese excavar dentro de mí y conocerlo todo; el sofocante calor que sentí con su fuerte agarre, tan parecida a la sensación de quemarse con hierro caliente. Estaba segura de que relacionarme con este erizo sería peligroso, pero nunca creí que sería como caminar sobre un campo minado. Seguir frecuentando a Shadow seguramente me llevará a muchos problemas y quizá a situaciones realmente arriesgadas, pero hay algo más ahí. Es un sentimiento que ignora por completo mi sentido de supervivencia. Quizá terminé enloqueciendo en todo este tiempo que me he encontrado bastante aislada, pero quiero continuar con todo esto. Me siento como una ilusa polilla que revolotea cerca su muerte por el simple hecho de encontrarse embelesada por la luz. Consciente del peligro, de la posible muerte, pero sin poder resistir esa atracción que solo hace las cosas más excitantes.

Viendo la hora me doy cuenta de que tuve suficiente descanso y reflexión por un día. De modo que me preparo para ver a mi padre. Recibo un mensaje de mi hermano, quien indica que ya se encuentra con nuestros padres en el hospital y que puedo tomarme mi tiempo para ir ya que mi padre se encuentra bastante bien. No tardo mucho para salir de casa y ser llevada por nuestro fiel y robusto conductor hacia el hospital. El camino es tranquilo y el trayecto de igual forma es bastante relajante, lo que me hace pensar mi alocado primer viaje en motocicleta, fue terriblemente aterrador y de todas formas emocionante  y lleno de adrenalina. Todavía puedo sentir como me aferraba a Shadow en ese momento. Creo que podría llegar a disfrutar de ese tipo de rutina, si tan solo las cosas fueran diferentes a lo que son ahora. Estoy segura de que en otras circunstancias Shadow podría ser el tipo de erizo del que podría enamorarme. Al menos lo de hoy se sintió bastante cercano a una situación normal. Despertar a su lado y tratar de hacernos el desayuno, su sorpresa y angustia al descubrir mis carentes habilidades culinarias y molestarme con eso, visitar cafeterías familiares y pasar el rato juntos como si no hubiese nada de qué preocuparse, además de hacerle una que otra broma como la de hoy. Pensando en ello mi mente viaja al momento de esta mañana cuando vi aquella mordida en su labio inferior.  Algo muy parecido a la ira se apoderó de mí, pero no tendría sentido hacer nada al respecto, los celos no eran algo que estuviera en mi naturaleza para empezar, al menos estaba segura de que nunca podría llegar a sentir celos. Lo que aún no explica el motivo por el que esa marca en sus labios me sacó de mis casillas. Sé que le dije que ya no importaba y tampoco es que tenga la intención de relacionarme de manera seria con él, pero eso no explica mi conducta en absoluto.

Aún perdida en mis pensamientos no noté el momento en que había llegado a mi destino. Fue la voz de Big la que me sacó de mi ensimismamiento y me regresó a la realidad. Baje apresurada del vehículo para dirigirme a la habitación donde mi padre se encontraba reposando. Una habitación blanca, como era de esperar, impregnada con el olor a desinfectante y medicamentos. En cuanto llegué mi familia me rodeó de abrazos y afecto todavía conmocionados por lo que había pasado. Por su parte mi padre solo tenía algunos golpes y rasguños, pero de todas formas querían mantenerlo en observación considerando la terrible impresión que se había llevado, en especial después de semejante ataque. Conversamos un poco sobre mi secuestro y la forma en que Shadow fue en mi rescate. Gracias a aquella hazaña mis padres estaban cien por ciento convencidos de que, a pesar de la apariencia intimidante y su personalidad un poco brusca, Shadow era alguien en quien podían confiar y que era merecedor de su estima y cariño. Por supuesto, a los ojos de mi familia este podría ser considerado un acto desinteresado y meramente impulsado por el amor que pensaban sentía por mí. Aunque hubiese sido lindo que las cosas se dieran de esa manera estaba segura de que nada de eso podría rivalizar con la codicia que tenía por las famosas esmeraldas que tenía en mi poder y estaban destinadas a sus manos gracias a nuestro acuerdo de por medio. Sin embargo, el objetivo de que mi familia tuviera una cosa menos de que preocuparse gracias al erizo azabache ya era una victoria dentro de las metas que tenía contempladas.

—¿Qué tipo de cosas le gustan a Shadow? —preguntó de repente mi padre —Si bien sé que no fue a rescatarte con el objeto de una recompensa me gustaría darle algo para demostrar nuestra gratitud de traerte de nuevo a casa sana y salva. Además, está claro, de cuidar de ti mientras nosotros nos encontrábamos ausentes tras todos estos eventos.

La pregunta me tomó por sorpresa ya que no estoy realmente segura de lo que le gusta a Shadow. Pensándolo mejor, no tengo la menor idea de qué podría gustarle. La única información relacionada a eso que tengo es que le gusta el dinero, las mujeres, los cigarrillos y su motocicleta. A parte de eso no tengo ninguna respuesta satisfactoria que darle a mi padre. Por lo que no me queda otra opción que desviar la pregunta y ganar tiempo.

—Le encantan las motocicletas, pero ya tiene una. —digo lo más tranquila posible procurando disimular mis nervios —Pero creo que podría preguntarle cuando lo vuelva a ver y así podríamos preparar una pequeña celebración sorpresa para él con algún obsequio que no vea venir.

—Creo que sería lo más acertado. —me secunda Silver con una sonrisa —Con nuestro último encuentro pude notar que Shadow es un muchacho simple que no codicia más de lo que necesita por lo que sería complicado preparar un obsequio acorde. Sería bueno sorprenderlo con algo que no espere en absoluto.

Mis padres asienten en total acuerdo con nosotros tras escucharnos. La conversación se torna mucho más animada hablando de cómo podríamos planear una fiesta sorpresa para mi querido "novio". La tarde pasa rápido y el horario de visita termina, lo que no nos tiene tan angustiados ya que tras esta noche en observación mi padre será dado de alta y podrá relajarse en casa después de semejante conmoción. De modo que en el camino de regreso nos embarcamos de regreso a casa con mi madre y hermano. A pesar de que me gustaría llamar a Shadow para saber cómo está mi orgullo aún herido se niega a ceder, al menos por esta noche. No pasa mucho tiempo para que mis párpados cedan ante el peso del cansancio y regrese a ese mundo creado por Morfeo, solo espero que se encuentre libre de pesadillas.

Narra Shadow:

El día pasó tranquilo y sin ninguna novedad acerca de la pequeña princesa, cosa que me indica que todavía se encuentra un poco molesta por la mordida que encontró en mi labio inferior. Un asunto que, admito, me tiene bastante intrigado. Todavía me cuesta comprender su caprichos de tener un novio falso como yo, pero tal como ella dijo es una relación falsa, nada de lo que haga fuera de la actuación que mantenga cerca de sus familiares, amigos y conocidos debería ser un problema. No debería haber un motivo para molestarse con mis encuentros con otras hembras además de ella. No es como si me permitiera tocarla de todas formas y ese, al menos para mí, es un gran problema. Nunca he sido del tipo que se mantenga fiel a ninguna mujer, además siempre he sido claro con cada encuentro que tuve, nada de cursilerias sentimentales, solo placer. Por otro lado, aunque quisiera darme la oportunidad de encontrar a alguien más me sería completamente imposible, bien dicen que es cosa que se da solo una vez en la vida y yo ya tuve suficiente de eso. Después de todo las cosas no resultaron nada bien y solo me gané esa sensación de vacío constante y falta de emoción dentro de mí. No obstante, lo de la noche anterior fue algo bastante refrescante y sin precedentes. La emoción que sentí al ver a la pequeña y frágil princesa siendo dominada por el miedo me dio un soplo novedoso que no había sentido en mucho tiempo. Cosa que solo me animaba cada vez más a divertirme con ella en cuanto terminara nuestro acuerdo. Podré ser muchas cosas, pero no alguien que falta a su palabra cuando hay un acuerdo de por medio, un principio que establecí cuando inicié este tipo de vida.

Sentado en el marco de la ventana de mi habitación con un cigarrillo en mano no pude evitar preguntarme cómo habrían resultado las cosas si esta pequeña eriza rosa hubiese ingresado en mi vida antes que la bruja que me hechizó. Seguramente seguiría siendo una especie patética llena de ilusión y compromiso para esforzarme día a día por ella. Me dedicaría en cuerpo y alma haciendo lo posible por hacerla sonreír y permitirle alguno que otro capricho que me fuera posible. Podría abrazarla y negarme a soltarla mientras recorremos la ciudad, compartiendo risas y algunas golosinas. Seguramente robaría besos cada tres pasos y me apoderaría de sus labios en cada rincón que pudiese encontrar. Finalmente, por la noche tenerla junto a mí envuelta en mis brazos, intercambiando besos y palabras de afecto, llegando a compartir una pasión desmedida y reclamarla como mía. Pero seamos realistas, eso es algo que nunca podría ser posible entre nosotros, somos diferentes y rotos. No hace falta ser un genio para notar que ella tiene sus propias heridas sin curar. Ambos somos un desastre, no sabría decir cual se encuentra más dañado, si ella o yo. De lo que estoy seguro es que con ese heridas ninguno de los dos es capaz de avanzar a ningún lado. Muchos dirían que estar así de dañado no es algo productivo y que la mejor forma de repararlo es dar un primer paso. Pero yo no estoy de acuerdo con eso, he llegado a pensar que estar roto y herido no tiene porqué ser algo malo y causa de lástima. Mientras uno consiga un motivo para levantarse durante el día es suficiente. Cada uno vive como mejor le sea posible y nadie más debería tener el derecho de decidir si es algo lamentable o no.

—¿Alguna preocupación que quieras compartir? —pregunta mi querida compañera murciélago mientras me pasa una de esas limonadas rosa que tanto le gustan.

—Excelente elección de bebida. —le señalo de manera irónica ya que eso solo me hace pensar más en la princesa —La siguiente vez aborda el tema de manera más directa, por favor.

—Entonces estabas pensando en esa niña. —dice con un deje de preocupación en su voz —Todavía podemos dejar este estúpido trabajo e irnos con la vida arreglada con esa esmeralda —dice sabiendo que mi respuesta no cambiará en nada a nuestro conversación más temprana —Ambos necesitan a alguien que lo de todo por el otro. En especial tú ¿Aún no logras olvidarla?

—Fue todo lo que siempre quise, di todo mi ser por ella y mira como terminé.

—Aunque no quieras reconocerlo lo tienes todo para salir de esa fosa, pero eso solo podrás conseguirlo si tratas de encontrar algo mejor. Y ya que estás tan encaprichado en continuar con esta misión deberías aprovechar la experiencia completa con esa niña.

La miro bastante confundido ya que no hace mucho me había dicho que debería alejarme de ella porque representaba un gran problema en el que no quería que el equipo se viera involucrado. Ahora dice que debería disfrutar de la experiencia de este trabajo y dejarlo ser. 

—Sé lo que estás pensando idiota. —dice como si ya hubiese leído por completo mi mente —No digo que sigas adelante con esta farsa de relación a ver hasta donde llegan, solo digo que la menos podrían servirse de apoyo uno al otro. Quizá te ganes una buena amiga, además de mí claro está, que se preocupe por ti. De todas formas no pierdes nada, una vez termine el trabajo puedes llevarte amistad, o quizá una aliada bañada en dinero, y riqueza gracias a las esmeraldas. De todas formas si no resulta te sigues llevando las esmeraldas, un ganar o ganar.

Me quedo en silencio y ella no dice nada más. Pero lo considero seriamente, de todas formas podría ser divertido ya que cuando termine con el acuerdo podré hacer lo que quiera y podría tener la confianza suficiente para que la princesa me facilite la entrada libre a su fortaleza llena de tesoros. Seguro se decepcionaría mucho, me pregunto qué tipo de expresión haría, ¿me mostraría una vez más esos ojos llenos de miedo y terror? Pero en esta ocasión solo me estaría viendo a mí. Una sonrisa se forma en mi rostro de solo pensar en esa posibilidad y porqué no. Solo debemos jugar mejor nuestras cartas.

...............................................................................................

Holiwis mis sensuales lectoras y lectores.

Espero que hayan disfrutado del capítulo. De ser así, no olviden picar a la estrella y dejarme sus comentarios ❤️

También les agradezco toda su paciencia y constante apoyo. Que significa muchísimo para mí.

Los amodoro a todos.

Sin más que decir...

... Eve cambio y fuera.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top