TE EXTRAÑO MUCHO, INTERNET💔

No pudo estar callada, guardando esa gran verdad que le acechaba. Como hubiera podido elegir entre ver el recuerdo y no hacerlo. Hubiese preferido mil veces no hacerlo, le había contado el secreto a Hermione, la cual, siempre tenía una respuesta para los problemas de Aylien:

"¿Sabes? No todos somos perfectos, tal vez tu mamá abusó de su belleza. Sólo quería divertirse, debes de tratar de olvidar aquello, a veces es mejor recordar a las personas tal y como las conocimos a hacernos de ideas falsas que los demás nos cuentan, a lo mejor, ese recuerdo era falso, ¡Ni siquiera sabes quién o qué es esa voz!"

Pero ni las palabras de aliento proporcionadas por Hermione lograban hacer que se sintiera mejor, Harry, Ron y Hermione conversaban a lado de ella, no prestaba mucha atención realmente, estaba tan ocupada pensando en la joven Lisbeth como para querer hablar de el porque Ginny y Dean discutieron. Aylien sabía perfectamente porque Harry se interesaba por saber, sin embargo, intento ocultar su molestia. A ella no debía interesarle en lo absoluto lo que Harry quisiera, después de todo, ellos eran sólo amigos.

-¿Por qué tanto interés, Harry?- preguntó Aylien intentando sonar normal.

-¡Solo no quiero que mi equipo se estropee otra vez!- respondió.

Antes de que Aylien pudiera responder algo, Luna llegó corriendo. Llevaba un bolso colgado, buscó entre todo lo que llevaba, sacando así varias cosas extrañas, como una cebolla verde y un hongo con un tamaño que obviamente no era normal. Depositó eso en las manos de Aylien para posteriormente sacar un pedazo de pergamino.

-Fui a la enfermería pero me dijeron que ya habían salido, esto es para ustedes- dijo refiriéndose a Harry y Aylien- Dumbledore me pidió que se los entregara.

-¡Buenos comentarios de que diste en el partido, Luna!- felicitó Ron.

-¿Lo dices en serio? Todos me dicen que fui terrible- respondió con algo de vergüenza.

-Lo dijo en serio, nunca habían disfrutado tanto los comentarios, por cierto ¿qué es esto?- le quitó la cebolla verde a Aylien de las manos y la examinó.

-Un Gurdyroot. Son buenos para detener a los Gulping Plimpies, puedes quedarte con el, tengo varios- quitó las cosas que había puesto sobre las manos de Aylien y las volvió a guardar en su bolsa- Bueno, adiós chicos- se fue dando pequeños saltitos.

Justo cuando volvieron a caminar, a una niña de coletas oscuras se le cayó una balanza, aquella niña observaba un cuadro de trolls con tutú

-No pasa nada- dijo Aylien al ver la cara de preocupación de la niña, se puso de cuclillas para recoger la balanza quebrada y la puso a la merced de Hermione. Ésta inmediatamente pronunció un conjuro y la balanza volvió a la normalidad- Ten.

Pero la niña no agradeció, tomó la balanza y se alejó corriendo.

-Que maleducada- se quejó Aylien.

-Cada vez son más pequeños, esa niña es más baja que Aylien- notó Ron.

-Gracias por ilustrarnos de tu sabiduría utilizando mi estatura como ejemplo- habló Aylien con sarcasmo- Oh, allí viene Lavander, yo me voy.

Hermione la siguió y ambas sonrieron satisfechas cuando Harry se les unió, entraron al Gran Comedor con un hambre voraz, Aylien tomó asiento a lado de Harry y enfrente de ellos, estaba Hermione y muy alejados del trío de amigos, se encontraba Ron con malhumor y Lavander dándole de comer en la boca.

Colin Creevey estaba pasando con su cámara, Lavander seguía alimentando a Ron, así que, Aylien le pidió su cámara a Colin que con inseguridad aceptó, Hermione se partía de la risa, intentaba ser discreta tapándose con su libro. Aylien tomó la foto.

-Gracias, Colin- dijo quedándose con la foto a movimiento que mostraba claramente a Lavander dándole de comer a Ron en la boca. -Esto va para El Profeta.

-¡Ja, ja, ja!- soltó Hermione y Harry al unísono. Aylien admiraba la fotografía por debajo de la mesa, Harry se acercó para verla también.

Se reía en el oído de Aylien, tenía una risa muy linda a decir verdad, volteó a verlo, ¿hace cuánto que no lo veía así de cerca? Con sus gafas redondas haciendo mas grandes sus ojos verde esmeralda, ese cabello tan rebelde que se levantaba justo en la coronilla. Su mejor amigo era muy guapo. Volvió a la realidad cuando sus miradas se encontraron.

-Yo... Ahm, te ví un piojo- mintió.

-¿Un piojo?- preguntó la voz arrastrada de Draco Malfoy- ¡Oigan todos! ¡El Gran Harry Potter tiene piojos!

-No soy tú, Malfoy- contraatacó Harry, un fuerte "Uh" se escuchó por todo el Gran Comedor. Aylien se sintió mal por lo que le había ocasionado a Harry.

-Deberías decirle a tu mamita que te cuide el cabello- se burló- Oh cierto, tú no tienes mamita.

El azabache, se levantó de su asiento, se puso enfrente de Draco quedando a su altura, todos permanecían callados, atentos a la situación.

-¡Basta!- gritó Hermione, cerrando de golpe su libro.

-¿Qué me harás, San Potter? ¿Llamar a Dumbledore?

Aylien se puso entre los dos, se sintió ridícula, Ron se levantó también y se dirigió a donde estaba a punto de estallar la bomba. Comenzaban a sacar sus varitas.

-¿Qué pasa aquí?- interrumpió McGonagall. -A sus asientos, rápido, creí que educamos a personas, no a unos simios.

«Eres un simio» otra vez esa voz, en tono burlón, Aylien sólo la ignoró.

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"Malfoy es verdaderamente insoportable, estuve deseoso de que tu amigo pelirrojo o Harry Potter, le dieran su merecido, lamentablemente llegó McGonagall. Me preocupe demasiado por ti cuando te pusiste en medio de aquellos dos. Si Malfoy te hacía algo me hubiera levantado y le hubiera hecho cosas malas. Te quiere: Ethan Phillipe"

Suspiró, ese día tenía una clase con Dumbledore. Así que se despidió de Hermione con un abrazo, guardó su trozo de pergamino con la letra dispareja de Ethan, su Ethan.

Una vez en la Sala Común, Harry ya estaba esperándola. Sin atreverse a mirarlo como durante la cena, inclinó la cabeza en señal de saludo y se fueron por los pasillos, aún no anochecia.

-¿Te pasa algo?- preguntó Harry, al notar que Aylien no se atrevía a mirarlo.

-Nada.

-¿Pensabas en Ethan?- cuestionó. Aylien, estuvo a punto de musitar un "sí" pero no fue capaz. Sintió que le estaba fallando, probablemente sí decía aquello, Harry se molestara o algo por el estilo, Ethan no era del agrado de Harry. -¿Sabes? A veces (casi siempre) pienso que él es poca cosa para tí, eres demasiado bonita para alguien tan patético como él.

Tal vez tenía razón, tal vez todos la tenían menos ella, pero, ¿qué hacer cuando tú cerebro esta en desacuerdo con tu corazón? ¡Es imposible una decisión acertada! ¿Por qué la vida es tan complicado? ¿Por qué no simplemente aquel día no ignoró el majestuoso sonido producido por la guitarra?

Estuvo a punto de defender a Ethan, pero luego sintió un nudo en su estómago, ¿De verdad lo quería? ¿O era sólo una obsesión? Justó cuando pensaba en explicar todo lo que sentía había llegado al despacho de Dumbledore. Y se olvidó de Ethan por ese rato.

-Ya los esperaba, me alegra saber que siempre llegan puntuales- comentó el anciano director en tono bonachón. -¿Han hecho su tarea?

-Por supuesto- se apresuró a responder, Aylien. Estaba orgullosa de su trabajo de Pociones, porque no necesito ayuda de nadie y ella sola busco la información. Harry se sorprendió mucho.

-Excelente, Aylien, ¿dónde esta?- preguntó Dumbledore, antes de responder se preguntó ¿Por qué a Dumbledore le importaba tanto la tarea que Slughorn les encargó?

-En mi mochila, torre de Gryffindor.

-Aylien, el profesor se refiere al recuerdo de Slughorn- le susurró Harry, sintió un ligero cosquilleo que le llegó hasta la espalda.

-¡Ah!

-¿Dónde está el recuerdo de Slughorn?- preguntó Dumbledore.

-Yo creí que hablaba sobre la tarea de Pociones- admitió con vergüenza. Dumbledore rió, después miró a Harry con la esperanza de que él lo tuviera.

La decepción que se llevó al saber que, Aylien Patterson y Harry Potter no pudieron cumplir con una simple tarea fue horrible, Dumbledore siempre permaneció sin levantar la voz o reclamarles. Sin embargo, Aylien hubiera preferido mil veces que le gritara, pues se sintió mal al saber que, Dumbledore se decepcionó de ambos, de una forma que jamás habia visto en el director. Se removió con culpabilidad sobre su asiento y un extraño sentimiento le invadió, no supo que era, era como una brisa de aire caliente dentro del cuerpo.

-Bien, creo que, está clase se hará muy larga si no vamos al punto, el día de hoy, visitaremos un recuerdo de un elfo doméstico llamado Hockey. Ya que, puede que haya personas las cuales conocieron a Voldemort y entablaron una conversación con él, pero, la mayoría, se niegan a recordarlo. Hockey servía a Hepzibah Smith, la cual, "murió envenenada"...

-Sucedió igual que con su familia, los asesinó sin dejar rastro y con un presunto culpable- dijo Aylien.

Y así, miraron al joven Ryddle, muy apuesto, admirando la copa de Helga Hufflepuff, siendo presumida por la anciana. Aylien quedó observando con detalle el maquillaje de la anciana, si ella no sabía maquillarse, la anciana había rebasado límites. La anciana, gritó a su elfina para que se llevará la copa y en su lugar trajera un guardapelo.

-Oh Tom, este es el guardapelo de Salazar Slytherin- los ojos del joven brillaron. Tomó con sumo cuidado el guardapelo y lo admiró con un brillo en los ojos. Pero ese brillo no era bueno, tramaba algo. Hepzibah se lo quitó y aún así, la cadena resbaló por los dedos de Tom.

-Es hora de irnos, muchachos- anunció Dumbledore.

Y Aylien volvía a estar de pie en el despacho de Dumbledore.

-Dos días después, como sabrán, Hepzibah murió y culparon a Hockey, la cual admitió que confundió el azúcar con otra sustancia mortal, el Ministerio no quiso indagar más, pues Hockey ya era muy anciana. También Tom había renunciado a su trabajo en Borgin y Burkes. Claro, había robado la copa de Helga Hufflepuff y el guardapelo de Salazar Slytherin. Por último, tengo un recuerdo mío, diez años después del pasado, este recuerdo será el último hasta que consigan el de Slughorn- Harry y Aylien intercambiaron miradas de decisión.

En el recuerdo, se veía a un Dumbledore con menos canas y arrugas. Tom, sin embargo, lucía menos atractivo, ya se asemejaba más al Lord Voldemort.

-Tom ¿a qué se debe tu visita?- preguntó Dumbledore, sereno.

-Hace unos años, pedí al profesor Dippet, un puesto como docente, sin embargo, me comentó que era demasiado joven, me dijo que esperará un tiempo, creo que ya es tiempo suficiente y por eso estoy aquí. Para pedir un puesto como profesor.

-¿De qué asignatura, Tom?

-Defensa Contra las Artes Oscuras.

-Es irónico, que pidas este puesto, cuando los rumores dicen que tienes gran conexión con las artes oscuras.

-Veo que usted está al pendiente de los chismes.

-No creo que sean simples chismes, Tom. Si tomarás el puesto ¿qué sería de tus mortífagos? Creo que así se hacen llamar tus seguidores.

-¡ESO ES FALSO!- se defendió el joven Tom. -Veo que hablar con usted es imposible, Dumbledore. ¿Me dará el puesto?

-No, Tom, lo lamento.

El recuerdo se disolvió y Dumbledore aviso que podrían irse, también volvió a recordar que tenían que conseguir el recuerdo de Slughorn.

Salieron de ahí y el sol aún no se ocultaba del todo. Sólo se volvía más cálido y apagado.

-Que bonita vista- dijo Aylien al mirar por una ventana al cielo. Harry se puso a lado de ella.

-Si, es... Relajante- dijo el azabache.

Aylien volteo a verlo, claro, debido a su altura tuvo que mirar hacía arriba, Harry miró hacía abajo.

-Me gustan tus ojos- dijo Aylien, ambos rieron levemente.

-Y a mi los tuyos- volvieron a reír.

Aylien sintió como si tuviera hambre, sin embargo no tenía hambre, no podía dejar de pensar en lo bonitos que eran los ojos de Harry. Sintió que se estaba poniendo roja. Unas pequeñas manos la empujaron hacía Harry y ambos cayeron...

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¡Holaaaaaaaa! Gracias por la espera, en serio, si no hubiera sido por Merodeadora05 no hubiera subido capítulo😂😂😂
Ella me dió la idea 7u7, gracias Lupin, te debo una😉