Narra Aylien:

Dos largos meses desde la broma del silbato, tremenda regañiza que me dió mi papá, en fin. Disfrutando de las vacaciones de verano, estaba yo sabiendo perfectamente que no iría a la secundaria muggle Stonewall, si no que iría al colegio Hogwarts de magia y hechicería. Sólo que... Mi carta aún no llegaba.

Miraba al televisor y a los cinco segundos miraba la ventana esperando que la lechuza llegará con mi carta. Hasta que la vi, como un puntito en el cielo que se hacía cada vez más y más grande.

—¡PAPI!— grité. Acto seguido, bajé corriendo las escaleras sin miedo de caerme. Mi papá estaba sentado leyendo su periódico—  ¡La vi! Una lechuza ¡es mi carta para Hogwarts!— aunque trataba de no gritar la emoción me ganaba estaba tan entusiasmada. No todos los días te llega tu carta y te vas a estudiar al mejor colegio de magia.

—Hija— empezó con tono de lamento. —Lo siento tanto— el miedo comenzó a carcome por dentro ¿Ysi soy una squib y si no iré a Hogwarts? Esto me mata saber que nunca podré estudiar magia.

—¿No iré a Hogwarts cierto?— estaba a punto de soltar el llanto sentí como una lágrima se deslizaba lentamente por mi mejilla rosada.

—No te creas ten— de su periódico sacó mi carta, la tan esperada carta, no me importo el como la había escondido en el periódico. —¡Iré a Hogwarts!— la abrí y la leía detenidamente en voz alta

Colegio Hogwarts de magia y hechizeria
Director: Albus Percival Wulfric Brian Dumbledore
Querida señorita: Aylien Paterson privet drive 7 subiendo las escaleras a mano derecha

Tenemos el placer de informarle que dispone una plaza en el colegio Hogwarts de magia y hechizeria. Por favor observe la lista de libros y el equipo necesario. Las clases comienzan el 1 de septiembre. Esperamos su lechuza antes del 31 de Julio.
Muy cordialmente Minerva McGonagall, subdirectora

Uniforme
Los alumnos de primer año necesitaran:
.Tres túnicas sencillas de trabajo
.Un sombrero negro puntiagudo para uso diario
.Un par de guantes puntiagudos .Una capa de invierno

Libros
Todos los alumnos deben de tener un ejemplar de los siguientes de los siguientes libros
. El libro reglamentario de hechizos Miranda Goshawk
. Una historia de la magia Bathilda Bagshot
. Teoría mágica Adalbert Waffling
. Guía de transformaciones para principiantes
. Mil hierbas y hongos mágicos Phyllida Spore
. Filtros y pociones mágicas Arsenius Jigger
. Animales fantásticos y donde encontrarlos Newt Scamander
. Las fuerzas oscuras una guía para la autoproteccion Quetim Trimble
RESTO DEL EQUIPO
. 1 varita
. 1 caldero
. 1 juego de redomas de vidrio o cristal
. 1 telescopio
. 1 balanza de latón. Los alumnos también pueden traer un gato, una rata o un sapo
SE LE RECUERDA A LOS PADRES QUE A LOS ALUMNOS DE PRIMER AÑO NO PUEDEN TENER UNA ESCOBA PROPIA.

—Wow, haber si entendí ¡¿no puedo jugar Quidditch?!— parecía neurótica al decir eso pero tenía que preguntar.

— No lo sé, yo estuve en el equipo de Quidditch hasta 5 grado— explicó mi papá, hice un berrinche como niña pequeña pero el Quidditch es mi pasión y no puedo andar por la vida sin practicarlo.

—Bueno por lo menos iré a Hogwarts— eso me tranquilizaba un poco pero no tanto ya que amo el Quidditch.

— Date un baño— ¿Acaso mi padre creía que olía mal?

—¿A dónde vamos?— si mi papá me manda a bañar, debe haber una explicación lógica y no solo porque si, además me bañe ayer por la noche.

—Con los Dursley— las tres palabras que mas temo y finjo que no, "Vamos Con Los Dursley" prácticamente son cuatro pero solo dijo Con Los Dursley como sea, los aborrezco.

En el cumpleaños número cinco, Dudley (el cerdo con peluca) me lanzó un buen trozo de pastel y betún, me entró a la nariz impidiendo la respiración tuve que ser llevada de emergencia al hospital. Ahora cada que entro a esa casa tengo la sensación de pastel entrando a mi nariz.

El día que cumplí siete años Petunia y Vernon me regalaron un oso rosa de peluche. Sin relleno.

Dudley se había enojado: porque a mi me habían comprado ese oso y a el no, por lo tanto le quito el relleno, es el niño que Grace, Katherine y yo mas odiamos después del entrometido Josh Smith, me preguntó cuando será el día que deje de meter sus narices en lo que no le importa.

Un día me toco trabajo en equipo con el, tuve que estar todo el día soportándolo y tolerando sus estupideces. Un troll de montaña es mil veces más inteligente que Josh.

Al final hicimos el trabajo mas horrible del mundo tanto muggle como mágico, volviendo al tema. Quede en un trance con la boca entreabierta.

—Cierra la boca se te meterá una mosca— me dijo mi papá, asentí y me fui a bañar.

¿Cómo olvidarlo? Hoy es el cumpleaños número once del muggle que mas odio, traté de tardarme el más tiempo posible pero solo conseguí una miserable hora de retraso ¡Diablos! Son las cinco en este preciso momento empieza mi programa favorito de televisión y adivinen quien se lo perderá. Yo, Aylien Patterson.

Pasó el peine por mi larga cabellera y ahogó un grito, tengo el cabello tan enmarañado que fácilmente puede haber un nido de ardillas viviendo allí y yo sin darme cuenta.

A pasos tan pequeños y tardados baje las escaleras...