Volvimos a retroceder los tres, ya que mi padre aun tenía, según él, que resucitar a más personas. Hizo nuevamente los mismos movimientos, pero esta vez la tierra tembló mucho más, y del suelo aparecieron 10 ataúdes. Yo me quede sin palabras al ver esto, no se que intenciones tendría mi padre.

Me llamo la atención que de los cofres salió una niña de cabello y ojos marrones, y con bandas moradas en sus mejillas, y un chico de iguales rasgos pero sin pintura, y de rostro diferente. Los otros 8 eran adultos, aunque no tarde en percatarme que tres de ellos eran los que figuraban tallados en las rocas de Konoha.

Mi padre se dio la vuelta y empezó a caminar como si nada, mientras las personas revividas tenían reflejadas en sus caras la confusión.

Toshiki: ¿Quiénes son todos ellos?

Sasuke: No me apetece dar explicaciones de la situación a un montón de personas, por lo que lo sabrán cuando lleguemos a casa.

Taigaken: Llamaremos la atención en la villa, además no dejan de hablar.

Mi padre giró la cabeza y los miró a todos con el sharingan activado y algo furioso.

Sasuke: ¡Callaos de una vez!

Se hizo el silencio, todos temieron su mirada, hasta a veces a mi me hacía estremecer cuando la veía.

Sasuke: Ag, gaste un montón de chakra para revivirlos. Toshiki, contacta con Ryu y teletransportarnos.

Toshiki: Utilizare a Kyu-chan. "Kurama, dile a Ryu que se prepare para teletransportarnos"

Kurama: "Me utilizáis como si fuera una paloma mensajera malditos mocosos".

Empecé a dibujar un gran circulo en el que todos cupiésemos, seguido de varios símbolos a los lados. Normalmente se necesitan tres personas para hacer este jutsu, pero eso no era un problema para mi, debido a la gran cantidad de chakra que poseo.

Toshiki: "Kyu-chan, ¿Ryuta esta preparado?"

Kurama: "Sí, ya esta listo"

Toshiki: "Oye, es mejor que mi papi este cerca de allí, ya que mi padre esta de mal humor" Ya esta listo.

Realicé unos cuantos signos y junte mi chakra sin ningún problema, a pesar de que éramos muchas personas. Aparecimos en el amplio jardín de nuestra casa. Mi papi estaba sentado en el poyete de madera.

Sasuke: Dobe me hiciste de gastar mucho chakra recompénsame.

Mi padre cogió con una de sus manos el rostro de mi papi y lo besó. A mi me parecía algo normal ya que solía pasar todos los días, pero al echar un vistazo me di cuenta que para las personas que venían con nosotros no era algo tan común y sus rostros estaban pálidos. Mi padre se sentó tranquilamente al lado de mi papi.

Naruto: (gotita) Lo haces aposta para divertirte teme.

Sara corrió y abrazó a mi papi, ya que ella también estaba algo acostumbrada a esas situaciones.

Naruto: ¡Sara!

Sara: Gracias Naruto-sama, se que fue su idea la de revivirme.

Naruto: Creí que este era un buen momento para hacerlo pequeña.

Ryuta fue corriendo y abrazó por detrás a Sara, mientras lloraba como un bebe. Él también la amaba mucho desde que éramos niños.

Ryuta: (llora) Sara one-chan, no te vuelvas a ir nunca, no lo hagas por favor.

Sara se dio la vuelta y lo abrazó con todo su amor, mientras mi padre acariciaba la cabeza de Ryu.

Sara: (llora) Sigues siendo un bebe llorón.

Ryuta: (llora) No te iras.

Sara: (llora) Te quiero mucho, mi pequeño hermanito Ryu.

Ryuta: (llora) ¡Papa, prométeme que se quedara con nosotros!

Mi padre lo cogió en brazos y dejó que sus lagrimas se derramasen en su hombro mientras le acariciaba el cabello de fuego.

Sasuke: No puedo prometerte que este siempre aquí, pero no la dejaremos ir por un tiempo. No llores mi bebe, papa esta aquí.

Vi a mi hermano Tsuyoshi adormilado venir hacia nosotros, sus alas estaban guardadas, por lo visto se estaba echando la siesta en el salón. Fue hacia mi papi y se puso en su regazo, acurrucándose.

Jiraiya: ¡Naruto, explícame todo esto!

De repente mi pequeño hermanito sacó sus hermosas alas azabaches, alzando el vuelo, miró de forma feroz con sus ojos carmesís a los recién llegados, mientras tenía activado el sharingan. Muchos de estos se sorprendieron y asustaron al verlo.

Sara: ¿Quién es ese?

Taigaken: Es mi hermano pequeño.

Sara: Es verdad, recuerdo que tu papi estaba embarazado.

Tsuyoshi: (gruñido) ¿¡Quiénes son estos!? ¿¡Qué hacen en nuestra casa!?

Mi papi se levantó y abrazó a un hombre de pelo blanco largo, que parecía muy sospechoso.

Naruto: (sonriente) El era mi sensei datebayo.

La niña le pregunto a mi papi porque estaba ella allí, si no los conocía de nada.

Naruto: No debes asustarte, yo soy el actual sexto hokage. Kakashi sensei nos habló mucho de ti, Rin.

Rin: ¿¡Él está bien!?

Naruto: (sonriente) Claro dattebayo, fue mi sensei y el de ese chico de ahí atrás cuando salimos de la academia.

Luego papi se dirigió a una mujer de cabello castaño claro y un hombre muy parecido a ella.

Naruto: Si no me equivoco tu debes de ser Karura y este es tu hermano....Yashamaru.

Karura: Sí.

Naruto: Tuviste un pequeño niño llamado Gaara ¿verdad?

La mujer empezó a llorar y el tal Yashamaru se sorprendió al oír el nombre de Gaara.

Naruto: Tu hijo es de mi edad, y es un buen amigo mío, ahora es el Kazekage, el mejor que la aldea de la arena pudo tener.

Los dos empezáron a llorar, abrazados.

Karura: (llora) Mi pequeño Gaara.

Mi hermano Tsuyoshi cada vez los miraba de forma más suave, al ver que eran conocidos de nuestros padres. Mi papi se volvió hacia el niño de cabello marrón y hacia un hombre de pelo plateado.

Naruto: (sonríe) He aquí mis rivales.

Papi enseñó su colgante azul, por lo que ambos le reclamaron y empezaron a enfadarse.

Naruto: Tranquilos, este colgante me lo dio Tsunade oba-chan, ella fue la quinta Hokage, me hablaron de vosotros, sois su hermano pequeño Nowaki y su novio Dan. Ella aun esta viva, aunque ya tiene unos 70 años. Siempre quiso volver a veros, por eso os he traído.

Sasuke: Me haces gastar tanto chakra solo por tonterías.

Naruto: No son tonterías teme.

Sasuke: ¿Por qué me haces de revivir tanta gente?

Naruto: Porque se alegraran los demás de verlos.

Sasuke: ¿Acaso eres tu el que tiene que preparar comida para 28 personas?

Todos nos sorprendimos al oír el número de personas que estábamos en total.

Naruto: (gotita) P-Pero nuestras madres, Soun y Himeko te ayudan.