Al llegar a la tumba de William, Katica ordenó cavar una nueva tumba junto a esta para sepultar a su abuelo y dar descanso a su cuerpo.

—Gracias por todo, abuelo. Espero que ahora puedas descansar en paz —Dijo Katica, colocando los últimos montones de tierra sobre la tumba ya tapada —Papá, abuelo, necesito que me ayuden en esto. No estoy muy segura de qué es lo que debo hacer, pero al menos tengo un gran ejemplo en ustedes dos...

—Katica...

—Volveré a Eruka con la gente y las protegeré tan bien como ustedes lo hicieron en vida. Les prometo que estaré bien y que... se sentiran orgullosos de mí. —Los miró en silencio un breve instante —Ya tenemos que seguir. Los quiero.

Luego de darle una merecida despedida a su abuelo, Katica y los demás continuaron su camino hacia Eruka.

—Ya no falta mucho —Dijo Terry —A este paso deberíamos estar llegando durante la noche.

—Al fin regresamos a casa.

***

En Eruka, no había persona que no estuviera haciendo nada. Todos y cada uno de los soldados y habitantes que permanecieron en la ciudad, pusieron manos a la obra para levanta su hogar.

—Avanzamos mucho más rápido de lo que creímos —Dijo Tom.

—¿Que pasará ahora? —Preguntó Dan. —Digo, estoy seguro de que Lord Henry puede manejar esto. Pero, ¿por cuánto tiempo? ¿Te has preguntado quién sería el nuevo Lord si el abuelo de Colmillo muere?

—Intento no pensar en ello. No creo necesario sumar un problema que aun no es.

—Supongo.

—Espero que Terry haya llegado a Riverton y convencido a la gente de volver.

—¿Creen que la gente querrá volver habiendo sido atacados una vez?

—Ulmer —Ambos hermanos miraron al hombre.

—Dime una cosa Tom. Si fuera real eso de que el actual Lord estuviera muerto, ¿quién crees que sería el nuevo Lord? Tú pareces un buen candidato al puesto por tu dedicación y compromiso con la gente. Pero también está ese tal Terry, que al igual que tú, tiene potencial para el cargo.

—Pero Terry no es nacido de Eruka —Comentó Dan —Es un traidor de Salamina y siempre será eso. Fue buena suerte que Lord William le perdonara la vida y que Lord Henry se hiciera cargo de él.

—Interesante respuesta, chico.

—Me llamo Dan.

—Sí, como sea. Vamos, ¿quién creen que es mejor para el cargo? ¿Tom o Terry?

Ambos hermanos se miraron por el rabillo del ojo y sonrieron de manera complice.

—¿Piensas lo mismo que yo? —Preguntó Dan.

—Sin duda alguna —Respondió Tom.

—¿Y bien? —Los hermamos miraron a Ulmer con un curiosa sonrisa en sus rostros —Algo me dice que están muy seguros de su respuesta, ¿puedo saber cuál es?

—El único Fenrirsson que sigue con vida, claro está. —Dijo Dan

—¿Quién más apto para el cargo que nuestro bello Colmillo? —Finalizó Tom.

—Parecen tener mucha confianza en esa mujer.

—Katica tiene la capacidad y la inteligencia para hacerlo —Aseguró Tom.

—Es una mujer.

—¿Y eso qué? Katica fue criada por su padre, quién fue el mejor Lord que Eruka pudo tener. Su abuelo es el Lord en este momento y es uno de los mejores soldados que haya tenido el ejército de esta ciudad.

—¿No te preocupa que sea un blanco fácil?

—Katica siempre piensa en todo. Dudo mucho que no tenga una estrategia para ello.

—Interesante. —Dijo Ulmer —Supongo que han despertado mi interés por conocer al dichoso Colmillo de Eruka.

***

Al caer la noche, Katica vió al fin lo que tanto esperaba.

—Eruka —Murmuró sin dejar de mirar la ciudad.

—Bienvenida de vuelta a casa, Katica Fenrirsson —Dijo Terry.

En los ojos de Katica se reflejó la inmensa alegría por ver de nuevo su hogar.

—Volvimos a casa...

—¡Volvieron! —Se escuchó un eco desde la ciudad.

—¡Colmillo! —Katica escuchó la voz de Tom. —¡Katica!

—¡Tom! —Apresuró el paso del caballo —¡Tom! ¡Tomy! —Cuando estuvo mucho más cerca, bajó de la silla y se lanzó en sus brazos. —Qué alegría que estés bien.

—Mi bello Colmillo, al fin estás en casa —Ambos se miraron por breves segundos antes de besarse.

A medida que la gente fue llegando a la ciudad, los soldados fueron en su ayuda para bajar de los caballos y buscarles un lugar en el cual descansar.

Katica observó abrazada a Tom, cómo la gente se abrazaba entre ella y quienes se habían quedado. Ver aquellas sonrisas en medio de lágrimas de felicidad, la hizo sentir un gran alivio en su corazón.

—¿Katica? —Preguntó Tom al sentirla aferrándose a él —Colmillo, ¿estás...? ¡Katica!

Todos voltearon al oír a Tom. Todos sintieron su nerviosismo al ver que la joven caía desmayada en brazos del chico.

—¡Katica! —Terry se acercó de inmediato.

—Está bien, descuida. Solo está agotada —Tom la levantó en sus brazos —¿Y Lord Henry? —Terry guardó silencio.

—Busquemos otro lugar para hablar.

***

Mientras Katica descansaba en su cama, Tom y Terry hablaron en la sala de estar de lo que una vez fue el hogar de Lord William y su hija.

—...Para cuando llegué, Lord Henry acababa de morir.

—¿Ahora qué? —Preguntó Tom —Nuestra ciudad se está levantando de un ataque, nuestro Lord murió y dejó a otro, pero ese otro murió sin dejar a nadie que lo sucediera. Si no hacemos algo, estaremos en problemas.

—Tom. —El mencionado miró a Terry con seriedad debido a su tono de voz —Katica planea tomar el lugar de su padre y abuelo. Tienes que hacer que entre en razón. Si ella lo hace...

—Lo va a hacer, Terry. Cuando a Katica se le mete algo en la cabeza, no hay quién la detenga.

—¿Dejarás que la maten?

—Claro que no. Katica es inteligente, Terry, ¿por qué no estiendes eso?

—¡Porque yo...! —Guardó silencio antes de terminar.

—Sé que también la amas, Terry. No es un secreto para nadie, ni siquiera para Katica.

—Solo trato de protegerla —Dijo Terry.

—Todos queremos protegerla, pero no puedes tenerla encerrada con si fuera un pájaro. Una vez ella confió ciegamente en ti. Tú podrías hacer lo mismo.

***

En la habitación, Katica pareció despertar justo cuando Terry alzó la voz. Lo que Tom dijo fue cierto, eso no era un secreto para nadie.

—Interesante discusión de alfas, ¿no?

—¿Quien eres tú? —Preguntó Katica al oir la voz del hombre desde su balcón.

—Ulmer, mi lady. El señor Rick me envió junto a mis hombres para apoyar a los suyos.

—¿Qué hace aquí?

—Solo vine para ver con mis propios ojos a la señorita que hacen llamar "Colmillo".

—¿Que quiere de mí?

—Nada por el momento, mi Lady. Solo quería conocerla y confirmar algo por mis propios medios.

—Explíquese por favor.

—Usted es una gran candidata a ser "Lord" de su ciudad. No dude en tener mi apoyo cuando eso ocurra. Estoy seguro de que el Lord de Riverton también la apoyará.

—No diga tonterías. No permitiré que Lord Erick pise Eruka.

—No me refería a él. —Katica vió la sonrisa de Ulmer.

—¿Katica? —Preguntó Tom. —¿Estás despierta?

—Nos vemos en otra ocasión, Lady Fenrirsson. —Dicho eso, Ulmer volvió por donde vino antes de que Tom entrara a la habitación.

—¡Katica! —Entró Tom y se apresuró en llegar a ella —¿Cómo te sientes? Estaba muy preocupado —La abrazó —Terry me dijo lo que pasó.

—Mi abuelo murió...

—Shh... Tranquila, todo va a estar bien.

—Hay algo que debo hacer y... no espero que lo entiendas —Se separó lentamente de Tom y lo miró algo insegura —Voy...

—Vas a tomar el lugar de tu padre, lo sé  —Terry se asomó a la puerta —Estoy al tanto de ello.

—Dime qué piensas sobre eso.

—Primero quiero oír tu plan, Colmillo. Dime cuál es tu estrategia.