Arianne Turner
Arianne Turner es lesbiana.
¿Hay algo de malo en eso?
No, claramente dirás que no. Bueno, quiero decir, cualquier persona que pueda decir que vive en el año 2016 puede decir que no tiene nada de malo ser lesbiana, cada persona es libre de hacer lo que desee y amar a quién desee, de eso no hay ninguna duda. Pero ¿Por qué se encuentra su nombre aquí? ¿A quién tuvo que matar?
Antes de adentrarnos, veamos su contexto familiar.
Es bien sabido que en México, la pobreza es un mito, que hay dinero y se produce dinero como para mantener a 20 generaciones futuras, pero ¿Por qué existe tanta pobreza y desigualdad?
Esa es cuestión a la que no debemos meternos, pero como se sabe en Casi el paraíso, los extranjeros podrán tener una vida miserable en su país natal, pero si toman sus maletas y venían a México, era casi seguro de que iban a ser recibidos mejor que la realeza misma. Y no sólo por los poderosos, el mexicano es malinchista por naturaleza, cree que una persona de piel blanca y ojos azules eran mejor que todos, ellos también te tratarían bien. Sin embargo, si un mexicano iba a su país, le dirán volador, asesino y probablemente le den una escoba y un trapeador.
Eso mismo les pasó a los Turner, por problemas con el fisco de su país, Joan Turner tuvo que traer a su familia a otro país. Todos estaban temerosos, puesto que llegar a un país totalmente diferente al tuyo, no debía ser la cosa más agradable que digamos.
Pero eso se olvidó cuando todos fueron tratados como reyes. Joan obtuvo empleo rápidamente y pronto se convirtió en gerente de una importante empresa. Diane Turner (su esposa) también obtuvo un empleo fantástico.
Arianne tenía un hermano, era Clyve, quien tenía un par de años menos que ella, pero aun así, ambos fueron idolatrados y prontamente endiosados por los adolescentes reprimidos y con baja autoestima, obviamente, ambos hermanos gozaron de toda la maravilla que podía ofrecerles ese país del tercer mundo.
Pero Joan lo veía de otra manera, quería que su familia tuviera mejores valores únicos y morales, así que decidió hacer un movimiento estrepitoso que lo perjudicaría más de lo que él se imaginó.
Fue con el padre de la iglesia local y preguntó si no conocía a una chica que pudiera servir como dama de compañía para su hija Arianne, pedía que fuera pobre o de una categoría levemente menor. Además pidió que fuera alguien bella, única y que tuviera una energía sorprendente.
—Quiero que sea muy bella para comprometer la con mi hijo —estableció —, quiero que sea una chica hermosa.
—Bueno señor Turner lo que usted me pide es prácticamente imposible, hay muchas chicas, pero no puedo asegurarle nada, todas son unas locas, groseras y depravadas por la época del descendimiento. Usted entiende, esta generación en general va de mal en peor, las chicas enloquecen, ignoran la petición de nuestro alabado Jesús.
—Eso es bastante cierto, las adolescentes de ahora han perdido el camino.
—Aunque claro que existen excepciones —aseveró —, siempre existe la aguja en el panal.
— ¡Explique ahora! —pidió apenado.
—Se trata de Miranda Tormes —habló —, una bonita niña de baja categoría. Su padre murió hace muchos años, y ahora vive bajo la tiranía débil de su madre Marina, a su lado también está Maribel, su hermana mayor. Pero Miranda es muy diferente a todas las chicas promedio de esta comunidad. Su presentación es muy fuerte y seductora, denota una energía poderosa y en su mirada deducimos rápidamente que, no es una chica cualquiera o naca como las demás. Incluso su sobre nombre es 'Mirabella'
—Interesante —dijo Joan con una mirada pensativa. —, creo que me ha convencido padre.
—Yo sólo le digo la verdad.
— ¿Sería tan amable de preguntarle a la famosa 'Mirabella' si le gustaría ser dama de compañía de mi hija?
—Por supuesto señor Turner.
Y esa misma tarde, el párroco encontró a Mirabella en la iglesia, la señorita estaba sentada frente a la banqueta mientras fumaba un buen cigarro. Pero no se escondió al notar la presencia del padre.
Le propuso que sería buena idea sí que sería buena idea si tomaba un rumbo diferente al cuál su familia había decidido. Mirabella no dudó ningún segundo para aceptar inmediatamente la propuesta del padre, ella necesitaba correr, escapar de la mediocridad que había vivido durante largos años. Estaba pensando e ideando nuevos planes para sobresalir de su miseria, pero cada uno era más disparatado que el otro. Entonces, aceptó.
Al parecer, la viuda de Tormes no le importó que su hija menor fuera a vivir con unos extranjeros millonarios. No cuestionó absolutamente nada y dejo marchar a su hija.
Pero ¿Qué tiene que ver Miranda Tormes con Arianne Turner?
¡Todo!
Mirabella iba con un objetivo en específico. Ella, a diferencia de las telenovelas mexicanas, no iba inocente a vivir una aventura para ver "que le deparaba el destino". Es más, ya tenía minuciosamente detallado lo que iba a hacer. Su propósito único era ligar a Clyve Turner. Esto es todo lo contrario a la típica historia del pobre que se fija en el rico, y no les miento. Toda la familia Turner respetaba a Mirabella, ella en serio demostró ser todo lo contrario a una mujer promedio de México (diferente, no vamos a generalizar) no es que ella fuera alguien "mágico". Pero Miranda Tormes tenía una luz propia que deslumbraba en todos los lugares. Era algo así como una "chica hermosa", en cada aspecto. Una apariencia de diosa del Olimpo, una voz que a cualquiera fascinaba, inteligencia, lógica, carisma. ¡Sencillamente alguien perfecta!
Claramente, Joan y Diane Turner no tardaron en persuadir a su hijo Clyve de iniciar una relación con ella y... ¡No era de extrañarse! Los amigos de la prestigiosa familia estaban contentísimos con la bella pareja que Clyve y Mirabella formaban, todos los veían con buenos ojos, una pareja de portada pero...
Nunca fueron novios.
¿Por qué?
Porque Clyve era gay.
¿Cuál era el secreto entre Clyve y su hermana Arianne?
¡Tenían dos!
Antes de que Mirabella llegara a la vida de los Turner, estaba Iris Parmith
Clyve tenía un amigo llamado Louis Parmith, y la hermana de este, era Iris. Ambos hermanos salían con los hermanos Parmith. Arianne decía que le gustaba Louis y Clyve decía lo mismo de Iris.
Pero la verdad, es que Clyve se besaba con Louis y Arianne con Iris. Y los dos hermanos tenían que esconder su homosexualidad de esa manera, sus padres jamás les perdonarían saber que sus descendientes eran "de esa calaña". Pero no era lo único
Ante la llegada de Mirabella, Joan y Diane prohibieron a los Parmith en cada aspecto, por lo tanto, Clyve ya no se podía ver con su "amorcito" Louis, y Arianne con Iris. Miranda significó una piedra en el zapato que no podían quitarse tan fácilmente. Así que debían hallar la manera en quitársela de encima.
Ese era el segundo secreto. Clyve le pidió un favor a su hermana y amigas que alejaran e hicieran sufrir lo más que pudieran a "Metichella" (sobrenombre, derivación de Metiche y Mirabella). Eso mismo hicieron, Clyve nunca fue sospechoso para Miranda, ni para sus padres. Eran Arianne y compañía quienes se dedicaban principalmente en jugarle bromas de mala gana y sumamente pesadas a la pobre Miranda, pero ella soportaba porque tenía claro el objetivo de ser la nuera de los Turner, no había nada más que pensará en ello.
La rivalidad entre Mirabella y Arianne se hizo cada vez más grande. La primera odiaba a su "futura cuñada" con todas sus ganas, pero debía mantenerse en una posición relativamente amable para que sus "suegros" no la vieran con malos ojos. Pero llegó momentos en donde ambas se enfrentaron. Aquí fue, en donde Arianne descubrió los verdaderos propósitos de la "inocente" Miranda Tormes, cuyos eran salir de la pobreza y miseria que tanto había vivido.
Pero ¿Qué ocasionó esto en la señorita Turner? ¿Odio, indiferencia, enojo?
Y ¿Qué hizo? ¿Cumplió su objetivo? ¿Quitó a Miranda Tormes de su camino?
Pues... del odio al amor hay solo un paso.
Y no, no cumplió su meta, no quitó a nadie. Al contrario, Arianne reflexionó mucho. Miranda era una chica hermosa que no merecía sufrir y ella solo quería ser rica. La pobre chica no tendría JAMÁS una oportunidad con Clyve, pero ¡Tal vez, sí podía tenerla con ella!
Eso sería perfecto, pasaron los días, y Arianne se enamoró profundamente de Miranda, y si juntaba ambas cosas... ¡Probablemente sus padres entenderían de una vez y para todas de que sus hijos eran homosexuales! Aceptarían su decisión y Miranda sería la nueva señora Turner.
¡Era perfecto para los tres! Inicialmente, pensó que Mirabella no tenía ningún interés lésbico con ella, pero ¡Con el tiempo se acostumbraría! ¡Sí! Ella estaría dispuesta a todo con tal de ser rica.
—Por lo tanto—dijo Arianne, después de explicarle el plan a su hermano—. Tú tienes que hacer el factor del cambio, yo enfrentaré a Mirabella y le confesaré mis sentimientos. Para eso, tienes que entrar con mis padres.
—Excelente, buen plan—admitió Clyve.
—P-pero...—tragó en seco— Debes de decirle que eres gay.
— ¿QUÉ? ¿POR QUÉ YO SOLO?—preguntó horrorizado— ¡Se supone que lo diríamos al mismo tiempo!
— ¡Ellos ya se habrán dado cuenta!—añadió Arianne— ¿No entiendes? ¡Así entenderán que no somos idiotas! Que tenemos derecho a vivir nuestro propio camino, ¡Que se jodan los putos adultos!
—Buena idea, Arianne. Y sí, les diré que soy gay.
El plan estaba organizado para el lunes, eso mismo pasó. Arianne confrontó a Mirabella, discutieron de cosas que nadie podrá saber nunca, por ser conversación privada. Hablaron de distintas cosas, pero la señorita Turner no pudo decirle los sentimientos tan pesados y profundos que había sobre ella.
Y sus padres entraron. Esa era la señal, entonces, en un impulso, Arianne soltó un semejante beso apasionado sobre los rojos y carnosos labios de Mirabella. Clyve, Joan y Diane Turner contemplaron semejante espectáculo.
Pero ¿Todo salió como lo habían planeado?
¡No!
Todo salió jodidamente mal.
Clyve no les dijo a sus padres que era gay, ellos solo vieron por sorpresa a su hija besar a una chica que en su tiempo creyeron perfecta. No solo eso, Clyve resultó ser una navaja, puesto lo que realmente le dijo a sus padres fue que Miranda era lesbiana y era novia de Arianne, que ella había corrompido a su hermana "por el camino del mal". Así que no podía estar con ella.
Sus padres se decepcionaron totalmente de ambas. Miranda fue inmediatamente despedida mientras que Arianne, severamente regañada. Y no solo eso: Fue duramente juzgada, ya que tuvo el valor suficiente para admitir a sus padres que en verdad era lesbiana. Mientras que Clyve fue una verdadera gallina al no querer contar nada y mantener firme su "heterosexualidad".
¡El objeto de Clyve estaba cumplido! Se deshizo de Mirabella, de su hermana. ¡De todo! Y sobre todo, volvió a ver a Louis Parmith, ¡Nadie tenía sospechas de él!
Pero... ¿Arianne tenía salvación?
No, ella seguía aferrada, culpaba a su hermano, exclamaba y decía su opinión. ¿Aquello era malo? Sí, y en especial, si eres hija de unos padres ultra religiosos.
Arianne fue castigada sin perdón. Le quitaron sus cosas tecnológicas y estaría en su cuarto las 24 horas del día durante seis semanas (No se preocupen, el cuarto era grande, tenía baño y sirvientes que le daban sus tres comidas al día). Aquello para "que reflexionará", pero no sirvió de nada. Seguía con su posición firme y directa.
Fue llevada al psicólogo. No sirvió, la doctora Vasilescu determinó que ella era una adolescente sana y sin problemas. No fue suficiente, y claramente, no podían meterla a un internado ni a un psiquiátrico.
Entonces, la mejor solución que encontraron, fue recluirla en un convento.
—Solo ahí, te reincorporaras al camino santo de Dios—repitió su padre.
El día antes de su partida, llegaría el momento que tanto espero.
Todos los momentos en que fue castigada, siempre se quejó, reclamaba sin parar, reprochaba y estallaba como volcán. Solo que cuando le informaron la noticia de su futura reclusión, no dijo nada que le molestará. Aceptó sin reclamaciones.
Ya tenía sus maletas listas. Se despidió de su caballo "Appalossa", era un fiel animalito que cuidó desde niña.
Y su hermano Clyve, feliz de la vida, en la tarde, se reuniría con Louis.
—Supongo que estás contento—dijo Arianne al entrar a la sala de su casa.
—Definitivamente. Mirabella y tú eran mi más grande estorbo.
—Hijo de puta, pero cuando se enteren...
—Jamás pasará, soy el "macho men" de la casa. Además, yo soy "novio"—hizo comillas con sus dedos— de Iris. ¡No se imaginan la verdad! Y no te creerán.
—De eso estoy segura...
Arianne caminó lentamente hasta su hermano, el cual, estaba con su tableta electrónica y disfrutaba de un buen momento, no se percató que su hermana estaba frente a él... y mucho menos... que traía algo en su espalda.
—Haz ganado, pero lástima que nunca volverás a verte con Louis.
Diciendo esto, Arianne le arrebató la Tablet, la lanzó lejos, sujetó a su hermano del cuello y empezó a apuñalarlo, una, dos, tres veces. Infinitas ocasiones sobre su delicado pecho varonil, este gritaba como niña atolondrada. Y finalmente, Arianne dejó caer el cuerpo ensangrentado de su hermano, sus ojos seguían parpadeando. Una segunda lluvia de cuchillazos le cayó a Clyve al ver que aún no moría, fue cuestión de minutos para ver sus ojos cerrarse definitivamente.
Arianne escondió el cuchillo, escondió el cuerpo debajo de la cama y limpió muy bien la escena del crimen. Tomó una revista y leyó tranquilamente, mientras esperaba a sus padres.
—Hola—dijo su padre, él estaba muy enojado—. ¿Lista? Vendrá tu madre y nos iremos al convento.
—Sí—respondió desinteresada—. Estoy lista.
—. ¿Y tu hermano?
—Se fue con Iris Parmith, su novia ¿No?
—Deberías aprender a tu hermano, él si obedece las reglas de Dios.
Arianne tenía un trapo con cloroformo detrás de su mano izquierda, se paró a lado de su padre. Y exclamó con todo el aire de sus pulmones:
—SÍ... ¡PERO YO NO!
Diciendo esto, la chica puso el trapo sobre la boca de su padre, no forcejeó demasiado. Él ya estaba inconsciente al poco tiempo.
Lo ató de brazos y piernas, lo dejo arrodillado en frente de cientos de cuadros de Dios, la Virgen, Santos y la Inmaculada Concepción. Él estaba nervioso, no dejaba de temblar ni sudar, rezaba inútilmente en su cabeza.
—Para Dios...—dijo Arianne, salió de su escondite y usaba un conjunto totalmente negro— Es pecado se gay, pero ¿Crees que sea pecado ser gay y a la vez zoofilico?
Era claro qué, su padre no podía responder, sus llantos eran suficiente respuesta.
—No creo, digo, si la madre de Jesús se embarazó de una paloma... ¿Por qué estaría mal ser zoofilico?
Cuando mencionó lo último, abrió la puerta, permitiendo así que "Appalossa" entrará al cuarto. Era irreconocible, inaudito que su caballo blanco entrará a la casa, pero por primera vez, eso pasaba.
Arianne llevó al caballo y lo puso en frente de su padre. Él cerraba los ojos, lo curioso era qué: Joan Turner, quedó atrás del animal, por lo tanto, los pelos de la cola del cuadrúpedo le hacían cosquillas en su nariz. Pero eso quería decir que... ¡Su boca quedaba justo en frente de las pelotas del animal!
—Quiero que las chupes, vas a morir, pero no irás al cielo—dijo su hija con odio ciego.
A la mala, Arianne obligó a su padre a abrir la boca y hacer que los gigantescos testículos del caballo entrarán y salieran. Era asqueroso, el colmo fue qué el animal hizo sus necesidades. Toda su mierda cayó en la cara de Joan.
Este no pudo más y mordió las "bolas" del animal, así que "Appalossa" le dio un golpe con su pata trasera y así lo mandó lejos. El cuerpo de Joan rebotó ante la cruz gigante de Jesús crucificado y cayó al suelo, totalmente muerto y lleno de heces fecales.
Está vez, Arianne no limpió, solo se puso perfume y limpió su nariz del asco que había vivido. Iba por su tercera víctima.
Era domingo, en su casa, estaba construyendo una pequeña casita para Appalossa, por lo tanto, el cemento estaba ahí, recién listo para usar, los albañiles salieron a comer y descansar.
Llegó Diane, la madre de Arianne.
— ¿Qué haces aquí?—preguntó extrañada.
—Se me cayó algo—respondió.
—A ver...
Diane fijo su vista directamente al cemento fresco que se hallaba, intentaba buscar la "cosa" que se le había perdido a su hija, y luego, sintió una fuerza inexplicable. Era ella, caía al cemento y este material, fue cubriendo poco a poco todo su cuerpo, sin dejar ni una sola parte libre. Se secó y el cuerpo de su madre quedó impregnado al pavimento.
—Y así maté a mis padres y a mi hermano—relató Arianne a sus nuevos amigos.
—Tu hermano era un hijo de puta, se lo merecía—respondió Linda.
—Lo sé, mis padres también.
—Carajo—complementó Colton—. ¡Es el siglo 21! Se supone que ya somos las "mentes libres". No cabe duda que la religión te hecha a perder la cabeza.
—Definitivamente. Chicos, gracias por aceptarme. Solo caminé unas cuantas millas después de que "La Bestia" me dejó votada en el desierto, fue el transporte ilegal que pude tomar para regresar a mi verdadera patria: Los Estados Unidos.
—Ya sabes, siempre estaremos aquí—apoyó Lysange.
Y esa misma noche, se unió una nueva miembro al club, todos estaban felices y cómodos, cenaban, hacían chistes y se divertían.
Arianne se sintió libre, tuvo muchas cosas, todo lo que quiso. Pero tuvo que pasar por el desierto y un sinfín de lugares para encontrar a una verdadera... FAMILIA.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top