Solo

Nam no podía parar de mover la pierna nervioso.
Los seis estaban reunidos en el salón de los Park desperdigados por el suelo y los sillones todos con cara de preocupación.

Hobi acababa de llegar casi al mismo tiempo que Suga que andaba de un lado a otro de la sala.
Inquieto. Nervioso. Impaciente.

-Mi hermano no se retrasa nunca...debo hacer algo.- dijo al fin Nam.-No me puedo quedar de brazos cruzados esperando

El mayor, se levantó.
Jungkook y Tae lo miraron con angustia.

-Espera Nam.- dijo Hobi acercándose a él. - ¿Qué pretendes hacer?

Hobi se encontraba en un dilema. Contar que, con toda probabilidad, Jimin se había retrasado porque estaba ocupado follandose a un heredero o seguir siendo leal a su palabra y dejar que sus amigos sufrieran innecesariamente.

-Hay un túnel ¿No, Suga? Entremos por él al otro lado.

-¿Estás loco?

-Entraré yo.- dijo Suga

-¿Qué?.- Hobi se giró hacía el pelinegro escandalizado.- ¿Os estáis oyendo?

-Si te cogen pasarás lo que te resta de vida en las minas del Norte. - informó Seo-Joon

Suga lo sabia de sobra pero no le importaba en absoluto. Las ganas de que Jimin apareciera enfrente de él podía con cualquiera castigo.

-Sentaos ahora mismo.- Ordenó Hobi.- Jimin seguirá en el Club todavía.

-¿Cómo estás tan seguro?

Hobi cerró los ojos un segundo preparándose para soltar la bomba.

-Se está viendo con un heredero.

Suga paró de andar.

-¿Qué?

Nam dejó caer en una de las sillas.

-Tu hermano lleva semanas quedando con un heredero en el Club. Cada vez lo hace con más frecuencia.- contó Hobi.- Le dije que parara muchas veces. Hoy lo he visto entrar de nuevo.

Nam se sostenía la cabeza con las manos.

-Es increíble.- dijo negando.- No sé qué coño tiene que pasar para que aprendan...

Suga se había quedado en el sitio mirando a Hobi sin pestañear y cuando este le devolvió la mirada lo hizo con pena.

-Lo siento, Suga.

Tae carraspeó rompiéndo el ambiente.

-Estará con él entonces. - dijo aliviado. - No veo nada malo en eso. Sólo se estará divirtiéndo.

Suga y Nam lo fulminaron con la mirada.

-¿Qué? ¿Creéis que Jimin es tonto? ¿Que se enamoraría de cualquiera?

-Tae, no tienes ni idea de lo que estás diciendo....- Habló Hobi.- Nosotros no somos para los herederos. Ni ellos para nosotros. Somos dos mundos distintos.

-Además de ser ilegal.- Matizó Seo-Joon

- Nam.- siguió Tae.- Jin y tú también tenéis una relación y...

-Espera...Espera- interrumpió Suga, incrédulo.-¿Estás comparándolos? ¿En serio Taehyung? ¿A Nam Y Jin? .- sonrió irónico.- ¿Puedes por una vez en tu vida bajar de la nube en la que estás instalado? Esto es la puta vida real, Tae.

Suga estaba realmente enfadado. Por la inocencia de Tae y porque sólo imaginarse a Jimin con un heredero le revolvía el estomago.

Tae bajó la mirada avergonzado. Jungkook le acarició la espalda.

-No seas duro con él, Suga. - pidió Nam

- Ese es el problema. Siempre lo hemos sobreprotegido. Ya es hora de que aprenda cuales son las circunstancias que lo rodean.

-¡Suga!

- No, Hobi, él ya debe aprender que ningún heredero es bueno y que, si Jimin no ha parecido no es que se haya quedado a pasar una noche romántica con su nuevo novio... ¡Está prohibido, joder! .- Suga estaba fuera de sí. A Tae se le empezaron a caer las lágrimas.- A Jimin le ha ocurrido algo. No sé aún que coño hacemos aquí y no atravesando el puto muro para encontrarlo... ¡Joder! ¡Joder! .- con cada 'joder' la voz se le quebraba un poco más.- Joder...

Nam lo sujetó con torpeza.

- Suéltame Nam. Lo siento...yo sólo....- miró a Tae.- Lo siento TaeTae

El chico también lo abrazó al mismo tiempo que escucharon aporrear la puerta.

🎈🎈

Tae corrió hacía la puerta abriéndola de golpe.
Jimin cayó sobre él buscando dónde apoyarse. Fue tal la fuerza que cayeron los dos al suelo.
El rubio tiritaba de arriba a abajo.

-Llegué, TaeTae... llegué.- Le dedicó una sonrisa a su hermano pequeño.

Y se desmayó.

-¡¡¡NAMJOON!!!

El mayor corrió y se deslizó por el suelo sujetando a su hermano e incorporándolo en su regazo.

- Jimin, no, no, no,no... Jiminie....abre los ojos, por favor.- le apartó el pelo de la cara viendo la sangre seca ubicada en un lado de la cara.- No...

Tae lloraba a su lado.
Hobi se llevó una mano a la boca y Seo-Joon miraba escena desolado.

A Jungkook sólo le dio tiempo a mirar cómo Suga salía de la casa, rodeando a los tres hermanos, sin decir ni una palabra pero el pequeño había visto como su cara pasó de sorpresa a la ira en un instante.

Nada bueno iba a salir de esto y comenzó a sentir un miedo atroz.
Ellos eran lo único que el menor tenía y presentía que, a partir de ahora, nada iba a ser igual.

🎈🎈

Comenzó caminando a paso lento, con los puños tan apretados que se pusieron blancos.
Andó un poco más deprisa, tropezó un par de veces.
Se chocaba con la gente que pasaba a su alrededor.
Algunos lo insultaban pero él no escuchaba.
Sólo escuchaba el grito de Tae.
La imagen de Jimin cayendo desplomado retumbaba en su cabeza.
La sangre en su cara.
Sus ojos cerrados...

Corrió y corrió, el aire se llevaba sus lágrimas ¿Por qué? ¿Por qué alguien le haría eso a Jimin?
¿Por qué lo dejó solo? ¿Por qué?

Un sentimiento de culpabilidad se adueñó de él.
No sabía en qué parte se encontraba pero había llegado al muro.
Ese trozo gigante de piedra que separaba, que segregaba.

Lo miró con rabia.

Jimin...

Gritó de impotencia.
Un puño chocó contra la dura piedra abriendo su piel. Rompiendo su mano .
Pero Suga no sentía dolor. No más dolor que el que estaba sintiendo ahora mismo en su interior.

Otro puñetazo.

Quería destruir el muro. Lo haría el mismo, con sus puños.

-¡Eh chaval!

Escuchó en lejanía pues el zumbido en su cabeza.

-¡Suga!

Su oído se afinó.

-¡¡Suga!!

Alguien tocó su hombro y Suga lo apartó de un codazo.

Sin mirar atrás comenzó de nuevo a correr queriendo encontrar la entrada al túnel.

No estaba lejos de allí.
Paek le tenía que dejar entrar.
Si.
Él iba a ir al otro lado a encontrar al monstruo que se había atrevido a tocar a la persona que más había querido en su vida.
Se iba a arrepentir.

Faltaban unos metros para llegar al perímetro de Paek. Desde su posición ya podía ver a los guardias corruptos que custodiaban la zona.

Ellos también lo vieron y se pusieron en guardia.

Se llevaron las manos al cinturón donde colgaban las pistolas.

-No te acerques más, muchacho.

Suga hizo caso omiso. Seguía corriendo.
Uno de los guardias ya sostenía la pistola entre sus manos.

Apuntando.

-Te estamos avisando...-gritó el otro.

El guardia quitó el seguro a la pistola dispuesto a disparar.

De pronto, algo golpeó a Suga por detrás haciendo que cayera estrepitosamente al suelo.

Alguien lo agarraba.

-¡¡¡SUELTAME!!!

Se dió la vuelta como pudo.

Jungkook lo miraba lloroso con el miedo instalado en su cara.

-¡No!.- gritó el pelinegro menor.- ¡¡No!!

Suga se deshizo del agarre como pudo y con toda la fuerza que tenía lo tiro a un lado.
Se arrastró un poco y se levantó pero Jungkook fue más rápido poniéndose delante de él, abriendo los brazos en cruz para que no pasara.

-¡Sal de mi camino, Jungkook!

-¡No!

Suga lo empujó pero el pequeño se mantuvo férreo volviendo a su sitio.

-No lo hagas, Suga. Por favor.

-Apartate si no quieres que te haga daño.- advirtió Suga fuera de sí.

Suga lo empujó con violencia.
El pelinegro mayor gritó.

-¡¡AAHHHHHHGGG!! DEJAME EN PAZ

-¡No!

Suga intento volver a pasar pero Jungkook volvió a impedírselo enganchandose a él.
Llorando.
Un nuevo empujón casi lo tira.

Entonces Jungkook, desesperado, le lanzó un puñetazo.

El golpe dió de lleno en la cara de Suga, cayendo de lado.

Miró a Jungkook desde abajo que lloraba con amargura pero seguía decidido a no dejarle pasar.

Se puso de nuevo enfrente de él.

Suga se limpio la sangre con el brazo. Estaba odiando con fuerza a su amigo.

-No lo hagas, Suga.- dijo Jungkook.- No pases el muro ¡Por favor!

-¡¡Voy a matar a ese hijo de puta!!

Suga se levantó de nuevo.

-¡¡No!!.- gritó furioso Jungkook. - ¡Jimin te necesita!

El mayor apretó sus doloridos puños.

-Te necesita, Suga...- dijo lloroso.- ¡Todos te necesitamos! ¿Qué va a ser de nosotros si mueres? ¿Eh? ¿Crees que podríamos seguir sin ti? ¿POR QUÉ? ¿POR QUÉ ESTÁS SIENDO TAN EGOISTA?

Entonces por primera vez lo sintió. Sintió el dolor de Jungkook. Y lo vió en él.
Vió a ese chico llorar por primera vez.
Y supo qué le pasaba porque a él le ocurrió lo mismo.
Se miraron atravesandose el alma.

Jungkook y él habían sido abandonados a su suerte.
Solos en este mundo tan cruel.
Eran tan parecidos...
Los dos rechazados por su familia, por la sociedad.
Los dos acogidos por los Park.
Encontrando en amor en ellos.

Tan iguales...

Vio en él al hermano que nunca tuvo.

La rabia comenzó a disiparse.
Un oleada de cariño comenzó a calentar su alma.

Jungkook se había puesto el antebrazo delante de sus ojos porque no podía llorar más.

-No te voy a dejar pasar, Suga.

Sólo pensar en perder a Suga le destrozaba por dentro.
Le daba igual que su amigo lo molinera a golpes.
Él no dejaría que pasara ese túnel.
Debería matarlo en el intento.

Dió un pequeño respingo cuando sintió los brazos de Suga rondeandole y apretando con fuerza.

-Jungkook...

El pequeño se aferró a él con ansiedad.

-Lo siento...Lo siento.

Jungkook se separó y lo miró.
Las lágrimas seguían cayéndole pero sonrió levemente.

-Vámonos...Jimin te espera.

Suga asintió.
Se apoyo en Jungkook para seguir caminando hasta la casa de los Park dónde Jimin seguía desmayado.

🎈🎈

Cuando Jimin abrió los ojos le costó recordar lo que había pasado.
Por un momento se ilusionó pensando qué había sido todo una pesadilla...pero no.

El dolor de cuerpo que sentía era real. Los recuerdos eran reales.

Estaba en su habitación. Todo estaba igual que lo dejó la noche que marchó a trabajar por última vez.
Todo menos él.

Él estaba hecho añicos.

Le habían cambiado de ropa. Ahora llevaba puesto su pijama.
También tenía el abdomen vendado y una tirita en la ceja.

Unos suaves golpes en la puerta le hicieron ponerse en alerta. La madera se abrió lentamente.

Jin asomó la cabeza y cuando vió a Jimin despierto,sonrio.

-¿Puedo pasar?

-Si

Jin se acercó aumentando su sonrisa a cada paso.

-¿Cómo te encuentras?

-Me duele todo el cuerpo.- dijo.-¿Y mis hermanos? .-

-Están fuera.-indicó- He decidido entrar yo primero para poder hablar contigo con tranquilidad

-No hay mucho que contar, Jin.

-¿Cuántos eran?

Jimin suspiró. Sabía que le esperaba el interrogatorio de Jin

-Tres

-¿Los conocías?

-Venían al Club a veces pero por lo visto ellos sí nos conocían a nosotros.

-¿nos?

Jin había cogió una silla y se la había acercado a la cama. Al lado de Jimin.

-Jackson Wang

Jin abrió los ojos.

-Se quiso vengar de lo que Jungkook le hizo a su hermano

-Hijo de puta. -masculló Jin

Jimin intentó cambiar de postura y sin quererlo profirió un quejido. Estaba agobiado de estar tumbado.

Jin se levantó intentado ayudarle.

-No.- dijo el rubio cuando Jin quiso agarrarlo.- Yo puedo...

-Jimin, déjate ayudar. Te dieron una buena paliza

-Sólo son golpes, ya está

Jin se quedó mirando al rubio, que se intentaba reincorporar con lentitud. Su cara reflejaba el dolor que estaba sintiendo.
Las piernas le dolían terriblemente.

-¿Qué pasa? No me mires así.- se quejó Jimin.- No soy un tullido

Jimin odiaba la condescendencia.

-Lo vi. Vi lo que te hicieron.

-¿El qué viste?

-Mientras estabas desmayado te estuve revisando las heridas.- confesó Jin.- Te forzaron a hacer algo ¿verdad?

Jin no sabía cómo decirlo sin herir al rubio.

Jimin cayó de nuevo en la cama. De repente el techo era su mejor vista. No contestó. Las lágrimas amenazaban con salir.
Sintió vergüenza.
Vergüenza y asco de sí mismo.

Allí en el camerino se juró no contarlo a nadie pero no había contado con esto.
Con Jin.

Cuando el joven doctor con ayuda de Nam había quitado la ropa a Jimin para ponerle el pijama vió con horror una gota de sangre recorriendo el muslo interior del rubio que se apresuró a limpiar antes de que Nam se diera cuenta también.

No dijo nada, por supuesto, antes lo tenía que hablar con Jimin.

-Tienes que ir al hospital.

-¡No!

-Jimin...Puedes tener un desgarro.

El rubio giró la cara al lado contrario de Jin

-No voy a ir a ningún lado. Estoy bien.

Pero no estaba bien. Los recuerdos golpeaban su mente tan fuerte como las embestidas que le propinó Jackson.
Las lágrimas cayeron de nuevo.
No podía mirar a los ojos de Jin. Sentía asco de sí mismo. Se sentía el mayor despojo de la Tierra.

Y ahora Jin también lo sabía.

-No es tu culpa Jimin.

-¿Ah no? ¿Y de quién es?.- pregunto con amargura. -Yo decidí ir a trabajar al otro lado.

-Sigue sin ser tu culpa. Tú no eres culpable.- dijo angustiado.- Eres la víctima, Jimin

El rubio volvió a girar su cabeza. Mirar a Jin se había convertido en un suplicio cuando se sentía abierto en canal por la humillación.

-Me doy asco. Quiero arrancarme la piel.

Jin se acercó a él y estiró el brazo para poder consolarlo acariciando su pelo.

-Tienes que ser fuerte, Jiminshi.- le dijo el doctor. - Yo te ayudaré en todo lo que esté en mi mano pero tú te tienes que dejar ayudar.

Jimin agarró la muñeca de Jin con fuerza y con miedo en los ojos le dijo

-Jurame que no se lo dirás a nadie sobre todo que no se entere Suga,por favor

Los ojos de Jin bailaron sobre los de Jimin durante unos segundos.

-Te lo prometo. - Suspiró

El rubio lo soltó y volvió a mirar hacia el otro lado.

-Déjame solo, por favor...

Jin se separó

-...No quiero hablar con nadie.

Aunque no lo pudo ver el doctor asintió y salió de la habitación cerrando la puerta con delicadeza.

Entonces Jimin se quedó solo de nuevo.
Estar de nuevo en frente de sus pensamientos le hizo sollozar.
Se tapó la cara con uno de los cojines y gritó.
De rabia e impotencia.

De miedo.

Nunca volvería a ser ese Jimin que salió de casa la noche anterior.

🎈🎈

Nota de la autora:

De nuevo escribo este capítulo con un nudo en la garganta.

La víctima NUNCA es la culpable

💔

Lau🐘

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