Revelaciones

Tae entró en casa sin saludar, pasando por alto a Jimin y Nam que se encontraban charlando mientras comían.
Sus hermanos miraron con la boca abierta cómo subía las escaleras de dos en dos.
Ya en su habitación tiró la mochila al suelo, se sacó la sudadera y se echó a la cama.
Había estado llorando todo el camino de vuelta a casa. Se había parado varias veces porque Hyung Sik le había ordenado calmarse.

Darse cuenta de lo cruel que estaba siendo Jungkook con él fue doloroso de aceptar.

Lo había perdido para siempre.

Minutos después tocaron a la puerta. Tae no contestó. Echó su brazo encima de sus ojos.

-Tae, ¿Puedo pasar? .- la dulce voz de Jimin se abrió paso.

Tae siguió sin contestar así que el rubio pasó y se sentó en el borde de la cama mientras intentaba quitarle el brazo de la cara.

-¿Qué ha pasado TaeTae?

-Nada.

No sabía cómo empezar a contárselo y también le daba un poco de vergüenza, la verdad.

-Venga, cuéntamelo.

Tae chasqueó la lengua y se giró para el lado contrario a su hermano.
Este lo movió enérgicamente.

-Me estás preocupando Tae, mírame.- le dijo su hermano.

Tae bufó y se dió la vuelta. Se quitó el brazo de los ojos.
En ese momento entro Namjoon a la habitación.

-¿Qué pasa,Tae? Cuéntanoslo.

A Tae no le quedaban lágrimas y además estaba enfadado con lo cual no le costó articular palabra.

-Es por Jungkook. No quiere hablar conmigo.

Aunque Nam sabía que esto iba a suceder se le cayó el mundo encima al ver a su hermano en ese estado.

-Qué raro.- dijo Jimin.- ¿discutisteis?

-Algo así...

Nam seguía de pie con cara de circustancia.
Jimin acariciaba el pelo de Tae en un intento de consolarlo.

-Seguro que se le pasa el enfado pronto,ya verás.- dijo el rubio en tono conciliador.- Jungkook está sometido a mucho estrés por la situación con su padre.

Tae siempre había intentado ser considerado con su amigo por eso mismo pero esta vez había algo que no le cuadraba. Jungkook nunca se había portado así con él. Ni siquiera en sus peores momentos.

-Creo que se ha puesto celoso.- dijo al fin

Nam levantó una ceja.

-¿Por qué? ¿Tienes un amigo nuevo?

-Si...bueno no...bueno,no sé.

Jimin frunció el ceño.

-Tae, ¿hay algo que no nos estés contando?

Tae miró a Nam que a su vez lo miraba confuso.
Respiró hondo y se armó de valor.

-Estoy enamorado de Jungkook.

Jimin abrió la boca mientras sus ojos sonreían.
Nam no cambió el rostro, impasible como siempre.

-Dios mío, algo me podía imaginar pero...-dijo Jimin.- ¿Y él? ¿Es por eso que se ha distanciado?.- el rubio puso cara de aflicción.- Oh, Tae...¿ Jungkook te ha dicho que no siente lo mismo?

-No, yo creía que si. Que sentía lo mismo por mí.- Volvió a ponerse el brazo sobre la cara.- pero estos días me he dado cuenta que no.

-Vaya.- Jimin le volvió a quitar el brazo de la cara.- Lo siento mucho Tae. Dale tiempo...-se quedó un momento mirándolo con ternura.-¿Quieres que hable con él?

-¡No!

Jimin y Tae miraron a su hermano confundidos ante ese grito.

-Nadie va a hablar con Jungkook.- Sentenció. - Dejadlo en paz.

Jimin se levantó.

-¿Qué quieres decir con qué lo dejemos en paz, Nam?

Nam chasqueó la lengua.

-Son cosas de ellos, Jimin.

El rubio no daba crédito a las palabras de su hermano.
Entonces a Jimin se le encendió una bombilla...
De repente pensó en que Jungkook podría estar en peligro.

-¿Y si le está pasando algo a Jungkook que no sepamos? ¿Y si su padre le ha amenazado con algo? ¿Y si al fin ha cumplido su amenza de aislarlo del mundo?.- Jimin estaba enfadado ante la pasividad de su hermano mayor.- Si lo que dice Tae es cierto, Jungkook se está comportándo de una forma que no es normal en él.

De pronto Tae se sintió mal.No se le había ocurrido pensar en eso. En el padre de Jungkook intentando hacerle la vida imposible a su hijo.
Igual se había enterado de que tenía unos amigos que lo cuidaban y que por ellos él era feliz.
Decenas de teorías le pasaron por la cabeza.
Su padre, por algún motivo, lo odiaba y no le gustaba verlo feliz.

-Lo vi herido.- dijo pensativo.- lo vi con la cara magullada.

Jimin se giró hacía él.

-¿Y por qué no nos dijiste nada?

Ahora Tae quería llorar ante la mirada acusadora de su hermano.

-No sé...pasaron muchas cosas después...- se excusó.

Las conclusiones que estaba sacando Jimin estaban acorralando a Nam y este se estaba agobiando.
En un momento fugaz pensó en contar lo que sabía pero no confiaba en la impulsividad de Tae. Y más si,como había confesado, estaba enamorado de él.

-Yo hablaré con él. -dijo el mayor de pronto.- ¿Vale?

La discusión que tenían en ese momento Jimin y Tae se paró.

-Si, por favor. - suplicó Tae.- Siempre ha confiado más en ti que en nadie.

Si tú supieras TaeTae, pensó Nam

Jimin no dijo nada. Se limitó a escuchar a su hermano menor darle las gracias a Nam y ver como salía de la cama para abrazarlo.

Nam sonrió, hacia mucho tiempo que el pequeño no tenía un gesto cariñoso con él.

Asi que, dejando a Tae un poco más calmado, los hermanos salieron de la habitación.

🎈🎈

Jin se encontró con Silvia a la hora que ella le dijo en una cafetería concurrida.
Por supuesto el doctor entendió la indirecta.
La chica estaba leyendo un periódico con unas gafas de ver puestas.
Sin maquillaje.
Aún así Jin no tardó en reconocerla y se acercó con una gran sonrisa.

-Hola Silvia. - dijo levantando su gran mano.- Soy Kim SeokJin

Silvia lo miró por encima de las gafas.

-Hola SeokJin, toma asiento, por favor

Pues si. Al parecer Silvia era dura de roer.

-Cuéntame.

Y encendió una grabadora. Al ver la cara que puso Jin explicó

-Es para no perderme ningún detalle.

Jin asintió y le contó.
Le contó sobre Jeon Ji-Hu, el padre de Jungkook, sus malos tratos y la dudosa muerte de la madre de Jungkook.
Le contó sobre la agresión que sufrieron JK y Tae y todo lo que pasó después.
Cómo el Senador Wang mintió y cómo, para tapar aquello buscaban a los culpable como chivo expiatorio.

-Quieren demonizar a los desheredados para ganar las elecciones.

Jin asintió.

-Es la misma conclusión que he sacado yo. Necesitan hacer creer a los ciudadanos que con Wang gobernando estarán seguros de los 'malvados' desheredados.

Silvia empezó a atar cabos.

-Por eso ahora están bombardeando con noticias negativas sobre los desheredados. Tanto en prensa como en televisión.-caviló.- Están creando una falsa inseguridad.

El camarero vino interrumpiendo la conversión para dejar el té de gengibre frente a Jin.

-¿Aún no han averiguado que fueron esos chicos los que estuvieron allí, no?

Jin negó y le contó sobre el padre de Jungkook y el guardia.
Y como este último le seguía a todas partes.

Silvia removió un poco de su té con leche.

-Entiendo.

Jin se cruzó de piernas y sostuvo la taza entre sus manos.

-Mi prioridad ahora es salvar a Jeon Jungkook de las garras de su padre. Y para ello te necesito a ti.

-¿Y como podría ayudarte?

Jin se acercó un poco más a la mesa.

-Necesito que, si le pasara algo, tu periódico lo sacara en portada.

-¿Mi- mi periódico?

Jin sonrió al ver la cara de estupefacción de la chica. Era la primera vez en toda la reunión que la vio insegura.

-Ajá. Necesitamos que todo el mundo se entere de quién es Jeon Ji-Hu para pararle los pies.

-Pe-Pero si casi no lo lee nadie. No sé ni cómo lo tengo en pie aún.

-Ningun periódico de este lado va a querer sacar en portada a Jeon 'el sanguinario' casi un ídolo para el pueblo como un maltratador .- dijo Jin.- así que te concedo ese honor a ti y a tu periódico.

-¿Y cómo lo haremos? La palabra del chico no va a servir de mucho.

A Jin se le oscureció el rostro.

-La verdad, esperemos que no pase pero le dije que la próxima vez que le tocara fuese a un hospital.

-¿Y?

-Soy médico ¿recuerdas?

-¿Sacarás los informes? ¿Es eso legal?

-Digamos....que es menos ilegal que el maltrato continuado a un menor. - contestó Jin.- Además, un periodista, como un mago, nunca revela sus trucos ¿verdad?

Jin le guiñó el ojo y Silvia sonrió por primera vez enseñando sus dientes.

-Imaginate la presión social: el hijo de un héroe de guerra denunciando malos tratos.-dijo Jin.- Repartiremos periódicos en el otro lado también. Haremos que todo el mundo se entere.

A Silvia se le abrieron mucho los ojos.

-Esperemos que de resultado, SeokJin, sino... la hemos jodido.

Jin suspiró.

-Yo también lo espero, Silvia.

🎈🎈

Cuando estuvieron en la cocina Jimin cogió del brazo de su hermano para que no escapara.

-Ahora me puedes contar la verdad.- dijo serio.

Nam habia infravalorado la suspicacia de su hermano menor.

Suspiró vencido.

-Siéntate. - Le dijo

Y le contó todo tal y como se lo había contado Jungkook.
Jimin puso su mano sobre la boca aterrorizado ante la situación del menor y aterrorizado por escuchar que era a la figura de Suga a la que buscaban.

¿Cuánto hace que no veía a su ex novio?

La paranoia empezó a adueñarse de él.
Los ojos de Jimin se aguaron, Nam le pasó una servilletas.

-Pobre Jungkook. -dijo desolado.- No quiero ni pensar por lo que habrá pasado y estará pasando...

Nam consoló a su hermano.

-Lo solucionaremos,Jimin. Lo prometo.

🎈🎈

Nota de la autora:

Comienza lo fuerte.

Lau🐘

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