Capítulo 6
Jimin suspiró al darse cuenta que ya era hora de su siguiente clase y él no había hecho nada más que pensar en su penoso problema. Por que sí, era completamente vergonzoso para él, no se imaginaba andando libremente por ahí tosiendo flores.
Se levantó asegurándose de votar en el sanitario todos los pétalos acumulados en su mascarilla y se dirigió a clase. Obviamente no puso atención en ningún momento y aunque sabía que no podía continuar así, ya que era un estudiante becado, no podía evitar distraerse pensando en los chicos.
¿Cuál? ¿Cuál me gusta más?
Se preguntaba internamente, pensandolo seriamente.
Sacó su lápiz y decidió que lo mejor sería hacer una clasificación de los chicos, ordenándolos del uno al seis, siendo el uno el que más atractivo le parecía y el seis el que menos atractivo le parecía. Desistió cuando la clase terminó y él aún no había escrito siquiera un nombre. Volvió a suspirar sintiéndose demasiado extraño, pero mejor salió caminando a la cafetería, pronto se debería encontrar con los hermosos hermanos Jung.
Cuando llegó a la cafetería miró a todos lados pero los hermanos aún no habían llegado por lo que al captar a un conocido solitario caminó rápidamente hacia él, sentándose sin siquiera pensarlo frente a él.
─ Vaya, de verdad volviste. ─ Le dijo el chico sin bajar su libro, el cuál parecía ser el mismo del día anterior.
─ Claro, te dije que volvería. ─ Dijo Jimin mordiéndose el labio aunque el moreno no le miraba. ─ ¿Cómo vas con tu libro?
Namjoon bajó el libro mirando al rubio de forma sospechosa ante la pregunta y es que nadie preguntaba por sus libros nunca.
─ Pues me va bien, ¿Cómo me puedo ir mal con un libro? ─ Preguntó provocando un leve sonrojo en Jimin.
─ Em... pues, ya sabes, si no entiendes mucho lo que lees entonces te está yendo mal con el libro. ─ Explicó algo nervioso.
Namjoon se sorprendió ante lo lógica que sonaba aquella respuesta y luego sonrió ante la creatividad del chico. Jimin pensó que todo estaba saliendo bien con el moreno hasta el momento.
─ ¿Por qué llevas mascarilla? ─ Preguntó Namjoon, sintiéndose curioso ahora que la conversación parecía estar avanzando.
Cerró su libro colocándolo de lado y quitó sus lentes colocándolos sobre éste. Jimin observó los movimientos algo metódicos del chico y se preguntaba por qué parecía estar siendo especialmente cuidadoso.
Namjoon extendió su mano para tomar su refresco pero terminó tirandolo al piso. Se golpeó la frente con una mano, algo frustrado, y Jimin no pudo contener la risa.
─ Oye tranquilo, solamente se te cayó el refresco. Lo limpiarán y listo. ─ Dijo Jimin, pero el moreno estaba lejos de calmarse.
─ Esto es algo de todos los días, por eso me enojo. ─ Explicó respirando profundo mientras intentaba controlar las ganas de salir corriendo por haber hecho el ridículo frente al chico lindo. ─ No respondiste.
Jimin recordó la pregunta.
─ Oh, creo que me está dando una gripe y no quiero andar contagiando a nadie en el primer día. ─ Namjoon lo miró analizando, definitivamente el rubio se miraba algo pálido, incluso si la piel del chico ya era bastante pálida tenía un color verde poco común.
─ Deberías descansar. ─ Le dijo.
Jimin pensó que las cosas estaban yendo demasiado lento con el moreno, él no se iba a pasar meses conquistando a cada chico.
Así que estiró sus brazos y tomó la mano del chico, el cuál se sonrojo y desvió la mirada.
─ Gracias por preocuparte por mí, Hyung. ─ Le dijo.
─ Yo... sólo te decía lo obvio. ─ Namjoon se soltó pero el que su corazón se acelerara no era algo que pasara desapercibido.
Suspiró, apenas conocía el chico y éste ya estaba moviendole un poco el piso.
─ Aja, si, lo obvio. ─ Dijo Jimin regresando a su asiento mientras intentaba pensar en alguna otra jugada.
─ ¿Qué tal fue ayer en la reunión de los de primer año? ─ Preguntó Namjoon cambiando el tema nuevamente.
─ Oh, ha estado bien. ─ Dijo Jimin. ─ Conocí a algunos chicos. ─ Casualmente logró ver a los hermanos entrando a la cafetería.
Suspiró, no había avanzado tanto con el moreno como le hubiera gustado.
─ Hablando de ellos, quedé de cenar con ellos y al parecer han llegado. ─ Señaló a los chicos y Namjoon se volteó pero al ver a Jungkook se volteó de nuevo a ver hacia adelante sonrojado y es que el pequeño le parecía muy agradable.
─ Los conozco. ─ Dijo Namjoon. ─ Son buenos chicos, diviertete.
Jimin asintió mirando pensativo al moreno que había cambiado de actitud. Notó que volvía a colocarse los lentes y a levantar su libro para leer, pero su mano temblaba levemente.
¿Qué acababa de pasar?
Los hermano Jung lo vieron de pie, cuando ya se había alejado de Namjoon y Jungkook lo saludó enérgicamente con la mano.
Los chicos se acercaron y no pudo evitar notar que Hoseok lo miraba extraño.
─ ¿Por qué llevas... ─ Comenzó a preguntar el pelirrojo.
─ Oh, creo que me está dando gripe. ─ Respondió Jimin.
─ ¡¿Y así me dejaste abrazarte?! ─ Se quejó Jungkook dramatizando. ─ Creo que me enfermaré.
Jimin rió.
─ Dudo que te enfermes de lo mismo que yo. ─ Le dijo.
Si supiera...
Hoseok reunió el dinero de los tres cuando estuvieron en la mesa y rápidamente fue a comprar unos sandwiches para la cena. Jimin agradeció tener una oportunidad con el chico de su misma edad.
No tardó en tomar el rostro del chico entre sus manos mientras éste se sonrojaba.
─ Jungkook, ¿Te han dicho que eres muy lindo? ─ Le preguntó notando cómo él se sonrojaba aún más.
─ ¿De verdad lo crees? ─ Preguntó Jungkook sintiéndose bien de que Jimin le estuviera coqueteando tan descaradamente, pero sobre todo porque le estaba coqueteando a él y no a Hoseok.
─ Claro, si no lo creyera, ¿Por qué lo diría? ─ Jimin comenzó a toser sintiendo como los pétalos comenzaban a llenar su mascarilla.
─ Rayos, realmente no te importa enfermarme. ─ Se quejó Jungkook alejándose entre risas.
─ Debo ir al baño. ─ Le dijo Jimin prácticamente corriendo lejos de ahí hacia el baño. Entró un cubículo y vació los pétalos nuevamente.
Suspiró.
No será nada fácil...
Mientras él estaba en el baño, el pelirrojo miraba con algo de envidia a su pequeño hermano, sabía que Jungkook lo miraba a él de aquella forma muchas veces, pero esta era la primera vez que él se sentía así y es que el rubio le estaba coqueteando al pequeño. Pero estaba seguro de que él podría ganarle a su hermano.
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