05: Noche de películas


─Al fin una noche de películas, pensé que jamás lo haríamos debido a mis insoportables hermanos. ─Exclamó Clary mientras comía y se acomodaba.

─Te comprendo, las cosas son cada vez más difíciles.

─¿A qué te refieres? ─No dije nada, aún no había hablado con Clary sobre lo sucedido con Michelle. No dudaría en subir a su habitación y enfrentarla si era necesario.

─Ya sabes, Michelle y sus compras. ─ Estaba nerviosa, y ella sin dudas lo notó. Como siempre había dicho era muy mala mintiendo. Me miró unos minutos y yo sólo rogaba porqué no preguntará nada más.

─Tienes razón. ─Dijo comiendo los últimos Doritos que quedaban. ─Sé acabaron...¿Vamos por más? ─Asenti con la cabeza y nos levantamos del suelo para buscar más comida y bebidas.

Aún no sabíamos que ver, tenemos varias opciones, el caso era que habíamos visto todas mil veces, y no sabíamos cuál escoger. Llegamos a la cocina y seguimos charlando de sus alocados hermanos y mi chillona hermana. Tomamos más Doritos, Lays y unos 3D, más unas gaseosas. Caminábamos mientras reíamos al hacer imitaciones de cada uno de ellos, siempre lo hacíamos porque los conocíamos tan bien que hasta podríamos fingir ser lo. Nuestras risas pararon al ver a mi hermana junto con dos de sus insoportables amigas riendo en nuestro lugar. Ambas mirábamos indignadas como reían sin parar.

¡Por dios! Iba a quedar sorda.

Reconocí a la de cabello pelirrojo, más conocida como Natalie Jones, así es, la hermana de Kelly. Podía jurar que parecían gemelas, si no fuera por la edad. Su cabello era lacio y sus ojos de un color avellana muy claro con un toque de ojos verdes, riendo tan falsamente que siento pena por ella. Luego estaba Sabrina, con su cabello de un color entre castaño y rubio, y ojos color verde, casi turquesa. Tenía una o dos amigas más pero supongo que no podían venir. Ambas "mejores amigas" de mi hermana, quien sorprendentemente se llevaba de maravilla con Kelly, ya que estaba todo el tiempo en su casa. La cara de Clary merecía una fotografía estaba en shock intentando no atacar a alguna de ellas.

─¡Oh! Cuanto lo sentimos. ─Dice Michelle con una mano en el pecho y un tono inocente. ─¿Estaban aquí? No lo habíamos notado. ─ Me dirigió una sonrisa de victoria y yo no decía nada.

─Que conveniente, ahora sal de aquí rubia estábamos primero. ─Clary sonaba furiosa, reteniendo cada golpe que quería ejecutar.

─¿Salir? Lo siento, tenemos que ver un desfile en vivo y luego nuestra serie. Pueden ir al cuarto de Kathe, también tiene una televisión, no es así? Deja la violencia querida Clary, sólo logras parecer más hombre.

Sólo éso bastó para que amiga corriera en su dirección dispuesta a ahorcarla, sus agudos gritos y los de sus amigas era irritantes. Clary no paraba de forcejear cuando la detenía y mi hermana comenzó con el llanto falso. No faltó mucho para que mi madre llegará y calmara a Clary con sus "métodos".

─¿Qué sucedió aquí? ─Parecía tranquila, aunque sabía que por dentro estaba furiosa.

─Le diré que sucede, Michelle y sus amigas arruinaron nuestra noche de películas, fuimos por algo de comer y beber cuando tomaron nuestro lugar. Con todo respeto, si hija se lo busco.

─Pero si yo sólo la invité. ¡Dijo que no miraría nada con nosotras porque nos odiaba, fue horrible! ─Oh mierda, Clary estaba controlada pero al escuchar el teatro de Michelle explotó.

─¿Invitar? ¡¿INVITAR?! ─Tuve que volver a impedir que la atacara mientras Michelle lloraba en el pecho de mi madre, no podía creer todo el drama que había provocado.

Llevé a Clary a mi habitación e intenté calmarla, no aguantaba las ganas de querer matar a mi hermana, ambas se odiaban, era notable. Además ella no es una persona exactamente tranquila, cuando alguien la molesta no era buena idea. Bajé para ver como seguían las cosas y sólo logré escuchar risas nuevamente, a lo lejos logré ver la sonrisa de mi hermana satisfecha. Mi madre estaba tomando un té, generalmente lo tomaba para tranquilizarse, podía estresarse mucho. Intenté dar la vuelta pero ella lo impidió.

─Kathe, podemos hablar un segundo hija? ─ Insultaba en mi mente, no quería aún más problemas con Michelle, tenía suficientes.

─Claro. ─ Debí haber dado la vuelta y volver a mi habitación, pero si no era hoy sería mañana.

─¿Puedes decirme qué pasó?

En blanco, así estaba mi mente ahora. Cuestionaba el decirle que Michelle actuaba pero la última vez no salió muy bien, acabé llendo al parque furiosa. Trague en seco intentando decir algo pero no podía, mis padres podían o no creerme, será mejor decir lo que creía correcto.

─Fue como dijo Clary, sólo fuimos por algo de comer y beber. Al llegar estaban allí y nos dijeron que debíamos irnos, no habíamos dicho nada, así Michelle provocó a Clary. Ya sabes como acabó. ─ Escuchaba atentamente cada una de mis palabras pensando en cuál versión era la real.

─Gracias cariño, veré que hacer, está bien? ─ Asenti y salí de allí soltando un gran suspiro. Subí las escaleras y entre rápidamente a mi habitación asustando a Clary al parecer.

─¿Qué rayos paso? ─Ella estaba con una remera algo suelta y nos shorts cómodos entreteniendose con su teléfono al parecer.

─¿Tiene qué pasar algo? ─ Me miró con su cara de "no te creo una palabra". ─Bien, mi madre quería saber que sucedió en realidad.

─Dime que no defendiste a tu loca hermana. ─ Negué con la cabeza y me miró algo confundida.

─Sólo dije la verdad, sólo espero no tener más problemas.

─¿Por qué dices éso? ─ Y había vuelto a tocar el tema, me removia algo nerviosa y ella esperaba su respuesta.

─Sólo espera a que llegué mi padre.

~•••~

Pasaron las horas y ella se quedó dormida, habíamos visto todas las películas de Crepúsculo y callo rendida en la cama. Por más que intente no podía dormir, había sido un día algo...exagerado, mi hermana no dudaría en volver a amenazarme al saber la versión que mi madre escuchó. Con cuidado me levanté y cerré la puerta intentando no despertar a Clary. No había tanto silencio debido a el televisor donde anteriormente estaban Michelle y sus amigas. Caminé despacio y aún pensando para salir al patio trasero, suspire algo cansada y me senté en uno de los bancos que estaba allí.

─Noche difícil, o no? ─ Busqué el lugar de donde provenía esa voz y no era nada menos que Jayson. Lo miré sorprendida y asenti. ─ Escuchamos algunos gritos hace rato, todo en orden?

No dije nada, estaba detrás de la cerca esperando una respuesta, sabía que tenía razón. Los gritos de Michelle lo escuchaban hasta los vecinos.

─¿Me crees si digo que sí? ─Soltó una leve risa y me sonrió.

─No, es evidente que algo malo sucedió. De todas maneras no iba a creerte. ¿Quieres contarme? ─Me removia algo incómoda, no se lo había dicho a Clary y se lo diría a Jayson, aunque el era más tranquilo y es confiable.

─Creó que no tengo otra opción. ─Dije a lo que él volvió a reír. ─Resulta que no es novedad pero mi hermana me odia, y está dispuesta a hacerme la vida imposible. Éso sucedió hoy, iba a ver una película con una amiga y con sólo dejar el lugar dos minutos lo tomó y comenzó a decir que no fue intencional. Alteró a Clary insultandola indirectamente y mi amiga no es muy tranquila, por poco la ataca. Creó que cada vez es más difícil entender a mi familia. ─Él me miraba algo apenado pero sólo me sonrió y se acercó un poco más.

─Sí pudiera te daría un abrazo, pero la cerca lo impide. Lamentó eso, no parece ser tu hermana, sin ofender claro. Los hermanos están para cuidarse entre sí, nunca para matarse entre ellos. Aunque no creo ser él indicado para decirlo, soy hijo único, pero mis primos son como hermanos para mí. ─ Le sonreí amable y él igual. ─Creó que conseguí lo que quería, sacarte una sonrisa, al igual que la timidez. ─No dije nada, decía todo con un tono tan agradable, no hablaba mucho con chicos desde hace un tiempo pero se sentía muy bien.

─Gracias Jayson.

─No agradezcas, es lo menos que puedo hacer por creerte una invisible vecina, aún no superó el hecho de que llevas más tiempo aquí que yo. ─ Ambos reímos y debía admitir que tenía razón, desde pequeña he estado aquí.

─No te preocupes, no salgo mucho y en la escuela no soy muy conocida. Tienes todo el derecho a creerme invisible. ─Volvimos a reír y luego sólo sonreimos en silencio.

─Bueno Kathy, debo irme. Alex está dormido pero tal vez se despierte, y no quiero problemas. Esperó verte de nuevo.

─Yo igual Jayson. ─Ambos nos despedimos y subí de nuevo a mi habitación, como creía Clary dormía profundamente, ver eso fue un alivio. Sonreí viendo por la ventana y admirando la casa de Alex.

No sabes cuanto me alegraría que tú ventana estuviera frente a la mía.

Suspire y al cabo de unos minutos ya estaba en la cama aún pensando en lo que había sucedido. Un día terrible se convirtió en un día donde conseguí tener un nuevo amigo.

~•••~

─¡Arriba chicas! ¡Tienen todo un hermoso día por delante!─Al instante en el que las cortinas se abrieron por poco quedó ciega. Observe la hora y abrí los ojos indignada.

─¡Son las 10:00 a.m de un sábado! Vuelve más tarde.─Volví a acurrucarme en las sábanas dispuesta a volver a dormir pero luego de un tirón mi madre las quitó.

─Katherine, despierta, es tarde.

¿Tarde? ¡¿Tarde?!

Para una persona normal es temprano así que si me disculpas.─Volví a tomar las sábanas y me acomode nuevamente, al no volver a ser molestada sonreí y intente volver a dormir. Pero como siempre mi madre no se rindió.

─Katherine Amelia Collins, más te vale levantarte de esa cama si no quieres una semana sin teléfono.─Maldición, mi nombre completo, luego la mataré por decir mi segundo nombre.

─¡Mamá! ¡Es sábado!─Me queje al escuchar que quitaría mi teléfono.

─¡Exacto! Por eso iremos al centro comercial por todo lo que nesecitas para la escuela.

¿Alguien quiere matarme?

¿No? ¿Nadie? Bien.

─Falta casi un mes.

─Incorrecto, casi tres semanas así que despierta a tu amiga nos vamos en una hora.─¡Genial, verdaderamente perfecto!

Al estar sentada para batallar contra mi madre caí con cansancio de espaldas a la cama, para luego con disgusto ir a despertar a mi amiga. Decir que tenía el sueño pesado era poco, dormía casi todo el día. Aún bostezando y arrastrando los pies la moví un poco pero ni siquiera lograba una queja de su parte. Rodé los ojos e intenté diciendo su nombre pero nuevamente, nada.

─¡Clary! ¡Despierta!─ Sería más difícil de lo que pensé.─Maldición...─ susurre mientras pensaba cono despertarla.

Rendida tomé una rápida ducha logrando despertar un poco más mientras la dejaba dormir unos minutos más. Al salir busqué una remera de color azul con unos shorts blancos y converse grises. Como el clima no estaba tan pesado dejé mi cabello suelto y volví a donde mi mejor amiga dormía para volver a intentar.

─Clary, vamos, debemos ir de compras.─Nada, genial!.─¡Clary no me obligues a hacerlo de la manera difícil!

Nada, ella se lo busco.

Tome su colchón del piso y la tiré logrando que despierta y hablara rápidamente.

─¿Qué? ¿Qué paso? ¡Yo no fui fueron los niños!─Al verme me miró indignada y reprimi varias todas que tenía.─¿Por qué me despiertas? ¡¿No ves que es sábado?! Sí quieres te lo deletreo... S-A...─La calle con una risa y hablando antes.

─Créeme, si fuera por mi aún seguiríamos dormidas. Tu ropa está en el baño, en media hora iremos de compras.

─Una de las razones por las que yo y tu madre nos entendemos. Ahora no hay rencores.─Fue con una gran sonrisa al baño mientras yo reía por su reacción. Sabía que se alegraría, aprovechaba ir de compras para obligarme a tener "mejor ropa", no se rendía hasta que aceptaba.

Comencé a ordenar mi cama al igual que la habitación mientras Clary se bañaba. Aún no creía que las clases comenzarían tan pronto, sabía que el tiempo pasaría demasiado rápido. Al acabar ella salió y seco su cabello para peinarlo y arreglarlo un poco. La miraba aguantando varias risas, se preocupaba mucho por su apariencia, aunque yo no era la indicada para hablar del tema. También me preocupaba un poco por ello.

─Lista. ¡Vamos! Muero de hambre y desde aquí huelo el cafe que tu madre preparo.─Jaló de mi mano hasta acabar de bajar las escaleras y sentarnos en la mesa a desayunar.

─Ves cariño, debes ser así de alegre como tú amiga.─ La mire indiferente y mi amiga sólo reía mientras comía sus tostadas. Ella y mi madre hablaron hasta que llegó la hora de irnos, tenían muchas cosas en común, se llevaban de maravilla. Mi madre tomo las llaves del auto y todas subimos no son antes abrochar los cinturones, podía alterarse si no lo hacíamos.

En el camino ambas siguieron hablando de ropa que planeaban comprar mientras yo sólo conecte mis auriculares a mi teléfono y escuche música mirando el camino. Finalmente mis ruegos fueron escuchados y llegamos, pasamos por varias tiendas, encontré una hermosa mochila blanca con dibujos negros, la ame. Mi amiga decidió una metalizada de color plateado con algunos detalles dorados, también me gustó mucho la de ella, era su estilo sin dudas. Compré todos los materiales que necesitaba, resaltadores, la lapiceras y demás.

─Bueno al parecer tenemos todo, es hora de comenzar con lo divertido.─Dijo ella y me arrastró a una tienda de ropa. Comenzó a mirar todo y tomo varias camisetas diciendo "mira está te va a quedar hermosa" "No esta" y así seguía.

Como siempre logró que comprará unas cuatro o cinco remeras más dos jeans que según ella, resaltaban me figura. Ahora era mi turno, la arrastre a la librería y no paraba de ir de estante a estante mientras ella esperaba sentada en uno de los sillones. Le gustaba leer pero de vez en cuando. Conseguí casi diez libros luego de las quejas de Clary de que quería beber algo, pagué todos y nos fuimos.

─¿Vamos a otro lado te parece? Me pareció ver un lugar donde venden unos deliciosos licuados y jugos.─ Asenti tomando todas las bolsas y dejando las con mi madre quien las llevaría a casa. Caminamos hacia la salida del centro comercial y mientras charlabamos dirigí mi vista hacia el frente.

De allí salían Alex y quienes al parecer eran unas niñas, sus hermanas de seguro. Venían riendo sin parar y hablando. Levanto la vista y notó que estaba allí. Una sonrisa se dibujo y saludó logrando que quedará allí parada. Clary lo miraba sorprendida, luego me miraba y me movía esperando que respondiera. Tímidamente levanté la mano y lo salude. Al parecer soltó una risa y se fue.

¿Qué me estas haciendo chico patineta?

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¡Hola a tod@s!

Suspenso, suspenso...7u7. Muchas cosas pasaron, nuevas amistades, encuentros. Y además de muchas otras cosas más.

Las clases se acercan.

¿Qué cosas le esperan a Kathe y Alex?

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