¿porqué no?


Cuando regresé con el botiquín en la mano Vegeta ya no estaba. Yamcha se encontraba en el suelo con una mano apoyada en su mejilla. Estaba roja y muy inflamada.

-Estoy bien - mintió.

Tomé su mano y la aparté de su cara para poder aplicarle algodón con un poco de medicina.

-De verdad ,Bulma, me siento bien.- insistió.

-Que necio eres.- comenté.- Ahora no te muevas.-

Sentí un poco de nostalgia, él y yo solíamos estar así, juntos, todo el tiempo.

-Porque te golpeó?- pregunté, tratando de olvidarme de lo anterior.

Vaciló.

-No lo sé.. - dijo.- Supongo que estaba enojado porque yo vine.-

-Típico de Vegeta.- solté, pero en realidad me pareció inusual.

Guardé silencio, apliqué un spray que eliminaba bacterias y que ardía un poco, hizo una mueca pequeña de dolor.

-Lo siento.- dije.- Por lo de Vegeta.- agregué.

-No, no. Creo que en parte lo merezco..-

-No me refería al golpe.-

-No?-

-No..- respiré.- Por actuar como estúpida, por darte celos con Vegeta y por todo lo anterior.-

Él había tenido la culpa, y no lo dudaba, pero ciertamente yo no actúe de la mejor manera.

Yamcha parecía sorprendido.

-No te disculpes.- soltó - Yo fui el idiota. Quería venir hoy precisamente a eso, a aclarar las cosas y que volvieran a ser como antes.-

-Claro que podemos ser amigos- aseguré.

-Yo no quiero ser solo tu amigo, Bulma-

-A que te refie..-

Y me besó. A una manera sorprendente su boca se acercó a la mía. Sus labios me envolvían salvajemente , no me agradó. Mi corazón ya no se agitaba, ya no sentía lo mismo al besarlo, solo quería alejarlo de mí.

Con un movimiento, a la vez ágil y a la vez torpe, lo desprendi de mí.

-Será mejor que te vallas.-

Guardó silencio.

-Entiendo.- contestó al fin. Y yo supe, por su mirada, que entendió que yo ya no lo quería de eso modo, que ya no lo quería a él.

Lo acompañé a la puerta.

-Lo siento.- pero yo no doy segundas oportunidades, pensé.

-Es por él cierto?-

Asentí.

-Adiós, Bulma.- se quedó mirando, como esperando a que yo cambiara de opinión.

-Cuida te.-

Y cerré la puerta.

Suspiré. Y con decisión quité los residuos de los labios de Yamcha.

Vegeta, pensé, también le debo una disculpa. Se encontraba en su habitación, pues la puerta estaba cerrada. Toqué.

-Vete, no me importa lo que te haya dicho el gusano.-

-No es sobre él!-

-Y que quieres?!-

Estaba molesto.

-Podemos hablar?-

Se escuchó el click de la puerta. Se abrió.

A tientas de la luz del corredor, sus ojos parecían rojos.

-No me digas que..- coloqué mi mano de bajo de su mejilla, observando su ojo.

La apartó.

-No, no me he drogado.- contestó aclarando mi duda.

Me dejó pasar. Encendió la luz. Lo observé más detalladamente. Y más que drogado parecía cansado, como si no hubiera dormido bien durante días.

-De que querías hablar?-

-Le pedí disculpas a Yamcha.- soltó una mueca antes de dejarme continuar- Y quiero pedirte perdón a ti también-

-Porqué?-

-Por utilizar te... Por todo-

-Has madurado.- comentó con una sonrisa.

-Ya lo creo.. -

-Aunque estás exagerando.- dijo- Como siempre.-

-No soy exagerada!-

-Si, también lloras mucho, y por cosas sin sentido..-

Su voz tenía un toque de insinuación.

-Aun no lo entiendes?- entendí.- Me decías, que no debía enamorarme de ti, lo hacías muy prohibido.. Temía hacerlo!! Pero como no! Porque no?!-

Él permanecía inmóvil.

-Acaso es algo malo?-

Seguía como una roca.

-Lo peor de todo.. Me abandonaste! Nos abandonaste - incluí a Trunks- Te fuiste sin decir palabra y sin decirme porqué.-

-Dijiste que no necesitabas mi ayuda, que no tenías miedo de cuidar a un niño solo.-

-No lo tengo!-

-Entonces?!- dijo.- Porqué sigues reclamando me lo?-

-Porque me importabas!- grité.- Y te vas..-

-Nunca fui tuyo precisamente- dijo sin verme a los ojos.- Pero, sí me importas..-

-De verdad?-

Me abrazó. Sus músculos me envolvieron de una manera firme y me sentí segura. Supe que seria uno largo.

Comprendí...
Susurré a su oído:

-Que hay de malo con enamorarse?-

Él no respondió.

-Tenías miedo?-

Su respuesta se escuchó como un susurro claro, como un secreto.

-Aun lo tengo. -

Una lágrima cayó suave por mi mejilla, la estaba aguantando, y eso confirmó lo que había dicho Vegeta: que soy demasiado llorona.

-Porqué?- pregunté.

Y sin ver su rostro, pues aun estábamos abrazados, supe que vacilaba en su respuesta, pero que me la diría.

-Pierdo con facilidad las cosas que amo.-

-Yo no iré a ningún lado.-

.................................................................

Si, decidí contestarles su pregunta:

Porqué diablos no enamorarse del nalgón, chaparro, cabello de antorcha* más sexy del universo?

*Si, aún no lo supero XD

Pues ..

Ooo y no, no me he olvidado de Koku.








Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top

Tags: #dbz