El eco de la noticia de que Jenna Ortega estaba saliendo con alguien no tardaría mucho en correr como la pólvora y enseguida las redes se hicieron eco de ello. Las mismas fotos llenaban las redes sociales, tanto Twitter como Instagram. Y obviamente era TT JennaOrtega, NovioJennaOrtega, Elchicodelrefugio...etc.

Tn estaba trabajando con los animales de nuevo tras esos días tan lleno de sorpresas y altibajos, sobretodo con el tema de los mercenarios. Además, se supo que Tn estuvo implicado salvando la vida de esos animales provocando que muchas fans le tuvieran en un pedestal. Tanto, que incluso hicieron un club de fans.

—Tn, ¿has visto las redes?—le preguntó una Melissa sonriente y tomando café.

—No, he estado trabajando—respondió sudado y con algo de polvo antes de sentarse—estoy algo cansado, hoy los animales están más revoltosos que de costumbre.

—Si, es como si hubieran conocido la noticia del héroe del refugio—dijo ella bromeando y enseñándole el teléfono.

El chico vio las fotos de ellos dos y también los cientos de comentarios que la gente escribía en las redes. Casi todos eran muy positivos, realmente había impactado mucho la noticia y su perfil de Instagram se llenó de notificaciones en los cuales la gente le daba me gusta. También se debía en parte a que trabajaba con animales, y eso era un plus.

Eran tantas las notificaciones que era un sin sentido. Eran demasiadas por cada foto, y no tenía pocas ya que llevaba mucho tiempo trabajando allí. 

—¿Qué se siente ser famoso?—Melissa disfrutaba viendo al chico sufrir un poco.

—Es abrumador...sabía que podía pasar si yo...bueno...si Jenna y yo...

—¿Si Jenna y tú salíais juntos?—él asintió—bueno, es lógico que la gente se sorprenda tanto.

Él continuó tomando su descanso viendo las redes hasta que llegó la hora de volver al trabajo y seguir cuidando de los animales. 

Aunque esa misma tarde una televisión de la isla acudió para hacerle una entrevista y hablar sobre esos dos temas. Tanto de los mercenarios como el de Jenna. El chico estuvo bastante nervioso hablando de ello pero sobre su pareja no dijo mucho debido a que no sabía como lidiar con esos temas, y lo último que deseaba era poner en apuros a Jenna.

Tiempo más tarde se enteraría que los mercenarios revelaron los empresarios y personas involucradas. Algo que los llevó a ser condenados por contratar a gente para matar a Tn y al resto del personal. 

Esa noche Tn acudiría a visitar un rato a Jenna quien estaba disfrutando del tiempo libre tras rodar unas cuantas escenas. Con algo de vergüenza se acercó hasta donde estaba ella pues no le había dicho nada de que iba al set. El verla sonreír, feliz y disfrutando del tiempo con sus amigos vestida de Miércoles se le hacia raro en relación con el personaje que interpretaba,

—Yo creo que ha quedado bien la escena, pero debemos revisarla por si acaso—comentaba ella—pero primero a disfrutar del buen tiempo que...—al voltear para señalar el cielo se percató de la presencia del chico.

—Hola—saludó él tímido desde su posición.

Ella se levantó y se acercó antes de besarlo.

—¿Qué haces por aquí?

—Venir a verte—se rascaba la mejilla nervioso.

—No me has avisado

—Qu-Quería darte una sorpresa

—Pues lo has hecho.

Ella se le quedó mirando un poco hacia arriba pues él era más alto que ella, y sonreía ante otro beso que estaba por llegar.

Ambos se fundieron en un pequeño beso antes de escuchar los aplausos del resto de las personas que estaban allí. Emma silbaba provocando unas pequeñas risas entre el resto del reparto. Jenna les dijo que regresaría en un rato.

La pareja caminó hacia afuera y se alejó un poco del pueblo, en un lugar más apartado donde no serían molestados. La luna brillaba y estaba todo en silencio, salvo por el ruido de las casas cercanas ya que no querían alejarse demasiado.

—He visto tu entrevista, no ha estado nada mal—dijo ella sonriente y tomando su mano.

—Estaba acojonado—reveló él—y sudando...

—Es normal, no estás acostumbrado. Oye, hay algo de lo que quiero hablar contigo

—Tú dirás pues—al mirarla, se quedó un poco en silencio pues por segundos olvidó lo que iba a decirle al chico.

—¿Vendrías conmigo al estreno del primer capítulo de la serie?—Tn se sorprendió mucho.

—Yo...no creo que pueda, tengo trabajo

—Hablare con tu jefe, creo que será bastante comprensivo. Considera esto...un viaje de negocios...al conocerte a ti y tu trabajo, quizás más famosos se animen a donar dinero para mantener tu refugio.

El chico supo que ella llevaba razón aunque...

—Suena más como un chantaje—dijo provocando una risa en ella.

—Podría ser—le dio un golpe—¿qué me dices?.

—Me encantaría ir contigo...aunque me tendrás que ayudar a lidiar con la gente

—Claro, aunque te advierto a que uno nunca se acostumbra a ello.

Pasaron el rato allí sentados en la hierba mirando el cielo y tomados de la mano. Y no hacia falta decir mucho más pues el joven estaba feliz junto a ella. Jenna también estaba pasando por cosas que hasta el momento no había experimentado por el tema de estar centrada en su trabajo. Pero no le disgustaba en absoluto, estaba feliz y ahora solamente quería permanecer allí mucho tiempo, relajada y sin pensar en nada.

Durante los siguientes días se vieron muy poco debido al tiempo de trabajo de cada uno pero no les preocupaba porque pronto terminarían el rodaje. Aunque Tn trabajase, ella estaría libre y acudiría al refugio donde el joven le sacaba fotos con los animales.

—No sabría decir quien es más animal de los dos—reía Tn ganándose una mirada algo molesta de su pareja, aunque era broma, le hizo todavía más gracia su cara.

Los días continuaron transcurriendo y pronto Tn obtuvo sus vacaciones yendo con Jenna. Y sí, mucha gente empezó a donar más dinero a causas sociales. La peor parte para el chico fue ir a los sitios con ella pues los fans eran una completa locura. Por no hablar del ruido ensordecedor al chillar o incluso los veía llorar por tenerla muy cerca.

Tn siempre permanecía un poco apartado de ella porque era Jenna la estrella. El verla firmar autógrafos o sacarse fotos con los fans que lloraban de felicidad, le sacaba una sonrisa.

En una de las noches, los dos se sentaron en una terraza en un hotel un poco apartado de la ciudad donde se quedaron a oscuras contemplando el cielo. Jenna no decía nada, y él tampoco, solamente estaban allí disfrutando de las vistas.

—¿Sabes cómo te apodan?—preguntó ella en un susurro.

—¿Cómo?

—El chico del refugio, creo que te queda bien

—Si, no suena tan mal.

No tardarían mucho en irse a dormir pues en los siguientes días habían quedado con Emma y el resto del reparto para comer. Tn no quería ir porque deseaba que Jenna hablase como siempre con ellos pero estos insistieron así que tuvo que aceptar.

En cuanto a los padres, tanto el uno como el otro se ganaron enseguida el cariño de los padres provocando que las reuniones fuesen como si se conocieran de toda la vida.

Y así termina esta historia.

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Un saludo.