Primer capítulo dedicado a: Solanalossi15, Anabell_Martinez, Noahmusician14, y natsumidragonil

P.O.V. Allen

-¡Lenalee! Buenos días.

-Buenos días Allen- ella es una beta y mi mejor amiga, Lenalee Lee, vamos juntos desde primaria, este año entramos a la misma secundaria pero vamos a clases separadas.

-¡Que emoción! Tendremos nuevos compañeros y haremos muchos amigos nuevos, pero, me gustaría que estuviéramos en el mismo salón este año también.

-Agradece que estamos en la misma escuela Allen, no tienes que preocuparte de nada.

-¿Pero y si no hago amigos? Hay una gran diferencia en pasar tres años en el paraíso o tres en el infierno...

-Allen no seas paranoico, ¿qué es eso de tres años en el paraíso o el infierno? Te ira bien, ya verás.

-Tal vez tengas razón solo tengo que... ¡agh!

-¿Allen qué pasó?

-Alguien o algo me tiró, fue muy rápido...- dije aturdido levantándome del suelo y sacudiendo mi uniforme para buscar con la mirada qué o quién me había tirado -¡oigan críos! Fíjense- un pequeño grupo de dos betas y un alfa de unos 7 u 8 años estaba jugando a la pelota, seguramente eso es lo que se me atravesó en los pies.

-Ya vámonos Allen que llegamos tarde.

-Tienes razón, vamos.

-*¿Cómo paso esto? ¿cómo es que todos ya estan divididos en grupos y yo aquí sólo?*

-Hmm que aburrido empezar las clases...- una chica muy linda estaba a mi lado, su piel es clara, su cabello es corto y azul tirando a morado y sus ojos son amatistas como los de Lenalee, huele a omega, usa unos pendientes muy llamativos, intentaré conversar con ella.

-Que bonitos pendientes, te quedan muy bien.- me ha mirado como bicho raro.

-¡Road Kamelot! Misma clase ¿eh?- otra chica se nos acercó y le habló a la primera, esta es rubia y al igual que la primera una omega algo baja de estatura, su cabello es largo y ondulado y sus ojos son rojos y su maquillaje incluye unas curiosas líneas en dorado bajo los ojos.

-¡Tevak! ¿qué tal te va con tu novio?

-Sigue llevándome a cenar a restaurantes caros en cada cita ¿Y el tuyo?

-Tan infantil como siempre.

-Los alfas nunca dejan de sorprender a uno, son como niños con un juguete nuevo cada vez que se acerca el celo- mentí casi por inercia, no quería quedar excluido del único grupo donde aún podía encajar aunque llegara al último.

-¿Tú tienes novio, eh...?

-Allen Walker, solo diganme Allen.

Meses después...

-Y últimamente solo vamos a comer y luego a algún hotel- Road hablaba con cansancio de su novio mientras estiraba sus pestañas con un rizador.

-Pues últimamente el mío ha estado insistiendo con eso de hacerlo atándome las manos, ¿que no ha oído de la liberación omega?- Tevak pintaba sus uñas mientras se quejaba de los inventos de su alfa.

-¿Ehh?... deberías intentarlo, a lo mejor y terminas disfrutandolo.

-¿Allen-chan no me digas que lo has hecho?

-Pues bien por ti que puedes darte ese lujo, mi novio es ya un adulto no haría cosas tan infantiles como esa.

-Oh- suena mi celular y salgo corriendo a contestar -es mi novio, ya vuelvo... ¡Hola amor!...

-¡Que amor ni que nada! Allen hasta cuando seguirás con esto, mira que ya has reventado mi cuenta del teléfono en dos meses, ya diles la verdad...

-Prometo que te pagaré Lena...

-Tú también crees que es mentira..- una voz se oía acercarse a donde nos encontrábamos frente a la fuente de agua, eran las chicas, jale a Lenalee y la metí conmigo en el cuarto de la limpieza justo al lado de la fuente de agua donde Road y Tevak se detuvieron y unos segundos las oi.

-¿Eso del novio que lo llama todos los días? ¿Es que tú tampoco lo conoces?

-Cuando le digo que me lo presente, simplemente cambia el tema, y si le digo que me muestre una foto, me dice que no tiene.

-Cada vez es más claro que eso del novio alfa es mentira...

-Sí, vamos.- las oímos irse y salimos del cuarto de la limpieza mientras Lenalee me sermoneaba, y yo solo pensaba que haré para no quedarme solo tres años en el infierno...

Hace un bonito día, al salir de clases me fui caminando por la plaza, lástima que no puedo disfrutar el buen clima que hace por estar pensando que haré con mi novio de mentira, el que me invente para encajar, aunque la verdad jamás he tenido novio o salido con alguien. -"y si le digo que me muestre una foto, me dice que no tiene"- ¡eso es! Solo necesito una foto para que me crean...

-Ne~ ne~ ¿no es guapísimo ese chico?

-ambos lo son, ¿a que te huelen?

-alfas sin duda.

-que suerte tienes de ser omega Milu-chan.

Me gire en la dirección que veían el par de chicas y noté que en efecto había un par de alfas muy llamativos, uno en especial, tanto que antes de que mis neuronas hicieran contacto con mi cerebro, le estaba sacando una fotografía al alfa, y eso no es lo peor, sino que él... miró.

-Oe... tú...

-¡Oh mira! ¡un perro volador!- el chico me creyó y se giró a ver, pero obviamente no había nada, eso me sirvió de maniobra de escape. 

Me fui lo más rápido que daban mis pies, que vergüenza, me pudo haber acosado de invasor de la privacidad o pude ir a la cárcel por esto (es cierto, no lo intenten en casa), pero analizando bien su foto, si que es guapo, su largo cabello negro y al parecer lacio, esos ojos azules que sentí que me prenetraban con la mirada, sus labios finos y de aspecto suave, ¡wah! ojalá pudiera tener un novio tan simpático... apuesto a que es todo un caballero.

Al día siguiente partí a mis clases como de costumbre, al salir me despedí de mis padres, Mana y Miranda, aunque ambos son castaños, yo soy albino, al parecer lo heredé de mi abuelo paterno, creo, pero si tengo los ojos de mi padre y la actitud un poco insegura de mi madre, bueno aunque no tan insegura como la suya, ella es la descripción gráfica de la palabra. Tomé un vaso de jugo y me lleve mi tostada para el camino, se me hacía tarde porque se me pegaron las sábanas, otra vez...

En la intersección cercana a mi casa ya me esperaba Lenalee y se notaba ya impaciente, no le gusta llegar tarde, y es que ella va muy bien en la escuela comparada conmigo.

-Buenos días Lenalee.

-¡Allen! Por Kami-sama (Dios) creí no llegarías, estaba por irme, apresúrate ¿sí?

-Ok, ok, y donde quedó mi buenos días para ti también.

-Sí, sí, buenos días, ahora date prisa.

Caminamos tan rápido que si usara tacones se me habría roto los dos, pero llegamos muy a tiempo, justo antes del timbre, claro que Lenalee me reclamó porque llegamos con las justas, pero al final fuimos a clases con tranquilidad, al entrar Road estaba pintándose las uñas como siempre, y Tevak, estaba pintando sus labios de un tono rosa casi transparente que a decir verdad le queda muy bien, llegué y me senté en mi puesto que está al lado de Tevak y Road delante de ella. En seguida notaron mi presencia me empezaron a hablar de lo mismo de siempre, novios y citas, una cosa llevó a la otra y volvieron a tocar el tema de lo de mi novio, sabía sus sospechas y recordé la foto que por poco y me cuesta una ida a la cárcel el otro día, después de todo ya han pasado tres meses desde que iniciaron las clases y es obvio que sin un indicio de que existe tal novio empezarán a sospechar, así saque el celular y me dije a mi mismo ¿por qué no? y se las mostré, me excuse diciendo que se la tome a escondidas solo para mostrarles luego la prueba a ellas.

-¿Ese es tu novio Allen? ¡es guapísimo!

-¿A que sí?

-¡Ahora entiendo porque lo escondes, está chulísimo!

-Ahora que lo veo bien, me parece que lo he visto antes- ¿¡Qué!? ¿no será un modelo o algo así verdad? rayos.

-No lo creo- le dije mientras le quitaba el celular para guardarlo -debe ser imaginación tuya.

-Eh... ¿será? bueno, si tú lo dices.

Comenzamos la clase con la llegada del profesor Lee, que casualmente es el hermano mayor de Lenalee y mi consejero de clase, y ahora mismo mi salvador, eso me ayudó a que no me preguntaran más las chicas. Más tarde salimos a la cafetería en la hora del almuerzo, nos sentamos las tres juntas como de costumbre, y mientras comíamos Road volvió a sacar el tema de la fotografía...

-Hmm...

-¿Pasa algo Road-chan?- pregunté dudoso de si debí hacerlo.

-Sigo pensando que lo he visto en algún lado.

-¿A quién?- preguntó Tevak con confusión y me puse nervioso.

-Al novio de Allen-kun...

-Ya déjalo Road-chan, debe ser tu imaginación...- trate de convencerla en vano ya que seguía pensativa y luego pegó un grito que me asustó.

-¡EL PRÍNCIPE! como no me di cuenta antes ¡Allen-chan! ¡TU NOVIO ES EL PRÍNCIPE!- gritó casi la mitad de lo que dijo y para mi gran y enorme sorpresa, al levantar la mirada me tope con una azul profundo que ya había visto antes ¿puede ser el mundo tan chico? ahí, detrás de Road-chan, estaba el susodicho al que por algún motivo llamó 'príncipe', mirando con extrañeza mi rostro y a nosotros, estaba por hablar y mi cabeza no pensaba bien las cosas, así que actué precipitadamente.

-Tú eres el chico de la...- le tape la boca y le susurré al oído que me acompañara un momento.

Cuando llegamos al patio del colegio, tome una enorme bocanada de aire, había corrido prácticamente arrastrando al chico de largos cabellos azabaches y mirada azul profundo por medio colegio, cuando logré reponerme al fin, se dirigió a mí con una sonrisa leve.

-¿Te encuentras bien?- dijo sosteniendo esa bella sonrisa, de verdad que parece un príncipe viéndolo a simple vista.

-Un poco, ¡oh! lamento haberte arrastrado así... 

-Yu Kanda. Supongo que debe haber una historia detrás de esto ¿te parece contarmela? (ya sé ya sé, demasiado OoC, pero no se adelanten aún)

-Sí claro, por cierto, me llamo Allen, Allen Walker. Bueno lo que pasa es que...

Luego de varios minutos le conté lo que he atravesado los últimos tres meses desde que inició el ciclo escolar, lo que había empezado como una inocente mentira me había arrastrado a donde estaba ahora, frente al chico que utilice sin su consentimiento para probar mi enorme red de mentiras.

-Ya veo. Bien, así que necesitas que me haga pasar por tu novio ¿eh? me parece bien.

-*¡Por Kami-sama! ¿puede haber personas tan buenas en este mundo tan injusto después de todo?*

-Bueno, me parece que debes dar un par de vueltas y ladrar para mi.

-¿Qué?- eso me tomó desprevenido, sabía que era demasiado bueno para ser verdad.

-Y eso fue lo que paso...- hable desganado y no era para menos, Lenalee hizo un pequeño gesto de burla en lugar de darme algo de consuelo.

-Bueno, ¿y qué vas a hacer? deberías contarles la verdad y ya está.

-¿Te has vuelto loca? ¡me tacharan de mentiroso y me apartaran al exilio total!

-Bueno entonces, sigue siendo el chico del lobo.

-*No debí comentarle eso del chico del lobo*

~{Flashback}~

-Bueno, me parece que debes dar un par de vueltas y ladrar para mi.

-¿Qué?

-Ya me oíste, chico del lobo. Tu necesitas que me haga pasar por tu novio, y yo necesito un perro para divertirme, entonces, ¿aceptas?

-Ni de chiste ¿estás loco?

-Bien, como quieras, pero no me culpes si cuento por ahí que es mentira eso de que salgo contigo.

-¡Espera!- vi un flash de mi vida pasar frente a mis ojos donde era exiliado por mentiroso mientras que Road y Tevak me pisoteaban y me gritaban 'chico del lobo' -aceptó.

-Ya se me quitaron las ganas, después de todo aún no haces lo que te pedí- di giros como bailarina y llegue hasta él soltando un 'woaf' como lo haría un perro, el muy sinico se rio y cambio su mirada sensual por una siniestra para hablarme -vaya, buen chico, moyashi.

-¿Moyashi?

-Ese será tu nombre de perro, ya que eso pareces, un jodido brote de habas.

~{Fin del flashback}~

-Ya está bien, lo siento- dijo Lenalee entre lágrimas y risas contenidas mientras aún se burlaba durante su 'disculpa' -¿pero no has pensado en enamorarte y conseguirte un novio de verdad?

-¿Enamorarme dices? no sé cómo hacerlo.

-Allen ¿es que nunca te has enamorado?

-No y nunca he tenido novio.

-¿Pero nunca te has fijado en algún chico, alfa o beta, que llamará tu atención?

-Bueno tal vez he tenido uno que otro cotilleo pero nada serio, y mucho menos he llegado a enamorarme.

-Pues tal vez deberías empezar mirando a los chicos que tienes alrededor.

-Quizás tengas razón. Lo intentaré y así dejaré de ser el chico del lobo.

Al día siguiente en clases...

Miraba de un lado al otro del salón llegada la hora de almuerzo, había un alfa regordete devorando un enorme sandwich equivalente a su aperitivo sin ni una pizca de modales, denigrante, por otra parte un beta varón sacando muy gustoso los mocos de la nariz cual crío de primaria, asqueroso, otro par de alfas jugando a las luchas haciéndose llaves entre sí, simplemente inmaduro, ninguno de mis compañeros me sirve en definitiva, no me enamoraría de ellos aunque fueran los últimos hombres sobre la faz de la tierra. En eso Tevak me sacó de mi pésima ensoñación.

-¿Te encuentras bien Allen-kun?

-¿Eh? Ah sí, claro claro.

-Allen-kun, creo que te buscan, lleva mucho rato ahí haciéndote señas- dijo otra de mis compañeras que se aproximó a mí de la nada, señalando a la puerta, donde se hallaba ni más ni menos que el príncipe amargado, el mismísimo Kanda.

-Bueno chicas, nos vemos luego ¿sí?- dije para salir a su encuentro.

-¿Por qué tardaste tanto, moyashi inútil?

-No te había visto, además mi nombre es Allen, no 'moyashi'.

-Vaya pero veo que no aprendes, un perro no le ladra a su amo, tendré que reprenderte para que aprendas modales desde cero.- su mirada era tan afilada que podía cortar el aire con ella. Me asuste tanto que le hice caso.

Los siguientes días continuaron casi igual, con la única variante de que ahora mi supuesto novio me llama a cada rato o me textea a pedirme cosas, "tráeme mi libro de matemáticas" "cómprame una botella de agua y traela a las canchas" "date prisa, ôkami shônen", el no quería un perro, quería un sirviente, y yo era el desafortunado.

Hoy no lo vi por la hora del almuerzo, no me vino a buscar, ni llamó, ni siquiera texteo, fui a su salón a buscarlo y me encontré con Lenalee que casualmente es su compañera de clases.

-Hola Lena.

-¡Oh Allen! que bueno que te veo, ¿podrías llevarle esto a Kanda?

-¿Como? ¿no vino a clases?

-Tiene fiebre. Tengo que hacer un par de cosas con mi hermano hoy y no podré ir y el profesor me lo ha pedido a mi. ¿Podrías ir tú? mira aquí está anotada la dirección.- dijo señalando el sobre con los apuntes.

-Bueno, si no tengo opción...

-Gracias Allen, nos vemos.

Y ahí voy yo, ahora me encuentro camino a su casa, llegue casi tres horas después, lastimosamente, soy torpe con las direcciones, siempre me pierdo con las direcciones nuevas o si voy muy distraído. Llegue a un complejo de apartamentos grande, el edificio es blanco y de estilo moderado, de unos cuatro pisos, por suerte el vive en el segundo, subí y llegué a la puerta que me indicaba el sobre, toque el timbre y empecé a divagar, pensando quién me abrirá la puerta ¿y si eran sus padres que les diré? 'hola, soy el novio falso de su hijo y le traje los apuntes' obvio eso no funcionará, 'que tal, soy compañero de Kanda y le traigo los apuntes' sí eso está mejor, en eso la puerta se abrió y un aura negra emanaba desbordante por la puerta dejando ver entre ella a un muy malhumorado Kanda lleno de ojeras y de aspecto cansado.

-¿Y tú qué haces aquí?

-Etto, te traje los apuntes, Lenalee no podía y me lo ha pedido. ¿Hay alguien en casa?

-No. Si eso es todo ya lárgate- dijo quitándome el sobre y girando sobre sus pies para volver adentro, solo que antes de entrar se dió de lleno con el marco de la puerta más el remate de la puerta al regresar a su posición, era de esas puertas que se devuelven en automático al soltarlas para que no se queden abiertas por error.

-¿¡Kanda estás bien!? pero para que pregunto, se nota que no lo estás.- lo levante del suelo como pude y entré con el a cuestas, en verdad si estaba solo, encontré el cuarto y lo ayude a llegar a su cama donde se acostó y se arropó hasta el cuello para luego darse vuelta y darme la espalda.

-Puedes irte ya.

-Deberías tomar medicina.

-No es necesario, nunca lo hago, solo necesito dormir.

-Tonterías- fui hasta su cama y lo obligue a girar para verme a la cara, su cabello estaba suelto desde que llegué, era la primera vez que lo veo suelto, se me muy bien así, en la escuela y la primera vez que lo vi, siempre lo lleva recogido en un moño alto con unos cuantos mechones delante de sus orejas y un flequillo algo revuelto en su frente. Levante su flequillo con mi mano casi inconsciente de mi acto para tomarle la temperatura, al instante me espante, estaba muy caliente. -¡Pero si estas ardiendo en fiebre! Bien, primero debes comer algo, ¿hay algo que quieras comer?

-No tienes que hacer nada por mi.- tiene razón, en realidad no tengo por qué pero aún así quiero hacerlo, tal vez sea por mi instinto de omega o mi naturaleza de siempre ayudar a quien lo necesita sin distinguir raza.

-Pero quiero hacerlo.

-Te repito que no necesito nada.

-Kanda- lo mire fijamente y le sonreí, no sé por qué le sonrió pero salió sin meditarlo -cuando estamos enfermos hay que dejar el orgullo de lado y depender de los demás ¿sí? confía en mí al menos, que soy tu perro.

-Si tú mismo admites que eres un perro supongo que ya no puedo hacer nada- me he timado yo mismo, cuan bajo he caído. -fruta.

-¿Qué?- no entendí en principio a que se refería.

-Fruta, quiero algo ácido o amargo, como toronja o piña.

-¡Sí!- salí de ahí como alma que se lleva el diablo para ir al supermercado más cercano. Al volver le preparé una sopa de soba y le lleve piña en trozos, junto con un vaso de agua y unos análgesicos. -Toma, aquí tienes, ¿puedes comer por ti mismo o necesitas que te dé la comida?- me ha quitado el plato y ha empezado a comer de inmediato, sabía que su orgullo no permitiría tanto, es divertido ver cuando reacciona así, al probar la soba vi como sus ojos se dilataban y expandían como platos -pareces sorprendido ¿te gusto?

-... Está caliente, moyashi tonto.- no me lo creo, vi un leve sonrojo en sus mejillas pero supongo que se atribuye a la fiebre.

-Cómetelo todo y tómate la medicina.

-Creo que oí mal, querrás decir 'cómetelo por favor, amo'- su mirada se volvió sombría de nuevo haciéndome erizar la piel del susto.

-He... he... ¿por favor, amo?

-Así está mejor. Ya puedes irte, ya tome la medicina.

-Bien, espero que te mejores- ¿pero que estoy diciendo? -nos vemos.

-Oe, gracias- fue un susurró apenas audible, pero lo suficiente para que lo escuchara, sin percatarme realmente del por qué, le sonreí antes de irme.

Al día siguiente fue igual, no lo vi en todo el día, al terminar las clases me fui a su salón y me tope casualmente a Lenalee por salir.

-Allen, ¿qué tal?

-Bien gracias, oye Lena, ¿hoy si vino?

-No, ahora voy en camino a llevarle los apuntes, gracias por tu ayuda de ayer, ya voy yo hoy, no quiero incomodarte, sé que no lo soportas...

-¡Yo se lo llevó!- respondí enérgico pero sin rayar en lo grosero, la verdad desconozco mis expresiones faciales en este momento.

-¿Eh? ¿estás seguro?

-Si, claro- vi como me miraba Lenalee y conozco esa mirada -¡e-es que ayer me deje algo y quiero ir a buscarlo y de paso te hago el favor así puedes hacer otras cosas! he he

-Hmm, sí, claro- la fregue, yo solo me delató, ni siquiera sé cual es mi afán de ir yo mismo -bueno entonces, te lo encargo, ve a atender a tu 'novio, chico del lobo'...

Después de que Lena se burlará unos segundos más, me retire para ir nuevamente a su casa, quería cerciorarme si estaba bien ya que ¿por qué no había ido hoy? ¿y si sigue con fiebre? rayos será mejor que me apresure o me dará un colapso mental. Pase por el supermercado de la otra vez y llene el canasto de diferentes analgésicos entre otras cosas. Al llegar y subir las escaleras, lo primero que veo a girar el pasillo en dirección a su departamento es a él saliendo de este como si nada, ¿es que está loco, quién sale a la calle con semejante fiebre?

-Un momento ¿a dónde crees que vas? deberías estar en cama descansando.

-Ya no tengo fiebre, voy al supermercado.

-De eso nada, vamos de regreso a la cama.- lo arrastre adentro no sin antes pedir permiso para entrar y hacerlo sin ninguna respuesta para tumbarlo a la cama, a pesar de ser más corpulento y atlético que yo estaba tan despistado que no puso resistencia alguna. Tome el termómetro para medir su temperatura y vaya sorpresa que me dí. -vaya, es verdad, ya no tienes fiebre.

-Te lo había dicho ya, baka moyashi.

-Y yo que compre todo esto pensando que seguías enfermo- dije vaciando sobre la pequeña mesa en el centro de su cuarto el contenido de la bolsa de supermercado, habiendo desde medicamentos hasta compresas frías -bueno, ni modo, me lo llevaré a mi casa para que no se pierda. Que alivio.

-Toma- extendió su mano ofreciéndome el dinero que había gastado con la factura que no sé en qué momento había tomado en su otra mano.

-No es necesario, lo hice porque quise. Después de todo, si ya estabas bien ¿por qué no fuiste al colegio?

-Tenía flojera. ¿Ahora me vas a interrogar?

-No, no quise decir eso es solo que...- es solo que ¿qué? ¿por qué me explico tanto y por qué estoy tan nervioso? Tal vez sean sus feromonas que me están intimidando un poco. -gomenasai.

~{Domingo, cafetería de la zona}~

-¿Y qué tal te va con eso de enamorarte?

-Fatal, los chicos de mi salón son un asco, ninguno llama mi atención- platicaba con Lenalee en una cafetería que solemos frecuentar para conversar de temas triviales entre otras cosas.

-¿Y qué pasa con Kanda?- su mirada se volvió pícara, eso no es común en Lenalee a menos que se le atraviese una idea en mente y no descansa hasta confirmar o cumplir lo que tiene en mente.

-¿Qué pasa con él?

-No te hagas el desentendido. ¿Me vas a negar que te gusta?

-¡A mi no...! no digas tarugadas Lena.

-¿A no? ¿y por qué titubeaste eh? Allen te conozco de toda la vida, no necesito ser un alfa para oler tu nerviosismo.- tiene razón, no puedo engañarla y debo dejar de engañarme a mí mismo.

-Creo que... me rindo, soy un tonto y estúpido masoquista por enamorarme de semejante idiota- ya ha pasado más de un mes desde que empecé a ser el chico del lobo, no quiero seguir así.

-No digas eso Allen, tal vez es cierto que no estás en la mejor situación, pero al corazón no puedes darles ordenes, uno no escoge de quién se enamora, algo ha de tener que te ha cautivado a tal grado.

-Ojalá tengas razón Lena.

-Deberías confesarte.

-¿Qué? no, definitivamente no creo poder hacer eso.

-Si no lo haces no sabrás si te corresponde, hay personas que demuestran su afecto de maneras extrañas, como Kanda, tal vez tengas suerte y dejes de ser el chico del lobo.

-Hmm. Tal vez tengas razón en eso también. Voy a pensarlo ¿sí?

-Bueno.

"Estoy en un mundo surreal, tú estás conmigo, pero, ¿de verdad estás ahí?"

Holis holis mis lindos betas, les está gustando esta historia?

Deseo conocer su opinión, esta publicación estaba destinada para mañana sábado, pero me parece que voy a estar muy ocupada para subirlo (la verdad me atrase por estar escribiendo esto y me recargue de trabajo y lo tendré que poner al día mañana) ||(°>_<)||

Con respecto a las actualizaciones, la próxima semana daré a conocer cual será el nuevo horario de actualización para mis dos historias en estado de continuación... Esta y The Switch...

Por el momento trataré de que mi loca cabeza se calme un poco y se concentre en las dos historias actuales porque la verdad si hago otra no actualizaré las tres a tiempo. Se habrán dado cuenta de que estas dos historias son las de los capítulos más largos que haya escrito hasta ahora y me gusta mantener eso capítulo tras capítulo, espero actualizar de acuerdo al horario y no quedarme corta de ideas porque ustedes son los que me inspiran siempre, cada comentario, cada voto, cada añadida, cada seguidor, créanme, se les quiere de gratis... Todo esto es para ustedes.