➳ Vigésimo séptimo capítulo

[Dedicado a HarrysVenom ♥]

— Joven príncipe, no me parece nada bueno que ande por las calles del reino a estas horas. Sé que lleva consigo al general Choi, pero aquello no lo salva de cualquier tipo de malhechor o asalto durante el camino.

La reina fingió muy bien su preocupación, pues HoSeok ya estaba dispuesto a ceder y no ir aquella mañana al riachuelo para ver a TaeHyung. Sin embargo, el único que no se creía ni una sola palabra era el general Choi, quien tenía la miraba baja, pero llena de rencor y odio hacia la mujer que parecía querer llorar con tal de no dejar salir a su hijo.

— Realmente me preocupan estas salidas de entrenamiento, joven príncipe, tanto así que he pensado en rogarle a su padre para que acabe con todo esto y usted vuelva a entrenar dentro del palacio. — la reina se aferraba al cuerpo del príncipe, quien trataba de tranquilizarla, pues desde que llegó al establo no dejó de persuadirlo para que no saliera aquella mañana.

— Mi reina, eso es imposible. Mis salidas están programadas. — mintió. La reina frunció su ceño, pero al instante volvió a fingir que estaba llorando. — Lamento afligirla tanto, mi reina, pero esto es necesario. — susurró HoSeok, antes de alejarse de su madre y subirse a su caballo.

Por más que la reina trató de impedirlo, incluso comenzó a rogarle para que se quedara, HoSeok no lo hizo, solo siguió su camino, siendo seguido por su consejero y poco después por el guardia real, quien se ganó la mirada llena de odio de parte de la reina.

— Te arrepentirás de no haberme hecho caso, mocoso y también de haberme humillado. — susurró la mujer, limpiando la lágrima que corría por su mejilla.

Aunque HoSeok hubiera querido quedarse aquel día junto a su madre para tranquilizarla, no pudo, pues obviamente tenía un compromiso con TaeHyung al que no iba a faltar.

Bajó de su caballo apenas llegaron al lugar, ya muy conocido, en donde  dejaban a los animales a cargo del general Choi, este solo los miró irse, tanto al príncipe como al consejero, sin intenciones de ir a espiarlos, como había tratado de hacerlo en todo ese tiempo.

— Joven príncipe, ya lo hemos hablado, no insista, tampoco lo presione. Recuerde que los donceles son muy frágiles y que TaeHyung parece serlo aun más.

HoSeok asintió, dejando atrás a Jihong y llegando por fin al riachuelo. Había hablado lo suficiente con su consejero como para saber que no podía presionar a TaeHyung, que solo debería tratar de ayudarlo hasta donde él quisiera. Estaba tan concentrado en todo lo que diría, pues había practicado una forma de disculparse con el doncel la tarde anterior, que no escuchó el incesante llanto que provenía de la persona que yacía esperándolo en la orilla del riachuelo.

HoSeok no se percató de nada, hasta que lo tuvo delante de sus ojos. TaeHyung estaba lastimado y no lo supo por la propia boca del doncel, sino porque él vio las prendas, ya gastadas y andrajosas, que siempre llevaba el pelirubio, manchadas de sangre. Para ese preciso momento el príncipe no dudó nada en acercarse y sentarse al lado de TaeHyung, tratando de no tocar la espalda de este al rodearlo.

— ¿Qué sucedió? — se atrevió a preguntar luego de unos largos minutos de silencio en donde solo consoló a TaeHyung.

El doncel negó, aún cubriendo su rostro con sus manos.

— TaeHyung, por favor, tienes que decírmelo. Tenemos que curarte. — soltó ya un tanto preocupado de ver mucha sangre manchando la camisa de lino que cubría la espalda del pelirubio.— aunque sea déjame ver las heridas y echarte un poco de agua.

El doncel siguió sin reponder, pero tampoco dió indicios de negarse, por lo que sin pensarlo, HoSeok rompió un trozo de tela de su camisa y la sumergió en el riachuelo, para luego caminar y arrodillarse detrás de TaeHyung.

— Levantaré tu camisa, TaeHyung. — susurró, como pidiendo permiso y recibiendo un sollozo en respuesta.

HoSeok respiró hondo y finalmente levantó la prenda, encontrándose con lo que parecía ser heridas hechas por un látigo. Él las conocía muy bien, pues ciertas veces había sido testigo de los latigazos que le propinaban a sirvientes soplones o ladrones, además de ver como quedaban las espaldas de estos tras terminar con la tortura. El castigo era muy fuerte y extremo, para su gusto y creía que para el gusto de cualquiera, por lo que no imaginaba el terror y dolor que había sentido TaeHyung.

Pasó lentamente el trozo de tela húmeda por la espalda del doncel, recibiendo un grito a modo de respuesta. — Sé que duele, TaeHyung, pero solo limpiaré la sangre seca.

El doncel no respondió, solo siguió llorando y soltando uno que otro gemido de dolor al sentir un fuerte ardor alrededor de las heridas, aún abiertas.

Para cuando HoSeok terminó de limpiar la espalda de TaeHyung, se aseguró de tratar de curar las heridas, aunque no tuviera los implementos necesarios y tampoco pudiera hacer mucho.

— G-gracias... — susurró apenas el doncel, sin siquiera mirarlo.

HoSeok asintió, temiendo bajar la camisa de TaeHyung, pues esta no solo estaba llena de sangre y suciedad, también le quedaba a la medida, por lo que la tela terminaría rozando con las heridas, aún abiertas y ocasionaría que sangraran aun más.

— T-Taehyung, ¿Puedes quitarte la camisa? — preguntó algo avergonzado.

El pelirubio lo miró por primera vez en aquella mañana y negó. — N-no lo haré.

— La mía es más grande y te la puedes poner sin temor a que las heridas sangren aun más. Si quieres me doy media vuelta y ten por seguro que no te miraré. — El doncel volvió a negar.
— TaeHyung, por favor, solo hazlo, es por tu bien... — insistió, susurrando lo último y esperando conseguir la respuesta que tanto quería.

Aunque TaeHyung no quisiera denudarse frente a HoSeok, sabía que en parte, este tenía razón, pues las heridas no iban a sanar mientras estuvieran en constante roce con una prenda, ya sucia, así que con algo de duda y temor se colocó de pie. El príncipe de inmediato le dio la espalda, por lo que el doncel no dudó en hacer lo mismo y terminar sacándose la prenda.

— Y-ya estoy listo... — susurró, volteando apenas para recibir la camisa que HoSeok le ofrecía. Ni siquiera fue capaz de ver la espalda desnuda del príncipe por mucho tiempo, pues el dolor y la vergüenza le ganaban.

HoSeok se mantuvo de espaldas, hasta que TaeHyung volvió a avisar que ya se encontraba vestido y que podía voltear.

— M-me queda muy grande. — dijo el doncel, con la mirada baja.

HoSeok se encontraba sin camisa, pero eso era lo de menos para él, pues lo único que le importaba era que el doncel se encontrara cómodo.

— Esa era la idea, TaeHyung. — susurró, algo cohibido, aunque el pelirubio no lo estuviera viendo. — T-tienes que descansar y c-creo que mejor me voy.

Dio media vuelta, con todas las intenciones de retirarse, pues tampoco le gustaba la idea de andar medio desnudo por el bosque. Sin embargo, TaeHyung se lo impidió al sujetar su muñeca con algo de fuerza. HoSeok volteó, preocupado de que el doncel necesitara algo más, pero este solo se acercó, aún con la mirada baja y lo abrazó.

— M-muchas gracias, enserio... — se atrevió a decir nuevamente, levantando la mirada para encontrarse con la cara llena de confusión del príncipe. — Eres el mejor amigo que he tenido.

Y aunque TaeHyung realmente lo veía como un amigo, no podía explicar por qué su corazón latía con fuerza ante la cercanía de HoSeok o por qué se encontraba emocionado de ver cada vez más cerca el rostro del príncipe. Tampoco pudo explicar por qué un simple choque de labios lo llevó a otro mundo o por qué no le desagradó el suave tacto de los labios del pelinegro.

Al separarse, ambos tenían las mejillas sonrojadas y sus corazones amenazando con salir de sus pechos. HoSeok fue el primero en sonreír y alejarse un poco, temiendo de haberse sobrepasado con el doncel. TaeHyung, en cambio, fue el que hizo todo lo contrario, pues se acercó y aún con mucha vergüenza, se atrevió a besar de nuevo al príncipe, siendo correspondido al instante.

Ha pasado bastante para que se besen, ahora solo imaginen cuánto falta para que hagan el sinrespeto :)

Por otro lado, le dediqué el capítulo a la preciosa HarrysVenom. bb, esto es para ti y prometo que habrá otro capítulo que te dedicaré. ♥ Solo espera.

Muchas gracias por los votos y comentarios, bebxs, realmente las aprecio. ♥

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