Estuve un gran rato observándola y notaba como los chicos babeaban por ella. Eso me irritaba más y más.

Después de estar casi media hora vigilándola una chica se me acercó y me llevo a bailar, luego de un rato en la pista nos fuimos a su mesa. Ella estaba un poco ebria, estaba acompañada de dos amigas y un primo. La chica se me insinuaba muchísimo, si fuese un tío descarado ya me la hubiese follado en los baños de la disco, pero en verdad no le llega ni a los talones a mi chica por lo que no llama mi atención en lo absoluto. Muchas veces ha intentado besarme pero en todas la he frenado. Ya me tenía arto y estaba a punto de marcharme cuando llegó su primo y dijo:
-Miren a mi chica – traía a Ely del brazo y me quedé viéndola. Como coño ese pedazo de imbécil va a decir que ella es su chica es tonto o qué?

-Qué bueno primito _dijo la anormal de su prima y me besó. Ely se quedó pasmada viendo como esa chica me devoraba la boca. Cuando reaccione la separe de mí, las cosas estaban sucediendo demasiado rápido. Ely levantó su mano y le pego una cachetada a la chica que la dejó tumbada en el sofá. Eres una estúpida! _se le trepó en sima y no paraba de pegarle. Las amigas de la chica trataban de separarlas pero no podían, Ely estaba como loca. Quite a las dos chicas que agarraban a mi princesa y me llevé a Ely cargada. Ella por supuesto no paraba de gritar.

Ely:
Me fui a la mesa con  ese chico y el me presento a todos los que venían con él. Alex estaba sentado en esa mesa y de pronto la chica le devoró la boca delante de mis narices. Alex la apartó y le di una bofetada que de seguro sintió hasta su madre, le deje tirada en el sofá. Con los tragos que llevaba y la rabia que tenía que me consumía no me sentía satisfecha con esa bofetada que le di, así que me le trepé en sima y le di hasta que nos separaron. Alex me cargó en sus brazos y yo iba gritando
Suéltame que aún no termino con ella!

Veras cuando te coja lo que te haré!
Estas loca, como te atreves a besar a mi chico!
Fui gritando hasta la salida de la disco. Alex me montó en el auto y nos fuimos a la casa. En todo el camino no dijimos ni una palabra. Llegamos a la casa y rápidamente tomé una ducha. Estuve un largo rato dentro del baño, cuando salí Alex ya estaba en la cama en calzón, se había duchado en el otro baño. El me abrazo y entonces me sentí más calmada.
-Amor te pusiste como loca
-Tanto que reprochabas sobre el comportamiento de mis amigos y dejaste que esa puta te besara
-No la deje, la aparte al instante.
-No me interesa! _ estaba muy molesta

-Amor crees en serio que teniendo una chica tan guapa como tú, tendría deseos de estar con alguien más
-Pues no lo sé, dímelo tú
-Pues no!, no tengo ningún deseo. Todo lo que deseo tú lo posees. Te quiero solo a ti
Yo no dije nada, pero me gustaba la confesión de amor tan cursi que estaba dando
-Ven dame un beso_ me jalo hacia el
-Hasta que no te laves la boca no pienso volver a besarte_ me cruce de brazos y puse cara de pocos amigos

-Pero si ya lo he hecho
-Pues hazlo otra vez - con mi dedo señale el cuarto de baño _ El me hizo caso y fue a cepillarse.
-Ya estoy listo ven que muero por besarte – Se sentó a mi lado y rápidamente lo bese. Estuvimos entrelazados un largo rato, y cuando terminamos nos acostamos a dormir. Un largo viaje nos esperaba al amanecer.
Alex me abrazo y dormimos de cucharita, me encanta dormir con él, es una de las muchas cosas que extrañaba cuando estábamos separados.
Me desperté y Alex no estaba a mi lado. Tendí la cama y fui a buscarle a la cocina, supuse que estaría haciendo el desayuno. Llegue a la cocina y él no estaba allí, lo buque en algunas habitaciones pero nada. Le marque al cell
-Hola amor que pasa?
-Donde estás, acabo de despertar y no estas
-A sí, es que tuve que venir a mi casa para preparar la maleta, nos vamos de viaje, lo recuerdas?
-Sí que lo recuerdo. Entonces esperaré a que regreses
-OK, casi estoy listo
-No tardes mucho, ya te echo de menos.
-OK amor, ya casi estoy
-Bien te espero.

Le marque a Roxy, Peter y Amelia, hablamos los cuatro por video llamada, les conté que nos iríamos a Washington por unos días para arreglar todas las cosas, ellos me desearon mucha suerte y dijeron que no tardáramos mucho. Al colgar me puse a pensar en algo que Amelia mencionó, dijo que nunca había montado un avión y recordé que Alex tampoco lo ha hecho. Guardé unos caramelos para dárselos en el viaje.
-Amor ya llegué_ aviso Alex
-Estoy en la cocina
-No te cansas de tragar
-No lo digas así que me ofendes
-baya que noticia.
-Oye no hemos hablado sobre el ganador de la apuesta
-Es en serio?_ puso cara de desinterés
-Sí, muéstrame cuántos números tienes
El quedó en silencio
-Baya no me lo creo, no conseguiste ni uno, ni siquiera el de la chica atrevida?– que manera de burlarme de él
-No que pasa! _ tenia cara de perdedor

-No me lo creo_ dije muerta de risa
Yo si conseguí muchísimos números, deja que te muestre.

Subimos al cuarto y cogí el bolso para mostrarle todos los números que me había dado. Pero abrí la cartera y estaba vacía, no había ninguna servilleta.
-Haber muéstrame _dijo en tono burlón
-Espera es que no las encuentro
-Valla, parece que todo fue producto de tu imaginación, quizás bebiste de más.
-No, no es cierto!. Sabes que tenía un montón de servilletas con los números, dónde están?
-bale es cierto
-Y entonces?
-Eres la ganadora, estas feliz?
-Sí, ahora dime que hiciste con los números
-Los queme, que querías salir con ellos?
-No seas tonto, solo quería restregar mi victoria en tu cara.