Llegamos a la casa y nos dimos tareas. En lo que yo lavaba, Alex iba recogiendo todos los cuartos y limpio la piscina. Luego nos repartimos la mansión para limpiarla, a mí me tocaba la parte superior es decir donde estaban todas las habitaciones, mientras que a él lo tocaba la parte baja: Salón, cocina, comedor entre muchas otras cosas. Los dos terminamos exhaustos, en ese entonces eran las siete de la noche. Pedimos pizza y luego nos vestimos para ir a la disco a cumplir con el trato.
-No así no vas_ reprochó Alex al verme.
Cada uno se puso su mejor ropa, los dos estábamos muy lindos y tentadores, Alex se puso camisa azul y pantalón aguas claras, y zapatos de vestir, yo use una saya de ocasión que hacía que mi parte trasera resaltara y una blusa corta que solo cubría mis senos, los tacos de tacón transparente. Se me veía un cuerpo espectacular.

-Como que así no voy, esto no estaba en el trato, cada uno a lo suyo – el hizo fuerza de cara pero al final aceptó.

Ya sé lo que pasa, ya tienes claro que vas a perder_ me burlaba de el
-Valla, eso no está en mis planes
-Pues ve incluyéndolo.
Nos montamos en el auto y fuimos a la disco.
-Qué pasa?– le pregunté a Alex que me tomó del brazo cuando iba a bajar del auto
-Recuerda, esto es solo un juego_ puntualizo mientras me miraba fijo a los ojos
-Después dicen que yo soy la histérica-—  me burlaba de el
-La verdad ya estoy un poco arrepentido sobre esta apuesta
-Amor no va a pasar nada, es solo un juego- lo coji de la cien
-Es cierto. Mejor ya vamos dentro

Entramos y me separe de Alex, el ambiente estaba bueno, habían bastantes chicos y rápidamente observe a la primera víctima. Estaba en la barra, un rubio alto, guapo, cabello largo y muy bien vestido, tenía un gran parecido con Alex. Mire para ver si estaba solo y no había nadie a su lado así que fui a por él. Me acerque a la barra y me puse a su lado, él estaba concentrado en su trago pero no veía problema con eso.

Perdona me podrías un mojito_ le dije al camarero tratando de llamar la atención del chico y desde luego me funciono.
-Buenas noches está usted sola? _me pregunto
-Si estoy sola y tú?
-Yo estoy muy solo, estaba esperando que una chica tan bella como tu llegara.
-Gracias
-De nada bonita, te invito un trago
-Ya he pedido, pero gracias
-Me das tu número, así puedo invitarte a salir
-O claro – Fingí que buscaba mi celular en el bolso
Mm lo siento se me ha quedado el cell
-Hay es una pena
-Tranquilo apúntame el tuyo en esta servilleta, yo te marcare y quedamos.

-Está bien- dijo apuntándome su número.
Me tome el trago en la barra con él, él estaba un poco tomado, si quieres nos vamos a un sitio más calmado _me dijo al oído. Alex se acercó a nosotros y le empujó, pero lo hizo como si hubiera tropezado con el chico. La situación se estaba yendo de control, Alex tenía cara de pocos amigos.

-Voy un segundo al baño y luego nos vamos _le mentí al chico
-OK preciosa, aquí te espero.
Salí como en dirección al baño y Alex me siguió. En los pasillos me incrustó contra la pared y estaba un poco molesto
-No pierdas los estribos, recuerda que esto es solo un juego. Mira ya tengo un número y una cita a la que no iré– movi la servilleta en su cara –Tranquilo no hay nadie mejor que tú, yo te amo a ti- le bese y él se relajó un poco.
-Está bien, pero trata que tus amigos sean más respetuosos o en serio no respondo
-Baya y dices que soy histérica_ levante mi ceja y tenía deseos de reír
-No es juego, tú eres mi chica _ me cojio de las nalgas
-Con que tu chica no!, pues tu chica tiene una apuesta que ganar_ le di un beso y me largue.
Me puse a observar el panorama y encontré el segundo chico de la noche. Un moro súper lindo, estaba bailando y se movía muy bien. Me acerqué a él y cuando estuve a su lado tire mi reloj delante de él, luego me incliné a recogerlo y así llamaría su atención.
-Te ayudo bonita_ me dijo al oído
-Gracias, es que se me callo el reloj. La verdad soy un poco despistada
-Vaya si te quedas a mi lado puedo ayudarte con eso
-En serio?- dije haciendome la tonta
-Sí, te apetece un chupito?
-Si no es molestia
-Para nada.
Bebimos dos rondas de chupitos y luego nos sentamos en su mesa
-Y cuéntame que hace una chica tan linda sola?
-Es que soy como caperucita ando en busca de mi lobo feroz
-Baya baya, quien lo diría
-Y tú?
-Yo?
-Si tú!. Porque estas soltero con lo guapo que eres.
-Así que crees que soy guapo_ me jalo hacia él y casi me besa pero lo esquive
-Me das tu número?
-Claro guapa, más bien debería ser yo quien lo pidiese
-Es que se me quedo el cell, como dije soy un poco despistada – puse mi mano en la cabeza fingiendo lamentarlo
-Entonces donde te lo apunto
-Aquí en esta servilleta_ le di una servilleta
-Tienes con que apuntar?
-Toma tengo un boli.
El chico me dio su número y guarde la servilleta en la cartera, nuevamente intento besarme y esta vez se me acercó muchísimo más, de pronto vi a Alex con una chica, ella estaba casi encima de él, me enfade pero no lo mostré
-Discúlpame un segundo para ir al servicio
-Claro preciosa, yo aquí te espero
-Genial
Me quede unos segundos mirando a Alex y tratando de relajarme para no perder los nervios. Traté de ignorarlos y me fui a la pista de baile, un chico se me pego y comencé a bailar con él, bailamos dos canciones.
-Linda vamos a mi mesa?_ me tomo de la mano
-OK
-Bien, allí está mi prima con dos amigas y un chico que acaba de conocer, supongo que ya es su novio.
-OK vamos.

Alex:
Ely estaba súper linda, esa ropa que se puso hacia que su cuerpo se viese aún más voluminoso. Cuando la vi vestida me dieron deseos de cancelar la apuesta, íbamos llegando a la disco y cada vez me arrepentía más de haber aceptado esa estúpida apuesta.