Hermanos!
Esa palabra se repetía en mi mente, no podía pensar, la vista se me nubló y sentí que caí al suelo.

Alex, Alex  _ desperté llamándolo_ estaba acostada en una cama y habían muchas maquinas a mi alrededor
- Hija cómo te sientes?
-Donde esta Alex?
-Él está bien, no a querido separarse, se ha pasado los dos días sentado, no ha comido, ni ha hablado. Solo está esperando noticias de tí.
- Puedes pedirle que pase
-Está bien, yo voy a esperar fuera.
-Bien

Ely!
-Alex como estas?
-Ahora que despertaste estoy mejor
- Estuve mucho tiempo inconsciente, tuve un sueño horroroso
-Más horroroso que lo que está pasando?
-Sí, soñé que éramos hermanos, creo que por eso desperté
-No amor, no fue un sueño
- Que quieres decir?
- Tu papá nos contó que somos hermanos, y por eso fue que te desmayaste.
-No, esto no puede ser verdad, no no.
- Ely cálmate amor, debe haber una buena explicación para esto, sospecho que sea una trampa para separarnos.
-También lo creo amor, me besas?
-Sí, pensé que nunca lo pedirías.
Nos besamos y me quedé mirando sus ojos verdes, son tan lindos y me encanta verme a través de ellos.

-Permiso, señorita ya se puede ir, le acaban de dar el alta, su mamá está afuera - dijo la enfermera.
-Gracias
Mamá donde esta papá?
-Está en casa, esperándolos para aclarar esto de una vez.
-Bien entonces vamos.

Llegué a casa y baje de manos con Alex, ambos teníamos miedo de pasar tras la puerta. Algo me decía que después de hoy todo iba a cambiar, no tenía buen presentimiento.
Nos apretamos las manos, nos miramos a los ojos, nos besamos y nos adentramos en mi casa

Papa! - Grite con todas mis fuerzas, me sentía como si mi papá fuese el malo y los muñequitos estavan por acabar, ya era su hora de caer.
-Estoy en mi despacho.
Alex y yo entramos
-Tomen asiento.
-Papá no juegues con nosotros! .

-Yo no quería que supieras de esta manera que tenías un hermano, pero veo que la sangre pesa más que todo y aquí estamos.

- Puedes dejar de darle vueltas e ir al punto - expresó Alex

-Bien!
Hace años conocí a Sofía, éramos muy jóvenes y ella me llamó la atención desde el primer momento, era pobre y mis padres cuando se enteraron prohibieron que me acercara a ella. Estuvimos tiempo sin vernos y un día me llamó diciendo que se marchaba. Ese día me escapé y fui a su casa estuve con ella hasta el momento que abordó en el tren, ese día sentí que había muerto.
Pasé mucho tiempo que no hablaba, apenas comía, pasé meses esperando que ella regresara pero eso no pasó. Un día mis padres dijeron que nos iríamos de viaje, fuimos a Nueva York, ahí conocí a tu mamá Ely, ella era una chica atrevida, espontánea incluso divertida y esas cualidades llamaron mi atención, mis padres dijeron que íbamos a pasar las vacaciones allí y comencé a salir con ella. Un día papá tuvo que hacer un viaje de negocios, él era accionista y fui con él, vinimos a Los Ángeles. En esos tiempos los padres llevaban a los hijos a los burdeles a divertirse con chicas, fue mi primera vez en un lugar de esos y allí me encontré con Sofía, ella se había vuelto prostituta. Nos sorprendimos al vernos, hablamos mucho y luego nos acostamos, el viaje de papá era por tres días y los tres días fui al burdel y me acosté con Sofía.
Días después regresé a Nueva York, yo salía mucho con Leticia, y un día me pidió que fuera su novio y acepté, como era de buena posición económica mis padres aceptaron nuestra relación, luego nos fuimos a vivir juntos y después nos casamos. Un día recibí una llamada de Sofía avisando que estaba embarazada y que era mi hijo, fui a hablar con ella para que me explicara cómo estaba tan segura que el niño era mío, dijo que sólo conmigo no usaba protección, pero que como sabía que yo no lo creería ella le haría un análisis de ADN al niño cuando naciera, en ese trato quedamos, yo le expliqué que tenía mi mujer, que me había casado y que me haría cargo del niño pero nada más, no quería nada con ella, ya era feliz con Leticia. Ella aceptó, le dije que cuando ella diera a luz y yo tuviera la certeza que el niño era mi hijo daría dinero para que se retirara de esa vida y te criara en paz y como es correcto.
Ese mismo día volví a Nueva York, no sabía cómo contarle a Leticia que tendría un hijo, sabía que no iba a creer el cuento. Estuve dándole largas y buscando la manera de poder contarle, trate de hacerlo muchas veces pero siempre que trataba se me hacía un nudo en la garganta. Cuando por fin me decidí a contarle ella dijo que estaba embarazada, que se había hecho una prueba y tenía dos semanas. Me puse muy feliz y ese día tampoco le pude contar.
El día del nacimiento de Alex no pude estar presente, Leticia no estaba bien de salud, pero mandé a mi abogado con una muestra para que hicieran el ADN al niño. A la semana me llegó un sobre y eran los resultados, había dado positivo, Alex era mi hijo! . Mandé a mi abogado a que comprara una casa para ustedes y que pagara los gastos del hospital, mande a que te compraran todo, nunca quise que te faltara nada. Leticia tuvo muchas complicaciones antes del pacto, tenía amenaza de aborto por eso no me podía separar de ella. Con mucha suerte el pacto no tuvo complicaciones y Ely nació sana y con mucha salud, entonces viajé a Los Ángeles quería ver a mi hijo, pero cuando llegue a la casa habían otras personas, habían comprado la casa tu mamá la había vendido.
Pagué muchos detectives para que te buscarán, no entendida porqué ella se había ido, hoy aún no lo entiendo. Llegué a casa y le conté todo a Leticita llorando, nunca te pude ver, lo único que sabía era que te llamabas Alex, ella también sufrió pero entendió todo y me apoyó. Los detectives no daban ninguna noticia de ustedes, era como si la tierra se los hubiera tragado, Leticia notaba que ese tema me hacía daño así que se le ocurrió la idea de venir a vivir a Los Ángeles por si Sofía volvía. Pasé muchos años sin recibir noticia de ustedes y un día el detective dijo que había encontrado una coincidencia, tardamos en encontrarte porque Sofía nunca te puso mis apellidos, solo los de ella. Estabas en un orfanato y fui a verte, pero cuando pregunté por ti dijeron que te habías escapado, pedí que me enseñarán tus datos, y sí eras tú!, el hijo de Sofía, mi hijo. Sabía que no podías estar muy lejos, así que le di una foto al detective para que te buscara, pero fue muy difícil encontrarte.