El tiempo avanza y con ello se van reduciendo rápidamente el número de contrincantes, las primeras dos rondas han sido prácticamente pan comido para la mayoría de mis compañeros del CARP, desafortunadamente Perth ha quedado eliminado después de haberse enfrentado a un imparable Sing, quién ha dejado en claro que no tiene pensado perder el torneo.

Buena suerte con ello...

Ahora es el turno de Ohm, quién parece disfrutar como el maldito demente que es, cada golpe que da... como cada golpe que recibe.

¿Quién diría que detrás de esa cara de tonto, hay un maldito hijo de puta sadomasoquista de primera?... Bien dicen que caras vemos... Locuras no sabemos y este hijo de puta es una máquina imparable de dar golpes.

Hasta ahora todas sus peleas no pasan del primer round, y al ver la expresión de Sing... veo que tiene un nuevo objetivo a la vista y ese es sacar a Ohm del camino.

Sabe perfectamente que es un oponente fuerte y muy peligroso que no se anda con rodeos, lo único que en serio me preocupa es que desea hacerle pagar con creces por el ataque que recibió cuándo el novato defendió a Gun.

Sing es impulsivo y puede llegar a cometer una estupidez con tal de lograr lo que se propone, y por primera vez me preocupa que en serio pueda lastimar a Ohm.

Aunque el odio que hay en su mirada al ver a Ohm, no se compara con la que me da cada que me ve, algo me dice que tiene planeado hacerme mierda, para llevarse el torneo.

En serio quiero ver que lo intente para poder cobrarme de una vez por todas cada una de las burlas que le ha dedicado a Gun.

Así que... tanto él así como el resto de los competidores se la van a pelar, porque no pienso dejarme eliminar por ninguno de ellos, por nada... ni por nadie. Porque ellos quieren esto tanto como yo, y vaya que si me he esforzado y partido el culo a más no poder cada día desde hace seis meses en los duros entrenamientos...

Así que por mi todo el mundo se puede ir a la mierda... Unos en menor grado que otros, pero al final a todos los pienso mandar al mismo lugar.

»Las rondas de eliminación siguen su curso y aunque no quiera escucho el vitoreo de la gente apoyando a cada uno de sus favoritos y aunque sé que mi prioridad es concentrarme... mi mente está puesta veinticuatro siete en mi pequeño sol y en lo idiota que he sido al pedirle que no viniera a apoyarme.

¿Qué mierda pasa conmigo?

Tanto que critique la actitud de su padre, y yo me comporté de la misma manera, ni siquiera sé por qué le pedí que no viniera... ¿Con qué derecho lo hice?, tal vez me dejé llevar por lo que dijo su padre en su desesperado intento por protegerlo.

Así que sin pensar un poco en lo que él deseaba o quería hacer... Hice lo más estúpido al apoyar a su padre en vez de apoyar a mi hermoso y pelirrojo novio.

Mi novio... Dos putas palabras que tienen tanto valor en mi vida y para ser honesto, nunca creí que en algún momento de mi puta existencia llegaría a decirlas.

Más sin embargo... ahora estoy hasta el culo de enamorado de un chico precioso e inteligente que ha logrado derribar todas y cada una de mis barreras para colarse directamente en mi vacío corazón, llenándolo con su amor haciéndome sentir por primera vez que merezco ser amado.

Gun llegó como un imparable tornado a mi vida poniéndolo de cabeza instalándose en lo más profundo de mi ser, de dónde estoy seguro que será imposible que salga.

—No sé dónde tienes la puta cabeza... Pero necesito que toda tu atención esté puesta en el torneo —las duras palabras del entrenador me traen de vuelta.

Le miró sumamente enfadado y el maldito cabrón hace un atisbo de sonrisa, estoy seguro que está disfrutando ver la cara de culo que he puesto... Y que ni siquiera me preocupo en ocultar.

—Esas ganas que tienes ahora de patearme el culo... úsalas para acabar con tu siguiente oponente —dice muy tranquilo el hijo de puta— Vamos Jumpol... tú y tu cara de culo suban al ring que ya es hora... No olvides da lo mejor de ti. —dice finalmente cuándo se escucha mi nombre a través del altavoz.

Tras dar un largo suspiro, chocó ambos puños y camino hacía mi destino, en dónde ya me espera un tipo mal encarado.

Al estar nuevamente en el centro del cuadrilátero... nos vuelven a recordar las reglas, para al final hacernos chocar los putos puños de manera amistosa... Aunque no tiene nada de amistoso que me golpeen con dureza los puños queriendo hacerme saber la fuerza que hay en ellos.

Si pudiera reírme a carcajadas, en serio que lo haría, pero el maldito protector bucal me corta la intención.

Cuándo suena la campanilla indicando que ha dado inicio el primer round, lo primero que hacemos es medir y poner a prueba al oponente, haciendo algunos movimientos para tratar de intimidar al contrario, ambos esperamos ver quién será el que lance el primer golpe.

Mientras continuamos con una ridícula danza en medio del cuadrilátero, escucho algunos vítores gritando: "Fury" por todo lo alto.

—¡Vamos Jumpol! ¡Tú puedes, acaba con él! —se escucha la voz gruesa de Ohm y no me sorprende su apoyo, por supuesto que desea que gane... para que entonces él pueda tener la oportunidad de competir contra mí.

Eso sí que sería épico... Volver a cómo empezó todo. El tipo de nombre Sang me lanza un jab derecho, que fácilmente logro esquivar, con ello dándome la oportunidad de impactar un Uppercut a la parte baja del abdomen izquierdo logrando que éste baje un poco la guardia.

Si estaba buscando jugar a mi favor este es el momento preciso, así que me dedico en atacar sin piedad.

—¡Vamos Off!... Acaba con él!

Por un puto segundo me congeló al escuchar aquel grito, dándole a mi oponente un respiro mientras intento calmar mi jodido y alocado corazón.

¿Acaso estoy alucinando?

—¡Vamos amor... Tu puedes! —no, no estoy alucinando... Esa es la voz de mi pequeño sol, quién está gritando como un demente mi nombre para darme ánimos.

Joder... Pero qué bonito se siente escuchar cada palabra que sale de su preciosa boca. Y mi cuerpo responde de inmediato a cada una de sus frases como si fuesen órdenes, y yo no soy quién para contradecirlo.

Sang aprovecha ese breve lapsus para volver al ataque queriendo tomarme completamente desprevenido, pero ni siquiera le doy la oportunidad de que dé un paso cuándo su rostro se traga un hermoso derechazo, y de inmediato cae a la lona completamente noqueado.

Rápido me aparta el referí mandándome a mi esquina para iniciarle a Sang el conteo oficial, mientras yo aprovecho para buscar al dueño de la voz más perfecta para mis oídos.

Empiezo a buscarlo como un puto loco entre las gradas, hasta que doy con su ya peculiar greña pelirroja. Está precioso con ese mono de mezclilla y esa camisa de manga larga y visiblemente sonrojado.

—Tres... Cuatro... —cuenta el referí y al parecer Sang no tiene intenciones de levantarse.

Vuelvo a mirar a mi precioso chico, quién me sonríe alzando una pancarta y... Momento... ¿Dónde mierda está su collarín?

—Seis, siete...

El referí sigue haciendo el conteo de los diez segundos de rutina, mientras yo me pierdo en mi chico y en lo que dice la colorida pancarta que trae entre manos, pero no puedo dejar de preocuparme en que no lleva el collarín... ¿Por qué se lo ha quitado? ¿Su padre sabe que está aquí?

—Nueve... Diez.

Se terminó... El referí hace la seña que he ganado legalmente vía K.O, y el ruido ensordecedor se hace presente, pero a mí sólo me interesa escuchar una voz, pero esta se pierde entre tanto grito.

Cuándo bajó del cuadrilátero me quito el protector bucal así como el protector de la cabeza y voy hasta dónde está mi equipo quienes me reciben con una leve palmada en el hombro para felicitarme.

—Buen trabajo, Jumpol —me felicita el entrenador y el señor Mike y no me pasa por alto la forma en que me mira Ohm.

—Felicidades, Jumpol... Ganaste limpiamente —dice con una leve sonrisa y sé que no se refiere a la pelea— Sólo... cuídalo mucho. —dice en medio de un leve suspiro y yo sólo me limitó en asentir.

¿Qué lo cuide?... Joder, hasta sería capaz de dar mi vida si fuera necesario, ese pequeño lo es todo para mí. Se ha convertido en mi mayor motivación, él y su fuerza son las que me impulsan a querer ser un hombre de bien para poder ofrecerle algo en la vida.

Una vez más volteo hacia dónde él estaba en compañía de sus amigos y mi preocupación crece cuándo de pronto ya no lo veo.

—Hola Papii...

De inmediato me volteo a su llamado atraído por él cómo si éste fuera un canto y sin que me importe una mierda que me vea su padre o el resto del mundo, lo tomo entre mis brazos para hacerle saber lo feliz que me ha hecho que él esté aquí conmigo en este momento.

—Te extrañe, Sol —es lo primero que logro decir y una estúpida sonrisa se instala finamente en mis labios al sentir sus delgados brazos en mi cuello, y sus largas piernas enroscadas alrededor de mi cintura, y sé que también a él le importa una mierda lo que su padre diga al vernos así.

Lo compruebo cuando me sonríe en la forma en que lo hace iluminando todo el centro de convenciones, y se impulsa un poco para besarme con ternura.

Escucho un par de maldiciones a mi espalda y sé de quién son... Pero Gun sabe que esto es justo lo que necesitaba, y yo acepto gustoso.

El que Gun esté aquí y que grite mi nombre, el que no le importe lo que la gente diga o piense de nosotros, el poder hacerle saber a la gente que éste precioso chico es mi novio y mi mayor motor... Pff... es la sensación más puta madre que he tenido.

Alestar así con Gun, sé... y sigo convenciéndome completamente que estoy loco porél y sólo deseo poder hacerlo feliz tal y cómo se merece.

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ

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Bien corazones, hasta aquí la actualización de esta historia... el día martes estaré actualizando y quizá dándole fin. Espero hayan disfrutado y sigan haciéndolo...

Gracias, por leer y comentar.