36. ¿Qué es esto?
Por fin hemos salido del hospital y casi puedo jurar que mi papá nos observa a distancia, a pesar de que no se quedó preocupado me intriga que fue lo que le dijo Off para que me dejara ir con él.
Si pregunto, dudo mucho que me diga, lo único que me queda claro es que mi padre también confía plenamente en él o de lo contrario yo no estaría aquí con él con destino a no sé dónde porque no me quiere decir nada.
Cómo ya es su costumbre, y con un cuidado que me impresiona, me ayuda a subir a su enorme Jeep y no pierde tiempo en colocarme el cinturón de seguridad, y en ese breve instante me permito observar con lujo de detalle su perfecto y atractivo rostro y al final me veo recompensado con la más hermosa de sus sonrisas, al mismo tiempo que acaricia mi mejilla.
—¿Estás listo Solecito? —me pregunta irradiando un brillo especial que me sorprende, y sólo puedo sonreírle de igual manera.
—Sí, —respondo no muy convencido porque en realidad no sé qué es lo que tiene en mente.
—¿Qué? —me pregunta con una sonrisa nerviosa, se le ve jovial y se ve que ha estado esperando esto y eso me inquieta un poco más.
—¿Me dirás a dónde vamos? —Pregunto esperando correr con suerte—. Si te digo, entonces ya no será una sorpresa —es lo último que dice antes de poner el auto en marcha.
»Off ha manejado por unos quince minutos, y cuando vamos por el camino que creo que es hacia su departamento no puedo evitar sentirme un poco incómodo.
Estoy consciente de que es una actitud muy infantil de mi parte, pero es algo que no puedo evitar, ese lugar me trae recuerdos muy desagradables, que de momento prefiero no recordar.
Al final de cuentas es su casa, es donde vive, así que necesito trabajar más en mi confianza y empezar a bloquear esos recuerdos, lo que él haya hecho antes no lo puedo cambiar, ahora importa el hoy y el nosotros.
Una vez más creo que soy muy obvio porque no duda en mirarme para ver mi reacción, ahora lleva una gorra de béisbol con su cabello negro hacia atrás, sus lentes de sol estilo aviador, y sus brazos multicolor al descubierto mientras sonríe mirando al frente, y luce como el hombre más sexy que jamás he visto en mi vida.
Sabe que me he girado para admirarlo con detenimiento y su sonrisa se hace aún mayor al mismo tiempo que se muerde el labio inferior, ahora estoy más confundido que antes porque no tengo ni la menor idea de nada y tal parece que Papii ha estado esperando por este momento.
Al pasar por la calle en donde está su departamento me doy cuenta de que seguimos de largo y volteo a verlo confundido y me sorprende que no diga nada y tampoco tiene intención de parar. Inconscientemente libero el aire que había retenido empezando a sentirme un poco aliviado y de soslayo veo como la sonrisa de Jumpol ilumina todo alrededor.
¿Qué está pasando?
Seguimos por la misma avenida, y aunque no puedo voltear a mirar a Off como quisiera debido al collarín, una delicada caricia en mi mano izquierda me hace saber que no debo de preocuparme, que todo estará bien y creo que eso es más que suficiente para sentirme tranquilo...
Cuando menos me lo espero, el auto se ha detenido en una zona residencial no muy lejos de su casa y un beso en mi mano hace que me gire a verlo, si tan sólo pudiera describir su rostro en este momento...
—¿Estás listo? —pregunta ansioso y aunque no sé de qué se trate todo esto, sólo puedo afirmar con timidez.
—Uhum... —respondo y se le escapa una enorme sonrisa porque él sabe perfectamente que no tengo idea de nada.
De nuevo me ayuda a bajar del auto y con ternura agarra mi mano mientras caminamos hacia una modesta casa de un piso.
—¿Dónde estamos Papii? —no me responde sólo sonríe y con la mano que tiene libre saca unas llaves y de inmediato abre la puerta del inmueble.
La casa aún tiene olor a pintura fresca, las paredes son de color neutro y aunque le faltan muchos detalles por terminar, me sorprende que tiene casi todos muebles en las mismas tonalidades neutras que la hacen ver sencillamente preciosa.
Aún no me ha dicho que es lo que estamos haciendo aquí, pero no importa... Lo había echado tanto de menos, que con el simple hecho de estar junto a él es más que suficiente.
—¿Dónde estamos? —le preguntó curioso en vista de que él sigue sin decirme nada.
Me observa con cautela, como si estuviera estudiando mi reacción mientras se muerde con nerviosismo el labio inferior, ¿acaso está sonrojado?...
—¿Te gusta? —pregunta intentando aparentar estar tranquilo.
—Es una casa preciosa —confieso— ¿quien vive aquí? —pregunto curioso.
—Me gustaría que en un futuro podamos vivir aquí los dos —suelta nervioso y yo creo que a mí me dará algo...
—¿Papii?
—Ven Sol, vamos a sentarnos —toma de nuevo mi mano y me guía hacia el sofá, ante mi imposibilidad para moverme.
"Me gustaría que en un futuro podamos vivir aquí los dos", la frase se repite en mi cabeza una y otra vez, ¿acaso escuché bien?
Estoy completamente en shock, no soy capaz de procesar nada en estos momentos, y él lo sabe porque sigo sin reaccionar.
Con cuidado me sienta en el sillón de dos plazas y él toma asiento a mi lado, inmediatamente toma mi helada mano, y empieza a hablar.
—Sé que no te gustaba el lugar donde vivía y te soy honesto a mí tampoco me gustaba, —da una larga exhalación— después de haberlo pasado tan bien juntos en el hotel y después de dejarte en tu casa, en cuánto llegué a ese departamento sentí una fuerte punzada, por primera vez me sentí avergonzado de quién era antes de conocerte.
Mi corazón está latiendo tan fuerte que lo siento en las orejas.
—Lo que quiero decir... es que ya no soy ese Off que hacía y deshacía en ese lugar. —percibo su honestidad al tocar mi pecoso rostro. De nuevo un pinchazo incómodo se instala en mi pecho al recordar todas las veces en que fui testigo, pero aún así no tengo derecho a reprocharle nada porque en ese entonces no había nada entre nosotros...—. Después de haber estado juntos y haberte hecho el amor supe lo que quería a partir de ese momento —siento mi cara arder al recordar— te lo dije Sol, te quiero mucho y te quiero conmigo. —Dios... Ahora mi corazón late tan fuerte que bien puede tocar en una orquesta—. Gun, imagino que has de pensar que es muy pronto para pensar en el futuro, pero... debes saber que para mí lo nuestro no es un juego, te lo dije... Yo no podría hacer esto con nadie más que contigo
¿En verdad esto está pasando?
—¿Papii? —apenas y me sale la voz.
—¿Qué?... ¿Por qué tienes esa cara?
—¿Qué hay de tu departamento?
—Después de aquella noche, pensé que necesitaba un cambio y como si fuera una jodida señal, pasé por este vecindario y vi el letrero en venta, así que creo que por fin le di un buen uso al dinero de mi tío y bueno aquí es dónde ahora estoy viviendo.
—¿Qué hay de todo lo que tenías en tu antigua casa?
—No lo necesito, no podía empezar de cero con cosas de mi pasado. —se acerca para besarme con cuidado. Juro que estoy intentando procesar todo—. Así que aproveché que tu padre me había echado una semana del CARP para organizarme y hacer todos los cambios necesarios... Fue dos en uno, —dice guiñándome el ojo— me dediqué a arreglar la casa y al mismo tiempo me estaba ejercitando.
—¿Es por eso que no me llamabas? —él sólo asiente.
—Deseaba apresurarme a tener todo listo, deseaba librarme de aquel lugar lo más pronto posible.
—Off... Sabes que yo nunca te lo habría pedido...
—Lo sé... Y esa era una razón más para hacerlo, quería que cuándo estuvieras conmigo te sintieras cómodo sin tener la necesidad de irnos a un hotel...
Dios... ¿cómo no amarlo?
—Quiero que aquí te sientas en casa, que tengas esa libertad para hacer y deshacer... Si hay algo que no te guste puedes cambiarlo a tu antojo, Gun. —Juro que mi corazón va a colapsar en cualquier momento— Sé que apenas vamos iniciando, pero lo de vivir aquí en un futuro juntos lo dije en serio, ojalá que más adelante puedas vivir aquí conmigo. —Juro que si pudiera en este momento me arrancaba todo lo que llevo puesto y me subiría sobre él para besarlo como deseo hacerlo, y tal parece que me lee el pensamiento porque con gran cuidado me toma y me sube a su regazo quedando a horcajadas y empieza a acariciar mis piernas subiendo las manos hacia mi trasero—. No quería hacerlo de ésta manera, había pensado algo diferente... Pero no quiero esperar más...
No puedo ocultar el gran nerviosismo que tengo y una enorme sonrisa se posa en sus delgados y bonitos labios, mientras que sus preciosos ojos gris oscuro me miran con un brillo especial.
—¿Me estás asustando sabes? —digo con una sonrisa nerviosa y rápido se incorpora para besar mis necesitados labios.
—Permíteme ser tu novio Gun —dice en un susurro contra la comisura de mis labios.
De inmediato me separo un poco para mirarle...
—¿Qué? —me da un beso en la punta de la nariz ante mi asombro.
—Quiero que me permitas ser tu novio Gun, quiero que me permitas estar a tu lado para amarte y para poder cuidar de ti...
¡Madre santa!
¿Acaso estoy alucinando?
—¿Entonces qué dices, Sol? —me mira y puedo sentir su nerviosismo y creo que mi cuerpo se ha convertido en una enorme gelatina de naranja.
—Sí, sí quiero Papii. —respondo con todo el nerviosismo y alegría del mundo y una enorme sonrisa se posa entre nosotros.
Off no deja de besar mi rostro al mismo tiempo que sus enormes manos me recorren el cuerpo por completo.
—Si no llevaras ese collarín no dudaría en desnudarte para hacerte el amor. —dice con su ronca voz y eso es suficiente para derretirme por completo.
—Podemos fingir que no lo traigo... —mi voz sale casi en un jadeo, ¡rayos como pude decir eso!
Off de nuevo me besa pidiendo permiso para explorar mi boca y le doy acceso para que me deguste por completo.
—Le prometí a tu padre que te llevaría temprano a casa, y no quiero fallarle o me cortará las bolas. —dice en la sensible piel de mi cuello erizándome por completo. No dudo en separarme un poco para mirarle incrédulo, y sólo sonrío para después relamerme los labios. Su mirada se oscurece peligrosamente al tiempo que acaricia mis piernas—. Aunque yo también lo deseo, hoy no podemos —dice como si de nuevo me leyera el pensamiento.
Pero sus palabras en este momento no son de impedimento, me siento feliz, me siento eufórico, no puedo dejar de pensar que él ha hecho todo esto por mí, por nosotros...
Siento su dureza en mi trasero y eso es suficiente para querer quitarme el mugre collarín, pero Off no hace y no dice nada, sólo me mira con ese brillo y me regala esa sonrisa digna de comercial de pasta dental.
—La respuesta sigue siendo... —Ni siquiera puede terminar la frase en cuanto siente que me frotó sobre él con todo el cuidado, apoyándome en sus hombros—. Me estas matando, Gun... —dice en un susurro al tiempo que aprieta mi trasero— Te deseo como no tienes idea, Sol... Pero no quiero lastimarte.
Me abraza apretando mis caderas contra su dureza haciéndome jadear al instante y ese pequeño sonido le oscurece la mirada y de nuevo alza sus caderas.
Sé que no dará su brazo a torcer, si algo tiene Off es que es muy protector conmigo, y lo que menos quiere es lastimarme, así que en el fondo le agradezco que tenga más control que yo.
Su beso en la nariz me indica que nuestra sesión candente ha terminado al menos de momento y cuando mira el reloj se que es hora de volver a casa.
—Dijo mi papá que mañana regresas a entrenar.
—Ujum... Estas semanas serán las más difíciles, así que dudo que nos podamos ver. —se acerca de nuevo para tomar mi rostro entre sus manos.
—Te voy a extrañar —confieso con una pizca se tristeza. —pero debes saber que estoy muy orgulloso de ti y definitivamente sé que darás lo mejor de ti.
—No tienes idea de cuánto te quiero —dice besando mis labios.
—Yo te quiero muchísimo más Papii —mis palabras le gustan y mucho.
—Será mejor que te lleve de una vez a casa o de lo contrario no me hago responsable...
—Ya estoy en casa... —le dijo con honestidad y de nuevo aparece esta nueva mirada en su atractivo rostro.
—No sé qué rayos estás haciendo conmigo, pero nunca dejes de hacerlo, Sol. —me dice esa frase que alguna vez me dijo en el pasado al tiempo que su frente reposa sobre la mía y me permito disfrutar de su cálido aliento y de todo lo que el provoca en mí.
¿Se puede estar más enamorado?, en mi caso diré que sí, cada día que pasa mi amor por Off crece más y más al grado que temo que sólo se trate de un bonito sueño.
Tal vez sea muy pronto para pensarlo, pero estoy seguro de que Papii llego a mi vida y a mi corazón para no salir jamás.
𝕰𝖛𝖎𝖎𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top