Estaba un poco consternado después de salir de la clínica y volvía al departamento. Después de hablar con ella menos quería ver a Jimin o Min Ju en un bueno rato.

Entre al departamento y no hable con nadie solo me dispuse a tender las camas como se lo había prometido a Jin Hyung. Ninguno de los chicos me preguntaron algo a mi o a Jimin.

Deseaba con todo el corazón que Lee Jong volviera, ya me estaba volviendo loco y sentía que podía cagarla en cualquier minuto si abría la boca por que no diría nada bueno. Se supone que soy un hombre tranquilo y toda esta situación me pone los nervios de punta y con ganas de vomitar; Yo y mi maldito estómago débil en situaciones como estas. Recuerdo que vomite 2 veces antes de ir por Min Ju en nuestra primera cita.

Yo estaba preparando mi maleta con ropa cómoda, NamJoon Hyung me dijo que la ropa que nos podrían en los conciertos y en los Fanmeeting lo tendrían preparado ya las estilistas. No quería irme en realidad, no quería salir del país, no quería seguir siendo Lee Jong y no he hecho prácticamente nada y tampoco es que lleve mucho tiempo suplantándolo pero ya no soportaba más esta vida de Idol.

Pase la mano por mi espalda justo donde tenía los morados de mis caídas que ya se estaban borrando pero todavía dolían y seguí acomodando mi maleta metiendo todo lo necesario tratando de no olvidar nada, las pijamas necesarias, lista, la ropa interior necesaria, lista, camisas blancas de Lee Jong, Listo, pantalones, listo, cepillo de dientes, listo, las botas de Lee Jong, casi... Las buscaba por toda la habitación y nada, hasta por debajo de la cama.

— ¿Buscabas algo? — Jimin tenía las botas limpias en una de sus manos mientras entraba al cuarto y las dejaba las botas en mi cama. Y en su otra mano tenia una bolsa marrón que no dejaba ver su contenido.

— No era necesario que las lavará tú, yo podía hacerlo — dije algo amable mientras dejaba de bien buscar debajo de la cama y me paraba limpiando un poco mi pantalón y la camisa

— En realidad fue Jin Hyung quien las limpio — se sentó en su cama con media sonrisa — Eres muy ordenado...

— Ya lo se, soy muy diferente a Lee Jong — la monotonía en mi voz bastante cuando lo interrumpi y busque mi toalla y medias limpias

— Eres totalmente diferente a él, no tiene nada en común, solo él parecido entre ustedes que yo ya no puedo notar, estoy seguro que si los dos estuvieran en la misma habitación sabría cual es cual — paso su lengua por sus labios algo resecos era una pequeña manía de él, las estilistas deberían ponerle más balsamo labial para que no se le sequen tanto.

— Claro solo pon una lechuga frente a los dos y el primero que se la como soy yo. Cualquiera lograría diferenciarnos solo con eso — una risa escapo de sus labios y saco algo de la bolsa. Eran dos tazas de comida rápida y eran ensaladas para ser más preciso una Cesar con Camarones.

— O sólo pongo una canción cualquiera y Jong la bailaría perfectamente y tú solo te caerías — esta vez reí yo, tenía tanta razón. Supo como sacarme una conversación y llamar mi atención.

Me senté al lado de el y agarre una de las tazas abriéndola y llenando a la ensalada de un sobre con aderezo César, para luego agarrar la cubiertos de plástico. Yo comía con una sonrisa de oreja a oreja, cualquier cosa que tuviera lechugas me hacia feliz y más si era compartido con alguien.

— Una vez Min Ju me dijo que ganar tu confianza y tu amistad es muy fácil a veces. Tu eres la única persona que puede decir que la felicidad se puede comprar, mirate nada más una ensalada y hablamos tranquilos — él comía también con una sonrisa y yo sólo le di un pequeño golpe en el hombro

— No puedo comprar que este con Min Ju otra vez en el pueblo — su sonrisa se borro y yo solo le di otro bocado a la ensalada

— Tú realmente amas ese lugar y a Min Ju — removía las lechugas buscando los camarones para comérselos primero y dijo eso con melancolía

— Es al lugar donde pertenezco, Donde nací, crecí y probablemente moriré. Tienes que ir un día es pequeño pero tiene su encanto, todos nos ayudamos y se vive trabajando duro y algo tranquilo, y claro que la quiero Jimin. Min Ju es muy especial — pensaba en los días pasados en el pueblo y no puedo evitar sonreír

— No quiero que te vayas ni que Min Ju sea especial para ti — molestia en su voz era bastante y dejo su ensalada a un lado.

— Yo me tendré que ir un día, cuando vuelva Lee Jong y se que lo hará y con Min Ju es algo que no puedes cambiar — ya me casi me iba a terminar la ensalada

— Me gustas y no quiero que te vayas de aquí. Quiero que te quedes conmigo.

— Estas actuando de una manera algo infantil — Termine mi ensalada y deje la taza y los cubiertos en la bolsa marrón. — No llevamos mucho de conocernos, somos hombres, tengo novia y ni debería estar en este lugar. Lo siento Jimin, pero ni tiene ni sentido que yo te gusté para empezar.

— Para mi lo tiene, eres una persona agradable, trabajas hasta partirte el lomo por lo que quieres, eres alguien tranquilo que soporta las loqueras de mi grupo, eres un soñador, eres totalmente lindo de todas las formas hasta enojado, haces lo que sea por el bienestar de los que amas, un novio perfecto, me gusta cuando me prestas atención cuando te estoy enseñando un paso, lo bien que te llevas con las ARMY, seguiría numerando las cosas que me gustan de ti pero nunca terminaría de hablar — dijo el tomando mi mano que la separe de la suya cuando termino de hablar

— No tenemos ni cuatro meses de habernos conocido, yo tengo novia y somos hombres — repetí negando — Estas loco

No se como hizo y de un momento a otro estaba encima de mi y puso su mano en mi pecho para recostarme es su cama para luego acercar su cara a la mía

— No me importa nada de lo que dijiste, quedate y nos conoceremos más. Tu novia puede regresar sin ti a tu pueblo y que seas hombre es lo que más me trae sin cuidado — dijo confiado y tomado mi mano

— ¿Eres homosexual? Bueno eso era obvio cuando te me declararse y te puedes quitar de encima que pesas — Trate de no parecer tan avergonzado por sus palabras

— Quedate — casi suplicando acercándose a mis labios, moví mi cara a tiempo y término siendo un beso en la mejilla.

— Hagamos como si nunca me dijiste de tus sentimientos hasta que vuelva Lee Jong para yo volver a mi lugar de chico campesino — apretó mi mano con su agarre y luego me soltó para salir de la habitación