Tn se encontraba tumbado en su habitación pues la salida al patio se canceló debido a que estaba lloviendo. Tampoco podían preparar la canoa así que tenían que permanecer dentro de las habitaciones. Enid estaba abrazando a su chico mientras los dos veían una película. La loba ya no estaba con el celo, pero le gustaba pasar el tiempo con él.

—Es muy romántica—comentaba ella emocionada—¡prométeme que nunca me dejarás!.

—¿Eh?, claro que no—respondió él sorprendido por eso.

—¡Eso espero!—lo abrazó con más fuerza.

—Enid...cariño...la...la...fuerza—ella se separó—casi logras lo que mis enemigos no—bromeó sobre el tema antes de ser mordido.

—Tonto—infló las mejillas.

El chico la besó un poco y ella correspondió antes de continuar con la película. Era un momento de felicidad y tranquilidad para ambos cuando sonó la puerta. Por la manera de tocar a la puerta sabían que era su amiga Miércoles.

—¿Qué ocurre?—preguntó tras hacerla pasar.

—Pues...te dejaste algo de ropa en nuestro cuarto...y cuando la toqué...tuve una visión—se sentó a contarles mientras Enid tenía la cabeza apoyada en el pecho de éste.

Ella se vio en un pasillo donde había un reloj y una fecha, era dentro de una semana. Luego, avanzando por el pasillo escuchaba unos gritos y vio fuego. Los ojos de la pelinegra captaron a Tn, Rupert y otra persona ensombrecida peleando contra el ser de fuego verde y otros tantos enemigos mientras parecían tener muchos problemas para poder pelear.

Enid estaba tirada en el suelo, malherida y con mucha sangre mientras se vio a sí misma con un cuchillo clavado en su pecho y yaciendo muerta.

—Eso...es lo que vi—sus ojos se iban volviendo vidriosos—y...—Tn la acercó para abrazarla y darle un beso en la frente.

—Eh, gracias por decirme. Ahora...tocará entrenar y ser más fuertes, gracias a tu habilidad evitaremos que algo malo os pase—la besó y ella correspondió—ahora vamos a relajarnos un poco, has asustado a Enid.

Al tornar la mirada la vio algo asustada.

—Enid, tenemos que prepararnos para luchar. Y necesitamos tu ayuda—le dijo—todos tenemos que prepararnos, no es mucho tiempo pero es una semana.

—Vale, terminemos la película—dijo relajado—hablaré con Rupert.

Los tres permanecieron allí para desconectar un poco de la noticia no sin antes escribir al grupo que dentro de una semana tendrían que pelear. Y ellos fueron a dirección después de la película aunque Tn quería entrenar.

Utilizarían la sala de esgrima para ello y Rupert se mostró contento de poder entrenar con Tn así que realizarían ejercicios y también, peleas cuerpo a cuerpo. Miércoles había pedido unos materiales para fabricar una serie de armas que vendrían bien. Enid por su lado, entrenaría la fuerza ya que era una loba y de paso tener más agilidad, le costó poco porque la esgrima le obligaba a estar en cierta forma y su cuerpo sufría menos.

Entrenaron después de la película y Tn mejoraba sus movimientos porque Rupert era ágil obligando a éste a esforzarse más. Justo cuando le dio un puñetazo a éste, Tn sintió una fuerte sensación de calor por su cuerpo y empezó a moverse con mucha más rapidez.

—¡Increíble!—iba de un lado a otro rebotando y se sentía más fuerte—¡a entrenar se ha dicho!—exclamó el joven.

—Entonces usaré yo esto—dijo Rupert—te enseñaré una técnica que todavía me cuesta usar—Expansión de...

—¡Chicos hora de cenar!—Enid que había estado fuera entró viendo a estos dos mirándola perpleja—¿no tenéis hambre?.

Las tripas de ambos rugieron un poco y se echaron a reír.

—Será mejor dejarlo por hoy—comentó Tn—vamos a cenar.

Aunque primero de todo se dieron una ducha para quitarse todo el sudor. En la cena, Tn comió más de lo normal ante la mirada de sus chicas.

Xavier, Eugene, Bianca...todos fueron hablando de ello mientras pensaban en estrategias a seguir para poder derrotar a esas bestias, no querían pasar de nuevo por una derrota pues Tn acabó en la enfermería.

Después de eso, Tn acudió a su habitación acompañado de Enid quien le tomó de la mano, parecía no querer separarse.

—Deja que me quede...—rogó con los ojos.

—Enid...—ella lo besó.

—Sé que hemos tenido...mucho...de...ya sabes...

—Sexo

—¡No lo digas de esa manera!—se cubrió la cara—pero tengo miedo...aún estoy algo...ya sabes...sentimental...

—Ya veo, anda, duerme conmigo hoy.

Al entrar en su cuarto, vieron a Miércoles tumbada en la cama de él y mirando por la ventana antes de voltear.

—¿No es invasión de la privacidad?—el chico esbozó una sonrisa.

—Hoy dormiré aquí—contestó ella ya en su pijama.

—Doble premio—dijo de pronto ganándose unas miradas de sorpresa por parte de ambas.

Aunque Miércoles dijo que no dijese esa clase de cosas, que solamente se encontraba muy débil ese día así que por eso dormiría allí. Sin embargo, esa noche, el chico estuvo recibiendo y dando amor a ambas chicas. Miércoles quien era una experta en otras cosas, se mostró muy inocente y torpe en esos momentos donde el joven le fue enseñando junto a la loba.

En la mañana, el joven despertó y vio a ambas durmiendo, una a cada lado. Se estiró un poco para terminar de despertarse. Ambas despertaron al cabo de poco, Miércoles no dijo nada durante el desayuno aunque la veían caminar un poco raro. Ella dijo que pronto se pondría mejor pero que era mejor que no dijeran nada al respecto.

—Fuiste un poco bruto—le susurró Enid.

—Solo le di lo que me pidió—replicó él—más bien lo exigió.

—Y conmigo...por poco te equivocas de agujero—llevó las manos a su trasero—tonto.

—Oye, estaba oscuro porque a ti te daba vergüenza y a Miércoles no le gustaba que lo hiciera con luz...—se defendió él.

Tras desayunar, acudieron a las clases y luego de estas, fueron a la sala de esgrima para poder entrenar duramente. Miércoles en su cuarto por su lado preparaba unas bombas y otras cosas que pudiesen utilizar. Cosa le iba pasando las herramientas mientras ella se aseguraba de que todo estaba bien colocado.

Enid estuvo pintando un poco porque necesitaba desconectar y no tenía fuerzas para entrenar en ese momento. Luego, iría a ver a su chico entrenar. Aunque en realidad lo hacia también porque llegaba un punto donde se quitaba la camisa y a la loba le gustaba esas vistas.

Esa noche Tn se sintió cansado después de la ducha y la cena. Enid y Miércoles dormirían en su habitación después de mucho. Mientras, él se quedó mirando el cielo mientras poco a poco se iba dejando llevar por el sueño. Debía volverse más fuerte para salvar a las personas que le importaban y no perder a nadie.

Mientras, lejos de allí, la oscuridad se iba preparando para atacar la academia pensando que era un ataque sorpresa. Lo único que había en ese sitio...era muerte y oscuridad.

—Nika...te mataré...—las carcajadas resonaron por el lugar.

Y por otro lado, un coche iba en camino a la academia con un hombre algo mayor, pelo blanco y barba del mismo color, vestido con un traje parecido al de los duques junto a una espada en el asiento de al lado.

—¿Realmente es tan fuerte?—preguntó su ayudante, una joven de unos 25 años.

—Así es, y es necesario afrontar este mal—contestó relajado—nuestro deber es ayudar a Nika y de paso, erradicar el mal.

—¿Él sabe algo de su poder?

—Lo dudo—sacó un libro—tanto tiempo nos ha llevado a tener esto...Rupert me ha hablado muy bien de ese muchacho. Es hora de ver que clase de persona es realmente Tn.

—Entiendo—su asistente le sirvió otra taza de té.

—Gracias, lo necesitaba—bebió un poco y se quedó viendo por el cristal de la ventana pues el coche no iba muy rápido.

Fin de la 1 temporada.

Espero que les haya gustado y muchas gracias por el apoyo  :D