9-Fiesta llena de alcohol
La noche había llegado, faltaba poco para la hora y Enid se estaba probando varias prendas hasta que finalmente se decantó por una de ellas. Estaba muy ilusionada, pero había un buen motivo para ello. Quería captar la atención de Tn para poder pedirle oficialmente una cita y si todo iba bien, empezar una relación con él.
—¡Mis garras deben de estar más coloridas que nunca!—pensó mirándose las manos las cuales desprendían casi un arcoiris—perfecto, ahora solamente queda esperar a que llegue el momento de la fiesta. ¡Qué nervios!.
—Ya estoy preparada—anunció Miércoles saliendo con unos ropajes negros y llamativos que hacian resaltar sus ojos y cabello negro. Hasta Enid se sorprendió.
—¡Estás fantástica roomie!—exclamó la loba acercándose—realmente te ves muy bien.
—Gracias—contestó antes de sentarse a colocarse bien los zapatos.
Llegado el momento, las chicas fueron a buscar a Tn pues era el único de ellos que no sabía donde acudir ya que su sentido de la orientación era un poco malo y tampoco conocía como activar las escaleras.
—Voy—dijo el chico antes de abrir la puerta.
—Venimos a...a...—el chico estaba con todo puesto salvo la camisa. Enid abrió la boca embobada.
—La cosa es que me había...había...—se estiró—mucho mejor. Me había dormido.
Se colocó la camisa ante la mirada de ambas, Enid no disimulaba demasiado bien mientras que su compañera de habitación estaba atenta a cada fracción de su cuerpo. Cuando estuvo ya vestido del todo, cerraron la puerta y empezaron a caminar.
—Realmente os veis muy bien está noche...bueno...siempre os veis bien pero esas ropas resaltan vuestra belleza—comentó el chico sorprendido.
—Gracias—ella se retiró un mechón dejando ver un pendiente en forma de lobo brillante.
—Puedes ahorrarte tus halagos—Miércoles caminaba sin mirarlo, pero por dentro estaba algo feliz de ver que captó su atención.
Cuando la gótica chasqueó los dedos y aparecieron las escaleras, Tn casi da un grito de emoción que tuvo que ser tapado por la loba.
—Shh, no hagas tanto ruido—dijo—abajo está insonorizado, pero no aquí.
—Entiendo...hueles a frutas—lamió la mano de la loba haciendo que ella se retirase antes de reír—pero no sabe a frutas.
—Claro que no—la loba se echaba de vez en cuando una crema para mantener hidratada su piel y el olor se había quedado en sus manos.
Al llegar abajo encontraron a todos ya con los preparativos; mesas plegables, sillas, vasos y algo de picoteo por si les daba hambre. Todos estaban realmente bien vestidos e incluso Eugene estaba allí. Junto a Yoko, habían inventado una bebida con un toque dulce de miel.
—Estás preciosa Enid—comentó Divina.
—Si, realmente te queda bien—Bianca la halagó antes de recibir un halago por parte de la loba.
La situación había cambiado mucho desde el curso anterior, el juntarse a enfrentar a Crackstone hizo que fueran más amigas que enemigas. Por no hablar de que formaba una rivalidad con su roomie Miércoles. Tn se acercó a la vampira.
—¿Qué me recomiendas?—preguntó él.
—¿Has bebido alguna vez?
—No, así que necesito algo suave. No sé si soy muy tolerante con el alcohol—la vampira esbozó una sonrisa antes de preparar algo suave y dárselo a probar—oye, esto está delicioso.
—Claro, pero solamente ve despacio por si acaso—aconsejó ella.
Ajax puso algunas canciones porque estaba practicando para trabajar en algunos lugares como Dj, incluso tenía el apoyo de Enid quien le pidió una canción. Eugene activó los focos tal y como el gorgona le había dicho y pronto se vio un gran ambiente de fiesta. Divina y Enid bailaban mientras Kent y Bianca hacian lo mismo. Yoko se unió cuando terminó de servir las bebidas junto al chico abeja. Miércoles sentada y bebiendo, chasqueaba los dedos dejándose llevar un poco por la música con Tn a su lado.
Ambos charlaban alegremente cuando Enid se acercó al chico y le tendió la mano.
—Baila conmigo Tn—decía una alegre loba con una copa encima—no me hagas un feo eh—advirtió antes de reír.
Cuando ambos comenzaron a bailar, la música cambio a una más relajante. Allí abajo, todos se divertían, bebían y se dejaban llevar. Enid estaba muy cerca de Tn a quien no le dejaba de mirar a los ojos. Se sintió con un calor por su cuerpo fruto del amor que ya había empezado a sentir por el chico de goma.
Justo cuando quiso hablar con él, Divina irrumpió diciendo que si le prestaba a Tn.
—Claro—dijo aunque la realidad era que no quería.
Se sentó a descansar un poco en la silla mientras observaba a la sirena reírse mucho estando con el chico. La mirada celosa de Enid no pasó desapercibida para Miércoles quien le pidió algo para Enid a Yoko quien enseguida lo hizo. La gótica quería ver actuar borracha a la loba y cuando le dio la bebida, la loba se lo bebió casi de golpe.
Había pasado ya rato desde el inicio de la fiesta, más de lo que parecía. Es lo que ocurre cuando estás muy a gusto en un sitio y divirtiéndote. Enid apareció para reclamar a Tn, cosa que Divina cedió enseguida.
—Noto cierto olor a alcohol—comentó Tn antes de terminarse su bebida—¿te encuentras bien?.
—Calla—contestó sorprendiendo a éste—solamente...porque eres un chico guapo...listo...fuerte...—le costaba un poco hablar—te atreves...a robarme el corazón.
—Definitivamente estás borracha—el joven tuvo que sujetarla porque casi se cae.
Durante el siguiente rato de baile, incluida Miércoles, Enid no dejó de decir cosas similares así que Tn la cargó en sus brazos. Yoko sacaría unas fotos para el recuerdo.
El chico se llevó a Enid hasta su propia habitación y la dejó sobre la cama. No recordaba donde quedaba la habitación de las chicas y tampoco donde estaba la estatua. Le quitó los zapatos y la loba se removía mucho mientras no dejaba de decir cosas como las de antes.
—Enid, has bebido demasiado—dijo éste—ahora debes descansar.
Ella le rodeó con los brazos hasta tumbarlo y colocarlo encima de suyo.
—Tienes una sonrisa preciosa—le acariciaba las mejillas mientras el calor que sentía no dejaba de aumentar.
—Enid, estás borracha, esto no está bien—Enid le dio un beso en la mejilla.
—Oye, Enid...no—dijo algo más serio.
La loba le hizo la pinza y le dio una pequeña lamida en la mejilla donde le había dado el beso a lo que Tn se quedó algo paralizado por la acción.
—Eres un chico maravilloso—susurró ella sincerándose.
De pronto fue cerrando los ojos y se quedó dormida. Él la dejó descansar y tapó para que no pasase frío. Al verla tan dormida, esbozó una sonrisa. Realmente era muy guapa, entendía porque era tan popular. Unido a eso, una personalidad amable y colorida.
A la mañana siguiente, cuando despertó y se vio en el cuarto de Tn, lo primero que comprobó era si estaba vestida.
—Vale...creo que no ha pasado nada—los hombres lobo tenían una gran resistencia y no tenían resaca a pesar de dormir borrachos—ay dios...ahora recuerdo que le dije todas esas cosas—se cubrió el rostro.
Tn apareció con el desayuno y se sentaron en una pequeña mesa que tenía a comer. Enid agradeció el gesto aunque estaba sonrojada.
—Estás muy callada, ¿ocurre algo?—preguntó él.
—¿Anoche hice algo...malo?
—Nada, solamente disfrutaste de la noche—ella suspiró al escucharlo cuando sonó el teléfono y vio las fotos por chat privado que le mandó la vampira. Estaba con Tn en sus brazos o bailando con él.
—Tn...¿entonces anoche...no hicimos nada...sexual?—éste negó.
—¿Por?, ¿acaso querías tener relaciones?—lo hizo con tal calma que la loba se puso roja.
—¡No, claro que no!—replicó—bueno...no es que no quiera, pero somos jóvenes...y...hacer esa clase de cosas aunque son naturales y...ay dios...no sé ni lo que digo—se cubrió la cara mientras escuchaba la risa del joven.
Continuaron hasta terminar el desayuno. Enid agradeció a Tn por la ayuda y lamentó lo que había pasado teniendo que dejar que durmiera en su cama y él utilizase la otra.
—Ya te he dicho que no ha sido nada mujer—le revolvió el pelo—ve a darte una ducha o algo para despejarte.
—Si—se paró antes de irse y se acercó—oye...te...te...ay...
—Enid, ¿qué pasa?
—Me preguntaba si...¿quieres ir tomar algo mañana a Jerichó?
—Claro, me encantaría.
Ella esbozó una sonrisa.
—Pero...quiero...—se acercó para hablar en voz más baja—te estoy proponiendo una cita...tú y yo...—se sonrojó.
Tn abrió los ojos. Entonces, algo rojo asintió.
—Me...me gustaría mucho—ella se puso tan feliz que le dio un sonoro beso en la mejilla antes de marcharse.
Enid llegó muy contenta a la habitación aunque Miércoles estaba abajo desayunando relajada. Y estuvo toda la mañana feliz mientras charlaba con sus amigas sobre todo lo sucedido. Pero especialmente por la cita que tendría con el chico.
Miércoles por su parte aunque sentía cierta atracción por el chico, necesitaba pasar más tiempo con él para saber sobre sus sentimientos.
Ese día no tendrían clase pero si clubs y Tn estaba en una silla del club de esgrima completamente dormido pues aunque fue de espectador, estaba con sueño. Enid a su lado le miraba dormir, le daba mucha ternura. Eso antes de ser despertado por el profesor porque no quería que nadie durmiese allí.
—Suerte Enid—dijo bostezando mientras la veía marcharse a entrenar.
Continuará...
Espero que les haya gustado.
Un saludo :)
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