Se anunció a todos los invitados que el príncipe ya estaba a punto de entrar al salón, para sorpresa de todos los invitados y de Hyunjin, Felix llevaba un velo, no le tomó importancia y espero a que bajara las escaleras para tomarlo de la mano.

—Alteza. —le hizo una reverencia aún con su mano en la suya, Felix lo imitó sin decir una palabra.

Ambos caminaron hasta el sacerdote, que aunque estaba en contra de lo que el Rey quería que hiciera, no tuvo de otra, era por el Reino.

—Su Alteza, si usted lo quiere no se quite el velo hasta que termine de darles mi bendición. —le indicó el sacerdote y Felix solo asintió.

Mientras tanto el Rey se fue a su oficina, sabía que Hyunjin y el duque tendrían todo bajo control, con lo que no contaba es que Christopher iba tras de él, lo vio entrar a su oficina y entonces supo que debía acorralarlo ahí cuando dieran la señal.

Jisung y Changbin se vieron y asintieron para poder moverse e ir tras el duque y por su hijo si hacía un movimiento en falso.

Seungmin y Jeongin mataron a los guardias que estaban fuera del salón para intercambiarse por ellos, ahora sólo quedaba esperar la señal, que por cierto estaba a punto de ser dada.

—En nombre de Dios les deseo un feliz y duradero matrimonio, los estaré esperando en la iglesia para ser yo quien escuche sus votos. Ahora si Su Alteza puede quitarse el velo.

El príncipe se giro frente a Hyunjin y lentamente se levantó el velo.

—Tú... no... no eres el príncipe. —dijo Hyunjin sorprendido para luego buscarlo con la mirada entre la multitud.

—¡Guardias! —Grito el duque, pero ningún guardia entró al salón, solo pudo sentir que le tocaron el hombro e inmediatamente se giro.

—Duque... —La espada de Jisung atravesó el pecho del duque. —Debería preocuparse por usted.

Los invitados corrieron hacia las puertas para poder salir, pero fue inútil, no se abrían, gritaban del miedo al igual que comenzaban a temblar.

Hyunjin por su parte se acercó hasta el cuerpo de su padre que ahora ya no tenía vida, estaba frío.

—¿Quien eres? ¿Como te atreves a hacerle esto al Reino? —le cuestionó ya furioso.

—Ja, ¿Al Reino o a ti? El duque nunca ha aportado nada al igual que la mayoría de los nobles que estan aquí, ahora mismo deberias preocuparte por tu futuro esposo o debería decir tu pase al trono. —lo último lo dijo lo suficientemente alto para que todos ahí lo escucharan.

—Calumnias. —Rió sarcástico.

—Tenemos pruebas suficientes para decir que es verdad, tú, el duque y nuestro Rey lo planearon todo, querían matar al príncipe, pero, El Diablo afortunadamente ha hecho todo para protegerlo y ahora mismo vamos a tomar la corona. —confeso Jisung con una sonrisa triunfante.

—¡Guardias! —Esta vez grito Hyunjin, pero de nuevo no hubo respuesta o algún ruido que avisara su llegada. —¿Donde esta el príncipe?

—No lo sabemos y si lo supiéramos no te lo diríamos, nos vemos. —le dijo para abrir las puertas y salir.

Todos se apresuraron a salir del salón y Hyunjin también para ir a buscar a Felix.

¿Y donde estaba él? En el gran salón donde el trono del Rey estaba, pasando sus manos por el asiento que le corresponde, bueno ya no.

Por su parte Christopher tocó a la puerta de la oficina del Rey y entró sin el permiso.

—¿Un insolente se atreve a entrar sin mi permiso? —miro al chico frente a el de reojo.

—Le pido perdón, Majestad, pero tiene que escucharme. Usted esta a punto de morir, solo quería avisarle. —le sonrió y se acercó a la puerta para ponerle un seguro.

—¿¡De que hablas!? —cuestionó exaltado. —¡Guardias!

—No tiene caso, la mayoría ya están muertos y otros amenzados o son aliados.

Y era cierto, Jisung, Jeongin y Seungmin estaban matando a los nobles tiranos y corruptos con algunos aliados que tenían, bueno eran una multitud vestida de caballeros del Palacio.

—No puedes matarme, harías que maten al príncipe y a la Reina ya que serían una amenaza...

—Nadie dijo que ellos también morirían, yo solo quiero ser el Rey. —Lo interrumpió Minho que estaba en el balcón, los gritos afuera avisaron que pensaban que saltaría de ahí, pero no sería así.

—Minho... tú... siempre fuiste una amenaza, desde que entraste al Palacio.

—Claro, su error fue no saber cómo se veía el sanguinario asesino apodado «El Diablo», pero eso ya no importa. —dijo para sacar su daga. —Le jure a Su Alteza que su muerte sería rápida y sin dolor, es una pena que no pueda cumplirlo, lo haré pagar cada latigazo que Felix tiene en su espalda.

Christopher solo se recargo en la puerta, observando a Minho y al Rey rogando por su vida en cada paso que el chico se acercaba a el, pero fue en vano.

Minho hizo que el Rey gritara en cada corte, los invitados que estaban en el salón y ahora estaban afuera sabían que el hombre no viviría mucho, pero aunque ahora la corona estaba en manos del diablo y nuevo Rey, seguía vivo y muy pronto sería ejecutado.

Enseño el cuerpo a los nobles que quedaban vivos, entre esos Hyunjin.

—¡Minho! ¡Te reto a un duelo! —le grito desde afuera.

El chico sonrió ladino.

—Te encargó el cuerpo, ordena que lo lleven al calabozo y que lo mantengan vivo, yo me encargaré del hijo del duque. Ah y otra cosa, cuida a Felix, nadie puede acercarse a el más que ustedes, no quiero que le pase algo.

Christopher asintió.

Minho bajo hasta donde estaba Hyunjin y alrededor muchos nobles, él de cabello castaño le lanzó una espada y le indicó con la cabeza que lo siguiera.

Lejos de todo el mundo y rodeado de sus aliados, ambos pelearán por amor y por avaricia.

Hola gente bella aquí el capítulo, espero que les guste y que no tenga faltas de ortografía, sin más espero poder subir otro capítulo en un rato o mañana, pero por ahora Chan les manda un Big hug ✨💕