Capitulo Treintaiocho.
Wei Ying yacía sentado en la sala de la casa de Nie MingJue, el cual le entregaba una taza de café.
—Gracias —pronunció Wei Ying —¿Realmente crees que yo te estaría mintiendo respecto a eso?
—Es mi hermano de quien hablas Wei Ying, porque siendo sincero, no creo que él pueda hacer algo como eso
—¿Y qué ganaría yo mintiendo sobre él? —responde mirando con seriedad a Nie MingJue
—Realmente no lo sé, pero lo que me has contando va más allá de cualquier duda sobre mi hermano. Es mi hermano menor, yo le crié como si fuera mi hijo después de la muerte de nuestros padres, si bien es mi medio hermano, aun así, creo que lo conozco mejor que cualquiera aquí.
—Entiendo, sólo espero que no te lleves una sorpresa —pronunció para levantarse y hacer una reverencia —sólo te diré algo, así como tú defiendes a tu hermano, yo lo haré con el mío, así que si por la cabeza de Nie Huai Sang pasa volverse a acercar a mi hermano, te puedo asegurar que no me tentaré en lastimarlo. Gracias por el café y por escucharme, buenas noches MingJue.
Wei Ying salió de aquella casa, dejando al mayor con un trago amargo en la boca, no entendía porqué Wei Ying podría mentirle así sobre su hermano, si su hermano menor era aquel que se negaba a entrenar, aquel que solo se la pasaba pintando, quien no quería saber nada sobre la mafia o los clanes; entonces cómo podría ser aquel que ahora dicen que es cruel y despiadado si jamás lo vio lastimar a alguien, pero aún estaba seguro que su hermano menor no era esa persona a la cual todos señalaban, se sentía extrañamente confundido.
Tomó su saco, se lo colocó y salió con dirección a la oficina donde Huai Sang decía trabajar.
–¿Cómo está WanYin? —preguntó el chico de sonrisa tranquila, el menor de la familia, Jin ZiXuan
—Está bien en lo que cabe, sólo un poco distante. Creo que el daño fue más a su corazón que a su cuerpo —respondió YanLin
—Eres fuerte y admirable como lo fue tu madre, realmente admiro tu fuerza, todo lo que has hecho para que tu familia esté libre de acusaciones sobre la mafia. Todos los clanes están alterados por la decisiones del clan Yunmeng Jiang y su salida de los clanes, mi padre y mi hermano parecen estar felices... yo sinceramente quisiera ser tan valiente como tú y salir de ese entorno, sueño con estudiar una carrera... oh lo siento, hablo mucho
—Ja, ja, ja, para nada, me gusta escucharte. Gracias por venir a verme y estar siempre a mi lado en todo momento, realmente... me gusta tu compañía —dijo con timidez
—A mi la tuya, sé que no soy tan fuerte y valiente como tus hermanos pero... sin embargo quiero que sepas que siempre estaré para ti... —tomó su mano suavemente.
Huai Sang bajaba las escaleras que están delante del edificio, con varios hombres detrás de él, mientras encendía un cigarro.
—¿Huai Sang? —pronunció el mayor de los hermanos.
El menor dejó salir el aire del cigarro y dio un suspiro.
—No tenías que venir hermano —pronunció con una mirada fría —realmente esto es molesto
—Entonces es verdad
─¿Verdad? ¿Cuál verdad? ¡Que yo tengo los huevos que tú no tuviste hermanito!, realmente esto es cansado, fingir que yo siempre estoy a tu sombra, fingiendo ser frágil, delicado, amable y gentil, sólo para cuidar tu espalda —lo miró molesto —nunca te diste cuenta de mi capacidad como líder, creíste en las otras personas dándoles su apoyo, me subestimaste demasiado, si tú hubieras creído en mí, ahora sería el líder de todos los clanes, pero sabes qué es lo cómico, que ahora los clanes para mí son basura, tengo más poder que todos ellos, y todo gracias a ti hermanito.
Ming Jue alzó la mano para pegarle en la cara a su hermano menor, pero éste lo detuvo en el aire.
—Ya no soy tu hermanito pequeño, Ming Jue
Los hombres de Nie Huai Sang se acercaron a él.
—No se preocupen, esta basura ya se va, ¿verdad hermanito?
Ming Jue arrugó el ceño, la cara que siempre pone cuando está realmente molesto.
—Ja, ja, ja, amo tu cara de molestia hermanito, nos vemos
Lo soltó para subir a su carro, después sus hombres subieron dejando al mayor con mucha confusión.
Era cierta cada palabra de Wei Ying pero aún así creyó en su hermano, sin embargo ahora era claro quién decía la verdad y era cierto, subestimó a su hermano menor, pero no de la manera que él creía, jamás dejó que su hermano tuviera el trono, no porque no sintiera que tuviera la capacidad de liderazgo, si no porque quería una vida mejor para su hermano.
—¡¡Carajo!! —gritó molesto.
—Jefe Sang, mire —pronunció uno de sus hombres para luego entregarle una carpeta con fotos.
—¿Qué es esto? —preguntó mirando las fotos
—Es un nuevo recluta, ha estado trabajando bien en todas y cada una de sus órdenes, dice que quiere trabajar con usted, ya que paga bien.
—¿Es él? —mostrando una foto
—Dice no mostrar su rostro debido a que tiene una gran cicatriz en la boca y que se siente mejor así.
—Bien, tráiganlo a mí mañana por la noche, por ahora llévenme a mi departamento.
—Sí señor.
WanYin se sentía aún de manera extraña, incluso no pensaba correctamente puesto que ahora estaba en un bar de mala muerte en el centro de la ciudad.
Ya llevaba el cuarto vaso de licor, su celular no dejaba de sonar, era su hermano quien parecía estar histérico, miró el teléfono y lo apagó.
—Oh miren, si es el pequeño loto, —dijo un hombre que era del clan Wen
—Sí, es al que violaron —pronunció otro
Los dos se pusieron atrás de Jiang Cheng, murmurado respecto a lo que le había pasado y de lo que se dio cuenta es que se había regado por todos los clanes.
—Ven con nosotros —uno de los hombres lo tomó del hombro.
Jiang Cheng apretó su vaso y cuando iba reaccionar, el hombre yacía en el suelo con un golpe, una patada a su lado y él de atrás salió casi volando, su mirada era algo borrosa por el alcohol y pero cuando pudo aclararla pudo ver a Lan Huan, sosteniendo a un hombre destrozándole la cara.
—Xichen —pronunció el joven loto
Xichen lo miró, sus ojos parecían dos bolas de fuego, había tanto odio en ellos que el menor sintió un escalofrío. Dio un paso hacia atrás y el vaso cayó al suelo, lo cual hizo que Xichen se levantara de golpe, cuando iba a tocar a Jiang Cheng este se encogió de los hombros.
—Jiang Cheng... lo siento... lo siento... soy yo... mírame —suplicó el mayor
—¿Qué pasó aquí? —pronunció Wei Ying quien había activado el GPS del celular de su hermano, después de lo que le había ocurrido, no dejaría que otra vez pasara eso
—¿Xichen? —preguntó Lan Zhan, quien venía con Wei Ying al ver a su hermano de esa manera
—Ellos estaban acosando a WanYin, yo sólo... lo quise proteger
Jiang Cheng tenía las manos en el rostro.
—Estoy cansado... realmente estoy cansando —dio un suspiro y salió del lugar
–¡A-Cheng! —pronunció Wei Ying yendo tras de él
Los dos estaban afuera, Jiang Cheng se detuvo y miró al cielo.
—¿Tan débil soy?... para que todos crean que pueden protegerme
—Solo estamos preocupados por ti —pronunció el mayor
—Pero nadie se da cuenta que no quiero su lástima, no quiero que me miren así
—No es lástima, sólo es...
—Miedo de perderte —pronunció Lan Xichen ─no queremos perderte, no queremos que nadie más te lastime, que te toque... —alza su mano ─solo confía
Jiang Cheng con los ojos llorosos tomó la mano del mayor, quien lo jala para abrazarlo. —Todo estará bien... lo prometo...
Muchas gracias a okami-13p por la corrección de este capitulo, espero les guste.
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