Capítulo Doce

Jiang Cheng se levanto de golpe al darse cuenta que la noche antes había tomado demasiado y no sabía como había llegado a ese lugar, miró a su alrededor para notar que era un hotel, miró hacia su pecho y se abrocho la camisa rápidamente, se colocó sus zapatos los cuales estaban a un costado de la cama, abrió la puerta de la habitación, ya que el lugar era algo como una suite de un gran costo, camino para ver a Xichen durmiendo en sofá.

Se odiaba así mismo por dejarse llevar y no recordar nada, dio un suspiro y colocó con suavidad su mano en la mejilla del mayor, luego la puso en su hombro y la movió para despertarlo.

—¿Mmm? —Se levantó Xichen, con el cabello despeinado y la ropa arrugada, —Has despertado, ¿dormiste bien?

—¿Cómo llegué aquí?

—Anoche estabas muy ebrio, no podía llevarte a tu casa, porqué no se donde vives, luego no quise dejarte en tu carro por medio de que algo te pasara, pues está solo fue mi solución, te dejé en la cama y quite tus zapatos —se sentó en el sofá

—¿Pasó algo más? —preguntó con seriedad

—¿A que te refieres? —sabía a que se refería pero quería molestarlo un poco más

—Ah... nada, me voy —se dio la vuelta.

Lan Xichen jalo su mano acomodandolo para que Cheng quedara debajo de él, pero sobre el sofá.

—¿Qué haces? —dijo empujándolo desesperadamente

—Anoche me dejaste que te besara, incluso me pediste algo más, pero como soy una persona decente no me podría hacer tal cosa por en tu estado de ebriedad, pero ahora que estás lúcido, ¿por qué no continuamos lo de anoche? —tomó la barbilla de Jiang Cheng con fuerza para acercarse a sus labios

—No creo... tus... palabras son mentiras —un tinte rojo se postró en sus mejillas

—Si son mentiras, ¿por qué estas tan nervioso?, incluso sonrojado —Se acercó tanto que sus labios se rozaron suavemente —Me gus...

—¡Silencio! — la mirada de Jiang Cheng era de molestia y dolor.

Siempre odio esa palabra, "Me gustas", perteneciendo al clan, nunca falto la chica que se acerca a ellos dos, Wei Ying y Jiang Cheng, como los hombres, pero a diferencia de Wei Ying que aprendió a divertirse con aquellas personas que solo querían usarlos, Jiang Cheng quien era una persona difícil la cual interactuar o intentar acercarse alguien era algo que nunca lograba, se decía que era por el reflejo del carácter de su padre, por lo cual cuando era joven fue utilizado, lastimado y dejado, por personas que se dieron cuenta que no sacarían nada con estar a su lado, por eso siempre era renuente con aquellos que se acercaban, con una "Buena intención", la cual sabia que solo era acercarse solo por quien era, por lo que la única persona que se acerco a él, sin ninguna intención oculta era Nie, pero ahora estaba este descarado hombre, que sin importar lo que hiciera no podía descifrarlo, no sabía si solo lo quería utilizarlo, o sus intenciones eran verdaderas.

Empujo a Lan Xichen, levantándose para acomodar su ropa.

—¡Deja tu maldito juego!, de mi no vas a sacar nada

—Jiang Cheng, al principio si lo hice, solo te quería utilizar para sacar algo de tu familia, pero esta vez soy sincero, me gustas, me gustas realmente...

—Dices que querías algo de mi, ¿por qué ahora cambio tu sentimiento?

—Porqué sin importar que haga, jamás sacaría algo de ti, me di cuenta que tu eras especial, eres una persona sincera, franca y fría, pero también esta ese lado, donde puedes llorar, reír y enamorarte, no te pido que me correspondas ahora, solo déjame acercarme a ti, déjame seguir viéndote, déjame luchar para que tú me mires como lo miras a él —la mirada de Xichen era sincera, ya no era esa sonrisa burlona

—No te conozco, solo nos hemos visto un par de veces, pero eres alguien difícil de descifrar y eso me frustra —dijo mirándolo

Lan Xichen se paró, tomo sus dedos con los suyos, suavemente, con miedo a ser rechazado.

—Quizás si me conoces, sabrás cuanto son reales mis palabras

—No lo sé... me tengo que ir

—Tienes mi número, cuando sientas que puedes darme una respuesta, estaré ahí para escucharla.

Jiang Cheng compuso un poco su ropa y cabello, para salir de la habitación de camino al lugar donde había dejado su auto.

Lan Xichen se quedó ahí sentando, recordando aquel rostro, sonrojado, tan pasivo y dulce, que con un solo roce podía gemir tan lascivamente.

—¡Genial ahora tengo una erección!, solo quiero que seas mío, quiero que me mires como lo miras a él, quiero que me muestres ese rostro tan dulce, que digas mi nombre, que suplique por que toque tu cuerpo, no se que hiciste Jiang Cheng conmigo, pero ahora puedo decirte que yo soy completamente tuyo...

Se levanto para ir al baño a descargar de nuevo su hombría.

Jiang Cheng estaba en el carro pensando en las palabras de Lan Xichen, su mente le aseguraba que no debía creer en él, pero su corazón suplicaba por una oportunidad, jamás se había sentido de esa manera.

El sonido de su celular lo sacó de sus pensamientos.

—¿si? —Contestó sin mirar

—Jiang Cheng...

—A-Sang... ¿qué pasa? 

—Quiero verte..

—Si y yo a ti...

—¿Podemos vernos en el mismo café de siempre?

—Claro, ahí estaré

—Te estaré esperando.

Jiang Cheng prendio el auto para dirigirse al lugar donde siempre los dos se veían, lejos de la vista del el hermano mayor Nie, su corazón se sentía tan confuso, quería verle pero ahora recordaba las palabras de Xichen haciendo un doloroso conflicto en su corazón.

Wei Ying había tomado la moto de su hermano para ir al encuentro con Xue Yang, quien le tenía respuestas sobre lo que estaba pasando con YanLi, quería saber que planea el clan Jin.

Llego al mismo bar de aquella vez, camino entre todos aquellos hombres, quienes pertenecían a pequeños clanes, esta vez estaba solo, le mandó un mensaje a Jiang Cheng antes de entrar pero no hubo respuesta, estaba ahora dentro de una cuna de lobos.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top