Capitulo Cuarentaiuno.

Jiang Cheng.

Su beso hace que mi boca arda, siento como si estuviera bebiendo ácido, me quema dentro, mis manos tiemblan, mi cabeza está confusa y mi corazón ni siquiera parece latir de manera correcta.

Estoy a un paso de la locura misma, pero quiero enfrentar una lucha que es clara que perderé, quizá esta noche yo muera con él, pero si eso puede hacer que mi familia esté a salvo, lo haré.

Mientras toca mi piel, solo puedo escuchar las detonaciones de aquel estúpido concurso que me hizo jugar Xichen, puedo ver su sonrisa burlona y su forma despreocupada arrastrándome a límites y lugares que jamas imagine. Se volvió mi tormenta que con sus vientos y caos, causaron un desorden en mi corazón, entró sin aviso para causar estragos en él.

Creía firmemente que el amor de mi vida era Huai Sang, me dolía tanto el hecho que hubieras roto por mi cobardía que simplemente nunca imagine que esa persona, Xichen, llegaría a mi vida para llevarme a su locura, que calmaría mi dolor y me enseñaría una faceta de mi que jamas pensé exponer, logró romper cada barrera en mi corazón y cuando me di cuenta, lo amaba, realmente lo hacía.

Pero nada salió como esperaba, terminando con un corazón roto, confundido y solo de nuevo.

Por lo que cuando todo estaba en la niebla de la confusión misma de mi corazón, mi cuerpo fue atrapado en el miedo, en ese miedo de no saber cómo la persona que alguna vez amaste te lastimaría de esa manera, termine roto.

Cuando conocí a Huai Sang tenía aquella edad donde apenas entendía mis propios sentimientos. Mi hermano siempre fue abierto de lo quería y la libertad en la que manejaba sus relaciones me hizo entender que aunque era un descarado, era más valiente que yo.

Estar en el mundo de la mafia no era fácil, no solo era los enemigos eran las personas que querían obtener algo de mi o de mis hermanos, las que hicieron que me alejará de todos, al igual hubo personas que me lastimaron de la manera que cerré mi corazón por completo hasta el día que lo conocí.

Venía de un clan pequeño pero muy fiel a su convicciones. En las reuniones de los clanes nos vimos por primera vez y donde me di cuenta que era muy tímido y reservado, además de torpe, verlo intentar decir algo o hacer algo con torpeza, hizo que sintiera una calidez en mi corazón. Cuando por fin pude tener algo de valor para hablarle me di cuenta que no solo era aquello que veía, sino que también tenía un cálido corazón o al menos eso creí firmemente.

Escuchar su risa era lo único que necesitaba para estar bien.

Amaba escucharlo quejarse de la rutina que su hermano lo hacía practicar para que pudiera ser un buen líder, puesto para ser líder era lo que menos quería.

Por todas esas razones hicieron que mi corazón se negara a aceptar que pudiera lastimarme. Lo negué tanto que cuando estaba en esa cama, siendo lastimado, golpeado y humillado, solo pude cerrar mi mente y pensar que lo que pasó era solo una maldita pesadilla. 

─Bebamos ─pronunció después de aquel doloroso beso

─Esta vez no le pongas nada al vino ─indique mientras me sentaba 

─Vienes a matarme o a vengarte ─preguntó serviendo el vino 

─Quizá ambas,─respondí tomando la copa y bebía de ella ─¿por qué Yanli?, ¿por qué deseas lastimarle? ─cuestione 

─Solo estoy quitando lo que estorba en mi camino ─respondió tan frío, no había ni una pizca de aquel chico tímido ─no es personal pero tu hermana está causando muchos estragos con la limpieza de tu clan ─bebió de su copa sin antes agitarla un poco y oler el aroma de está 

─¿Todo era falso?, esa persona no existió ─expuse mi corazón, los pedazos que quedaban de él ─el "yo no sé nada, simplemente no lo sé" ─sonreí de manera rota tras ese recuerdo en mi mente ─nadie quiso nacer en ese mundo de mafia y poder, solo crecimos en ese entorno donde había dos opciones; morir o vivir, ser bueno o ser un gran idiota.

》 Me sentía algo solo y aturdido cuando nadie estaba a mi lado, cuando a veces me usaban o cuando no sabía si me gustaban las chicas o los chicos, cuando solo aprender a usar un arma era lo único importante... y mientras eso ocurría, llegaste a esa reunión con el cabello recogido y una ropa de lo mas informal, mientras tu hermano venia de traje, pensé:  "¿Quien es esta persona que no encaja?". Así fue, jamás encajaste en el molde de líder... o al menos eso pensé... creía, ─bebí de la copa de nuevo ─que eras diferente a todos, eras todo lo que necesitaba... solo necesitaba escuchar tu risa contenida por tu mano, para sentirme feliz...

Lo mire con un ardor profundo en mis ojos, conteniendo el deseo de llorar, aferrándome a la poca fuerza que quedaba en mi interior.

─¿Ese eras tú o simplemente nunca existió? ─quería una respuesta, pero él simplemente ya no me miraba, miraba a la ventana, como si peleara con sus propios sentimientos. ─Huai Sang yo realmente te ame...

 ─¿Me amaste?, ─fue cuando por fin me miró ─oh ya no me amas, amas a ese policía que te disparó... ─dijo en un tono que no podía comprender del todo ─nunca fue mi intención engañarte... ese chico que conociste... ese... era.. 

Un explosión se escuchó el movimiento nos aturdió y nos puso alerta, los disparos comenzaron a sonar y entonces el me miro con odio.

 ─¿Una trampa Jiang Cheng?, no esperaba menos de ti ─puso una pistola en mi cabeza ─diles que se detengan o morirás aquí ─sus ojos ahora eran dos flamas ardiendo 

─El clan Wen y Jin dieron con una mina de oro ─pronuncie sin ninguna pizca de miedo en mi voz ─yo solo les dije quien les había quitado sus mejores contratos, son unos clanes estúpidos pero fuertes 

Las detonaciones siguieron cada vez más cerca.

 ─¡Maldita sea moriremos juntos si no los detienes! ─me gritó quitando el seguro del arma

─Yo no tengo ninguna arma, mucho menos un teléfono para detenerlos ─sonreí ─yo he muerto cuando fui amarrado a esa cama 

─¿¡No te importa que tu hermana o tu hermano mueran!? ─por fin pude ver el miedo en sus ojos.

─No podrás matarlos si tu estas muerto. 

La puerta se abrió de golpe para dejar ver a dos hombres mal heridos. 

─¡Señor tenemos que salir de aquí!, debemos usar esa salida ─sugirió ─no hay tiempo

 ─Voy a destruir todo lo que amas.

 Un disparo se escuchó, sentí como el calor de mi sangre comenzaba a salir, mientras lo miraba huir. Como pude, me sostuve, cuando mire mi estomago este ya tenía un agujero, sonreí ante eso, camine para salir, mientras se seguían escuchando los disparos y un auto salir a toda velocidad, daba un paso tomando mi estómago. Si bien no lo había logrado matar las bajas de su grupo eran evidentes y además logre exponer su identidad ante muchos grupos y clanes, no sería fácil para él. Cuando pude avanzar lo suficiente mire  a varios hombres tirados, ya no podía caminar y me deje caer, me acerque para tomar un celular del hombre en el suelo ahí mismon con el sonido de las detonociaciones marque aquel número que me había aprendido de memoria . Después de un par de tonos pude escuchar su voz.

 ─¿Si? —respondió del otro lado de la linea.

─Xichen ─pronuncie intentando calmar mi ya respiración agitada 

Jiang Cheng, ¿dónde estás? ─era evidente que podía escuchar el caos detrás de aquella llamada.

─Lo siento mucho ─apenas pude articular antes de toser ─solo quería decirte que lamento mucho todo... Lamento que tuvieras que hacer todo por mi, por querer ayudarme... también ─toso de nuevo ─quiero decir gracias...

 ─No, Jiang Cheng, no necesito que me digas eso, si no ¿dónde estás? ─podía escuchar su voz alterada 

─Gracias... por enseñarme... ─mi voz se hacía cada vez más débil ─amar... podrías decirle a Wei Ying que hoy no llegaré a casa... que lo siento mucho... y que cuide a Yanli 

WanYin... tu... no  ─su voz se escuchaba tan lejos

 ─Adiós... Xichen...

 La llamada se cortó mientras podía ver cómo todo se nublaba.

─Por fin no fui un cobarde... por fin fui valiente... lo hice bien... ¿verdad mamá?.  

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top