^_^

-¿He?- miraron con curiosidad como ella les extendía las manos, mirándolos con tranquilidad.

-Manos y nombres, por favor- ella se veía ligeramente divertida con sus expresiones. -Solo háganlo, ¿si?- ella sonrío, sus ojos brillando por un momento. -Es parte de mi trabajo-

-Cuphead- hablo el de pantalón rojo, extendiendo la mano y apretando la de la coneja.

-Yo...- el otro suspiro, haciendo lo mismo que su hermano. -Soy Mugman-

-Es un placer Cuphead, Mugman- ella los soltó pero sus manos empezaron a brillar, una charola plateada apareciendo con dos vasos arriba. -Los primeros van por la casa~- les guiño el ojo con una sonrisa. Cup acepto rapidamente el vaso con tres "X" dibujadas enfrente, mientras que Mug agarro su propio vaso y lo miro con curiosidad. Tomo un ligero sorbo, sonriendo al sentir el sabor a manzana inundar su boca. Ink sonrío con cariño, para después darse media vuelta y empezar a caminar, haciéndole un gesto a los hermano para que la siguieran. -Entonces...¿qué les gustaría probar? ¿Algo en especial?-

-¡Quiero probar todo en este lugar!- Cup sonrío de manera extraña, mirando a su alrededor.

-Bueno, en ese caso...- una gran mano apareció de la nada, rodeando el cuerpo de la coneja y levantándola con fuerza.

-¡Oye!- Mug y Cup se quedaron quietos, sin saber que hacer. Ink se mantuvo quieta, cruzada de brazos y con expresión de aburrimiento.

-¡Este casino y tu me han robado todo lo que tenia!- era un toon de lo que parecía ser un perro muy grande con pircings en las orejas y una cicatriz cruzando sobre uno de sus ojos. -¡Exijo que me devuelvas todo!-

-Lo siento mucho señor...- Ink negó. -...pero las reglas del casino son claras: "no hay reembolso"-

-Tu me devolverás hasta el último centavo, coneja- empezó a apretarla pero una patada le llego a la cara, logrando que la soltara y ella cayera. Mug se adelanto, extendiendo los brazos.

-Te tengo~- sonrío al haberla agarrado, mientras que Ink lo miraba con sorpresa pura.

-Gracias...- murmuro al volver a tener los pies en el suelo.

-¡Largo de aquí!- el conejo de traje gruño, pateando con fuerza al otro toon. Se dio vuelta con un bufido, acercándose a la coneja. -¿Estás bien Ink?- pregunto con preocupación.

-Estoy bien Oswald, tranquilo- le sonrío con cariño. -Muchas gracias-

-No hay problema- le sonrío, asintiendo. Su orejas se levantaron al escuchar fuertes pasos acercarse y, a pesar de que las orejas de Ink estaban atadas, ella también pudo escucharlos. Se miraron entre ellos, un escalofrió recorriendo sus cuerpos. -Debo irme...- murmuro.

-Bien...nos vemos en la barra más tarde- murmuro de vuelta, suspirando al ver al conejo alegarse. Miro a los hermanos algo nerviosa, jugando con el borde de su vestido. -Siento mucho el problema, yo...- los hermanos retrocedieron un paso al ver una figura el triple de grande que ellos aparecer tras la coneja. 

-Ink...- ella se tenso. Se dio vuelta lentamente, viendo al sujeto alto y grande, vestido con un traje violeta claro, un gran moño en el cuello y guantes blancos. Su cara era un dado, mostrando un rostro serio.

-S-Señor King-Dice...- ella bajo la cabeza. -Yo...-

-¿Esta todo bien?- pregunto él sin cambiar su expresión.

-S...¡Si señor!- asintió rapidamente.

-¿Y quienes son ellos?- miro a los hermanos copa, quienes tragaron con fuerza. Cup llevo a su hermano tras él, empezaba a arrepentirse de entrar a ese lugar.

-¡C-Clientes nuevos, señor!- respondió, levantando la vista para mirarlo.

-Mmmm...- una sonrisa enorme empezó a dibujarse en la cara del de cabeza de dado, mostrando unos grandes y blancos dientes. -Llévalos a la "mesa especial" pequeña-

-P-Pero..señor...-

-¿Alguna objeción...Ink?- se agacho, mirándola con seriedad.

-¡No señor!- negó rapidamente. -¡L-Lo haré enseguida!- bajo la cabeza, apretando los puños con fuerza.

-Bien- el más alto se levanto, dándose vuelta y mirándola por sobre su hombro. -Déjalos en manos de Bendy y ve a ayudar a la barra, pequeña. Es una orden- empezó a caminar, perdiéndose entre la gente.

-Si señor...- murmuro a pesar de que el más alto ya se había alejado. Suspiro con tristeza, mirando de reojo a los hermanos. -Vengan conmigo, por favor- empezó a caminar. Los hermanos se miraron entre ellos, para después empezar a caminar.

-¿Sigues creyendo que venir aquí fue buena idea?- murmuro Mug.

-Nop, no lo creo- negó Cup.

-Aquí estamos...- Ink se detuvo frente a una mesa situada en el centro del lugar, dos sillas apareciendo de la nada. Ellos se sentaron lentamente, sintiéndose incómodos ante la mirada de todos los presentes. Ella chasqueo los dedos, un par de vasos llenos apareciendo en medio de ambos. -Va por mi cuenta...por los problemas- agarro suavemente el brazo de Mug, tironeando de él.

-¿He?- su rostro se sonrojo ligeramente al sentir el aliento ajeno muy cerca de su rostro.

-Tengan cuidado...- murmuro, alejándose y mirándolo con tristeza. Mug abrió la boca para hablar pero ella ya se estaba alejando, perdiéndose entre la gente. No pudo evitar quedarse por un momento quieto, preocupado por lo que ella le dijo.

-¿Mug?- el mencionado miro a su hermano, quien lo miraba con una ceja arqueada. -¿Pasa algo?

-Yo...- sacudió rapidamente la cabeza, enderezándose en su asiento. -No, nada. Olvídalo- le sonrío a su hermano, quien le devolvió el gesto y le presto atención al juego. Mug suspiro, mirando de reojo a su alrededor. -Tener cuidado...- murmuro de manera distraída. -Pero...¿tener cuidado de que?- pensó extrañado. Algo realmente no andaba bien en ese lugar.