Capitulo Largo,Flashbacks culpables

—Ash, Kanto está a la vista, tal vez quieras... ¿qué estás haciendo?

—Recordando Alola, Lillie. —Le contesto mientras apago el reproductor. —¡Genial! Vamos Pikachu, no podemos perdernos la vista de Kanto, Slowpoke el último en llegar—Y salimos en carrera dejando a Lillie parada en el marco de la puerta.

—Hermosa y majestuosa

—¡Pika!

Kanto, ahh, es genial volver a mis raíces, me gustaría decir que vengo a vacacionar, pero vengo por algo más, al menos puedo disfrutar la vista.

Que hermoso cielo, que hermoso mar, tan azul, lleno de Pokémon... Tan azul que brilla con la luz del sol... azul... Ahh... ¡Qué bueno es estar de vuelta en casa!

Otra vez me siento raro, ¿Por qué pensar en ti me pone así? No quiero estar así, pero tampoco quiero dejar de pensar en ti, me gusta esa sensación.

—Serena...

—Con que Serena, creo que perdí una apuesta.

—¡Lillie! —esta chica a veces asusta como su hermano —me asustaste.

Ella se acerca hacia donde me encuentro y Pikachu salta a su hombro para ser acariciado por ella.

—Me sorprende que tengas enamorada, eso explica por qué rechazaste a Lana.

—No tengo enamorada —respondo inmediatamente —, ella sólo es una buena amiga... Y ¿a qué te refieres con que rechacé a Lana?

—Mejor olvídalo jeje. —Pikachu baja de su hombro y va a jugar con Shirön.

Lillie se queda mirando hacia las tierras de Kanto a las que cada vez nos acercamos más, el viento, la brisa marina, alza sus cabellos rubios y ella cierra los ojos para sentirlo mejor, el sol hace que su piel blanca resalte de una manera muy​ llamativa, debo admitir que la imagen es muy hermosa.

Pero no es a Lillie a quien veo en esa imagen.

Sacudo mi cabeza, que estoy pensando, ella ni siquiera está aquí.

—Sabes que no tenías ninguna razón para acompañarme a Kanto —cuando volteó a verla me encuentro con su mirada esmeralda viéndome seriamente

—Sabes que si tengo razones, yo soy el causante de que tu madre esté en ese estado, casi la maté cuando me enfrente a ella en el ultra espacio, me siento muy culpable.

—Si, tú eres el culpable de que Alola este a salvo, tú eres el culpable de que Necrozma no esté suelto por ahí y Nebulilla esté con nosotros, tú eres el culpable de que mi madre este viva, aquí y ahora y no atrapada en el ultraespacio, tú la salvaste y te lo agradezco, no debes de sentirte mal por eso, ya te lo he dicho muchas veces.

Ella me sonríe y yo le regreso la sonrisa —Taaaal vez tengas razón, pero me siento obligado a verificar que mi trabajo de salvación este completo, por eso estoy aquí y... Porque necesitas un guía por Kanto —le pongo la mano en el hombro —. Te prometo que encontraré a Bill y curaremos a tu madre.

Lillie ríe un poco —Por eso te considero mi mejor amigo, espero que tu también me consideres así eh. —me llevo la mano detrás de la cabeza nervioso, ella lo nota.

—Vaya por tu reacción deduzco que no es así —pone cara pícara —, ese lugar lo ocupa esa tal Serena verdad. —No sé ni siquiera cómo debo de pensar de ella

—Bien, cuando evolucione a "algo más" espero quedarme con el puesto de mejor amiga eh. —Dice eso y no solo ella pone cara pícara también Pikachu.

—Eh, mejor concentrémonos en encontrar a Bill, Ok —Ella asiente y los tres nos giramos para mirar a Kanto acercarse.

¿Qué cosas me esperan en Kanto?

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—Gran idea Ash, ser guía por una región donde la mayoría del tiempo te la pasabas perdido en los bosques, gran idea —Era como me regañaba Misty, si tan solo me hubiera traído a rotom no hubiera pasado esto.

Resumiendo, llegamos a Kanto y dejamos a Lusamine en mi casa al cuidado de mi madre y unos cuantos de la fundación, mientras, Lillie y yo buscaríamos a Bill, sabía que vive cerca de ciudad Celeste, dije sabía porque ahora no sé ni dónde vivo yo. Salimos rumbo a ciudad Celeste, nos perdimos –mi culpa, creo– pasamos una semana en el bosque, creo que Pikachu pintó de chocolate mi camisa, y nos encontramos con Tracey y Misty que ahora nos escoltan hasta ciudad Celeste. Ellos en el camino parecían querer explicar que hacían ahí, no me importó, de seguro algún entrenamiento.

Tenía hambre y mucha, aunque había alguien que tenía más que yo y esa era Lillie, estoy seguro de que nos devoraríamos hasta la comida de Misty. La rubia tenía tanta hambre que su estómago sonaba como el de un Snorlax, se veía chistosa sonrojada por la pena... Serena también se sonrojaba, pero ella se veía bonita...

Todos me están mirando, ¿tengo algo en la cara?

—Con que Serena eh -—el dibujante y la rubia dicen pícaramente, Misty sólo me ve de manera ¿rara?

—Oh, Pikachu ya hace hambre ¿No crees? —ni me espero a que conteste, inmediatamente salgo corriendo rumbo a ciudad Celeste, escucho los gritos de mis compañeros, no debí haber pensado en voz alta.

Al llegar a ciudad Celeste fuimos directamente al gimnasio de Misty, cenamos y por desgracia tuve que explicarles quién era Serena, fue incómodo, ¿Por qué creen que me gustaría? les repetí hasta el cansancio que no era así.

De tanto decir lo mismo no pude dormir, me sentía raro, como si sintiera culpa, ¿culpa de qué?

Salí a la azotea del gimnasio para despejar mi mente.

¿Por qué me sentía así? Y lo que es peor, ¿por qué en mi cabeza se repetía el nombre de Serena? ¡Ahhh! ¡¿qué me está pasando?!

—¡¿Qué estás haciendo en mi azotea?! Ash Ketchum —era Misty, se escuchaba molesta.

Le hubiera contestado de igual forma, pero no tenía ganas de discutir, no tenía ganas de nada más que no fuera saber qué me pasa. —No podía dormir, eso es todo.

Ella se acercó a mí y me analizó el rostro detenidamente —No te creo nada, ya, dime que te pasa. —Dijo tan autoritaria como siempre.

—Es por Serena ¿No es así? —Creo que sí, creo que no.

—En parte... si —le respondo sin mirarla.

—Entonces si te...

—¡No! Es sólo... que no me gustaron las preguntas que me hicieron sobre ella... ella no...

—Ok, ok —me interrumpe abruptamente —, olvidado va.

Y por un momento hay un silencio ¿raro?

—Entonces si no es Serena... tú y... Lillie... ella...

¿Por qué todos me emparejan con cualquier amiga?

—¡No! Ella sólo es una amiga, sólo eso... Jeje —no me gusta este ambiente, equipo Rocket aparezcan o algo por favor.

—Ya, solo estaba jugando contigo. —Luego de esto se queda cayada un rato. —Entonces el reciente capeón de Alola no tiene ninguna pretendiente, ¿alguna enamorada?

—No lo creo, Tú sabes que no soy bueno esas cosas de amor y sentimientos, lo poco que sé es por Brock, prácticamente soy un tonto en eso.

—Si eres un gran tonto —Y tu serás una prodigio ¿no? —Pero si no lo fueras, habría la posibilidad de que... ¿te enamoraras de mí?

—Claro que si —Respondo con una sonrisa —Pero sería raro, considerando que te veo como una hermana mayor.

Su cara no tiene precio, debe ser un honor el que yo le diga eso —Estoy seguro que cualquier chico seria un afortunado de enamorarse de ti, ignorando todo tu mal genio, claro —Ella no responde nada, sigue con cara de sorprendida, bueno, creo que ya es hora de dormir.

Todo fue raro, ¿por qué ella habría sacado aquel tema? A no ser que... —Misty —La llamo desde la entrada —Ya se porque me hiciste esa pregunta.

Su cara de sorpresa solo aumenta —Es porque te gusta Tracey ¿No? —Su silencio solo me da la razón, eres un genio Ketchum.

Los días siguientes, no me espere que Misty me aplicara la ley del hielo, tanto que no nos llevó con Bill, sino que fue Tracey. Luego de eso, llevamos a Lusamine, y junto a Lillie, Bill comenzó a buscar una manera de ayudarla, mientras, yo entrenaba con mis Pokémon, los cuales iba rotando para mantenerlos a todos en forma.

Con el paso de los días, Lillie dejo de ayudarlo, no porque ella no quisiera, sino porque ella ya no podía por lo avanzado que era, ella ahora me ayudaba a entrenar o se ponía a leer los libros de Bill. Misty rompió su ley del hielo conmigo y volvió a hablarme normalmente, incluso nos visitaba con Tracey.

Se cumplieron 5 meses desde que llegamos con Bill, pasaron pocas cosas interesantes, lo único que puedo resaltar era que Misty le dio una oportunidad a Tracey, bien por él, y lo que más me importó, me enteré por televisión que Serena era la reina de Kalos, lo sorprendente es que ella se hizo reina el mismo día que yo me hice campeón, ambos cumplimos nuestro sueño al mismo tiempo ¡Increíble! también me enteré que estaba de vacaciones en alguna región y que ella no había dado información de cuál.

—¿Festival Celeste?

—Sera divertido, anda di que si —Lillie me suplicaba tiernamente para que la llevara a ese festival, ¿Por qué no? será divertido.

Terminamos yendo junto a la pareja de Celeste, ¡fue muy divertido! montones de juegos mecánicos, festivales de batallas y la comida, ¡la comida! ¡era exquisita!, y todo sin siquiera hubiera atardecido.

-—Este festival fue ¡increíble! —Exclamé dando un gran salto —no puedo esperar para el siguiente.

Íbamos caminando entre los locales, Pikachu rompió algo de mercancía por accidente y tuve que pagarlo, ¡¿Por qué lo hiciste?! Me salió carísimo, pero me la pagarás, un día abrirás la nevera y no habrá kétchup. En un momento Tracey y Lillie se separaron para ver unas pinturas en venta dejándonos a Misty y a mi solos, bueno, incluyendo a Pikachu

Paseamos revisando cada local que veíamos, fue divertido, aunque hubiera sido mejor que ella pasara este rato con su novio. Eso me llevo a preguntarme algo, ¿Qué hubiera pasado si alguno de los dos rechazara al otro? Seguramente hubiera sido horrible ver eso, que te declares y que te rechacen.

Inmediatamente, Serena se coló en mis pensamientos, ella y todo lo del aeropuerto, ¿había sido eso una declaración? ¿Si verdad? ¿o no?

¿Qué le contestaría? ¿la aceptaría o no?

¿Por qué pienso en esto!

Perdido en mis monólogos mentales, no me di cuenta cuando ya caminaba solo. Busqué a Misty y a Pikachu entre la multitud y locales, pero nada, gritaba sus nombres, no los encontré, ¿dónde se metieron esos dos?

Busqué y busqué, cuando de repente la vi... Ahí estaba ella o era una alucinación.

—Serena —Murmuré para mí.

======12 Años después======

—Papá...

—See..re... —El llamado fue ignorado completamente, la infante llevaba ya unos 10 minutos tratando de despertarlo, pero nada, seguía dormido, Recordando lo que paso en Kanto durante el festival celeste.

—Papá... tengo hambre. —Seguía igual pero alguien si se había despertado ante el llamado y no iba a dejar que su mejor amigo desatendiera a su hija, no lo había dejado durante todos estos años y no comenzaría hoy.

—¡Pika! ¡chu! —Y solo había una manera.

—¡AH! —Salió de la cama disparado al piso, chamuscado y con humo saliendo de sus cabellos y viendo un par de pantuflas de fennekin, al levantar la vista se encontró con su hija sonriéndole.

—¡Alola papá!¡tengo hambre!

Ash, el campeón de Alola, llevaba siéndolo 9 de los 15 años que había vivido en Alola, serían 12 si no lo hubiera perdido una vez hace 7 años ante Luna. Ash amaba su trabajo; la meta que el había querido alcanzar desde que era niño, batallas contra entrenadores fuertes, y varios viajes a eventos en todo el mundo, principalmente Kanto, era el trabajo perfecto para él, al menos hasta que tenía que hacer papeleo post-liga. Lo bueno era que todo aquello había terminado y ahora se encontraba de vacaciones.

Cualquiera que hubiera conocido a Ash cuando tenia 10 años jamás en su vida hubiera apostado un centavo a que el sería responsable, que cocinaría o que mantendría su hogar limpio, pero ahí estaba, Thalia y sus pokemon amigas habían sido testigos de como el azabache cocinaba unos deliciosos hotcakes, con Pikachu como su ayudante, al ritmo de la música de BuluFM la mejor estación de radio de Ula-Ula, como limpiaba el desastre que el día anterior habían dejado él y Thalia luego de jugar con algunos de sus Pokémon y atender a sus más de 45 pokemon en el patio, y con todo esto, todavía le sobro tiempo para desayunar junto a su hija.

—¿No te has sentido mal, hija? —Thalia negó, esto alivio a Ash pues el día anterior Thalia había sufrido un ataque asmático mientras se encontraba con Serena, ella no había tenido uno desde hace tiempo, siempre estaba a su cuidado al igual que todos sus conocidos, en especial la Sra. Cruz quien tiene un remedio en su invernadero. Aunque su hija negara síntomas, el la llevaría de nuevo al médico y claro, aprovecharía para ver a su esposa durmiente, Lillie.

En lo que estaban en la sala de espera, Ash aprovecho para hacerle una visita a Lillie, Pikachu se encargaría de distraer a la niña para que no se diera cuenta de adonde fue su padre.

Muchos habían cuestionado la manera en que Ash llevaba la situación con Lillie. Algunos de sus amigos lo llegaban a llamar loco por haber pasado casi 5 años visitando a alguien que nunca despertaría, otros lo admiraban por eso, "Su amor debe ser grande" decían ellos, algo no muy alejado de la realidad. Algunos le decían que era injusto que Thalia viviera creyendo que su madre estaba muerta, que debía decirle la verdad, otros, como Gladio, prefería que Ash mantuviera esa mentira.

Cuando se encontró en la habitación de su esposa, procedió a hacer todo lo que siempre hacia con ella, hablarle de su día, aun cuando no estaba seguro si lo escucharía., él lo hacía, era su manera de decirle "aun estas aquí"

Al principio de todo, Ash no la amaba, ni siquiera sabía que era el amor, era un adolescente que todo lo relacionado a los sentimientos solo lo confundían, pero con el tiempo, entendió qué era el amor y aprendió a amarla, Thalia fue el resultado de ese amor. Y ahora eso era la razón por la cual venia a visitarla a diario, día tras día, esperando que despierte, incluso si los doctores decían lo contrario.

Se sentía culpable por lo que le había pasado, aunque muchos le digieron que no tenia porque, él así se sentía, culpable, sabía que pudo haber hecho algo, haber llegado antes del accidente, pero no lo hizo, se distrajo y por consecuencia dejo a su hija sin madre.

—Descansa —Besó su frente y procedió a retirarse de la habitación dejando tras de si su rostro melancólico para poner la sonrisa de siempre y volver para la revisión de su hija.

El doctor dijo que todo estaba bien, solo que evitara hacer mucho esfuerzo físico, y el resto de los cuidados que siempre tenía con ella, un ambiente limpio y seguir con el tratamiento de bolas polen de Ribombee y néctar arcoíris.

—Y ¿qué quieres hacer Thalia? —Le preguntaba mientras la llevaba sobre sus hombros, Pikachu iba a caminando en junto a ellos, aunque veía a los Ketchum con una sonrisa.

—¡Vamos con Serena! —No le sorprendió esa respuesta, después de todo él tenia la culpa de que su hija quisiera tanto a su vecina.

—¿si mejor hacemos otra cosa?

Quiero ir con Serena —Respondió haciendo un puchero, Ash se detuvo y suspiro.

—Mejor jugamos con Krokodile, ya no terminamos de maquillarlo la otra vez.

—¡Si! Esta vez podre ponerle cejas y una peluca. —Ash sonrio ante la emoción de su hija "perdón por adelantado Krokidile"

Y así, ambos Ketchum, acompañados de las hembras del grupo como Bayleef y Shirön, capturaron al reptil siniestro y lo sometieron a una sesión de embellecimiento, cabe aclarar que al finalizar quedo divino.

Ahora Ash veía,junto a sus Pokémon Charizard y Infernape, como Thalia jugaba con el resto sus pokemon, los anteriormente mencionados, aun con su rudeza, deseaban poder estar en el lugar de Greninja o cualquier otro con el que jugaba Thalia, incluso en el lugar del cocodrilo divino, pero no podían, aun así disfrutaban ver a la pequeña Ketchum divertirse.

Ash sonreía al verla sonreír, Thalia era su tesoro y verla feliz lo ponía feliz.

Thalia reía, jugaba y en ultimas instancias, trataba de bailar, siendo detenida por Ash por intentar hacer demasiado esfuerzo físico

—Quiero bailar como Serena —Era lo que le contestaba al verse regañada, claro que no iba hacer cambiar de opinión a su padre, pero hacia el intento. Así que no le quedo de otra que ir a jugar con bulbasaur.

Ante la mención de Serena, Ash volteo a ver a la casa de Serena, quien no sabía si seguiría siendo su vecina al final de la semana.

Cuando su hija le informo que había una nueva vecina. no espero nunca que fuera Serena, de haberlo sabido no la hubiera atacado en su casa, y sobre todo, se hubiera encerrado en su casa.

Volverla a ver luego de 15 años fue algo tan sorpresivo, más cuando fueron 10 años que paso evitándola a propósito y para rematar la tenía viviendo provisionalmente con él, ¿Cómo se suponía que tratas a alguien que estuvo enamorada de ti y tu desapareciste sin más de su vida? Ash no tenía respuesta para eso, así que opto por actuar normalmente e ignorar todo el tiempo de separación, eso funcionaría ¿verdad?

Así actuó toda la semana que Serena vivió con él, actuó como si nunca hubiera sabido de los sentimientos que ella tenía por él, como si lo del aeropuerto no hubiera pasado, como si Clemont y Bonnie no le hubieran dicho que ella los buscaba, parecía fácil, al menos hasta que la culpa comenzó a invadirlo. Entonces se disculpo y Serena pareció aceptar sus disculpas, podrían haber vivido una nueva vida juntos como vecinos y amigos, seguir por donde se quedaron en su amistad en Kalos, pero a veces todo sale mal.

Él sabía que si le explicaba a Serena que la estuvo evitando todos estos años, seguramente lo odiaría y aun más cuando le digiera la razón por la cual lo hacía, creyó que podría mantener el secreto por siempre, pero entonces don malasadas y doña fantasmitas atacaron y ahí todo se fue abajo.

Trato de explicarse, no quería que lo odiara, pero todo termino siendo así. Serena lo odia y lo quería fuera de su vida.

A Ash esto le pareció un castigo del mismo Arceus, sabía que se lo merecía, lo había hecho todo mal con ella, con Serena, quien fue su primera amiga, quien fue su primer amor.

Si, porque Serena fue su primer amor, Lillie fue su primera novia y la persona con quien se casó, pero esto no significa que fura su primer amor, le costó 10 años darse cuenta que todo lo que le provocaba el simple recuerdo de Serena era porque él estaba enamorado de ella, cuando lo hizo, ya era tarde, él estaba casado y ella comprometida, así que tuvo que decirles a sus sentimientos que se fueran, que se habían revelado tarde, que ahora debían aprender a amar a alguien más, a quien se supone que debió haber amado.

El sabe que esta casada, por lo cual no tendría que preocuparse si ella siente algo por él, y pues él... está en las mismas... a si que no tendría que preocuparse por nada que no fuera el que ella no lo odie ¿verdad?

Aunque no tenía idea de como lograrlo, Serena se negaba a hablar con él, ya había intentado algunas cosas y no había funcionado incluso dudaba que lo lograra. ¿Qué podría hacer?

O tal vez dejar que ella misma lo ayude con esto, en fin, siempre que el se encuentra en una situación en la que no sabe qué o cómo seguir, ella siempre lo ayudaba a enderezarse. Como aquella vez en su primer reencuentro, en Snowbelle, cuando tuvo claros sus sentimientos hace 6 años, o la más reciente, hace 5 años y tal vez la más importante. Cuando estuvo por rendirse con Thalia.

Hace 5 años, un mes después del accidente en que Lillie quedo en coma, Ash se quedaba en un hotel con una pequeña Thalia de 10 meses recién cumplidos, la casa estaba siendo reconstruida y él se mantenía aun a la expectativa de alguna buena notica de Lillie, quien era una de sus muchas preocupaciones.

Desde el incidente y desde que Thalia fue dada de alta, no habían parado de recordarse la imagen de Lillie y Thalia en la ambulancia, soñaba y vivía su día a día con esa imagen, sabiendo que pudo haber hecho algo, y para colmo, sus amigos no eran de ayuda, la mayoría lo culpaba, en especial Gladio, o le decía que no podría el solo con la niña que terminaría matándola. Aun con todo eso, Ash quería demostrarles que podía, que no importaba si lo llamaban mal padre, mal esposo, hombre irresponsable e incluso mal amigo, él les demostraría lo contrario. Pero incluso él tenía un limite.

Todo lo anterior juntado al estrés de la Liga y derrotas ante campeones de otras regiones en eventos de exposición, termino por quebrarlo, simplemente no estaba listo para ser padre.

Esa noche, la habitación del campeón y su hija era un total caos, Thalia lloraba con descontrol, habían pañales, biberones y talco regado por toda la habitación y Ash iba de un lado mordiéndose los dientes.

—¡Deja de llorar por favor! —Pero esto no hacía más que alterar a la bebé.

—¡BUAH!

Llevaba ya 15 minutos llorando, Ash se sentía desesperado, no entendía nada, se sentía un inútil y por todo el peso de campeón y las palabras de sus conocidos, empezaba a creer que Thalia no debía estar con él

Y entonces paso, Ash se rompió y se unió a su hija en llanto.

—No sé que hacer... no puedo con esto solo —Escuchar a su hija solo lo hacia sentir más inútil, aun cuando trataba de calmarse.

Su desesperación aumentaba a tal grado que llego a desear nunca haber tenido a Thalia, nunca haber sido campeón, nunca haber venido a Alola y nunca haber empezado su viaje. Era en esos momentos que solo los fracasos y malos momentos venían a su cabeza y lo consumían.

Y entonces la vio, la cajita musical que había comprado para su hija en Kalos, sobresalía de su mochila, la tomó y abrió, revelando así la figurita de su vieja amiga Serena.

—¡Todo es tu culpa! ¡Si no me hubieras besado aquella vez, no estaría aquí! —Y la lanzo contra la puerta, provocando que Thalia llorara más fuerte. —¡Puedes callarte!

Ahora Ash estaba abrazado a sus piernas, en el piso junto a la cama, él ocultaba su cabeza entre ellas y llorando, cada cosa la hacia mal y ahora era cuando todas las cosas que había hecho mal se juntaban sobre él. Quería que acabara.

Pero repentinamente, una música comenzó a sonar por toda la habitación, Ash levanto la cabeza, y vio lo que provocaba la música, era la caja musical, estaba abierta y sonaba, la vio por unos segundos y entonces se dio cuenta de algo, Thalia ya no lloraba.

Gateo hasta alcanzar la caja y al tomarla en sus manos, centro su vista en la figura de Serena y cada momento junto a ella paso por su mente

"No te rindas hasta el final"

Esa vieja frase volvía a él en un momento como ese, justo cuando más la necesitaba.

Se levanto y fue con Thalia, la música seguía, se acercó a ella y al verlo, le sonrió, fue ahí cuando lo comprendió todo, él era su padre, él era el campeón, el era Ash Ketchum, y nunca se rendirá hasta el final.

Y a partir de ese día se esforzó como nunca por ser un mejor Ash, lo hacía por Thalia, porque era el campeón, porque es Ash Ketchum. Y cada que veía la figura de Serena o veía alguna de las presentaciones de esta junto a la bebé Thalia, recuerda que ella volvió a ayudarlo.

Tal vez en este momento de duda ella lo ayudaría, tal vez, o tal vez volviendo a algún lugar donde el se sentía más cómodo podría encontrar la respuesta.

—Thalia nos vamos a Mele-Mele

======12 años atrás=====

—Serena —Murmuré.

Estaba muy lejos de mí, pero la veía, parecía estar buscando algo entre la multitud, era ella estaba seguro, no podía ser una alucinación. Entonces comencé a caminar, tenía que comprobarlo por mi mismo.

Tratando de acercarme caí y al levantarme pude ver cómo lentamente su mirada se posó sobre la mía.

Parecía que estábamos a años luz de distancia, yo quería acortarla, su sonrisa apareció de la nada y iluminó mi corazón como una supernova iluminado el cosmos.

Caminé lentamente hacia ella entre las personas, ella seguía ahí mismo, sonriendo, cada vez más cerca de ti Serena...

—¡¿Cómo te atreves a dejarnos solos Ash?!

Sentí el jalón del cuello de mi camisa, Misty me jalaba molesta, alejándome del lugar y perdiendo así de vista a Serena entre la multitud.

Forcejeé contra el agarre de Misty y al zafarme, corrí más rápido que la luz hacia donde había visto a Serena.

Al llegar no la vi, ¿Había sido una alucinación? ¡No! ¡Yo la vi!, estoy seguro.

Misty y Pikachu llegaron segundos después, ambos me miraron preocupados, les sonreí falsamente.

Todos volvimos al gimnasio de Misty para cenar, esa noche Lillie y yo nos quedaríamos ahí.

Luego de la cena, todos estaban pasando un buen rato, menos yo, así que fui solo a la piscina, dejando a Pikachu con ellos.

Me senté al borde de esta y contemple el agua mientras pensaba en lo sucedido hace rato.
No había sido alucinación, estoy seguro.

—Nuevamente te encuentro vagando por mi gimnasio Ketchum. —No le respondí, me quedé callado, me sentía mal.

Ella guardo silencio un rato
—¿Te sucede algo Ash?
No conteste.

—Vamos puedes contarme. —seguí sin contestar.

—Dijiste que me consideras una hermana ¿no? puedes decirme y no diré nada a nadie ni me burlare.

Sonaba sincera, no sabía si decirle o no, aunque... Tal vez ella sepa cómo ayudarme, ¡Al Giratina todo! le contaré.

—Tiene que ver con Serena.

—Puedes contarme... Claro si tú quieres.

Y así lo hice, le conté todo lo que había sentido desde que nos despedimos, ella se sorprendió por lo relatado.

Una cosa llevó a la otra y terminé contándole todo lo que viví junto a Serena, desde que nos conocimos hasta que nos separamos, al final del relato ella se quedó pensativa.

Yo por un lado me sentía bien de haberle dicho a alguien más (que no fuera Pikachu) todo lo que sentía, haberle dicho a alguien en quien pudiera confiar plenamente.

—¿Y? ¿Qué crees que tenga?

—Estas confundido, eso es obvio.

—¡Eso ya lo sé! —se supone que por eso pedí tu ayuda.

—Esa chica tiene la culpa, fue muy directa con un tipo muy estúpidamente denso, hizo algo como lo que yo hice hace semanas contigo, pero más atrevido —dijo analíticamente.

—No te entiendo.

—A lo que voy es que estas así por qué no sabes si corresponderle a Serena, si rechazarla o no.

—Momento ¿eso quiere decir que ella se me declaro?

Misty cayó de espaldas y rodó hacia la piscina.
—Eres sumamente estúpido. —dijo saliendo del agua —, pero volviendo a lo otro, si quieres dejar de estar confundido debes de decidir si serías capaz de corresponder o no a Serena.

—Y-yo no sé qué contestar. —y era la verdad, en ese momento mi cabeza estaba peor que nunca, Serena se me había confesado y yo creí que había sido una despedida, ahora todo encajaba, su comportamiento, sus acciones, todo, tenía sentido.

—Ella me ama ¿Verdad?

—Si y por lo que veo, desde que te conoció.

No sé cuánto tiempo permanecí callado, nunca me había sentido tan confundido en mi vida, ¿Qué podría responderle a Serena?

—Ash —llamó mi atención —, escucha, que ella te haya besado no te obliga a corresponderle si no quieres, no es como si te se fueran a casar por eso, tú puedes decidir, pero... En tu caso y por lo que veo, cualquier respuesta la lastimaría —¿Qué?

—¡¿Por qué haría eso?! ¡Yo no quiero lastimarla! Ella es muy importante para mí.

—Eso es porque veo que tú no la amas —¿No la amo? —. La ves como a cualquier otra compañera tuya, sólo como amiga, aunque no sé a qué grado, pero por lo que veo, no la amas, o no como ella a ti, o eso creo —lo último creo que lo susurro, la verdad no lo sé.

—¿Y por qué según tú la lastimaría?

—Porque si la correspondes, no sería por amor si no por obligación y ella tarde o temprano se daría cuenta y sufriría por eso, en cambio si la rechazas, sólo le romperías el corazón, en ambas te terminaría odiando y sufriendo.

La miré fijamente a los ojos, parecía hablar en serio, yo no quiero lastimarla, no quiero que me odie, no quiero que pierda ese brillo de sus ojos por mi culpa, quiero salvar esa luz.

—Ahora menos sé qué hacer —me siento impotente, cualquier cosa que le diga a Serena la lastimaría, no la amo ¿Verdad? ¿O si? Ella es diferente a todas las chicas que he conocido, por ella sacrificara mi vida por que fuera feliz.

¿Eso sería amor?

¡Ahhh! Ya ni sé por qué estamos hablando de esto si ella ni está aquí, pero si la veo tendría que responderle de todos modos ¿No?

La quiero, pero no sé qué tanto ¡Ahhh! por eso mismo no me interesa nada de amor y sentimientos, ¡Es tan confuso!

—¿Qué harías tú en mi lugar?

Misty se levantó de mi lado y camino alrededor de mí, como pensando en sus palabras siguientes.

—Siendo alguien con sentimientos inestables como tú... Me alejaría de ella por un tiempo, que ella olvide esos sentimientos y tú despejes tu mente. —Dicho esto se alejó hacia la puerta del gimnasio, aparentemente alguien tocaba.

Yo me quede ahí unos segundos, luego tome rumbo a mi habitación donde dormiría esa noche.

No sé quién tocó al gimnasio, sé que era una chica, cuya voz se me hacía conocida, muy conocida, tal vez necesito dormir. Tanto pensar en ella me hacía escuchar su voz.

Al llegar a la habitación me aventé en la cama junto a Pikachu y traté de conciliar el sueño pero seguía pensando en lo de hace rato.

¿Tal vez alejarme de ella sea la solución a mi confusión?

¡Hola hola alola!

"Lumynick estas demente 4 de la mañana publicando" sip, en México son 4:30 am, esto es el resultado de no querer dejar la tarea para el ultimo día (penultimo día:v) de vacaciones y de varios cafes, todo junto logro un BUM que me hizo borrar, escribir, vijar a otro planeta :v ok no.

bueno capitulo largo espero que les haya gustado y si he venido diciendo que no habría capitulo especial de Ash, y ojo, este no es el especial que antes mencione (auqneu tiene partes de esa cosa muerta), este solo me ayudo a poder manejar a Ash para futuros capitulos

Bueno ya no escribo, porque son muchas palabras.

gracias por leer, comentar/votar soy lumynick y les deseo una buena madrugada y en caso de novernos, buenos días buenas tarde y buenas noceherSF